Crónica y fotos de CYNIC + OBSCURA + CRYPTOSIS en Madrid

+ OBSCURA + CRYPTOSIS

Martes 19 de Marzo de 2023 – Sala Copernico  – Madrid

Sin ninguna duda el martes es un día bastante jodido para asistir a un concierto, la peña, por lo general, trabaja y se dificulta estar en la sala desde temprano, más aun cuando el bolo arranca pronto… como era el caso. Sin embargo, eso no fue un impedimento para que la sala Copernico se llenara, creo que no se colgó el cartel de sold out, pero, de ser así, faltó poco, ya que la sala estaba petada, había ganas de ver a CYNIC y eso era evidente ya en la fila para entrar, más aun si venían acompañados de dos grupazos como OBSCURA y CRYPTOSIS.

En mi caso, no había tenido la oportunidad de ver a ninguno de los tres grupos en directo, por lo tanto, no tenía referencia alguna de lo que me iba a encontrar, motivo por el cual me acercaba a la Copernico con mas curiosidad que expectativas.

Justo y como estaba pautado, los primeros en repartir cera fueron los Holandeses CRYPTOSIS, quienes hacían acto de presencia en un escenario adornado por pantallas en las que proyectaban animaciones robóticas y futuristas, y en las que, por momentos, también podíamos ver escenas de sus videos promocionales. La verdad es que, por ese lado, consiguieron ambientarnos en esa imagen cibernética y futurista que presenta la banda tanto en el arte de su disco como en sus videos.

El primer tema de la noche sería “Decypher”, cargado de riffs afilados y rápidos sin dejar de lado esa vena técnica e incluso progresiva que caracteriza el sonido de la banda, “Death Technology” y “Prospect of Immortality” serían las siguientes, esta última cargada de oscuridad y con unos arreglos de guitarra fascinantes, un tema con el que soltarían un poco el pie del acelerador, aunque no por mucho tiempo, porque con “Transcendence” volverían a la carga con eso ritmos acelerados y Thrasheros.“Conjuring the Egoist”, “The Silent Call” y “Flux Divergence”, cerrarían un directo corto pero muy intenso, ya que dejaron claro desde el primer segundo que saldrían a por todas, y así fue.

Llegaba el turno de OBSCURA un grupo del que tenía muy buenas referencias por parte de colegas y gente de la escena, comandados por Steffen Kummerer quien además hacia doblete al aportar sus guturales a la primera parte del directo de CYNIC .

Con la maravillosa introducción de bajo de “Forsaken” aparecía el cuarteto alemán demostrando el fantástico dominio que posee cada uno de ellos de sus instrumentos, con piezas complejas y cargadas de progresiones como “The Anticosmic Overload” o “Emergent Evolution”.

Disfruté en especial el tema “When Stars Collide” en el que el carismático y cercano Steffen nos demostraba su fantástico rango vocal en el que no solo destacan los guturales, otro de los temas que, para mi, marcaron un antes y un después fue el maravilloso “Orbital Elements”, una pieza instrumental de cinco minutos y medio que serviría de preámbulo a “Septuagint” con esos hermoso arreglos de guitarra acústica con los que se despedían en esta oportunidad los bávaros.

Sin ninguna duda puedo afirmar que todas esas buenas referencias que me habían dado de los alemanes se quedaban incluso cortas para lo que realmente ofrece este grupo en directo, virtuosismo y tecnicismo pero sin perder la espontaneidad. Gran directo de OBSCURA que dejó el listón muy alto para los protagonistas de la noche.

Llegaba el momento de ver a CYNIC , había ganas, eso era evidente en la cara de los presentes, con la sala petada y en total oscuridad aparecía en pantalla el logo de CYNIC. La espera había terminado y con Paul Masvidal llegaban las primeras notas de “Veil of Maya”, la seguiría “Celestial Voyage” con Steffen Kummerer de OBSCURA aportando los registros guturales, “The Eagle Nature” nos permitiría apreciar el magnifico trabajo del bajista Brandon Giffin y hasta este momento todo nos transportaba a ese mundo extraterrestre que nos dibuja CYNIC en su obra “Focus”, para ello no sólo utiliza su música, también nos sumerge en una atmósfera recreada con humo y luces verdes y azules que rompen con la oscuridad de la sala, como si nos encontrásemos en una nave espacial, de fondo la portada del “Focus” en colores morados alternando con imágenes del cosmo.

Por lo altavoces de la sala empezamos a escuchar las características percusiones de “Sentiment” que desembocan en una base rítmica en la cual Mike Gilbert se desenvuelve como pez en el agua con sus seis cuerdas. Con “I’m but a Wave to…” alternan las vocales de Paul con las guturales de Steffen de manera magistral y llegamos a “Uroboric Forms” y casi sin darnos cuenta ya hemos llegado casi al final del fantástico “Focus”.

Sin embargo, uno de los momentos memorables de la noche llega cuando Paul se dirige a los presentes en castellano para hablar de su sangre española, contando que su abuelo era de Villarreal, y que él quiere vivir aquí. Por supuesto, sus palabras son acompañadas por una sonora ovación, y es que en todo momento Paul se mostró cercano con los asistentes e incluso al finalizar el bolo se acercó a dar la mano y a abrazar a todo el que se le acercaba, además de hacerse fotos con todo el que se lo pedía; gran músico, de eso no cabe duda, pero mejor persona.

Aun quedaban dos temas para finalizar el set de Focus, el primero “Textures” un tema fantástico, muy jazzístico, y el popular “How Could I” que culminaba con la imagen de Sean Reinert y Sean Malone en la pantalla a modo de tributo. Comenzaba el segundo acto con Reinert y Malone en pantalla, Paul cogía la guitarra acústica para homenajear y dedicar “Integral” a sus dos compañeros y amigos fallecido en el 2020, sin duda uno de los momentos mas emotivos de la noche con el que daba paso a “Kindly Bent to Free Us” y la tónica cambiaba de esa atmósfera alienígena a una mas bien psicodélica, para este entonces ya Steffen había abandonado el escenario y los sonidos dominantes eran los progresivos.

Prueba de ellos fue la fantástica “In a Multiverse Where Atoms Sing”, en la cual Matt Lynch destaco en la percusión,  con “Carbon-Based Anatomy” nos acercábamos al final de la noche, el tema numero doce y parecía que el tiempo volaba, y sin darnos cuenta las notas musicales de “Adam’s Murmur” salían de los altavoces de la Copernico para culminar con las fantástica “Evolutionary Sleeper”.

No se me ocurre un mejor titular que “Una noche mágica” con unos CYNIC en un fantástico estado de forma, y con un Paul Masvidal, cercano y muy humano, una de esas noches en las que hay una comunión perfecta entre el público y los músicos en escena, enormes CYNIC , … ¡por más noches así!

Texto y fotos: Alvaro Ochoa

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