Crónica y Fotos del RESURRECTION FEST – Miércoles 28 de junio, con GHOST + AMENRA + THE BABOON SHOW + BEHEMOTH + ALCEST + THE GHOST INSIDE+ BORN OF OSIRIS + MOTIONLESS IN WHITE

MOTIONLESS IN WHITE + BORN OF OSIRIS
+ THE GHOST INSIDE + ALCEST
+ BEHEMOTH + THE BABOON SHOW
+ AMENRA + GHOST

Miércoles 28 de Junio – Sábado 1 de Julio 2023 – Viveiro – Lugo

Después de una buena pila de años, unos cuantos más de los que me hubiera gustado, volvía al que allá por el año 2016 ya era el mejor festival de metal de nuestro país. Y lo hacía con la promesa, o casi la certeza, de encontrarme un festival todavía más grande, mejor organizado y mucho más ‘premium’ de lo que ya era entonces, y es que si algo tiene este festival que le distingue de otros tantos es que, especialmente tras la pandemia, han sabido tirar adelante y evolucionar como ningún otro ya no solo a nivel organizativo, sino a la hora de reforzar su marca propia a nivel de la imagen que proyectan hacia fuera, y por supuesto añadiendo año tras año elementos que no hacen sino sumar valor a la gran experiencia que ya de por sí supone el evento. Incluso en cuanto a su programación, el RESU ha conseguido algo inalcanzable para tantos otros, y es llenar (o casi) un recinto enorme cada año, en una ubicación no olvidemos que bastante remota para muchísima gente, nada centralizada, vaya, con un público de edades tremendamente dispares sabiendo contentar cada año a todo el mundo y lo que es más importante, apostando tanto por ‘headliners’ clásicos como por bandas que sin lugar a dudas serán (ya son) quienes cojan el testigo, y todo sin “morir” en el intento.

Ya centrándonos en lo que ha sido la edición de este año, se puede decir a modo de resumen, y con la boca grande, que la edición 2023 del RESURRECTION FEST ha sido un éxito absoluto de aforo, rozando el lleno, y también a nivel de organización, una edición sin grandes incidentes que nos ha dejado un gran sabor de boca y de la que regresamos con la sensación de que el festival sigue haciendo muy bien las cosas, pero sobre todo de que toma buena nota de las que no están tan bien para futuras ediciones.

Este año, por ejemplo, los accesos fueron lo mejor que he visto en años en cualquier festival, al menos en el momento en que nos tocó acceder a nosotros. Colas mínimas, y un proceso de pulsación rápido que nos permitió entrar al recinto en cuestión de 5 minutos, algo que se les había demandado en otras ocasiones y que desde la organización tenían bien previsto.

Dentro de la RESURRECTION FEST City encontramos más servicios y facilidades que nunca, con especial mención a un RESURRECTION BOULEVARD espectacular, que nos daba la sensación de estar dentro de un parque de atracciones, una calle entera de camino a los 2 escenarios más grandes con todo tipo de reclamos entre los que destaco especialmente una nueva capilla, que en palabras de la organización ha llegado para quedarse, o una cervecería enorme con barriles de cerveza reserva, entre otros muchos. Aparte, mucho merchandising además del oficial, que por cierto se agotó casi en su totalidad bastante pronto, y alguna que otra distracción más, como un escenario alternativo con bandas locales y unos cuantos puestos de ropa bastante curiosos, hacían que los pocos ratos muertos que nos concedía el cartel, se pudiesen rellenar dando un agradable paseo mientras, de paso, disfrutábamos de la “fauna” que un año más creció en la cita gallega. Lógicamente, hablo de la inmensa cantidad de gente disfrazada, que nos hizo pasar más de un rato de lo más divertido.

