![]() |
+ GRAVE + ARSIS + THE LAST FELONY + THE ROTTED
SALA SANTANA 27, BILBAO – 19 NOVIEMBRE
Extenso cartel el que teníamos entre manos este viernes de noviembre, demasiados nombres para una sola gira, soy más partidario de giras formadas por un máximo de 3 bandas y con algo más de tiempo sobre el escenario cada, y luego está otra fórmula que es cada día menos habitual, un minifestival de más de cinco horas con bandas de nivel, como fue el caso.
Esperaba encontrarme una sala por la que solo rodara el típico rastrojo de los clásicos hollywoodienses del oeste, poco más de las seis de la tarde no era para menos, pero a diferencia de lo sucedido con otros bolos, la sala estaba a un tercio de su aforo más o menos, lo que se traduce en unas 40 personas frente a los ingleses THE ROTTED, aunque quizá más de uno los recuerde por su anterior nombre y bajo el cual grabaron tres discos, GOREROTTED.
Desde luego no se trataba de unos novatos, y desde un inicio eso se notó, el sonido fue mejor de lo habitual dada su posición en el cartel, por lo que me encontré ante una banda compacta, quizá no demasiado comunicativa, pero para eso ya se valía Ben él solo, berreando con mucha actitud y mala uva sin parar de moverse por todo el escenario.
No es que sean la panacea del death metal, pero contundencia les sobra, lo que unido a contar con un buen frontman les da la media partida por ganada. Está bien ver que tras la cruz de San Jorge aún queda algo que no sea «britpop».
Desde la zona francófona de Canadá aterrizaron THE LAST FELONY, una banda de esas que busca abarcar demasiado en cierto modo y se queda en todo a mitad de camino, me comentaban justo antes de su descarga que lo suyo era un death técnico con influencias del tan en moda metalcore, y nada más verlos sobre el escenario supe que de lo primero no sabía si habría mucho, pero de lo segundo para dar y tomar.
El sonido no se portó muy bien con ellos, los amplis petardearon durante gran parte de su actuación, pero ello no es motivo para no admitir que si bien hacían «ruido» como los que más, no ofrecían nada que no hubiera visto y escuchado ya, metalcore de riffs tan pesados y graves como repetitivos con algún que otro atisbo de melodía, eso sí.
Podría decir básicamente que pasaron por Bilbao sin pena ni gloria, una banda más de metalcore/deathcore, pero no sería justo. Su bajista Sebastien merece una mención de honor sino todo un párrafo/apartado para él solo. Ya de entrada llamaba la atención su peculiar forma de colgarse el bajo, pero lo realmente im-prezionante era escuchar como este angelito de muchos kilos entre tema y tema se adueñaba de un micro y entre otras perlas nos instaba a montar un pogo infernal bajo la amenaza de bajarse del escenario y matarnos ahí mismo con sus propias manos, aunque me gustó el detalle en el que se decantaba solo por los pogos «old school». Todo un personaje que arrollaba con todo y con todos sobre el escenario, allí donde él iba sobraban los demás, daba igual que tapara a sus compañeros guitarristas, que echara casi del escenario al vocalista o que en un brutal arrebato true-metalero rompiera una de las cuerdas de su bajo, solo le faltó enrollarla y dársela a alguno de sus fans. Loable la entrega de este chico de larga trayectoria musical, siempre ligada al metal extremo (todo sea dicho), pero humildemente creo que siendo algo más comedido ganaría en credibilidad, y lo que a él le sobra que se lo contagie a sus compañeros, un tanto faltos de garra.
Aunque puedan llamarme hereje, ARSIS a priori era para mi la propuesta más interesante de la velada, una banda que no se deja ver demasiado por aquí y que claramente presentaba un estilo muy diferenciado de sus compañeros de gira, mucho más pesados y cañeros, y mucho menos técnicos, que es lo que mejor y más los diferenciaba, todo sea dicho.
