Crónica y fotos de DIRKSCHNEIDER + CROWNSHIFT en Madrid

+ CROWNSHIFT

Sábado 22 de Marzo de 2025 – Sala Mon – Madrid

Otra gira importante, imponente y esperada era la que DIRKSCHNEIDER tenían programada para este mes de marzo. La banda liderada por el alemán acaba de publicar "Balls to the Wall – Reloaded" a modo tributo, y como celebración del clásico álbum de ACCEPT, el cual también sirve como reclamo y excusa para presentarnos lo que íbamos a ver en la Sala Mon madrileña. El que no iba a utilizar más temas de la mítica banda, ahora se ha agenciado a Peter Baltes para sí mismo, con lo cual, la expectación por el concierto era doble. La mitad de ACCEPT, junto a una banda súper competente, interpretando uno de los discos más venerados de nuestro rollo…una de esas ocasiones en las que el cuerpo te pide a gritos acudir, sentir la llamada y prepararte para la batalla. Solo con saber que "Balls to the Wall" iba a sonar por los bafles completo, ya está asegurado al menos un 50% del éxito, pues ya conoces el repertorio de medio show, y el otro medio, dudo que fuese a ser de temas intrascendentes. Un sold out fulminante desde hace tiempo acredita lo que os estoy comentando, y me da la razón.

Tenía ganas de ver a ALL FOR METAL, que con dos discos de estudio en el mercado, han logrado generar curiosidad en medios, festivales y fans del metal. Visitaron el LEYENDAS DEL ROCK, pero era de factura comprobar como se las gasta la banda en una sala, algo que no pudimos hacer, pues varios de sus miembros salieron al escenario a dar la cara y, con un visible disgusto, comunicarnos que no tocarían esta noche por algunos problemas con su equipo. Una pena el no poder comprobar lo que pueden ofrecernos estos jóvenes luchadores, lo cual no hizo que se adelantasen los horarios, con lo que tuvimos que esperar a que se cumpliesen las previsiones, y mientras hablábamos con unos, otros, íbamos al puesto de merchand o nos ubicábamos en un sitio que nos gustase para ver el siguiente concierto (tiempo tuvimos), ahí estaban CROWNSHIFT, para calmar los ánimos, y quitarnos el mal sabor de boca que nos había dejado la cancelación forzosa de la anterior formación.

La banda finlandesa se compone de ex-miembros de conocidas formaciones (3 de ellos ex- NORHTER), tales como Daniel Freyberg  a la guitarra (ex- CHILDREN OF BODOM, ex- NORTHER), Jukka Koskinen al bajo (NIGHTWISH, WINTERSUN y ex- NORHER), Heikki Saari a la batería (ex- FINNTROLL, ex- NORTHER), y el único menos conocido para los presentes, Tommy Tuovinen, a las voces.

Obviamente, lo que uno espera de una banda con semejantes nombres, es justamente lo que encontramos, que no sé muy bien si es lo que el público más clásico necesita para ver telonear a un veterano como Udo. De cualquier manera, con un único álbum de estudio homónimo, la banda salió a por todas, sonando muy consistentes, ensayados y profesionales. Podría definir su estilo como metal moderno, con influencias del metal extremo, pero manteniendo un perfil que no se puede asociar al death metal, ni a otros géneros en los que ya les he visto encasillados por ahí. Temas como "If You Dare" están claramente orientados al riff, aunque hay melodía, dinamismo, y una pegada monumental. La voz de Tommy posee varias texturas, pero sentí que no despunta por original, aunque en el álbum me gustó mucho, todo sea dicho."The Devil’s Drug" me atrajo más por su casi progresivo riff, que Freyberg ejecutó sin necesidad de un segundo acompañante… el esfuerzo llevado a cabo por la banda por ser fieles al álbum, estaba ahí, pero en directo suenan mucho más crudos, brutos y arrasadores. Obviamente aprovecharon su tiempo en escena para presentar su único trabajo, y para "Rule the Show", sin hacer que la gente enloqueciese (no por calidad, sino por el target al que va dirigida su música), lograron arrancar algunos comentarios tipo "qué buenos son estos tíos", porque lo que hacen, no inventa la rueda, pero lo hacen muy bien, con convicción y respaldándose de experiencia comprobada, así como buenos temas. Contraste impactante el que se genera con otras composicones como "My Prison", mucho más ambiental, atmosférica y alejada de lo que pudimos escuchar inicialmente, mostrando a una banda de sonoridades heterogéneas, pero bien ensambladas en un mismo espectáculo.

