Bob Daisley |
Siguiendo un poco con nuestra dinámica de realizar entrevistas retrospectivas puntuales a algunos de los músicos más importantes de nuestra escena, (como hemos hecho otras veces con gente como Rudy Sarzo o Bernie Marsden recientemente), os presentamos ahora la estupenda charla que mantuvimos hace pocos días con Bob Daisley, bajista entre otros de OZZY, GARY MOORE, RAINBOW… En la larga entrevista hablamos de toda su carrera además de incidir en varios puntos polémicos que siempre es interesante oír en boca de los protagonistas. La entrevista se hizo días antes de la desgraciada muerte de Ronnie James Dio, por lo que no pudimos pedirle opinión al bajista sobre el mítico cantante.
– Hola Bob, es un placer saludarte. Para comenzar, cuéntanos cuales fueron tus primeras influencias y cómo te metiste en la música.
Bob.- Pues recuerdo cuando un vendedor vino a mi casa y traía varias cosas y también algo de música, entre ello una guitarra y algunas partituras. Yo entonces quería aprender lo más básico, pero todo cambió cuando vi por primera vez un bajo eléctrico en un concierto local de una banda pequeña, y me enamoré al instante de ese instrumento y me di cuenta que era lo que yo quería hacer desde ese momento. A partir de entonces, dejé las clases de guitarra que había comenzado y empecé con el bajo, para lo que me apoyó mucho sobre todo mi madre, que fue la que más me empujó a intentarlo. Es más, ella me compró mi primer bajo y también un pequeño amplificador. Luego, cuando estaba en el instituto ya formé mi primera banda donde yo tocaba el bajo, claro… tendría 14 años.
A nivel de influencias, supongo que el primer bajista que me impresionó fue Jet Harris, de THE SHADOWS, que eran una banda instrumental, aunque después de esto vino la gran invasión británica con THE ROLLING STONES, THE WHO, THE BEATLES y todas esas grandes bandas. De hecho, Paul McCartney siempre ha sido una gran influencia musical para mí, incluso cuando empezó a tocar cosas más melódicas, y lo mismo Bill Wymann, que formaba con Charlie Watts una de las mejores parejas rítmicas de la historia y además son unos genios tocando material rythm&blues. De hecho, desde pequeño es uno de los estilos que más me han gustado, el blues y el rythm… Poco después mis influencias se fueron ampliando, desde Jack Bruce de CREAM, John Paul Jones de LED ZEPPELIN, Ronnie Wood incluso, cuando comenzó tocando el bajo con la banda de Jeff Beck. Y ya en los 80 por ejemplo siempre me gustó James Jamison de la Motown o un bajista llamado Willie Weeks que tocaba con Donnie Hathaway en los 70.
– ¿Cómo empezó tu carrera con bandas como KAHVAS JUTE, CHICKEN SHACKS, Mungo Jerry y WIDOWMAKER? Cuéntanos un poco como comenzó tu carrera más profesional en la música.
Bob.- Yo tendría 15 o 16 años cuando me di cuenta que esto es todo lo que yo quería hacer, tocar el bajo, y no me planteaba ni siquiera tomarse en serio ninguna otra carrera que no fuera la música. En ese momento, claro, tenía 16 años y la gente me decía que debería concentrarme en otra cosa pero es que es lo único que yo tenía en la cabeza, no podía pensar en nada más, y por ello ponía toda mi dedicación y ambición en ello.
KAHVAS JUTE fue la primera banda que yo tuve, aún en Australia, y donde ya tocábamos música totalmente original, canciones propias. Además, para mí fue la primera experiencia componiendo o al menos colaborando en escribir canciones, además de meter mis propias líneas de bajo. Pero en 1971 me mudé a Londres y ya allí, aunque tuve algunos trabajos eventuales, me enrolé en CHICKENSHACKS, que era una banda interesante entonces, muy creíble y que se lo tomaban realmente en serio, además de musicalmente muy buenos. De hecho, Stan Webb era un guitarrista de blues realmente bueno y, en definitiva, era una banda con una gran reputación entonces. Es que no era una tonta formación pop de la época sino ya un grupo serio y una banda de música en toda regla.
Luego, cuando estuve tocando con MUNGO JERRY fue otra experiencia, aunque sí era algo más poppie, pero tenía éxito en las listas, salía en la radio, alguna vez en la televisión… Eventualmente hicimos cosas interesantes, pero realmente yo no estuve nunca interesado en ese tipo de música, aunque bueno, yo tenía que vivir y de alguna manera también esto era una ocupación más seria para mí y además me servía un poco para la hoja de servicios, ya sabes. Aunque bueno, al final tampoco estuve mucho tiempo porque musicalmente no me gustaba demasiado la banda.
– Está claro que CHICKENSHAKS ya era una formación conocida en Gran Bretaña y MUNGO JERRY incluso llegó a tener éxito y varios hits y demás. De todas formas, tu primera gran banda de verdad fue la primera encarnación de los RAINBOW de Ritchie Blackmore, con quien permaneciste hasta 1979. ¿Cómo te surgió la oportunidad de unirte a RAINBOW y qué recuerdos tienes de tu estancia en la banda?
Bob.- Te cuento… Yo estaba de gira en América con THE WIDOWMAKER y al final de la gira me encontré a un buen amigo inglés, el guitarrista Dick Middleton, de MUNGO JERRY, y coincidimos en Los Angeles, y él es un gran fan de Ritchie Blackmore. Fue quien me dijo que Ritchie estaba buscando bajista para su banda. Por aquel entonces, me gustaba estar en WIDOWMAKER, eran buenos tiempos y nos iba bien, pero por otro lado no terminábamos de funcionar todo lo bien, o más bien lo rápido que yo buscaba. Entonces, acudí a la audición simplemente a ver qué pasaba, y aluciné un poco porque había como 40 bajistas también optando para el puesto y la verdad es que no conocía a ninguno de los que me gustaban (risas).
