Jueves 16 de Enero de 2025 – The Music Station – Madrid
Resulta curioso comprobar cómo, con el paso de los años, van cambiando los gustos musicales. Hay quien llama a esto evolución. Yo por mi parte, prefiero dejarme de etiquetas y sencillamente comprobar cómo el tiempo y la madurez adquirida me van dando la capacidad de apreciar matices que antaño me pasaban desapercibidos, o bien directamente no eran de mi agrado. También sucede al contrario, que canciones, bandas o música que antes me gustaran, ahora no me parecen para tanto.
Esta ha sido, a grandes rasgos, mi experiencia con LEPROUS, banda a la que había visto en directo un par de veces, sin que terminara yo de engancharme a su propuesta. Y sin embargo, gracias a su anterior álbum, “Aphelion”, conseguí entrar en ellos. Y es que con dicho disco, lo gocé a base de bien. Desde aquel momento, ya fui para atrás, revisitando todo aquello que anteriormente no me había gustado y descubrí una serie de matices que, aunque siempre estuvieron allí, yo no había sido capaz de apreciarlos hasta que el citado “Aphelion” me abriera las puertas.
El verano pasado tuve la oportunidad de disfrutarlos en Zamora, dentro del marco del Z! LIVE y la verdad que me encantaron, pese a que no son la típica banda que encaje en un festival de esa índole. Ahora, por fin, pude verlos en sala, dentro de su propia gira y dentro del concepto denominado “an evening with…” es decir, la banda sola, sin teloneros, tocando tres horas y con un pequeño descanso a la mitad.
El evento no pudo celebrarse en mejor sitio. The Music Station es un teatro enorme situado en uno de los laterales de la estación de trenes Príncipe Pío. La sala cuenta con dos secciones de butacas (una fija, otra extraíble), un techo abovedado altísimo, enorme escenario y amplitud para poder disfrutar cómodamente de un concierto.
¿Y el sonido? Pues como siempre digo y, siempre dentro de las especificaciones acústicas y materiales de los que conste un recinto, es algo que siempre depende de los técnicos que lleve cada banda. Y LEPROUS, como era de esperar, a tenor de ese mimo que le dan a cada una de sus composiciones y producciones, no iban a ser menos. ¡Media canción tardaron en estar ecualizados y sonar perfectos! ¡Qué maravilla!
Y aunque siempre habrá quien eche en falta ésta o aquella canción, pienso que la representación de su carrera dentro del repertorio, fue bastante acertada, haciendo especial hincapié en su última obra.
Arrancaron con “Silently Walking Alone” mientras se iban haciendo los ajustes necesarios desde la mesa de sonido y la banda se iba haciendo con el escenario, viniéndose muy arriba ya con la segunda canción “The Price” y haciendo que el público lo gozara a tope.
Tras una corta presentación en español y, ante la promesa de poder hablar un poco más en nuestro idioma para su próxima visita, llegaría “Illuminate”.
Vuelta al nuevo álbum para encarar un “I Hear the Sirens” intenso, donde Einar ponía a prueba los límites de su voz, subiendo a notas que no están al alcance de todos.
“Like a Sunken Ship” fue una montaña rusa de emociones. Desde la cadencia de sus partes lentas, algo bucólicas incluso con ese “lalalala” cuasi tontorrón (es un decir, no se me enfade nadie) a cómo va entrando al estribillo, rompiendo con todo (voz, distorsión, batería…. el in crescendo es brutal). Tras ella anunciaron que la siguiente sería una canción no apta para quienes sólo gusten de esquemas preestablecidos a la hora de crear canciones, presentando “Forced Entry”. Con “Out of Here” los vítores del público llegarían, en respuesta al conciertazo que se estaban marcando los músicos sobre el escenario y tras la evocadora “Alleviate” llegaría la hermosa balada “Distant Bells” con una bonita introducción de guitarra acústica.
“Foe” y “Nighttime Disguise” pondrían el punto y aparte para el descanso de quince minutos.
Y es que hasta ese momento, ya era como si hubiéramos presenciado un concierto “normal” en cuanto a duración. Sin embargo, aquello era sólo la mitad y lo mejor estaba por llegar…
Después de las actividades varias de avituallamiento, parada por el WC o salir a la calle para aliviar la abstinencia de nicotina, volvimos con el concierto de la mano de la siempre bien recibida “Unfree my Soul”, en la que contamos con un extra de percusión acompañando al sempiterno arpegio acústico que la preside. Seguimos así, tranquilitos, con “On Hold” y un “Below” que me recordó a una mezcla de los DREAM THEATER de “Awake” con los de “Scenes from a Memory”.
Recordaron sus anteriores visitas y cómo han ido incrementando su popularidad progresivamente, justo para encarar “Passing”, canción perteneciente a su álbum debut.
El momento más emotivo de la velada llegaría con “Faceless” en la que invitaron a varios fans para cantar el coro con ellos, tal y como hicieron en su día para la versión de estudio, en la que pidieron la colaboración del público a través de las redes para hacerles llegar sus voces e incluirlas en la canción.
“Castaway Angels” sonó mágica. De hecho fue comenzar y escuchar al lado mío un poderoso “Yes!” y es que aquello estaba repleto de personas de media Europa que se habían desplazado hasta Madrid para presenciar el inicio de gira. Mucho británico, francés, alemán, italiano, sueco…
“From the Flame” nos puso a todos las pilas, botando con ese estribillo que ya se ha convertido en todo un icono del metal progresivo.
“Slave” nos atrapó a todos con su atmósfera, justo para terminar dándolo todo en parte más cañera y salvaje.
Pequeño mutis de la banda para volver al escenario, por todo lo alto, ante los vítores y aplausos de un público agradecido, para interpretar otro de los temas de nuevo cuño, un “Atonement” que es ya otro himno más, con toda la sala gritando aquello de “and it’s all because of you”, empalmando con un fragmento de “The Sky is Red” y poner la guinda a un concierto perfecto que significa la constatación de que estamos ante una de las bandas más grandes y con más capacidad de crecimiento que hay en la actualidad.
Texto: J. José Jiménez – J_Jose_Jimenez@RafaBasa.com
Twitch: dj_phoenix – Youtube
Fotos: Alvaro Ochoa
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Por qué?
Acabo de intentarlo otra vez y no puedo con ellos.