Me encantó, porque soy amante de la expresión con instrumentos sin voz, un "Mirage" que por gustos personales, me llamó mucho la atención gracias a su entretenido desarrollo, nada común ni tópico. "A Crown Beyond Reach", mucho más accesible que todo lo escuchado hasta el momento, me encantó en directo, mientras que la banda se despedía con una versión metalizada de "Black Velvet" de Alannah Myles, echando un pie hacia adelante entre el público español, que de seguro, en su próximo paso, recibirá a la banda con todo el respeto del mundo, porque en Mon se lo ganaron a pulso con un show cargado de buen sonido, composiciones gancheras e intentos de conexión que tienen su mérito si consideramos que el protagonista es uno de los estandartes del metal más clásico, puro y duro.

Tan solo un pequeño adorno con el logo de DIRKSCHNEIDER bajo la tarima de la gran batería de Sven (hijo de Udo), recibiría a una banda que salió puntual al escenario, ante un público que había soportado una cancelación y había visto a una banda desconocida para la gran mayoría.. .las ganas de disfrutar del alemán eran notables, y cuando empezó a sonar la melodía inicial "Fast as a Shark", la fiesta ya estaba montada antes siquiera de tocar la banda una nota.

Cuando Udo saltó al escenario, vestido de militar, la sala se vino abajo, y empezó a sonar la icónica canción… ¿hay una mejor manera de empezar el concierto?. Lo dudo. Las guitarras de Dee y Andréi Smirnov no sonaban demasiado altas, especialmetne las del segundo, mientras que la batería de Sven quizás se notaba demasiado alta, y eso sí… el bajo de Peter retumbaba por doquier. Un Baltes que nos sorprendió con un look con coleta, sin su clásico pelo rizado y suelto, pero con una sonrisa imborrable en la cara, realizando gestos a las primeras filas continuamente, y en definitiva cayendo bien al personal. Udo, a sus 72 años, un físico que dista mucho de sus mejores tiempos (obvio y lógico), y muchas ganas de agradar, nos sorprendió con un chorro de voz, que si bien a veces mantiene con mucho esfuerzo, no pierde esa personalidad especial que tiene e imprime a los temas.

Incluso se le ve concentrado en hacerlo lo mejor posible. Con sus "peros", el inicio de concierto fue monumental…cómo no, con semejante petardazo. Sin demasiadas mejoras en el sonido, pero con mucha contundencia y punch, clásicos de la talla de "Living for Tonite" o la brutal "Midnight Mover", son suficiente motivo para que todo Madrid arda… ¡qué gustazo ver a Udo y Baltes en el mismo escenario!. Solo por eso, esta noche ya era especial, colegas… ¡valoradlo ahora que podéis!. Me faltó ver a Stefan Kaufmann para tocar el cielo. Ojo, que los guitarristas que acompañan al eterno pequeñajo enfadado, no son mancos, se distribuyen solos, y el sonido Hoffmann/Herman, lo bordan, y lo hacen con soltura, desparpajo, tirando de simpatía, lanzando púas, bromeando…pero poniendo cada nota en su sitio. Suenan afilados, como la música de ACCEPT requiere.

Me encantó la camaradería que se veía en escena, y cómo los músicos no se pisan en una lucha de egos, a favor de un concierto, que, sin sonar como debía hasta el momento, iba en pleno ascenso. Los coros, la fidelidad a los temas originales… todo apuntaba a una verdadera celebración del mejor heavy metal. "Breaker" y "Flash Rockin’ Man" son dos clásicos incontestables de la historia de los germanos, pero es caer la bomba atómica que es "Metal Heart", y ya hemos llegado a donde queríamos, con exhibición de Andéi incluida, simulando muy bien lo que pudimos escuchar en el "Staying a Life"… ver lo mejor de ACCEPT con su voz original, dándolo todo y, al César lo que es del César, con un chorro que es pura dignidad y gloria heavy.

