WARREL DANE – Shadow Work
Discográfica: Century Media
El 13 de diciembre de 2017, hace casi un año, el heavy metal perdía una de sus voces más carismáticas y personales con el fallecimiento de WARREL DANE en Sao Paulo, Brasil.
El que fuera cantante de Sanctuary, Serpents Knight y Nevermore dejó un gran legado musical tras de sí, incluyendo las grabaciones preliminares en forma de maquetas del que iba a ser su nuevo disco en solitario, segundo tras el debut “Praises to the War Machine” en 2008, del cual se recoge todo el trabajo grabado y posteriormente completado por Johynny Morales y Thiago Oliveira (guitarristas), Fabio Carito (bajista) y Marcus Dotta (batería) en el presente “Shadow Work”.
La verdad que mejor título no podrían haber escogido -“Trabajo Sombrío” o “Trabajo de Sombras” sería la traducción- ya que los siete cortes -más una introducción- que recoge “Shadow Work”, más allá de su connotación triste supeditada por el fallecimiento del artista bajo cuyo título sale editada la obra, es un canto a la oscuridad, a lo sombrío y melancólico, pasado por el tamiz del metal progresivo con tintes thrash que tanto le gustaba practicar a Warrel en los proyectos que lideró. Esas guitarras de siete cuerdas y las bajadas de afinación, consiguiendo, junto con bajo y batería un poderoso groove siguen estando ahí y son la idónea base sobre la que Dane canta con su particular estilo, sacando todo el potencial posible de personal timbre, así como de su peculiar y privilegiada capacidad cromática a la hora de atacar notas de lo más variopintas y alejadas entre sí en la escala del pentagrama.
Me llama la atención además como “Shadow Work”, pese a ser concebido como un álbum en solitario de un vocalista, cede espacio a cada instrumento, dotando a cada uno de los participantes de lucimiento. En realidad, es como si escucháramos el disco de una banda propiamente dicha y eso ya dice mucho y muy bueno de la manera de trabajar y componer que tenía Warrel.
Todo comienza con un “Ethereal Blessing” que, con sus percusiones de inicio y de manera tímida nos introduce poco a poco en ese reino de sombras y oscuridad, aunque a la vez lleno de matices. La preciosa instrumentación de teclados se deja arropar por la calidez que, aquí, es aportada por la preciosa voz de Warrel doblada. Es poco más de un minuto pero que sirve para contextualizar el tono general del álbum, justo antes de que inicie la poderosa “Madam Satan” con esa guitarras tan engordadas en graves y características del sonido de Dane, con riffs elaborados que desembocan en un estribillo precioso, ultra melódico y a la vez tan atípico pero con su sello totalmente reconocible, sin dejar de mencionar las preciosas líricas, tan lóbregas como poéticas.
“Disconnection System” tiene un halo que me recuerda y mucho a la genial “Acid Words” de NEVERMORE y es que bien podría haber encajado en aquella obra maestra compuesta por los de Seattle. Me encanta como va rompiendo la estrofa a cada poco a base de tresillos con marcadas notas armónicas, mientras va abonando el terreno para otro estribillo melódico y evocador a más no poder; y no perdáis detalle de los dibujos de guitarra mientras Dane canta su poesía a base de barridos entre las siete cuerdas, ¡un pasada!
Una sencilla figura de ligados nos da la bienvenida a “As Fast as the Others”, el tema más pegadizo de la obra en el que Warrel realiza un fantástico trabajo con los coros. Las estrofas a base de riffs cortados entre silencios mientras la segunda guitarra va desgranando pequeños arpegios nos lleva a otro de esos estribillos tan personales como maravillosos. Por su parte, “Shadow Work” es el tema más puramente thrash, con unos riffs y ritmos machacones, matadores… aunque una vez más la dinámica se rompe cuando llega el momento del estribillo con unas guitarras rasgando en la parte baja el mástil, simplificando su propuesta y a la vez llevándola al terreno más hermoso y melódico posible.
“The Hanging Garden” es una sorprendente versión de THE CURE, toda una lección sobre cómo realizar un cover llevándotelo a tu terreno. Aporta la faceta curiosa al disco, haciéndola prácticamente irreconocible con respecto al tema original.
El disco no para de darnos sorpresas y como muestra de ello, ahí tenemos una belleza melancólica como es “Rain”, la cual, con un dibujo de cuatro notas (con dos pequeñas variaciones) construye toda una preciosidad a medio tiempo demostrando que no sólo se trata de hacer bien las composiciones más complejas, sino que también se puede sacar partido de una estructura simple, con forma de nana para hacer todo un temazo.
La pieza final no es sólo la última, sino también la más compleja e intensa del disco, una tremenda “Mother is the Word of God” donde Dane construye uno de los temas más alucinantes de toda su carrera. En nueve minutos y medio tenemos una preciosa ambientación de orquestaciones, pasando por una semi balada (no perdáis detalle de esos gruñidos de rabia cuando canta sobre la parte acústica), acelerando poco a poco hasta arrancar hacia su vena más thrash metal. ¡Una gozada de principio a fin y qué pedazo de epitafio que ha quedado para la historia!
Se comenta que la idea de Warrel era realizar un álbum de unos ochenta minutos de duración. Sin embargo “Shadow Work” recoge prácticamente la mitad de ese tiempo, en cuarenta y dos apoteósicos minutos de música apabullante a los sentidos. Qué hubiera dado de sí el trabajo completo, es algo que lamentablemente nunca sabremos debido a la trágica pérdida de la vida de Warrel. Lo que sí podemos es disfrutar de un magnífico disco que no dejará indiferente a nadie, mucho menos a aquellos que, durante toda su trayectoria en vida o parte de ella, fueran seguidores de un cantante tan magnífico como personal en cuanto a propuesta a la hora de encarar sus melodías vocales.
¡Descanse en paz!
J. José Jiménez – J_Jose_Jimenez@RafaBasa.com – Twitter.com
Lista de Temas:
- Ethereal Blessing
- Madame Satan
- Disconnection System
- As Fast As The Others
- Shadow Work
- The Hanging Garden (THE CURE cover)
- Rain
- Mother Is The Word For God