 |
Martes 23 de Octubre de 2007 – Sala Heineken – Madrid
Es una pena que para ver una banda tan excelsa como son los magníficos RIOT no nos congregáramos en la sala Heineken de Madrid ni 100 personas, y más teniendo en cuenta lo barato del concierto costando las entradas solo 17 y 20 euros anticipadas.
 |
 |
Tras unos teloneros que nada tenían que ver con los protagonistas de la noche, saltaron a la palestra RIOT con una puntualidad casi británica arrancando con su maestría habitual. Al grupo no se le veía tan cómodo como en su última visita a la capital, permaneciendo la mayoría de los miembros bastante estáticos en el escenario.
 |
 |
Al parecer el guitarrista y líder Mark Reale y el batería Frank Gilchriest no se encontraban demasiado bien, lo que propició un concierto directo y sin contemplaciones siendo obviadas casi en su totalidad las presentaciones de los temas. A pesar de la un tanto fría salida, el público se animó enseguida con «Flight Of The Warrior», que consiguió despertar a la adormecida concurrencia.
El quinteto desempeñó el concierto con solvencia a pesar de lo mermado de sus condiciones físicas, aunque no consiguieron impactar tanto como se esperaba. Uno de los motivos para este menor impacto fue sin duda el set escogido, un tanto aburrido, extraño en ocasiones y con flagrantes omisiones. No hubo nada de discos como «Restless Breed» o su magnífico álbum anterior «Through The Storm», y por el contrario nos inundaron con canciones de su más desconocida etapa de finales de los 90 a las que se sumó un solo de batería que también nos hundió más en el ostracismo.
 |
 |
No quiero que parezca que el concierto fue horrible, ni mucho menos, de hecho tuvo momentos magníficos, pero faltó el punto (quizá por la enfermedad) que lo hubiera convertido en una gran noche.
Hubo sitio para sorpresas como «Glory Calling» o «Dance Of Death», y no faltaron clásicos como «Shine On», «Swords And Tequila», «Angel Eyes» o «Bloodstreets», pero sin estar mal no fue para tanto el recital.
 |
 |
En general un concierto ramplón de unos RIOT que por mi experiencia, imagino que tuvieron una mala noche.
Más suerte la próxima vez, y no os dejéis engañar por este relato aislado, RIOT son una magnífica banda en directo y unos auténticos profesionales, algo esto último que si demostraron el pasado martes.
Texto: Antonio Cerezuela
Fotos: Diego L. Pérez
Para ver las fotos a mayor tamaño, pinchar sobre
ellas.
 |
 |
 |
 |
 |
 |
 |
 |
 |
 |
 |