Al final fui yo el elegido y entré directamente para hacer una gira, y luego también grabé algunas cosas con ellos y fue una gran experiencia en la que sobre todo aprendí muchísimo porque además era una de las mejores formaciones que te podías imaginar: Ritchie, Ronnie James Dio, Cozy Powell…, músicos realmente serios e importantes, además de realmente considerados dentro de la industria, así que imagínate lo que significaba para mí tocar con ellos en la banda. Sé que dejé un poco colgados a WIDOWMAKER, pero también es una decisión de la que no me arrepiento o no lo siento. El cambio fue pasar de la que podía ser mi banda, por decirlo de alguna manera, a trabajar para otros, pero claro, esto suponía entrar en RAINBOW, el grupo de Ritchie, y obviamente estuve encantado con el cambio.
– ¿Y porqué dejaste la banda?
Bob.- Yo no la dejé exactamente, sino que fue más bien una sucesión de cosas… Estábamos de gira por América y Ronnie tenía cierta idea o como la sospecha de que la banda podía acabarse, al menos del modo en que estábamos funcionando. Entonces él me pregunto que, en el hipotético caso de que esto ocurriera, si querría tocar con él, y yo le contesté que si RAINBOW terminaba, podría irme con él en el proyecto que emprendiera, por supuesto. Al final, Ritchie sólo siguió con Cozy en la batería, pero cogió a un nuevo tipo para los teclados, que fue Don Airey, y a Roger Glover para el bajo, para estrenar la que era la nueva formación de RAINBOW (ndr: primero con Graham Bonnet a la voz y luego Joe Lynn Turner).
Estos nuevos RAINBOW tuvieron éxito y varios hits pero personalmente creo que, dicho con miedo a equivocarme, nunca se les tomó tan en serio como a la primera formación, sobre todo porque pasaron a ser muy comerciales bastante pronto. Con esto, la idea inicial fue hacer algo con Ronnie, pero a él le surgió la posibilidad de la gira con BLACK SABBATH porque Ozzy Osbourne había sido despedido, y fue curioso porque al final fue Ronnie el que entró en SABBATH y yo me uní a Ozzy para su nueva banda.
– Está claro que Ritchie Blackmore quería seguir otra dirección musical y por eso cambió la formación completa de la banda. Y estoy totalmente de acuerdo contigo en que de alguna manera «se vendió» para conseguir más éxito comercial, sobre todo en Estados Unidos en ese momento. De todos modos, ¿cómo ves los discos que grabaste con RAINBOW ahora que ha pasado tanto tiempo?
Bob.- Bueno, el caso es que yo sólo participé en un álbum de estudio, «Long live rock n’roll», y además no en todos los temas. Cuando yo entré, el disco estaba grabado y Ritchie había grabado la mayoría de pistas de bajo en casi todos los temas, con lo que al final yo sólo participé en la grabación de tres canciones. Eso sí, creo que toqué en los mejores temas (risas), sobre todo «Kill the king» y «Gates of Babylon», así que me siento realmente afortunado y agradecido de haber podido participar en esto.
Además, con el paso de los años, creo que el disco se ha quedado como el gran clásico de RAINBOW, y es todo un honor el haber formado parte de ello, además cuando justo después se produjo el cambio hacia algo más comercial. De verdad que me siento honrado de haber formado parte de RAINBOW antes del cambio, porque de verdad que nunca he sido fan de… la música pop-rock (risas).
– En esta primera etapa también trabajaste con James Brown y THE COMMODORES, algo muy diferente. ¿Cómo fueron estas experiencias?
Bob.- No, nunca trabajé con esas dos bandas, hubiera estado bien pero no es cierto (risas). Tendré que echar un vistazo a mi perfil en algunas enciclopedias virtuales y demás, porque esos datos no son correctos… ¿Pone que estuve con James Brown?
– Sí…
Bob.- ¡Qué extraño!… pues tendré que revisarlo, tienes razón.
– Bueno, ya en 1980 te unes a la banda de Ozzy, háblanos de tu primera estancia con el entonces sólo ex cantante de BLACK SABBATH.
Bob.- Fue algo que disfruté mucho, porque Ozzy estaba muy rebotado por haber sido expulsado de BLACK SABBATH y estuvo muy bien poner en marcha esta historia juntos. Es curioso porque desde el principio quisimos que fuese una banda, y todos estábamos de acuerdo en que se llamara como luego fue el título del primer disco, «Blizzard of Ozz». Es que nunca fue concebido como un proyecto en solitario… y de hecho ese primer álbum no es un disco en solitario de Ozzy en absoluto. Desde el principio fue una cosa de banda, incluyendo a Randy Rhoads, Lee Kerslake, Ozzy y yo.
Entonces, en ese momento era una situación ideal para estar, sobre todo a nivel de creatividad porque hicimos material que realmente aprecio. Es heavy y rock progresivo pero todo el mundo aportó su granito de arena a la música del disco. Además, Randy era un guitarrista increíble y está claro que Ozzy tiene una voz más que distintiva… Por otro lado, lo que más nos costó es encontrar al batería adecuado y al final Lee fue perfecto, por calidad, por personalidad… Y yo, además de tocar, escribí las letras de la mayoría de los temas, y también co-escribí mucha de la música con Randy, y Ozzy por ejemplo hizo la mayoría de las melodías de los temas. Así que ya te digo que fue una gran labor de conjunto y todo el mundo estuvo realmente implicado en «Blizzard of Oz».
Entonces, como te digo fue un gran período creativo para mí, y también lo disfruté mucho a nivel personal. De hecho, fue bastante especial en general y de alguna manera estaba como predestinado que pasara, para mí no fue por accidente (risas). Es que no fue como una banda más sino más bien como la piedra angular de algo, un hito en la historia del rock, de verdad que lo pienso así. Es cierto que en ese momento lo más popular era la música dance, disco, New Wave y demás, incluso el punk, con lo que hacer un disco de rock muy directo, incluso con los antecedentes de Ozzy, no era nada fácil y fue un gran riesgo, pero de alguna manera fuimos abriendo otra dimensión para la música rock… Aunque sí fue un poco más casualidad porque lo hicimos sin pensar, sin buscarlo, sin ninguna idea de hacer dinero o algo así, sino simplemente por diversión y por disfrutarlo. Al final, de lo que me siento orgulloso es de que el disco haya pasado tan bien la prueba del tiempo y que a día de hoy se siga considerando un álbum tan bueno e importante.
