Crónica y fotos de SOULFLY + LECKS INC + HELEVEN en Madrid

+ LECKS INC + HELEVEN

Sábado 24 de Agosto de 2024 – Sala Mon – Madrid

Habiendo pasado los hermanos Cavalera recientemente por la capital, solo había que llegar a las inmediaciones de Mon para darse cuenta del poder de convocatoria que tiene una figura como la de Max Cavalera. Esta vez, y ya son muchas, venía de visita a Madrid con un discazo como "Totem", que todavía no habíamos tenido ocasión de disfrutar en gira, y lo hacía con una sala abarrotada, seguramente al borde del "sold out". Pérdidas en las filas de SOULFLY como la de Marc Rizzo no han debido ser fáciles de superar para la formación, ya que algunos de los grandes momentos que he podido vivir junto a la banda,  han sido con semejante músico en las seis cuerdas…pues recuerdo con mucho más que cariño el concierto que la banda ofreció en la gira de "Conquer" en la antigua Sala Heineken, y aquel "Roots Bloody Roots" que puso la sala patas arriba, o una de las últimas giras junto a su hermano, rememorando los álbumes de Sepultura "Arise" y "Beneath The Remains". Rizzo siempre fue una pieza clave en los conciertos de Max, y no había podido disfrutar de SOULFLY tras su amarga salida del line-up. Un DeLeon (INCITE) iba a ser el encargado de calzarse semejante número de pie, y expectante estaba yo por conocer el resultado final, tras tantos años acostumbrado a ver la dupla Max-Rizzo. Veremos a ver.

Como digo, la sala gozaba de un ambientazo perfecto, motivado, seguramente, por caer esta fecha en sábado, claro está. Y los nacionales HELEVEN no iban a desperdiciar la oportunidad de demostrar al mundo de lo que son capaces, pues con dos pequeños telones laterales tras ellos, el kit de batería a la derecha, y muchas ganas, salieron derrochando profesionalidad por doquier, y lo hicieron con un trallazo como "Echoes of the Past" de su último disco de estudio "New Horizons, Pt 2". He de decir que el sonido de la batería de Matías Famá, nos voló a todos la cabeza desde el inicio, con una pegada espectacular, mientras que el resto de la banda suena como una auténtica maquinaria pesada, de las que destrozan el asfalto allá por donde pasan, destacando la figura de un Higinio Martín, que no solo brilló por manejar varios registros vocales con gran soltura y dominio, sino también por mantener un gran nivel también con su guitarra…ni qué decir que la complicidad que demostraron tener Álvaro Castilla (guitarra) y Kike Martín (Bajo), se pudo ver sin esfuerzo en todo momento desde la posición del público. Me encantó como la banda salió al escenario, a morder, y ese metal moderno que bebe de gente como FEAR FACTORY, GOJIRA e incluso referencias más actuales de la talla de JINJER o TESSERACT. Riffs pegados al milímetro a la base rítmica, y un gran nivel técnico, hicieron que desde el inicio, sin sonar demasiado las guitarras, ya se llevaron el beneplácito del público. "Toro" de su anterior álbum "New Horizons, Pt 1" sigue manteniendo un carácter moderno, casi industrial, en una pieza que podría haber compuesto Dino Cazares, llegando a un estribillo que incluso me recordó a los mejores ALICE IN CHAINS…¡una mezcla explosiva y muy bien llevada!. La banda disfruta tocando, se nota…y eso suma mucho a su show, mezclando tonos vocales limpios con guturales muy bien incrustados en su conjunto musical.