En el apartado del debe, podemos mencionar algún que otro aspecto que bien podría mejorarse de cara a años futuros. Es el caso de la ausencia de baños cerca del Desert Stage, por ejemplo, o la saturación en general de los aseos a determinadas horas, especialmente de los femeninos, cuyas esperas en determinados momentos eran excesivas. Ocurre lo mismo con los puestos de comida. Había a priori bastantes, no lo niego, pero a la hora de la verdad, hubo algún que otro día que nos tocó sacrificar a alguna banda de las deseadas por estar en una fila esperando demasiado tiempo, algo que pienso que tiene más fácil solución de cara a futuras ediciones y en lo que se debería trabajar, porque por ejemplo era algo que para pedir bebida no ocurría, o no tanto. En cuanto al tema de los precios, que suele ser un tanto recurrente, comentar que en mi humilde y totalmente subjetiva opinión, los de la bebida eran bastante aceptables teniendo en cuenta lo que suele ser habitual en una sala de cualquier ciudad medio grande o en un festival, pero a los de la comida sí que convendría darles una vuelta en la medida en que comer necesitamos todos y no está permitido el acceso con alimentos de fuera.

Por último, comentar que lamento no poder aportar mucha luz en lo que se refiere a las zonas de acampada, ‘glamping’ y zona de descanso en cuanto a calidad de los servicios por encontrarnos alojados en una localidad cercana al festival, pero sí que quiero hacerme eco de la falta de conexión por lanzadera entre varias de las zonas de acampada y el festival, aunque la organización nos consta que lo intentó hasta el último momento, y por otro lado subrayar también lo bien que pudimos aparcar todos los días y a diferentes horas tanto en la zona del puerto como en otras localizaciones de Viveiro, lo que refuerza algo que tengo claro desde hace tiempo, y es que Viveiro es suficiente para el RESU y que el RESU, sin Viveiro, no sería lo mismo.

Mencionar también, antes de pasar contaros el frenetismo del cartel que pudimos disfrutar este año, que como novedad este año hubo una serie de actividades alternativas para las primeras horas del día en la acampada como ‘metal yoga’ o ‘paddle surf’ que sinceramente, creo que fueron una idea excelente que deberían seguir desarrollando para futuras ediciones. Sin más, nos metemos de lleno en lo que dio de sí un primer día enormemente intenso, en el que el tiempo respetó con una temperatura bastante agradable, casi sin bochorno, sin lluvia, y con un cabeza de cartel como los GHOST que cada vez cuentan con más y más diversos adeptos a su particular misa, que oficiaron en Viveiro con incontestable éxito.

Miércoles 28 de Junio:

Antes de meternos de lleno con el resumen de lo que fueron los 4 días de festival al completo, sí que me gustaría hacer una valoración bastante personal del cartel de este año desde el punto de vista de programación de bandas, a nivel artístico. Este año he escuchado mucho, y puede que con cierta razón, que el cartel adolecía de bandas clásicas, particularmente de estilos más clásicos como puedan ser el ‘thrash metal’, el ‘death’ más tradicional o incluso el ‘heavy metal’, y aunque en parte puede decirse que hasta cierto punto ha sido así, hay que saber valorar el enorme éxito de asistencia que ha generado un cartel sin bandas “de las más grandes”, como puedan ser IRON MAIDEN, KISS o RAMMSTEIN, por citar tan solo un puñado. Este ha sido, creo yo, el cartel de los últimos tiempos que más se ha acercado a los orígenes del RESU, con bandas enormes y conciertos memorables dentro de estilos más afines al ‘hardcore’, ‘metalcore’, ‘deathcore’ etc, y la respuesta de la gente ha sido inequívoca, y es también por lo que este festival es tan distinto a otros que hemos conocido y todavía hoy conocemos en nuestro país. Llevamos tiempo diciéndolo, tenemos que acostumbrarnos a ir dejando de ver a los clásicos encabezando este tipo de festivales, como así está siendo poco a poco, y la gente que hace este festival ha demostrado que aquí, este tipo de formatos seguirán funcionando con bandas como GHOST, SLIPKNOT, PARKWAY DRIVE o (ojalá) PANTERA, que eran los máximos protagonistas este año, pero también con otras como SABATON, POWERWOLF y muchísimas más.