– Es muy conocido que Ozzy nunca ha sido un compositor, especialmente en aquellos tiempos… Quiero decir que él casi nunca ha compuesto la base de los temas, y tampoco las letras. De hecho, siempre ha sido muy listo en el sentido de rodearse de excelentes músicos y compositores en su banda…
Bob.- Sí, es lo que siempre ha hecho y nuestra labor en ese momento, de hecho, era también arroparle y rodearle de alguna manera en ese sentido, claro. Ozzy es genial en rodearse de grandes profesionales, muy buenos músicos y compositores, y en ese momento nosotros hicimos esa labor, y yo concretamente escribí las letras. Por supuesto que él siempre ha hecho importantes contribuciones en la música, sobre todo con las melodías vocales, pero él no toca ningún instrumento con lo que no es un músico en el sentido literal de la palabra, porque no entiende lenguaje musical, y tampoco es un letrista. Pero a su vez tiene muy buen tino para rodearse de gente que le ayude… y desde el principio creo que acertó con nosotros para esto (risas).
– Como tú decías, entonces era un riesgo editar un LP de puro rock clásico y directo, o de heavy metal, como lo quieras llamar, pero a su vez entiendo que tuvo que ser difícil también el editar un disco de Ozzy pero totalmente diferente a nivel musical de BLACK SABBATH. De hecho, imagino que los fans de entonces estarían esperando algo similar a su anterior banda pero «Blizzard of Ozz» era algo totalmente diferente.
Bob.- Sí, probablemente fuera así. Es que Ozzy era el nombre y la imagen un poco frontal, con lo que está claro que la gente venía a los shows a verle a él, o al menos por él. Es que entonces Randy Rhoads era totalmente desconocido, aunque Lee sí era un batería reputado que había estado en URIAH HEEP durante muchos años, y yo también era bastante desconocido a pesar de mi experiencia previa. Así que el gran gancho o atractivo de la banda para la gente era Ozzy, que había sido el cantante y frontman de BLACK SABBATH, ya sabes. Aunque efectivamente el público se quedó muy sorprendido de la diferencia entre el material que se esperaban y lo que ofrecimos, por mucho que la voz sí fuera la misma.
De todas formas, lo primero que hicimos para atraer al público inicialmente fue tocar en directo material de BLACK SABBATH, y de hecho preparamos un medley para el final de los conciertos con tres o cuatro temas suyos… Aunque Randy odiaba este material (risas), y yo lo sabía, pero a la vez todos sabíamos que teníamos que darle a la audiencia, al menos al principio, lo que querían para poder establecernos como nueva banda. La gente quería escuchar material con el sello de BLACK SABBATH y, aparte de a Randy, a ninguno de los demás le importaba hacerlo, más bien lo contrario, con lo que se lo dimos a la gente sin problemas.
– Aunque grabaste gran parte del segundo álbum del cantante «Diary Of A Madman», fuiste despedido poco antes de la salida de éste álbum junto al batería Lee Keerslake apareciendo en los créditos en tu lugar Rudy Sarzo, al igual que Tommy Aldridge en el de Lee. ¿Cuáles fueron los motivos de tu salida?, ¿qué pasó?
Bob.- Está claro que no salimos de la banda voluntariamente sino que fuimos ambos despedidos. Sharon y Ozzy me preguntaron mi opinión sobre reemplazar a Lee por Tommy Aldridge pero yo nunca estuve de acuerdo. De todas formas, mis razones no eran tampoco en plan lealtad a Lee o algo así, por mucho que fuéramos amigos, buenos amigos, de hecho, sino simplemente que creía que no era lo correcto para el grupo. Pensaba que si se hacía ese cambio se rompería la química de la banda, y una vez roto ya sería muy difícil de arreglar. Entonces, como te digo nunca estuve de acuerdo con esa decisión y al final de todo, cuando acabamos el álbum, Ozzy nos despidió a ambos.
– Así que grabásteis el disco completo…
Bob.- ¡Oh, sí! De hecho, yo co-grabé el disco y lo co-produje, además de tocar en todos los temas. Entonces, cuando salió, no sólo nos despidieron sino que encima nos encontramos con que aparecían los nombres de otros.
– ¿Y cuál era la razón para querer despedir a Lee Kerslake, por cierto?
Bob.- Yo creo que era porque cuando estábamos buscando un batería cuando se hizo la banda, Ozzy ya estaba encantado con la idea de contar con Tommy Aldridge, pero entonces no estaba disponible. Cuando encontramos a Lee, yo sabía que era perfecto para la banda y además funcionó muy bien pero en el primer disco estaba ejerciendo de mánager de la banda David Arden, el hermano de Sharon, bajo la supervisión de Don, su padre. Ya en la gira vino Sharon, que se mudó de América a Inglaterra para ser la mánager del grupo porque David iba a tener un bebé y no podía atender las obligaciones de la banda como era necesario. El tema era que Lee y Sharon nunca congeniaron muy bien y no tenían buena relación el uno con el otro.
Entonces, cuando Ozzy y Sharon decidieron echarnos a ambos, pues bueno, es una decisión que consideramos incorrecta pero ya está, aunque lo que creo que es inadmisible era que aparecieran Rudy Sarzo y Tommy Aldridge como participantes en el disco que grabamos Lee y yo. Ellos se tienen que llevar todos los créditos de estar en la banda y tocar en directo en esa gira, pero no entendí nunca que aparecieran en los créditos del disco, por mucho que luego lo promocionaran en directo.
– Tras abandonar la banda de Osbourne, te enrolas en URIAH HEEP junto a Kerslake, imagino que por amistad y complicidad con él. Con ellos grabaste dos discos, «Abominog» y «Head First» que ayudaron a que el grupo saque la cabeza de nuevo. ¿Cómo fue ese paso por URIAH HEEP?
Bob.- Lo disfruté muchísimo porque además los chicos en la banda eran tipos realmente encantadores. Siempre lo recuerdo como uno de los momentos bonitos de mi vida y es que, mirando atrás, incluso en ese mismo momento, algunos de los temas que hacíamos no eran tan heavies o hardroqueros como a mí me gusta. El tema es que tanto su management como su compañía de discos de entonces querían canciones que pudieran sonar en la radio, ya sabes, y en general hacerles un tanto más comerciales.
