Muy poco tiempo después de editar el fantástico «Requiem»
el año pasado, la banda de José Carlos Molina se puso a currar
para sacar el siguiente disco y aquí tenemos el resultado. A primera
vista puede parecer un trabajo poco elaborado, algo soso y grabado demasiado
pronto. Bueno, desde el punto el punto de vista de que es un trabajo más
sencillo y fresco y menos heavy y oscuro que el anterior, se puede entender
de ese modo, pero yo realmente no lo considero así.
«Títerés» es más roquero
(cercano al sonido de «Andando sólo», el disco que sacó
Molina en solitario en el 94) y menos elaborado y adornado que discos cómo
«Dos años de destierro», «La danza de las mil tierras»
o el propio «Requiem» por citar algunos casos concretos. Pero esto
no significa bajón de calidad ya que es evidente que este disco es así
porque Molina quería que lo fuera. La base de Ñu,
por mucho que algunos puedan pensar otra cosa, son las letras inteligentes,
sinceras e irreverentes y la personalidad que Molina imprime a todos sus trabajos
Estos detalles no son ajenos a este «Títeres», por supuesto.
La formación de la banda es la misma que ya grabó
«Requiem» con la excepción de la participación del
joven guitarrista Juan Freire (que ya había acompañado a la banda
en directo en varias ocasiones el año pasado), toda vez que no cuajara
la incorporación del ex-Beethoven R., Javier Kiercheben cómo nuevo
hacha de la banda. Esta continuidad en los músicos se nota en el disco
ya que no da la impresión de que estamos necesariamente ante las ideas
y el protagonismo de un José Carlos dictatorial frente sus «mercenarios».
Cabe destacar la participación y la importancia cada vez más notable
de «el hijo del Molina», el bajista Gorka Alegre, y de Jorge Calvo,
teclista y flautista, que con la tontería lleva ya bastantes años
en la banda. De todos modos, es innegable que Ñu es
José Carlos Molina y por ello todos los temas están compuestos
por él (menos la versión de «Have you ever seen the rain»
con letra en español de la Creadence) y la impronta de nuestro juglar
subyace en cada texto y en cada melodía que aparece en el disco.
Uno de los detalles más significativos del disco es
que José Carlos ha dejado un poco de lado la flauta (que se echa de menos
en momentos puntuales, todo hay que decirlo) para centrar toda su atención
en los textos, que destilan más mala leche y son más incisivos
que nunca (y si no me creéis escuchar atentamente «Mono»,
«Títeres» o «El canto del gallo» -«(…)
tengo un libro de cuentos que le llaman Historia donde aprendes mentiras que
te hacen muy patriota (…)-).
En cuanto a las canciones debemos decir que «Títeres»
se compone de 12 temas. Por un lado encontramos unos más netamente roqueros
y con letras más directas cómo la más sosa «Hot show
girls»; el medio tiempo «Sólo por tí (hago rock n´roll)»
(no os tengo que explicar de qué habla Molina en esta canción,
¿no?); las pegadizas «Todo por la pinta» y «Te seguiré»
(ambas 100% AC/DC musicalmente… quien lo iba a decir hace algunos años,
¿eh?); la ácida, vacilona y terriblemente reivindicativa «Mono»
(sin entrar en polémicas, una de las letras más inteligentes e
ingeniosas del disco); o la bonita versión de la Creadence Clearwater
bautizada cómo «Has visto alguna vez caer la lluvia» (y primera
incursión de Ñu en este campo). Por otro lado,
y sin desmerecer esta faceta más netamente roquera, aparecen los temas
«más Ñu» del disco. Esto no es una
perogrullada ya que Ñu significa personalidad, melodía,
sentimiento y fuerza a partes iguales, y esto es lo que aparece en los 5 temas
que más me gustan del disco: una rápida «Soy él»
para empezar el disco; una «Tormenta de pasión» cargada de
feeling (donde destaca la preciosa voz rota de José Carlos cuando le
da por querer transmitir sentimientos a través de ella); la potente «Piérdete»
(uno de los temas más cercanos a los Ñu más
antiguos de «Fuego» o «Acorralado por tí»); una
tremendamente personal «Títeres» (una de las que más
tira con bala el señor Molina) donde destaca el marcado sonido de bajo
que sobresale en este tema; y «El canto del gallo», un tema más
cercano al power que al principio descoloca un poco por el doble bombo constante
que preside la canción pero que es sin duda el temazo del disco con una
melodía, un estribillo y una voz fantástica.
Es cierto que este disco no es fácil que entre a la
primera… o mejor dicho, te entra a la primera pero es difícil que te
convenza entonces. Ahora, conforme más lo escuchas, más jugo le
vas sacando y más te gusta, al menos es lo que me pasa a mí. Yo
siempre he sido un auténtico fanático de Ñu
y por ello sería el primero en reconocer cuando una de mis bandas especiales
me está dando gato por liebre. Reconozco que en algún tema falta
la magia que caracteriza más que otra cosa la música de Ñu,
y por ello podemos hablar de disco algo irregular pero, cómo álbum
en conjunto, «Títeres» me parece muy bueno. No lo niego,
este disco va a gustar a unos y no tanto a otros pero lo que es seguro es que
una vez más, Molina se ha salido con la suya y ha hecho lo que ha querido,
cuando ha querido y cómo ha querido… con excelente resultado. No cambies
nunca, viejo juglar.
David Esquitino (esqui21@eresmas.com)
Track list:
1- Soy él
2- Te seguiré
3- Mono
4- Hot show girls
5- Sólo por tí (hago rock n´roll)
6- Todo por la pinta
7- Has visto alguna vez caer la lluvia
8- Tormenta de pasión
9- Piérdete
10- Títeres
11- Idolo
12- El canto del gallo