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Crítica del CD de ANGELUS APATRIDA – Cabaret De La Guillotine

23 abril, 2018, 8:19 pm

ANGELUS APATRIDA – Cabaret De La Guillotine

Discográfica: Century Media

Puntuación Popular

(5 votos) 8.6/10

Tres años después de la edición de su aclamado “Hidden Evolution”, por fin tenemos la continuación discográfica de ANGELUS APATRIDA, un “Cabaret de la Guillotine” que supone un meditado paso hacia adelante con importantes novedades dentro de la música interpretada por el cuarteto.

Los albaceteños siempre han tenido muy presentes sus influencias a la hora de componer, incorporándolas a su thrash metal y ése es un factor que continúa intacto, aunque de recibo es admitir que, a base de ellas también han logrado forjar su propio estilo y crecer dentro de él, hecho que el disco que hoy nos ocupa constata ampliamente. También en cuanto a sonido la evolución es más que patente, con una producción cuidada donde todo está en su sitio, dotando a cada instrumento de su parcela totalmente reconocible -me encanta particularmente el sonido que le han dado al bajo y la importancia que el instrumento interpretado por José Izquierdo tiene dentro de la mezcla final- con unas guitarras, voces y bases trabajadas con mimo y tesón.

Estamos ante un disco variado, con una banda 100% reconocible en cada pasaje aunque a la vez llevando los límites de su música hasta algunos extremos hasta la fecha nuevos. Ese aire más melódico que había impregnado a las composiciones de su anterior obra “Hidden Evolution” continúa presente aunque no de una manera tan intensa, apostando por la fiereza más extrema dentro de los parámetros thrash. Tampoco han dejado de lado la crítica hacia una sociedad cada vez más anquilosada en unos valores que hubieran podido parecer cosa del pasado pero que se han arraigado con fuerza en los últimos meses en el día a día de los ciudadanos. El propio título “Cabaret de la Guillotine” es ya una clara alusión a ello, sin necesidad de entrar en detalles.

Abren con acierto gracias a “Sharpen the Guillotine”, el cual no es sólo un tema idóneo para ello sino también el perfecto puente entre su anterior álbum y éste, con esas guitarras y bases tan marca de la casa pero con una línea melódica intacta que le sienta de perlas. Esa misma melodía, sólo que trasladada a las guitarras, continúa presente en el alucinante “Betrayed”, con unas armonías a terceras muy conseguidas en la introducción, mientras que el tema se desenvuelve con cadencia rítmica a lo largo de sus más de seis minutos. Con “Ministry of God” la bienvenida nos la da el juego de timbales base rompiendo en otro tema 100% ANGELUS que va ganando en intensidad y fiereza según se van sucediendo las estrofas y tras ellas, puentes y estribillos. En similares derroteros encontramos “The Hum”, con el juego de dibujos sobre el rasgado de las notas más graves aunque aquí incluyendo cantidad de solos cortos para separar cada una de las secciones de estrofa – estribillo.

Es con “Downfall of a Nation”, segundo single, con el que nos llevamos la primera de las sorpresas, con un riff principal muy influenciado por los PANTERA del “Cowboys from Hell” -de hecho, tiene un aire muy a lo “Domination”- y un Guillermo Izquierdo alejado de sus acostumbradas tesituras vocales, tirando más de graves, dotando a su timbre de mayor profundidad. Con “One of Us” me retraigo a los SEPULTURA del “Chaos A.D.” por su sencillo riff y ese filler de guitarra que es un arpegio agudo, pero sólo hasta que rompe el tema en lo que será su estrofa principal, porque lo que nos encontramos a partir de ahí es uno de los temas más rápidos del disco donde en poco más de tres minutos pretende no dejar títere con cabeza. Lo mismo que “The Die is Cast”, aunque ahora siendo más elaborado y con un estribillo de línea melódica gracias a su interesante dibujo y armonía vocal, aunque con unas estrofas que me recuerdan bastante al estilo clásico de OVERKILL.

Llega “Witching Hour” y no puedo sino quitarme el sombrero al escuchar cómo han hilado las partes más rápidas con las más pesadas y ese estribillo que me deja claro quién es uno de los vocalistas favoritos de Guillermo: Chuck Billy, de TESTAMENT. “Farewell” -tercer sencillo extraído del disco- es la primera incursión en terrenos baladísticos en su historia discográfica, aunque huyendo de lo meloso. El tema no pierde intensidad en las partes acústicas, con un sonido donde guitarras y bajo están muy presentes y una melodía vocal que, de lejos, me recuerda al “Wasting Love” de IRON MAIDEN. Las armonías entre estrofas son increíbles así como la forma de ganar potencia poco a poco hasta romper tras su segundo estribillo y la vuelta a la parte lenta con un enorme solo cargado de feeling. Como colofón, ahí tenemos “Martyrs of Chicago” una de las canciones más elaboradas y a la vez agresivas de la obra donde ANGELUS ponen toda la carne en el asador para despedirse por todo lo alto, consiguiendo algo que es toda una virtud en sí misma dentro de un disco: que te den ganas de pulsar el play para volver a escucharlo desde su inicio una vez que éste ha terminado.

Sin duda estamos hablando ante la obra cumbre en la carrera de ANGELUS APATRIDA. Un nuevo paso adelante en su carrera con una evolución sin mácula dentro del panorama del thrash metal a nivel mundial. Los de Albacete, con sus influencias perfectamente identificables han conseguido labrar un sonido e idiosincrasia propios, llegando a un nivel en el que pueden mirar “de tú a tú” a sus ídolos de juventud. La edición de “Cabaret de la Guillotine” así como la venidera gira supone todo un hito dentro del metal español y desde aquí no podemos sino rendirnos a la evidencia.

J. José Jiménez – J_Jose_Jimenez@RafaBasa.com – Twitter.com

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