No soy un gran conocedor de la banda pero creo poder decir que cuajaron una buena, correcta, aunque la respuesta del público fue poco menos que fría, la chavalería desapareció de la sala y con ellos los bailes espasmódicos y en cierto modo el movimiento en general.
El sonido no fue todo lo bueno que debería, las guitarras no sonaban con la nitidez que deberían para su estilo luciera al nivel deseado, pero cuajaron una buena actuación, por falta de ganas no fue, espectacular la forma en la que se dejaba el cuello a base de molinillos Noah sin desatender su labor al bajo, pero no por ello consiguieron una mejor respuesta, creo que hasta el mismo James se sentía algo incomodo al notar la indiferencia del público. Enérgica actuación de cualquier modo.
Lo de GRAVE es cuando menos curioso en mi caso, es una banda que me gusta pero que no me mata, de hecho si ellos fueran cabeza de cartel en cualquier evento no serían suficiente reclamo, pero como comentábamos varios antes de su descarga, quien más quien menos los había visto ya unas cuantas veces siempre como parte de giras de otras bandas, lo cual unido a festivales etc posiblemente haga de los suecos la banda de metal extremo que más veces haya visto en vivo.
Antes de comenzar con su actuación Ola Lindgren y los suyos intentaron en vano mejorar un poco el sonido, pero tras varios intentos y un gesto claro de resignación personificado en un sencillo encogimiento de hombros, arrancaron sin más miramientos para llevarnos al mundo del death metal sin florituras, puro death sueco del de toda la vida.
Pese a todo, casi me atrevo a decir que de todas las veces que los he visto, está ha sido la mejor descarga de GRAVE a la que he asistido, no por nada en particular, sino porque la gente por fin se acercó a las primeras filas y entre ellos había un buen puñado de fans de la banda, algo que notaron Ola y compañía, creándose cierto ambiente de buen rollo, algo muy perceptible en temas como «8th dominion» o «Into the grave». Sencillos, potentes, tonterías las justas. En definitiva, death metal.
La carrera de los estadounidenses MISERY INDEX podría calificarse cuando menos como prolífica, pocas bandas medianamente serias son capaces de editar tanto material en tan poco tiempo, algo en lo que tendrá que ver que pese a su juventud todos los miembros de la formación sean experimentados músicos con varios proyectos previos o paralelos a sus espaldas.
Realmente no esperaba que esta banda fuera capaz de atraer a «tanta» gente, pero así fue, y los de Baltimore respondieron, brutalidad sin tregua de principio a fin, quien buscara solos y virguerías varías ya sabía donde y cuando actuaba Satriani, allí se estaba para lo que se estaba, para repartir estopa, aunque como ya sucediera a lo largo de toda la ‘velada’, me llamó mucho la atención la ausencia, de «moshpits», «Circle pits (la versión hamster americana) y demás actividades habituales en estos bolos.
La dupla Jason/Mark a las voces es algo realmente espectacular, el primero con un tono más rasgado y agudo (y con una facilidad y claridad impresionantes), el segundo gorrino y cavernoso pese a su cara de niño, a la altura de bandas como NILE salvando las distancias. En resumen, caña burra del otro lado del charco.
Tal vez sea por sus claras influencia del grindcore y en menor medida de otros «cores», pero lo cierto es que llegados a un punto pueden llegar a hacerse un tanto repetitivos, pero teniendo en cuenta que es algo que también me pasa con bandas consagradas como NAPALM DEATH o BRUTAL TRUTH, tampoco es algo demasiado grave, y menos teniendo en cuenta el buen rollo que se gasta esta banda para con su público.
A modo de anécdota mencionar una tontería personal, y es que en ciertos momentos observando a Mark tocar y moverse me venía a la cabeza el actor Jack Black en «Escuela de Rock», ante lo cual no pude dejar de sonreír. En resumen y sin salirme por la tangente, agotadora y demoledora jornada de metal extremo.
Texto: Angel Ruiz
Fotos: Juan Ramon Felipe Mateo (www.musifota.com)
Para ver las fotos a mayor tamaño, pinchar sobre ellas.
Más fotos:
GRAVE
MISERY INDEX