Hacía ya bastante tiempo que venia siguiendo a esta joven banda bilbaína, y todo a raíz de verlos actuar una noche junto a otras bandas que daban sus primeros pasos en esto del metal, y ya desde el primer momento algo me decía que tenían futuro en este mundillo, se veía que tenían potencial, y que a nada que lucharan un poco, algo conseguirían. Y de ahí mi alegría cuando supe de este su primer trabajo, y es que el trabajo duro siempre tiene su recompensa, y ellos ya han empezado a recoger los frutos en forma de actuaciones junto a bandas del calibre de AMON AMARTH o SCAR SYMMETRY.
Como en cualquier banda que recién echa a andar, sufrieron algún que otro cambio de formación, pero manteniendo siempre el núcleo de la banda, quedando formada la misma en la actualidad por Alain «Dalay Tarda» a la voz, Hugo Markaida a la guitarra principal, Javi a la rítmica, Iñigo al bajo y el pequeño Txamo a la batería.
Yo mismo allá por sus inicios les eché en cara su falta de originalidad, sobre todo por su parecido desmesurado con los suecos IN FLAMES, quienes por otra parte no hicieron sino desarrollar lo creado por AT THE GATES con su «Slaughter of the soul», así que quien este libre de culpa en eso de las influencias, que tire la primera piedra. En la actualidad su estilo podría calificarse simple y llanamente como death metal melódico, y en eso si que no hay discusión posible.
Pues bien, categóricamente afirmo que quien a día de hoy siga tachando a una banda de directo brutal, de precisamente eso, de ser meros clones de IN FLAMES, primero es que directamente no ha escuchado este disco y no ha comprobado in situ la evolución de la banda en un pos de una personalidad propia, y segundo, que mucho oído para la música no tiene para compararlos a ambos en estos momentos. ¿Por qué digo esto?, por que así me ahorraré comentarios manidos.
El álbum en si echa a rodar con «Redrum», un tema que arranca con predominio de unos teclados la mar de animados, muy en la línea de algunas bandas que triunfan en la actualidad pero a la vez sin acercarse demasiado a la etiqueta «emo», la cual de por si sola puede hundir el buen hacer de cualquier banda. Un tema potente sin necesidad de baterías galopantes, donde desde un inicio un sonido claro y potente te golpea en la cara haciéndote despertar de la sorpresa inicial, pues para nada parece que estemos ante un disco de debut, y es que allá por los Rock studios el señor Carlos Creator está haciendo las cosas pero que muy bien últimamente, sin olvidarnos de que han tirado la casa por la ventana, pues el disco ha sido masterizado por Jacob Hansen en los afamados Hansen studios de Dinamarca.
«Prophet of doom» en probablemente más pesado que «Redrum», la voz de Alain suena un tanto más agresiva en contraposición con las partes con voz clara, contando esta vez si con algunas partes a doble bombo pero sin abusar de velocidad y recayendo el peso del tema en las guitarras de Hugo y Javi, como se verá que sucede a lo largo de todo el disco. Que decir de «Inner scream»…UN AUTENTICO TEMAZO. Así de sencillo, con todas las letras y en mayúsculas, uno de esos temas que nada más escuchar ya te ha enganchado de por vida. Si hubiera que puntuar cada tema uno a uno, a este no dudaría en darle un 10 como la copa de un pino, y razones no me faltan para ello.
En «Rise from Drama» vuelven a recuperar los teclados a la vez que los riffs de las guitarras se tornan pesados y machacones, pero no exentos de melodía cuando lo requieren, un tema muy elaborado con gran protagonismo de las voces, un interesante duelo entre Alain por un lado poniendo la agresividad y Aimar de NODRAMA por el otro con voz más clara, algo que ya hemos podido ver en directo con excelentes resultados. «Unknown presence» a priori parece ser más floja y pecar de repetitiva en un inicio, pero nada más alejado de la realidad, solo con escuchar las guitarras y ese pasaje instrumental, de deliciosas guitarras que beben de influencias muy lejanas al death metal pasado el tercer minuto del tema se ve que aquí se ha trabajado a conciencia, y que no estamos ante un grupo de amiguetes que se reúnen de vez en cuando para tocar.
«Forbidden lullaby» es en esta ocasión si, un tema que fácilmente podría relacionarse en un principio con la banda de Jesper Strömblad en los tiempos actuales, pero nuevamente partes a doble bombo, guitarras de riffs ultrapasados en unos momentos y melódicos en otros, nos devuelven al sonido 100% Goteborg, lo cual no es malo según se mire. Con «Infected wounds» en cambio se tornan más agresivos y crudos, aunque vuelven a incluir por momentos algo de electrónica en su sonido y voces desdobladas, debiendo en mi caso ensalzar la labor de Alain en este apartado, y doy fe que en directo no es de los que se viene abajo incapaz de interpretar lo hecho en el estudio.
«My sombre prospect» vuelve a ser nuevamente un tema agresivo, directo y sin muchas florituras, quizá un tanto más flojo comparado con otro pero visto el nivel general es normal. «When the instict…» es un corte instrumental donde Hugo es el principal protagonista, aunque de haberle impreso mayor velocidad habría casado a la perfección con «…Kills the reason», su alter ego, nuevamente un tema con juegos a dos voces y mucha melodía, logrando Alain sus registros más graves y guturales de todo el disco probablemente, terminado el redondo con «Chasin infinity», donde Txamo arremete con furia inusitada en momentos puntuales, buen tema para un notable disco, sobresaliente tratándose de un disco de debut de este estilo y en nuestro país.
Sobran las palabras, bravo y audaz lanzamiento, de excelente calidad que en este caso si que nada tiene que envidiar a lo que nos llega de otros países, ni por contenido, ni por calidad de producción, que tomen nota quienes dicen que en este país solo hay chapuceros, que abundan, pero también hay gente que lo hace muy bien, y para muestra un botón.
Angel Ruiz
Tracklist:
- RedruM
- Prophet of Doom
- Inner Scream
- Rise for Dream
- Unknown Presence
- Forbidden Lullaby
- Infected Wound
- My Sombre Prospect
- When the Instinct…
- … Kills the Reason
- Chasing Infinity