Ya te digo que yo nunca he sido muy amante de la música comercial pero pese a esto, personalmente es un período en el que lo recuerdo todo de manera muy positiva. Es que en ese momento URIAH HEEP se había roto y cuando Lee y yo terminamos con OZZY, Lee contactó con Micky Box, el guitarrista desde siempre y el responsable del sonido de URIAH HEEP, para reactivar la banda ya con nosotros en 1982. Pero ya te digo que para mí fue un gran período y estuve muy a gusto con ellos en ese tiempo. También reconozco que no les dí todo el apoyo que quizás necesitaban o merecían, sobre todo a nivel de promoción, porque ya te digo que alguna parte de la música que hacían en ese momento no era realmente mi rollo, y por eso cuando se me ofreció la posibilidad de volver con Ozzy en el 83 dije que sí.
– Como dices, a pesar de haber sido despedido, en 1983 vuelves a la banda OZZY OSBOURNE para grabar «Bark At The Moon». ¿Qué te motivó a volver? ¿Fue un regreso puntual para ese disco o te hubiera gustado permanecer en el grupo?
Bob.- Bueno, hubo varias razones. La primera es que Lee y yo teníamos litigios abiertos con Don Arden y con Jet Records por royalties no pagados de «Diary of a madman», pero Sharon había tenido una disputa fuerte con su padre y habían roto toda relación. Y Sharon me dijo que me echaría un cable con los problemas con su padre y Jet Records, y bueno, pensé que sí ella nos echaba una mano con eso, no estaría de más volver a trabajar con ellos.
Otra razón es que obviamente la música que hacía OZZY OSBOURNE está mucho más cercana a mis gustos, sobre todo comparado con la de URIAH HEEP, ya te lo he explicado. Pero bueno, sobre todo lo que me movió en ese momento era la promesa de Ozzy y sobre todo Sharon de ayudarnos en el litigio con Don Arden y Jet Records. Luego más tarde ellos se quedaron con el catálogo de OZZY OSBOURNE y tampoco cobramos los royalties de todas formas, pero ésa es otra historia…
– Pero en 1986 parecía que estabas involucrado de nuevo en OZZY y, de hecho, creo que escribiste varias letras para «The ultimate sin», aunque ya no tocaste en ese disco. ¿Es cierto?
Bob.- Sí, de todo el disco. Es que Ozzy nunca ha sido letrista, ya te lo decía antes, o al menos nunca ha escrito las letras de un disco él sólo, ni siquiera ahora. Entonces, yo grabé el disco «Bark at the moon», híce la gira mundial y cuando empezó el proceso de composición para «The ultimate sin» yo estuve escribiendo temas con Jake E. Lee para ese disco, y ambos hicimos la mayoría de la música, aunque luego Ozzy y yo tuvimos una fuerte discusión, nos enfadamos mucho y algunas semanas después nos encontramos de nuevo y me pidió si podía escribir las letras del disco, y lo híce… Bueno, básicamente se me pagó lo que se me debía por mi trabajo y entonces fue cuando dije que ok, que haría las letras para el disco.
De todas formas, no me convence demasiado ese disco aunque varias de las canciones están bien, pero la producción no me gusta y también creo que en algunas partes podría estar mejor interpretado. Al final estoy hasta casi agradecido de que no apareciera en ese disco porque tiene un sonido demasiado suave, y un tema como «Shot in the dark» me parece algo excesivamente comercial para una banda como OZZY OSBOURNE. Pero bueno, ya te digo que pese a todo escribí las letras de todo el disco.
– Como comentas, es un trabajo bastante suave, especialmente comparado con «Bark at the moon», que es muy rotundo y heavy. Parece que has desarrollado con los años una relación de amor/odio con OZZY OSBOURNE. Supongo que el problema principal puede ser que sientas que has ayudado mucho a Ozzy a tener una importante carrera en solitario, pero a su vez el principal problema puede ser Sharon…
Bob.- Está claro que es una relación obvia de amor/odio, y al final de todo ha habido algunos problemas serios sobre todo derivados de la propia personalidad de Ozzy y su extraño fuero interno, aunque ésta es sólo mi opinión. Con Sharon, no sé, es extraño porque por un lado es una pieza muy importante de la banda, pero no sé hasta qué punto el grupo no hubiera tenido una continuidad o una longevidad mayor sin ella. Quiero decir que siempre se ha centrado en mantener a Ozzy en el centro de todo, en focalizar todo con respecto a la banda alrededor de él, y que todo esté centrado en su figura, y personalmente pienso que pudiera haber sido mejor el centrarse en tener una banda sólida que permanecieran juntos durante años.
De todas formas, nadie sabe lo que hubiera pasado si Randy no hubiera muerto, así que al final todo son conjeturas… Al final OZZY como banda ha tenido un desarrollo diferente con los años, especialmente teniendo en cuenta la formación original, o el concepto primigenio, si lo queremos decir así, pero lo que está claro es que estos dos primeros discos han marcado el resto de su carrera, y fueron los que establecieron lo que ha sido y es OZZY OSBOURNE a día de hoy. También han sido los que le dieron credibilidad y estabilidad posterior después de todos los problemas de los últimos años en BLACK SABBATH.
Es que cuando Ozzy salió realmente en solitario fue después de los dos primeros discos, y esto ha marcado su carrera le pese a quien le pese. Por eso digo que pienso que lo correcto hubiera sido mantener esa banda durante años. Claro que ha tenido éxito desde entonces, pero nada comparable a lo que experimentó con los dos primeros discos.
– Siguiendo con los 80, durante estos años también acompañaste a Gary Moore, ¿qué recuerdas de esos años con el guitarrista irlandés?
Bob.- Gary es un intérprete increíble…
– … De hecho, tu carrera ha seguido ligada a Moore prácticamente hasta la actualidad.
Bob.- Fíjate, fue curioso porque la primera noticia que tuve de Gary fue a través de Sharon, que me comentó que él estaba haciendo un disco, y es que de hecho creo que los primeros discos de Gary Moore salieron con Jet Records, si no recuerdo mal. Entonces, ya te digo que fue Sharon la que me dijo que Gary estaba buscando un bajista para grabar algunas pistas para su próximo disco entonces.
