+ AZRAEL
Jueves 21 de Noviembre de 2024 – Sala Revi Live – Madrid
Cada vez que un concierto me saca de la rutina y hace que tenga que organizarme la tarde para poder viajar a disfrutar de lo que más nos gusta, siempre conecto de inmediato con un pensamiento que navega muy en contra de todos aquellos que afirman que los eventos deben programarse en fin de semana, pues creo de veras que dichas "escapadas musicales" aportan ese "algo diferente" que hace que las semanas en las que hemos señalado fechas en el calendario, sean especiales.
Si una de esas fechas, además, la copa la visita a nuestro país de una banda como RIOT V, que siempre es signo de garantía, el éxito está asegurado. Su última venida a Madrid presentando "Armor of Light" nos dejó un gigantesco show cargado de la mejor cara de RIOT (si es que alguna vez han tenido alguna mala…), pero de ello hace ya cuatro años, y un álbum después, recién estrenado, como es "Mean Streets", servía como excusa perfecta para volver a disfrutar del legado de Mark Reale, que por otra parte, además de lícito, está completamente consentido, y ya llevan nada menos que tres discos mucho más que dignos, de una calidad que mantiene el nombre de la banda en el candelero, y continuando con esa senda marcada por cada una de las etapas de la formación.
Para poner ese ingrediente que hace que lo suculento del plato, sea de premio, los granadinos AZRAEL serían los invitados especiales. La banda siempre me pareció top dentro de nuestro país, con discos como "Dimensión IV" (entre mis diez álbumes favoritos de aquí), "Mafia" (anda cerca) o sus más recientes "Azrael" o "Dimensión V". Los cambios de formación han sido una constante en los últimos años del line-up, y a decir verdad, a juzgar por el grandísimo concierto que descargaron en Revi Live, no han hecho mella en absoluto.
Es más, y aunque la banda no empezó sonando del todo nítida en "Nada Que Temer" del "Dimensión IV", creo sinceramente que esta podría ser la mejor formación en conjunto de la que han gozado los andaluces. Eso es empezar fuerte, y lo demás son anécdotas… un clásico al que los "nuevos" miembros, Óscar Espín a la guitarra, y Tino Torres a la batería, le dan ese punch que necesita, con florituras varias, técnica y mucho empaque… parecen llevar toda la vida en la banda.
Claro que, contar con el gran Marc Riera en la voz, es un seguro de vida, gastando un chorro de voz tan reconocible como poderoso. Obviamente, Salas al bajo y Enrique Rosales a la guitarra, gozan de ese saber estar que solo aportan los años, y eso que la guitarra rítmica sonaba muy alta, y la voz quizás demasiado baja. ¡Magia!… en "Al Amanecer", del gran "Código Infinito", todos los desajustes se corrigieron, sonó increíble, y pudimos disfrutar al 100% de su estribillo, sus veloces guitarras y esa personalidad de la que AZRAEL hacen gala. No desentona en absoluto un "Vivir-Morir" de su más reciente "Dimensión V", que encaja en el puzzle de la historia de la banda, y más aún en un setlist plagado de "hits", que no son pocos los que gastan…¡un disfrute para los que les consideramos una de las mejores bandas de España!.
Saben perfectamente que la nostalgia reina, ya que los asistentes eran, en su gran mayoría, gente que les conoció alrededor del año 2000, e "Incierta realidad", del álbum del 2002, levanta algunas de las primeras emociones de la noche, y se puede ver a muchos de los enamorados de AZRAEL cantar el estribillo con ímpetu. Al loro al trabajo de Óscar, pues algunos de los temas no son precisamente fáciles de ejecutar como él lo hizo, junto a un experimentado y siempre preciso Enrique Rosales.
"Hoy Por Fin", de su álbum homónimo, viste muy bien el set, con su perfecto estribillo. "Renacer" de su más reciente lanzamiento suena realmente prometedor y podría ser un inamovible en próximas giras, pero cuando suena "Tres y el Apocalipsis", recordamos, una vez más, el por qué de la importancia de aquel mastodóntico álbum llamado "Dimensión IV". Increíble trabajo de toda la banda, esforzándose por mantener la esencia de los temas originales, imprimiéndoles un plus de calidad con la voz de un Marc, que estuvo realmente pletórico durante todo el concierto.
El propio Riera anunció que volveríamos a otro de esos discos que marcaron nuestro corazón. "Mafia" tuvo su representación con "Volver a Nacer", con la que todos levantamos el puño, cantando cada uno de sus versos, y disfrutándola como cuando teníamos 15 o 16 años… un clásico inmortal, tanto como la increíble "Tarde Ya", con su intro de guitarra incluido, que anunció un intenso y memorable final de concierto en el que no pudo faltar la veloz, técnica y cargada de rabia "Sacrificio". Una de esas canciones que, por derecho propio, son ley en el reino nacional del heavy metal, y que, esta noche, sentenció un show cargado de los mejores AZRAEL . Grandísimo concierto de una piedra angular de nuestra música.