El miércoles nos tocaba buena paliza en coche, por lo que al no poder viajar el día de antes, accedíamos al recinto mientras escuchábamos como los interesantísimos ORBIT CULTURE hacían papilla un Ritual Stage del que después daríamos buena cuenta. Una verdadera pena, porque nadamos todo lo que pudimos para acabar “muriendo en la orilla”, como suele decirse, ya que lo de DEAD BY APRIL lo teníamos bastante asumido, una banda ya con un buen bagaje a sus espaldas y que me hacía especial ilusión ver, ya que no es fácil pillarles en nuestro país.

Texto: Jorge del Amo Mazarío

MOTIONLESS IN WHITE

Eso sí, ya situados y listos para la batalla, debutamos en el festival con unos MOTIONLESS IN WHITE que ya de primeras, nos llamaron poderosamente la atención por la inmensa cantidad de gente que tenían congregada en un Main Stage con ambientazo hasta la torre de sonido, algo muy a tener en cuenta considerando que hablamos de un miércoles a las 19 de la tarde.

La banda de Pensilvania comenzó sonando bastante mejor que los ORBIT CULTURE en el escenario contiguo, muchísimo mejor, con un sonido mucho más potente, con unas voces infinitamente más altas, y eso sí, con un sonido de guitarras algo mejorable durante el primer tercio de su actuación, un tanto difuminado, sucio… Pero dio igual; la banda tan solo había estado en nuestro país una vez antes y había muchísima gente como loca por verles, lo que se notó desde que la descarga comenzase con “Disguise”, y ya para “Sign Of Life”, que vino después, la fiesta era total, con varios miles botando y disfrutando del recital.

Fue de esos conciertos por los que uno va al RESU, un bolazo de ‘metalcore’ a cargo de una banda desatada, difícil de vivir fuera de un emplazamiento como este. Después, para alegría de muchos, serían los propios MIW la banda secreta en el Chaos Stage en la jornada del jueves, con un ‘set’ bastante parecido, eso sí.

Texto: Jorge del Amo Mazarío

BORN OF OSIRIS

En cuatro pasos estábamos ya disfrutando de unos BORN OF OSIRIS a los que, lo reconozco, tenía un poco perdida la pista, pero que me re-conquistaron rápidamente en un Ritual no tan masificado, pero que sonó puede que mejor aun que el Main momentos antes, más nítido seguramente.

La dupla de voces formada por Ronnie Canizaro y Joe Buras nos hizo la tarde, en un bolo despiadado en el que la banda no se guardó nada, e hicieron despliegue de un ‘deathcore’ pulcro, asesino y magistral como solo ellos saben.

Los de Chicago se centraron principalmente en su último trabajo, “Angel Or Alien” (2021), y en “The New Reign” (2007), EP con el que nos patearon la cara con cuatro temas rabiosos y directos al mentón.

Texto: Jorge del Amo Mazarío

THE GHOST INSIDE

La tarde seguía pintando ‘core’ con otra de las bandas que más ganas tenía de ver la parroquia local, unos THE GHOST INSIDE que no tenía demasiado controlados, y que me dejaron una sensación difícilmente mejorable en ese escenario ya antes del primer cabeza de este año.

El cariño de la gente, y el motivo, quedó fuera de toda duda desde que la banda echó gasolina sobre el escenario con la inicial “Engine 45”, y soltó la cerilla con un “The Outcast” que terminó por hacer saltar por los aires un concierto que fue una verdadera fiesta desde que empezó hasta que acabó. Sonido inmejorable, con toda la potencia del Main, y una banda absolutamente desatada fueron los ingredientes de uno de los conciertos que seguramente más recordará la gente afín a este género, con un Jonathan Vigil que no dejó de emocionarnos con su voz y una banda enormemente compactada, que pudo haber desaparecido en aquel trágico accidente a finales del año 2015, y que regresaba por primera vez a España con una vitalidad con mucho de reivindicativo.