Creo recordar que el disco ya estaba hecho y había usado dos o tres bajistas, y yo le eché un cable grabando algunas partes de bajo en ciertas canciones y él quedó muy satisfecho con lo que híce. Después, seguí grabando cosas puntuales con Gary incluso estando con OZZY…Por ejemplo toqué en un par de conciertos en Irlanda para editar un vídeo en directo de GARY MOORE. Entonces, Gary me dijo que cuando no estuviera haciendo cosas con la banda de Ozzy, o si la cosa se acababa, que contara con él porque tenía trabajo asegurado en su banda… Y fue «dicho y hecho» (risas), porque cuando Ozzy y yo dejamos de trabajar juntos en 1985, llamé a Gary…
Esa relación siempre ha funcionado muy bien porque además somos dos músicos que siempre nos hemos tenido un gran aprecio y respeto mutuo, y también a nivel personal nos hemos llevado muy bien. Hemos trabajado mucho durante estos años, aunque también he hecho más cosas como por ejemplo el disco con BLACK SABBATH, o los posteriores discos con OZZY (ndr: hay que decir que Bob Daysley también participó en las grabaciones y letras de «No rest for the wicked» y de «No more tears»), aunque es cierto que desde entonces la mayoría de trabajos que he hecho como bajista han sido con Gary desde 1985.
– Hablando de GARY MOORE, está muy claro que hay dos etapas en su carrera, ¿cuál te gusta más, la heavy/rock o la segunda ya totalmente dentro del blues?
Bob.- (Risas) Para ser correcto, te diré que lo que me gusta es el punto irlandés que tienen ambas, aparte del toque roquero pese a todo que siempre ha tenido. Aunque a su vez por ejemplo en los 80 utilizó muchos programas de batería, sintetizadores y cosas así que personalmente no me gustan, es que siempre preferiré un batería real que sonidos programados, está claro. Entonces, nunca estuve totalmente satisfecho con esta visión de Gary en los 80, y de repente dijo que quería hacer un disco totalmente de blues y la verdad es que era mi idea, así que no me pareció mal en absoluto, y además él es muy bueno haciendo esto.
Quiero decir que es realmente bueno tocando todos los estilos, aunque entiendo que para la gente de tu medio seguramente los discos netamente blues de su carrera gusten menos… Pero que sepas que he oído por ahí que tiene en mente volver a hacer un disco roquero, aunque por otro lado es cierto que no hablo con él desde hace algún tiempo, así que no tengo ninguna información directa al respecto ni nada parecido.
El caso es que Gary es un interprete de blues increíble, y de hecho yo híce con él «Power of the blues» en 2004 y realmente lo disfruté muchísimo, me encanta ese disco. Pero fue un álbum que no tuvo promoción en directo, al menos no como se podría haber hecho, y fui despedido debido a esto, pero ya te digo que me gusta mucho ese disco. Y también me gusta mucho su nuevo trabajo, por ejemplo, es muy bueno.
– También estuviste a punto de entrar en BLACK SABBATH para sustituir a Dave Spitz en 1987 pero la cosa no cuajó, ¿qué pasó?
Bob.- Conocía al productor, Jeff Glixman, que estaba produciendo el disco en los Air Studios de George Martin. Jeff me dijo que Dave Spitz se había marchado por razones personales, aunque no sé qué pasó realmente. Yo estaba trabajando con Gary entonces y simplemente se me propuso participar en el álbum y dije que vale, que cuando tuviera tiempo libre me pasaría. Entonces fui, grabé algunas cosas para el álbum y también ayudé a Ray Gillen con las letras y bueno, fue algo que lo disfruté porque además Tony Iommi es un guitarrista increíble, y trabajar con él fue genial. Es que le salen riffs continuamente, es impresionante, pero además son riffs realmente buenos siempre, es un genio.
Entonces, de alguna manera se me ofreció entrar en la banda, pero bueno, era buen material y me gusta ese disco, «Eternal idol», pero en ese momento el management no era demasiado serio y lo que me ofrecían no me convencía demasiado así que rechacé la posibilidad de entrar en la banda a tiempo completo y seguí con Gary.
– ¿Qué pasó con MOTHER´S ARMY? (una banda menos desconocida banda que formó en los 90 junto a Joe Lynn Turner, Carmine Appice y el guitarrista de NIGHT RANGER, Jeff Watson). ¿Fue un proyecto de sólo un disco o teníais más idea de continuidad?
Bob.- Depende, porque lo cierto es que hicimos juntos tres discos, aunque sólo los dos primeros tuvieron más relevancia como MOTHER’S ARMY, sobre todo el debút. El segundo, «Mother Earth», fue un poco más PINK FLOYD… bueno, no exactamente pero sí en esa onda, ya sabes, como más filosófico (risas). Luego el tercero, «Fire on the moon», volvía a ser más hard rock, pero hubo un cambio en la batería porque Carmine… bueno, tuvimos algunos problemas con su mánager y hubo complicaciones para que siguiera en la banda así que cogimos a Ashley Dumbar para ese tercer disco.
Ese álbum era muy bueno y los tipos del grupo eran increíbles, pero el problema era que yo estaba viviendo en Inglaterra, Joe Lynn Turner en Nueva York, Jeff Watson en San Francisco y Ansley Dumbar en Los Angeles. Por tanto, era difícil para nosotros juntarnos y de hecho mantener la banda como una banda, ya sabes, tener una unidad. Por otro lado, también ocurrió que el material que hicimos a principios de los 90 se consideraba dentro de la moda del viejo hard rock, rock clásico, vaya, y entonces todos sabemos lo que pasó con el grunge y demás, y aunque ahora se ve de otra manera, en ese momento tuvimos muchos problemas como tantas bandas clásicas, claro.