Cuando el telón de "Mean Streets", el último y reciente trabajo de RIOT V , y los dos paneles con imágenes de la foca más famosa del rock asomaron por el escenario, arropando el kit de batería, la sala ya presentaba un ambientazo impresionante, especialmente siendo un jueves por la tarde. Sinónimo del cariño, respeto y admiración hacia una carrera que, abarcando más de 40 años (si tenemos en cuenta toda la historia previa como RIOT, claro está), no ha tenido bajones de calidad, ni experimentaciones absurdas. Todos y cada uno de las decenas de discos de los americanos, tienen algo de especial, y aunque sea una banda que se deje caer bastante por nuestro país en los últimos años, la cita es obligada.
Saltaron al stage partiendo la pana con "Hail to the Warriors" de su reciente nuevo álbum, y desde ese momento, todo fue un mar de aciertos en cuanto a sonido, puesta en escena, entrega y pasión. Don Van Stavern sigue portando esa estética más macarra, gorra en cabeza y siempre vacilando con la botella, Mike Flyntz continua su cruzada particular por llevar el legado de su colega a lo más alto, y no falla una nota, y Todd Michael Hall canta que se las pela… llega a donde quiere, como quiere, con una sonrisa en la boca y mostrando un físico increíble, que esta noche, por cierto, no lució sin camiseta como tantas otras veces. Jonathan Reinheimer, por su parte, parece estar 100% centrado en estar a la altura de las circunstancias a la guitarra, y lo está… vaya si lo está.
El perfecto acompañante para Mike, completando la formación Jesse Tudda a la batería, quién ha sustituido al gran Frank Gilchriest. Una formación, que, como comprobamos de primera mano, defiende los clásicos como nadie, pues "Fight or Fall" del todopoderoso "Thundersteel" empieza a levantar pasiones, y es donde hace aparición el efecto flashback entre los asistentes, que no paran de mover el puño, y, mirando el panorama desde la mesa, deja la imagen de un montón de cabezas moviendo las melenas al ritmo del temazo. "Armor of Light" fue un grandísimo trabajo (como el anterior a este, "Unleash the Fire"), y "Victory" es una buena muestra de ello, pero el deje más veloz y cañero de "On Your Knees" del gran "The Privilege of Power", le queda como un guante a la voz de un Todd grandísimo, en estado de gracia y dándolo todo vocalmente hablando. Un frontman a la vieja usanza de los que se ven pocos por los escenarios… ¡qué calidad a todos los niveles posibles!. "Feel the Fire", de su último trabajo, es oro puro, con ese olor a JUDAS PRIEST, sonando perfecto, potente y con convicción. Muy creíble… muy RIOT.
Llegados al cénit del show, con todos los niveles equilibrados a la perfección y una banda en el tope de su capacidad, empezaron a desgranar un trallazo tras otro. "Road Racin’" del "Narita" contiene uno de esos riffs sencillos pero matadores, y está claro que aquel álbum, a pesar de su horrible portada, todavía es considerado como uno de los grandes de su discografía. "Warrior" del "Riot City" nos confirmaba que esto iba en serio, y RIOT V saben que todo aquello que saliese de los dedos de Mark Reale, es especial. Por supuesto, que no es de menor importancia "Bring the Hammer Down" del espectacular "Unleash the Fire", que, como bien he dicho, no tiene nada que envidiar al material de la etapa Reale.
No adolece, ni palidece frente a gigantes musicales como "Johnny’s Back" del "Thundersteel". Ya hemos cruzado la mitad del show, y lo único que nunca les perdono, es olvidar discos como "Inishmore", o uno de mis favoritos como es "Sons of Society"… me encantaría saber la razón, aunque tampoco se les pueda echar demasiado en cara cuando lo siguiente en sonar por el equipo es la fenomenal, pegadiza e intensa "Restless Breed", que con una cadencia más lenta, de medio tiempo, deja uno de los momentos más intensos de la noche, en el que la voz de Todd no para de sorprendernos, y el resto de la banda consigue sonar sólida como pocas en la actualidad. Por supuesto, ya era tiempo de no jugar demasiado a experimentar con nuevas composiciones y volvimos al "Thundersteel" a través de "Bloodstreets", generando un clímax inigualable, derivado de unos tonos vocales perfectos y una banda concentrada en regalarnos cada detalle del tema interpretado al milímetro. No obstante, también cayó otra composición de nueva hornada como "Love Beyond the Grave", que, con un riff que podría pertenecer incluso a GRAVE DIGGER, fue el preámbulo de una recta final plagada de clásicos.
A ver quién es el chulo de hacer cara a "Flight of the Warrior", la festiva "Swords and Tequila" del "Fire Down Under" (tela portadita también…), y el clásico de clásicos, "Thundersteel", con la que todos alucinamos cantamos, bailamos y movimos la cabeza. Cuando había seguidores a punto de irse, pensando que esto había llegado a su fin, Todd nos pregunto si queríamos uno, dos o tres temas más. Finalmente, fueron tres; "Take Me Back" del "Unleash the Fire", "Sign of the Crimson Storm" del "Thundersteel" y la siempre bienvenida "Fire Down Under", finalizando un repaso por todos sus primeros álbumes, así como los últimos, dejando a un lado una parte central de la que, repito, me hubiese encantado escuchar algo. Aún con ello, rayaron a mucha altura, lograron convencer, y afianzaron que, los que fuimos a verles esta vez, volvamos a la siguiente.
RIOT V no fallan. Un valor seguro.
Texto: José Rojo
Fotos: Rafa Basa
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