Aprovechando el parón que supuso en Abril de 2008 la salida de VELVET REVOLVER del vocalista Scott Weiland, el eterno ex- GUNS N ROSES Slash aprovecha para materializar algo que llevaba fraguándose desde hacía ya algún tiempo, un primer trabajo en solitario concebido inicialmente como «Slash & Friends», que finalmente no se ha acabado titulando así sino de manera homónima, pero que es en esencia eso, el primer trabajo de SLASH por su cuenta (sin contar SLASH’S SNAKEPIT, que era más un grupo sólido liderado por el guitarrista) en el que él es el máximo protagonista y único compositor, y donde se ha rodeado de un montón de estrellas invitadas y amigos para cantar trece temas de un rock que creo que en mayor o menor medida todos esperábamos.
Hay, como siempre, muchas formas de afrontar un trabajo como este. Los habrá quien esperen algo parecido al rollo VELVET REVOLVER, habrá quienes esperen algo totalmente diferente, e incluso habrá algún iluso que esperase material en la línea de GNR, aunque desde mi punto de vista creo que la manera más inteligente de encarar este «Slash» es, primero, teniendo en cuenta cuáles son los gustos e intereses musicales del guitarrista inglés, sobre todo para no llevarnos desilusiones, y segundo, anteponiendo que es uno de esos trabajos plagado de colaboraciones, el típico disco que se disfruta de una manera diferente, algo así como una fiesta de voces, vamos, un trabajo algo inusual, en el que va a haber un poco de todo, y donde tiene tanto interés ese apartado vocal como el instrumental, en el que adelantando se puede decir que Slash ha hecho un buen trabajo, que tampoco creo que quede en la memoria de todos como algo imprescindible.
Aproximándonos un poco a la propuesta musical del este primer trabajo de SLASH, desde la primerísima escucha parece no quedar atisbo de duda de que estamos ante un disco de rock, un rock de corte más bien actual, bastante más cercano a VELVET que a cualquier otra cosa que el guitarrista haya hecho antes, aunque a la vez muy diferente. Es un trabajo que suena realmente fresco, desenfadado, nada del otro mundo compositivamente hablando, rock sencillo y adictivo con tintes esporádicos de funk con algunos muy buenos temas y otros que no lo son tanto, pero desde luego todos enfocados en mayor o menor medida a ese toque comercial que siempre ha caracterizado a Slash, siempre inherente a su música. Luego, es obvio que a lo largo y ancho de los temas encontremos muy diferentes tintes, mucha variedad, aunque no creo que se hayan adaptado demasiado los temas a los vocalistas que los interpretan.
En el plano guitarrístico, veo a un Slash muy suelto, a su bola, con una producción realmente buena y un puñado de muy buenos riffs, punteos y arreglos en los que se sigue transparentando su estilo de siempre, nada recargado, aunque tampoco demasiado gamberro esta vez, sino más bien serio, comedido y elegante, un trabajo algo más maduro en ese sentido.
El disco comienza bastante bien, con «Ghost», un tema interpretado por Ian Astbury (THE CULT) que podría llegar a recordarnos en un momento dado a GNR aunque sólo sea por ese punteo tan característico de Slash, que después se va fundiendo con riffs tan sencillos como cañeros. Buen tema, en la línea actual que caracteriza al músico británico, con buena interpretación vocal también. «Crucify The Dead» es el tema que ha cantado Ozzy, y es un tema bastante diferente, ya no sólo para tratarse de Slash, sino incluso dentro del disco. Suena bastante más intimista, menos roquera, oscura insluso, tanto por la voz de Ozzy como por la letra, con dos partes muy bien diferenciadas, las estrofas, muy comedidas y el puente/ estribillo, donde entran sendos riffs bastante sencillos, ya más reconocibles, en un estribillo que por cierto funciona.
Tras dos temas diferentes y muy interesantes para abrir, «Beautiful Dangerous» vuelve a cambiar por completo la película, aunque sigue siendo un corte que también destaco. Su inicio no es nada halagüeño, y lo cierto es que después sigue sonando mucho más moderna que el resto, pero aun así tiene una fuerza sobre todo en el puente y estribillo enorme, que le da su ‘rollo’ al tema, sobre todo gracias a la tremenda voz de Fergie (BLACK EYED PEAS). «Promise» no me parece nada del otro mundo, aunque la voz de Chris Cornell suena realmente bien y encaja perfectamente en un tema bastante poppie, mientras que en «By The Sword» encontramos otro de los puntos fuertes del disco, y la prueba más fehaciente de la variedad que encontramos aquí. A la voz, Andrew Stockdale (WOLFMOTHER) hace gala de su registro tan caracterísitico para interpretar un muy buen tema tan roquero como country, un corte con mucho gancho. «Gotten» por su parte es una balada bastante pasable, aunque quizás demasiado poppie para mi gusto. Muy buenas líneas de viola (?) y buena atmósfera la creada por Slash, aunque no puedo evitar que la aterciopelada voz de Adam Levine me recuerde a un tema de sus propios MAROON 5, y mira que es una voz muy característica que me gusta…
«Doctor Alibi» parece un tema hecho por y para Lemmy, y es con diferencia el tema más cañero y macarra de todo el disco, mientras que «Watch This» me parece por su parte de lo más flojo del trabajo, a pesar de la colaboración de su ex – compañero en VELVET REVOLVER Duff McKagan y la de Dave Grohl (FOO FIGHTERS). «I Hold On» es otro de esos temas perfectamente radiables, bastante comercial, de los que suena roquero por casualidad, en tan sólo un riff y con Kid Rock a las voces, mientras que «Nothing To Say» cuenta con uno de los mejores inicios del disco y probablemente las guitarras más heavies, y aunque la voz de M Shadows (AVENGED SEVENFOLD) en ocasiones endulza un poco el tema, es probablemente de lo mejor de la segunda parte del trabajo. Finalmente, de los últimos tres temas del disco, destacaría especialmente la final «We’re All Gonna Die», un corte interpretado por Iggy (IGGY POP) y que además se acerca bastante a su estilo, un tema simple, guitarrero y eléctrico, pues desde luego «Saint Is A Sinner Too», con Rocco DeLuca (ROCCO DELUCA AND THE BURDEN) es de lo más aburrido del disco de largo.
Resumiendo, un buen disco que no revolucionará el rock, ni mucho menos, al que le sobra algún que otro tema, pero con buenas intenciones y un buen trabajo de guitarra que es toda una declaración de Slash, quien desde luego se ha sacado de la chistera algunos muy buenos temas en un disco bastante entretenido para disfrutar con la mente bastante abierta, pues el exceso del componente comercial y actual será seguro una barrera para muchos con expectativas equivocadas. Esto es SLASH, ni más ni menos…
Jorge del Amo Mazarío (jorge_del_amo@rafabasa.com)
Lista de temas:
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