Al final, nosotros ya éramos un poco viejos y la música que hacíamos era hard rock potente y directo, y las compañías buscaban chicos jóvenes que hicieran grunge, incluso aunque no supieran tocar muy bien. Entonces, entre esto y el no estar establecidos todos en un mismo área, lo que nos hubiera permitido girar más a menudo o al menos hacer ciertos conciertos con asiduidad, aunque fuera a nivel más local, acabó consiguiendo que todos en la banda fuéramos haciendo otras cosas: Por ejemplo Jeff se involucró en la reunión de NIGHT RANGER, Joe Lynn Turner con su banda en solitario JLT, Ansley Dumbar creo que estuvo tocando con Eric Burdon (ndr: y con U.F.O. poco después). Con todo esto llegó un poco que todo se volvió demasiado difícil para continuar con la banda.
– Personalmente no me gustan demasiado el segundo y el tercero, pero me encanta el primero, la verdad…
Bob.- Tendrías que darle una oportunidad más a los dos siguientes, que también tienen cosas muy interesantes… De todas formas, deberíamos hacer otro disco, a mí me encantaría, y he intentado hablar con ellos para intentar hacer otro álbum porque, además, pese a los tiempos difíciles MOTHER’S ARMY no funcionó mal y ya te digo que me gustaría hacer al menos otro más con ellos.
– Otra faceta más desconocida tuya es LIVING LOUD, proyecto que creaste con Steve Morse y Jimmy Barnes, ¿qué fue de esta banda?
Bob.- Originalmente íbamos a hacer algo con Jon Lord, porque estuvo en Australia en 2003 en el Opera House de Sydney haciendo varias cosas de música clásica, porque él hace años que está muy metido en esto y en temas orquestales y demás. Yo estaba por allí y entonces tenía una banda de blues llamada HOOCHIE COOCHIE MEN, y Jon se unió a nosotros a hacer unos pocos conciertos, y de hecho grabamos uno de los conciertos en un sitio chulo, que se llama The Basement, con idea de editar un DVD en directo. Allí apareció también Jimmy Barnes y cantó un par de temas en el concierto, y el promotor, Drew Thompson, me comentó después del show que porqué no mirábamos para hacer algo juntos Jimmy, Jon y yo. Y sí, lo contemplé como posibilidad, pensando también en Lee Kerslake como el batería perfecto para ese posible proyecto.
Otra posibilidad que Lee y yo llevando hablando desde hace años, porque tiene muchas ganas, es de hacer su propio disco tributo a Randy Rhoads regrabando incluso algunos de los temas de «Blizzard» y «Diary» con diferentes músicos, por ejemplo un par de diferentes teclistas, varios guitarristas, varios cantantes… Es algo que queremos hacer y por ejemplo en ese momento estaba la conexión de Jon con DEEP PURPLE, y de ahí con Steve Morse. Por otro lado, yo estaba con Gary Moore, que quizás podría participar en un par de temas, Brian May lo mismo, nos hubiera gustado contar con Ronnie James Dio también, y dos o tres cantantes importantes más. Pero bueno, la idea cambió un poco cuando Lee Kerslake estuvo trabajando con Steve Morse en su estudio en Florida y vieron que surgía material de manera muy natural y pensaron en hacer un álbum sólo nosotros, sin músicos invitados.
Tras esto, Jimmy Barnes fue un par de días después y comenzó a cantar sobre las ideas que tenían y se dieron cuenta de que ya lo tenían, que era algo que sonaba como una banda propia. Entonces comenzamos a trabajar en ello y los temas comenzaron a tomar forma, hasta que llegamos al punto de los teclados, y pensamos en contar tanto con Don Airey como con Jon Lord, pero éste último no estaba disponible entonces, y al final decidimos seguir adelante 100% con la idea de hacer una banda normal.
– ¿Y no ha seguido activa la banda?
Bob.- Estoy muy satisfecho de ese disco y hay una cierta posibilidad de seguir haciendo algo pero el problema es que Jimmy y yo estamos en Sydney, Jon y Don están en Inglaterra, Steve Morse en Florida… Y además Don y Steve están muy ocupados girando bastante con DEEP PURPLE. Entonces, eventualmente y cuando tengamos algo de tiempo intentaremos hacer otro disco, pero no es fácil.
– También trabajaste con Yngwie Malmsteen en su disco «Odyssey» de 1988. De todos es sabido su carácter egocéntrico e intransigente, ¿cómo fue trabajar con él?
Bob.- Pues en general una experiencia buena y también lo disfruté. Yo estaba tocando en Estados Unidos con Gary Moore y al final de la gira me encontré con Jeff Glixman, el productor del que te hablaba antes, y que además de con BLACK SABBATH también ha trabajado con Gary Moore e iba a producir a Yngwie. Entonces me preguntó si quería probar como invitado en algunos temas, porque a nivel permanente no podía ser ya que por aquel entonces estaba trabajando activamente y de manera más permanente con Gary.
Participé en el álbum como invitado en no más de 4 o 5 canciones y poco más. Pero vamos, que estuvo bien e Yngwie es un gran instrumentista y un músico muy completo, ¿qué puedo decir? (risas). No sé, yo me lleve bien con él y me ofreció unirme a la banda pero aparte de lo de GARY MOORE, musicalmente de nuevo me parecía más cercano a ese pop-rock ochentero que nunca me ha convencido, y ya sabes que no es algo en lo que yo esté muy metido. Es que ese disco fue un poco más comercial que otros de Yngwie, con algunas canciones pensadas para entrar en la radio y no me terminaba de convencer. Pero vamos, como músico es increíble y a nivel personal yo no tuve ningún problema, así que recuerdo el paso por YNWGIE MALMSTEEN como una experiencia bastante bonita.
– De todos los álbumes que has grabado, ¿cuál es para tí el mejor o el que te dejó más satisfecho?
Bob.- Hmm… difícil pregunta (risas). Hombre, por ejemplo es muy importante para mí el primer disco que hice con material totalmente original es muy importante. Tenía 19 o 20 años y fue genial. Es el disco de KAHVAS JUTE, «Wide open», que es probablemente uno de mis favoritos. Por ejemplo «Blizzard of Ozz» y «Diary of a madman» también son increíbles, dos clásicos para la historia y además se hicieron en un momento muy especial, y fue una situación personal muy buena y siempre les tendré un gran cariño. Es que ha sido grande el formar parte del renacimiento del rock, de la subida de la nada a lo más alto, ya sabes.