Al final de su actuación, tras “Aftermath”, Andrew Tkaczyk dejó la batería y salió a agradecer tantísimo apoyo como el héroe que en realidad es, una inspiración para muchos, que perdió una pierna aquel fatídico día, y desde entonces no ha parado de luchar y luchar. Cómo lo disfrutamos…

Texto: Jorge del Amo Mazarío

ALCEST

ALCEST es de esos grupos que desprende elegancia; la última vez que les vi fue junto a CRADLE OF FILTH en la sala Paqui y ofrecieron un bolazo increíble, mi única duda era cómo adaptarían su propuesta a un festival, y la verdad es que lo hicieron magníficamente. Esa elegancia tan característica de su sonido se mantuvo intacta y con su buen hacer consiguieron rápidamente sumergirnos en esas atmósferas oníricas que acompañan la melodiosa voz de Neige, que por momentos se ve interrumpida por guitarras corrosivas y esos guturales tan característicos del ‘post black metal’.

Cómo siempre Neige estuvo muy bien acompañado por los habituales, Zero a las guitarras, Indria Saray al bajo y Wintherhalter a la batería, arrasando un Ritual Stage que contó con un sonido estupendo y así una vez mas demostraron la buena salud de la banda, que visto lo visto no hay escenario que se le resista, ni siquiera el de un festival.

Texto: Álvaro José Ochoa

BEHEMOTH

Y llegaba el turno de uno de los cabezas del festival, me refiero a los polacos BEHEMOTH; y es que para nadie es un secreto el tirón que han tenido en los últimos años llegando al punto de posicionarse entre los dos cabezas de cartel del primer día del RESURRECTION. Negral y los suyos contaron con todo lo que debería contar un grupo de este nivel, plataformas, fuego, y un espectáculo visual realmente brutal, un show a la altura de un cabeza de cartel, en mi opinión superando con creces el bolo de Madrid junto a ARCH ENEMY.

Los polacos contaron con un sonido notable, que sirvió para arrasar con todo el que se acerco al Main Stage, contando con un set bastante potente cargado de temas que ya son clásicos de la banda como “Ora Pro Nobis Lucifer”, “Conquer All”, “Blow Your Trumpets Gabriel” o “O Father O Satan O Sun!”, sin dejar de lado los temas de su mas reciente lanzamiento discográfico.

Sin duda BEHEMOTH ofreció uno de los directos mas completos del festival, demostrando una vez mas por que han llegado a conquistar la cima.

Texto: Álvaro José Ochoa

THE BABOON SHOW

El solape entre BEHEMOTH y THE BABOON SHOW fue para mí seguramente el más doloroso de todo el festival, pero seguramente por haber visto tantísimas veces a los polacos desde aquella vez en la Ritmo & Compás, un día de los enamorados del año 2008, en la gira de “The Apostasy”, decidí dejar la orgía de fuego para un poco más adelante y dirigirme a la carpa del Chaos Stage para presenciar otro de los conciertos que para mí quedarán en el recuerdo del RESURRECTION FEST 2023, la descarga de unos THE BABOON SHOW que pusieron la carpa literalmente del revés, en un concierto en el que no se paró de cantar, menear la cabeza, saltar y bailar un solo segundo, espoleados por una Cecilia Boström que dentro de la escena ‘punk/ garage’ hace mucho que no sorprende, porque ya “nos la conocemos”, pero que a pesar de cumplir 20 años este 2023 con la banda no afloja ya sea una carpa hasta la bandera o una pequeña sala en cualquier ciudad media. Es la mejor ‘frontwoman’ del momento, pero es que lo lleva siendo años, y quien no les haya visto ya puede acudir a su sala más cercana, porque las fiestas que montan estos suecos no son normales.

Texto: Jorge del Amo Mazarío

AMENRA

Era pues momento para visitar por primera vez un Desert que quizás sí quedaba un poco retirado principalmente de los dos escenarios más grandes, pero en el que los AMENRA cuando llegamos ya tenían allí preparada una de aupa.