Un icono sentando cátedra, vaya. De los temas maravillosos que podría haber cantado Baltes (como "The King"…¡qué ilusión me hubiese hecho verla en directo!), cayó "Breaking Up Again" del "Breaker", y un Peter cuya voz pone la piel de gallina, en estudio y en directo. Siempre ha sido uno de mis bajistas predilectos, pero también uno de los músicos más completos del heavy metal… ¡qué show estaba dando. Para servidor, al 50% junto a ver al propio Udo en cuanto a interés. 

Una breve introducción nos metió de lleno en "Balls to the Wall", y lo hizo en orden, empezando por el propio tema. Misteriosamente el sonido mejoró una barbaridad, y el tema arrasó impresionante e imponente (sin la colaboración de Joakim Broden, claro está… que es la que menos me ha convencido del "nuevo" álbum). Los coros no paraban de sonar entre el público, que casi no dejaba a la banda proseguir con el tema, y es que esa parte final, tan germana, contiene una de las más grandes melodías de nuesta música. Icónica… impresionante. Baltes, con la palabra "Balls" en su bajo, no paró de hacer muecas, dirigirse a la gente, tirar púas… pero es que no da puntada sin hilo. En la bestial "London Leatherboys" su voz es casi tan icónica como la del pequeño gruñón, en el fantástico estribillo que todo el mundo gritaba con el puño en alto… esto empezaba a recordarme el por qué "Balls to the Wall" fue tan impactante para la escena.

Los que no vivimos aquella época, podemos intentar imaginar cómo de brutal tuvo que ser escuchar estos clasicazos recién salidos… pero, a falta de pan… aquí estábamos, disfrutando el álbum completo, con una buena porción del alma original que los grabó. Imprescindible… impresionante. "Fight it Back" es puro acero germano, pero el punteo inicial de "Head Over Heels" son palabras mayores.

Entra el riff, y Mon se emociona… ¡qué sentimiento más único y auténtico genera!. Nada que objetar respecto a nada… sonó como debe sonar, con cada solo, golpe de batería y bajo en su lugar. No querías que terminase un tema, pero es que el siguiente era tan espectacular como el anterior. "Losing More Than You’ve Ever Had", seguido de la más radiable pero salvaje "Love Child" fueron una sección que me encantó escuchar en concierto, especialmente, porque no son temas que los propios ACCEPT suelan tocar en sus giras, y que probablemente, será de las pocas veces que pueda verlas juntas en mi vida.

El bajo de Baltes fue atronador en un "Turn Me On" pesadísimo, súper heavy y abrasador, mientras que una de las favoritas, "Losers and Winners", sonó más afilada y cortante si cabe, especialmente cuando ves a Peter cantando aquello a dúo con Udo de "Write a letter / what’s the matter? / You’ll feel better / write a letter / You’ll feel better when it’s done… un escalofrío me recorre conforme estoy escribiéndolo.

Una orgía de puro heavy metal del más alto rango. Claro que fundirla con la épica del inicio de "Guardians of the Night", genera el éxtasis total para todos aquellos que adoramos el excelso álbum. La preciosa "Winter Dreams" finalizaba el golpe de la bola contra el muro, derribándolo por completo, y dejando a todos los asistentes con otro bonito recuerdo que llevarse a la tumba. Todavía tuvieron agallas de machacarnos  a base de poses y headbanging con más clásicos de la mano de "Princess of the Night", la roquera "Up to the Limit" del "Metal Heart" y la final y corrosiva "Burning", que no me esperaba y que sirvió para que el broche fuese entre lo bueno, lo mejor.

Claro que he visto a Udo con mejor sonido… claro que le he visto con más montaje. Pero el repertorio de esta noche era tan imbatible, que hizo que la hora y cincuenta minutos que la banda estuvo en el escenario, se quedasen cortos…muy cortos. Saben lo que el público que va a verles quiere, y se lo dan… así de sencillo. Udo por siempre.

Texto: José Rojo

Fotos: Pedro J. Delgado

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