– Hablando de esto, de todas formas será agridulce recordarlo porque en el 2002 Osbourne regrabó tus partes y las de Kerslake para reeditar «Blizzard Of Ozz» y «Diary Of A Madman» sin tener que pagaros derechos, algo que ya fue motivo de disputa en los 80. ¿Cuál fue tu reacción?… imagino que tuvo que ser algo que os sentó muy mal y con lo que obviamente no estéis nada de acuerdo.
Bob.- Por supuesto que es algo molesto y desagradable para nosotros, y claro que no nos gusta. Piensa que en los 80 estábamos peleando por royalties y derechos no pagados así que supongo que ellos vieron posibilidades de que nosotros pudiéramos ganar en el juicio, por mucho que contaran con abogados caros o lo que fuera, o que en su interior sepan perfectamente que tenemos razón. Entonces, lo que hicieron fue coger las cintas originales de los álbumes y quitar nuestras partes y literalmente reemplazarlas por otras pistas grabadas por dos miembros de la banda de Ozzy entonces.
Personalmente me parece un gran insulto, pero incluso no por la falta de respeto a Lee y a mí, sino que es un insulto a BLIZZARD OF OZZ, a la idea original de la banda, y sobre todo a la memoria de Randy Rhoads porque él lógicamente no ha podido opinar sobre esto y además está claro que si originalmente no estuviéramos Lee y yo, el disco hubiera sido diferente. Y que a nadie se le olvide que luego están los fans, la gente que compra o ha comprado el disco, y por supuesto que el original es mucho mejor que estas reediciones. Es una gran falta de respeto a nivel general y de verdad que no sé qué se les pasó por la cabeza aparte del tema monetario. Es que ellos han cambiado los dos discos sin tener en cuenta que son clásicos y la gente los adora.
Hubiera sido diferente si hubieran ofrecido la oportunidad de decirle al público que eligieran la posibilidad de regrabarlos o algo así, o al menos preguntarle a la gente que preferían una vez regrabados, o incluso tener las dos versiones y que se vendieran ambas o lo que fuera. Pero no, porque ahora la gente sólo puede comprar la nueva versión regrabada y es un error, un gran error. Pero bueno, esto te demuestra el tipo de gente que son, ¿qué puedo decir?
– Siguiendo con esto, hay un comunicado en tu página en el que indicas que Dakota Films, compañía que está realizando un documental sobre el fallecido guitarrista Randy Rhoads, no juega limpio aprovechándose de los músicos participantes. Cuéntanos algo más sobre esta historia, porque he leído la carta y parece ser que has tenido varios problemas con ellos.
Bob.- Bueno, el tema es que originalmente yo no quería estar involucrado porque creo que la cosa se salía un poco de la mera historia de Randy. Lo primero es que no pagaban a nadie aunque hasta ahí bueno, pero encima querían que yo fuera un poco el conductor de la historia porque sabía más que la mayoría de Randy, de los comienzos de la banda… Es que, por otro lado, está claro que la memoria de Ozzy no es muy buena, Lee Kerslake entró un poco más tarde porque ya te conté que al principio estuvimos probando baterías… Entonces, me decían que no iban a grabar nada en Inglaterra, así que si eso que podían venir a Sydney, que fue lo que hicieron, y estuvieron filmando material como 6 días con lo que sacaron 8 o 9 horas de material sólo aquí.
De todas formas, yo quise en todo momento asegurarme de la música que iban a usar en la película antes de firmar o no porque si no estaba 100% seguro de que aparecieran las versiones reales de los temas, obviamente no lo iba a hacer… y ellos no me lo pudieran decir con seguridad, con lo que rechacé hacerlo. Como comprenderás, no iba a participar en algo en lo que luego sonara alguien en el lugar de mis partes.
Secundariamente, quería saber cómo iban a ser usadas mis entrevistas, quería verlo antes del montaje final o lo que fuera, para que nada se sacara de contexto y demás, ya sabes, que sus preguntas y mis respuestas correspondieran con lo que luego se vería en el documental y demás. Entonces, ellos comenzaron a vilipendiarme, a insultarme, amenazándome con demandas y al final obviamente les mandé a la mierda, claro. En ese plan obviamente no quiero que vengan a Sydney, ni que cuenten conmigo para nada de eso, porque no quiero ese trato. Y éste ha sido el fin de todo esto.
– ¿Así que es cierto que pretenden ilustrar el largometraje con la música de las reediciones de 2002 con Mike Bordin y Robert Trujillo?
Bob.- Probablemente lo hagan… y creo que es Sharon la que no quiere dar el permiso para que se use la música original.
– Si es así es bastante injusto y poco fiel a lo sucedido en aquel momento.
Bob.- Es lo que te decía antes, es insultante con respecto a todo lo que pasó.
– Cambiando de tema, siempre has sido un músico contratado, mercenario o como quieras llamarlo, ¿te hubiera gustado tener una banda estable?
Bob.- Una banda estable… bueno, hubiera estado bien pero estas oportunidades se presentan por sí mismas porque las cosas se acaban y una puerta que se cierra siempre es otra que se abre y a mí siempre me ha gustado estar ocupado y hacer cosas. Por otro lado, estar con una banda, si eso significa permanecer siempre en sólo un nivel y no progresar no me interesa, ya que nunca me he movido por el dinero para hacer algo, al menos nunca ha sido la razón importante. De hecho, el ejemplo es cuando dejé MUNGO JERRY, cuando ellos tenían hits, vendían bastantes discos, tocaban mucho en directo… y les iba muy bien en general, pero su música no era para mí así que lo dejé.
Para mí lo bueno es estar a gusto y seguir o no con algo, pero no pararme, progresar siempre. Si hubiera seguido en WIDOWMAKER cuando recibí la propuesta de RAINBOW seguro que hubiera acabado frustrado por no hacerlo. Y después Ritchie cambió la banda y fue cuando surgió la posibilidad de hacer el grupo con Ozzy, y así sucesivamente. A veces son mis decisiones y otras no, como ocurrió con RAINBOW y OZZY, con lo que creo que lo hay que hacer es siempre adaptarte a los cambios y ya está. Son circunstancias que ocurren y oportunidades que se presentan por sí solas y que te permiten seguir avanzando y desarrollándote, a la par que te permiten seguir tocando y creando música, que también es importante.