El suyo fue el concierto más multitudinario que pude presenciar en ese escenario en todo el festival, seguramente porque los belgas ya son una banda que pide algo más, pero la magia del momento fue también un poco esa, seguramente, un escenario más pequeño y con una respuesta multitudinaria. Su actuación se ajustó exactamente a los cánones de la banda, con proyecciones constantes pasando en blanco y negro, un sonido apabullante, lo mejor que escuchamos seguramente ahí en los 4 días por nitidez y volumen, y un Colin H.

Prácticamente todo el tiempo de espaldas a un público que parecía levitar con cada ‘riff’ y cada giro del genial frontman.

Además su set, aunque algo corto para lo que suele ser la experiencia de ver a AMENRA en directo, fue muy variado, dejándonos momentos enormes como “Razoreater”, “Am Kreuz” o “Diaken”, con la que terminaban y nosotros ya nos dirigíamos a la ceremonia eclesiástica más querida de la escena rock mundial. GHOST esperaban ya en el escenario principal, y no defraudaron.

Texto: Jorge del Amo Mazarío

GHOST

Lo de GHOST era la crónica de un éxito anunciado, y un Main Stage a reventar en una noche mariñana perfecta fue lo poco (o mucho) que se necesitaba para que aquello sucediera; y sucedió. Hace mucho que la banda sueca liderada por el ahora Papa Emeritus IV es, con todo merecimiento, una banda grande con todo el merecimiento, y en Viveiro en la noche del miércoles dieron el que seguramente es el concierto más impresionante y memorable de cuantos han dado en nuestro país.

Telón con las vidrieras de su ya clásica catedral al completa, fuego haciendo arder la torre de sonido y la entrada del Pandemónium (algo mejorado este año, por cierto), y una teatralidad exagerada inundando el espectacular escenario para dar más vida aún a temas que cada vez se tornan en himnos antes, lo que habla sensacional de la evolución exponencial que sigue la banda desde que el mundo les conociera con aquel “Opus Eponymous”, y también de la cantidad y el fervor de los feligreses que les siguen.

Su concierto sonó con una perfección máxima desde que empezó hasta que acabó, desde la voz, con un protagonismo bastante dominante, hasta unas guitarras muy nítidas que se dejaban sentir incluso más allá de sus discos, y unos coros por cierto sensacionales, que son esenciales en la propuesta de la banda.

Además, su set cubrió casi la hora y media, demostrando también que la banda sueca tiene repertorio para eso y para más, porque todavía echamos algún que otro tema como “Secular Haze” o en mi caso alguno más antiguo quizás del citado primer trabajo, del que solo sonó “Ritual”.

Eché de menos un “Elizabeth”, por citar sólo uno… un tema que incluso con una buena ‘performance’ podría dar mucho juego. Aun así su concierto fue un éxito detrás de otro, y quien más y quien menos se dejó la voz cantando himnos como “Rats”, “Spillways”, “Year Zero”, “Mary On A Cross”, y otros muchos.

Papa terminó pletórico en los bises con su chaqueta de luces azul y luego roja, cambiando de plataforma en plataforma, de izquierda a derecha, volviendo loco al personal y terminando con un “Square Hammer” que fue un festón absoluto. Una cortina de chispas sirvió como final para un concierto que les refuerza, y para nosotros cerraba un primer día que no podía empezar mejor.

Qué bueno es para la música rock en general una banda como GHOST, que ha supuesto una puerta inesperada de entrada hacia otros estilos a tanta gente que viene de otros bien distintos. Y quedaba todo por delante…

Setlist GHOST:

1. Kaisarion
2. Rats
3. Faith
4. Spillways
5. Cirice
6. Hunter’s Moon
7. Ritual
8. Watcher in the Sky
9. Year Zero
10. Miasma
11. Mary on a Cross
12. Mummy Dust
13. Respite on the Spitalfields
14. Kiss the Go-Goat (bis)
15. Dance Macabre (bis)
16. Square Hammer (bis)

Texto: Jorge del Amo Mazarío (Jorge_del_amo@rafabasa.com) – Twitter: @Jorge_del_amo

Fotos: Alvaro Ochoa

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