– A pesar de no haber tenido una banda estable, es obvio que has trabajado con músicos increíbles. De todos los músicos con los que has tocado, ¿cuál es el que mejor impresión te ha causado tanto como persona como músico?
Bob.- Es difícil responder a esto y eso que es algo que me preguntan a menudo (risas). No sé, a nivel de guitarristas he tocado con interpretes muy variados, incluso muchos de los que se conocen como «guitar heroes», si se quiere decir así: Steve Vai, Yngwie, Ritchie Blackmore, Steve Morse, Randy Rhoads… Al final no se trata de quién es el mejor porque a cada uno tendría que juzgarlo por la situación en ese momento o en su propia situación. Quiero decir que por ejemplo el mejor guitarrista de RAINBOW es Ritchie y el mejor en la banda de Ozzy fue Randy, por muy buenos que sean también Jake E. Lee o Zakk Wylde. Es difícil pero por ejemplo Randy era un músico impresionante con un abanico de influencias realmente amplio, de rock, de blues, de música clásica… Ritchie lo mismo, Steve Morse es un genio musical, Vai es brillante… Por eso me resulta imposible responder a esta cuestión porque es imposible.
Mira, por ejemplo tienes a Ringo Starr como batería de THE BEATLES, y si lo comparas con otro batería de la época seguramente fuera técnicamente peor pero a su vez era perfecto para la banda, y de hecho fue una pieza clave para el sonido del grupo y para la química que consiguieron. O Lee Kerslake, que era perfecto para BLIZZARD OF OZZ cuando pudimos poner ahí a Vinnie Colaiuta, un batería impresionante, pero no sería lo mismo. Es que en las bandas hay un ingrediente que es casi más importante que las propias habilidades de cada músico, y es la química y la camaradería que hay entre los miembros de una formación.
– Por cierto, ¿a qué se dedica Bob Daisley en la actualidad?
Bob.- Ahora estoy escribiendo un libro, mi autobiografía. Llevo unos 15 meses con esto y espero tenerlo terminado a finales de año. La verdad es que no sabía que fuera tanto trabajo el escribir tu propia historia (risas). Es que es como una gran retrospectiva de tu vida y hay muchas cosas de las que no te acuerdas todos los días, claro. Afortunadamente llevo escribiendo diarios desde 1976 así que al menos tengo todas las fechas y eventos importantes recogidos con exactitud. Además, he ido recogiendo muchas fotografías de todas las épocas de mi vida y mi carrera, y afortunadamente tengo bastante buena memoria. Así que, entre la combinación de los diarios, mis recuerdos, las fotos y algunas cartas que conservo de hace muchos años, van a conformar la mayor parte del libro.
De todas formas, no se trata de sacar ningún trapo sucio o algo así, o de decir cosas feas con nombres y apellidos o algo así, sino una historia contada honestamente y decir lo que pasó, cuando pasó y quién estuvo involucrado. Y también comento cosas de mi vida, de mi niñez, la escuela, mi desarrollo como músico, mis primeras bandas… Yo creo que puede ser muy informativo e interesante para mucha gente. Quiero decir que no se trata sólo de hablar de las cosas más importantes sino hacer un repaso total a mi vida y mi carrera.
– ¿Y aparte del libro, alguna novedad más que nos puedas contar que tengas en mente?
Bob.- Una vez que termine el libro probablemente vuelva a hacer algo musical, claro, quizás un nuevo disco con MOTHER’S ARMY o LIVING LOUD estaría bien. También voy a trabajar en el diseño de algunos bajos personalizados tipo «Bob Daysley, signature series» ya sabes.
– Como curiosidad, en el 2007 trabajaste con el guitarrista español Jorge Salán en uno de los temas de su «Chronicles of an evolution», ¿cómo fue la experiencia?
Bob.- Bueno, fue sólo una sesión y un trabajo que hice precisamente como eso, como músico de sesión. De todas formas, Jorge me parece un gran guitarrista y lo que hace musicalmente es muy interesante, buen material y está muy bien tocado. Por otro lado, no te puedo hablar de la experiencia de tocar con él o algo así porque yo estaba en Australia y él en España, así que nos mandamos los archivos en audio y poco más. Pero vamos, fue un placer y el material era bueno. Me hubiera gustado hacerlo directamente y habernos conocido en persona, aunque las distancias lo hacían imposible.
– Ya para terminar esta larga entrevista te quería preguntar si te sientes satisfecho con tu carrera.
Bob.- Sí, lo estoy… aunque me hubiera gustado que se hubiera pagado adecuadamente lo que me correspondía (risas), y también que se me hubiera reconocido mi trabajo en ciertos momentos, sobre todo en «Diary of a madman», donde la situación ya te digo que fue bastante molesta, y siempre pensaré que fue un gran error lo que hicieron. Eran nuestros créditos y nuestro dinero, pero quejarse a estas alturas no sirve de nada y bueno, ya te digo que he tenido una carrera larga, afortunada, creativa y en general muy satisfactoria. He trabajado con un montón de buena gente… ¡y además no se ha acabado todavía!
– Ok, Bob, muchas gracias por esta entrevista tan larga e interesante y nada, cerramos aquí, así que cualquier cosa que quieras decir para terminar es el momento.
Bob.- Nada concreto, simplemente comentarle a la gente de nuevo que mi próximo paso será el libro que saldrá dentro de poco, con suerte a final de año, porque aún estoy trabajando en él. Tengo muchas ganas de sacarlo a la luz porque es algo que llevaba pensando desde hacía muchos años, y cuando hacía entrevistas y la gente me preguntaba por el pasado, o cuando les contaba historias a amigos o compañeros músicos… todo el mundo me decía que toda esa información debería ponerla en un libro. Llevaba muchos años prometiendo que lo haría y finalmente ahora está a punto de cumplirse.
– Pues lo dicho, gracias por todo, y a ver si después del libro tenemos la oportunidad de escuchar otro disco de MOTHER’S ARMY.
Bob.- Claro que sí, y te gustará más que el primero (risas).
Antonio Cerezuela