El sonido jugaba a su favor sin llegar a la perfección, el público estaba ganado y temas como "The Mask" son propensos a que les sigamos más aún la pista, y el carácter industrial de las voces todavía ofrece más texturas a nuestro oído…y aquí, incluso los actuales IN FLAMES me vinieron a la mente. Son tantas las referencias, y tan bien conjuntadas en su propuesta, que es complicado que no te llamen la atención. Es obvio que se vuelquen en un álbum tan bien hecho como "New Horizons, Pt2", dándole cancha con bombas como "Killing My Perseus", en las que la batería vuela, y nos hacen adentrarnos en sus diferentes sabores musicales. En cortes como "Wild From the Ashes", casi parece que van a aparecer las voces de Burton C.Bell de la nada…¡pero son españoles, y no necesitan imitar a nadie!. Higinio es un grandísimo vocalista y músico, y así lo fue dejando patente en cada paso que daban en el show. Volvimos a los sonidos más deudores de GOJIRA o MASTODON en "New Horizons", mientras que se acercaba el final con una referencia a su pasado como "Into the Oceans", primando una orgía de riffs a cual más efectivo para el headbanging, despidiendo su visita con el mismo corte que cierra su último trabajo, "Hope", y habiéndose ganado una merecida ovación generalizada, tanto de aquellos que parecían conocer su música, como de los que se quedaron un tanto impresionados por el nivel que demostró tener la banda granadina. Sin dudarlo un momento…un futuro referente del metal patrio. No os los perdáis.

Cambio de atrezo rápido, y los franceses LECKS INC. invadían el escenario, tras una intro electrónica pregrabada…"Fuck You Baby" de su último "H.E.L.L." de 2022 empezó a sonar, y aquí no funcionaba absolutamente nada. Acoples, una banda perdida, y un caos generalizado que hizo que tuviesen que volver a empezar su show de nuevo.

Cuando terminaron de arrancar (sin bajista y con una gran cantidad de sonidos pregrabados…algo muy usual en el metal industrial), pudimos vislumbrar a una banda muy descompensada, si precisamente conoces las referencias que insinúan. Samael, The Kovenant (en su etapa más electrónica, no la de "Nexus Polaris"), MiNistry o gente como GOTHMINISTER, se te pasan por la cabeza, pero cuando no acompaña ni el sonido, ni lo que ves en escena, ocurre lo que presenciamos en Mon… un público completamente desconectado del espectáculo, y especialmente desconcertado. Lecks, por supuesto, tras su máscara, sí dejó un buen trabajo vocal, y su batería, que parecía una viva imagen de Layne Staley de ALICE IN CHAINS en modo "steampunk", también dejó un buen repertorio de malabares, espectáculo visual y buen rollo. Más allá de eso, lo "medido" que debe estar un espectáculo de una banda de su género, brilló por su ausencia, quiero pensar, debido al desconcierto inicial.

Me gustaron algunos puntos de su paso por el escenario, aún con todos los inconvenientes, en temas como "Hypocrisy Stars", y es que, especialmente, en esos momentos más industriales es en los que las guitarras tenían una presencia más comedida, y es que no contaban con el tono adecuado, o al menos, esa sensación nos dio desde el lateral izquierdo más próximo al escenario a los asistentes. El descontrol fue santo y seña de casi todo el concierto (uno de los guitarristas limpiando el sudor de su mástil con las cortinas del stage, poniendo caras de disconformidad continuamente, es uno de los ejemplos), aunque cierto es que el espectáculo fue de menos a más, y lograron templar el sonido y coordinarse (en cuanto a lo musical, que no en lo visual)… temas como "Out of Control", de verdad que en estudio pueden hacer las delicias de los amantes de los sonidos que representan, pero el acabado final de sus álbumes dista mucho de lo que pudimos ver esta noche en la capital, a pesar de los esfuerzos del frontman en conectar con el público, agradeciendo la participación y paciencia en castellano. Cortes como  “Human Right" y su rockero-industrial riff, pueden ser una buena baza en directo,  o "Get Into You", que cuenta con un buenísimo groove para hacernos vibrar, hubiese podido ser un grandísimo final de fiesta, pero la triste realidad es que el concierto de LECKS INC. en Madrid, no estuvo tocado por la varita, y quedó muy desmerecido, máxime, cuando HELEVEN se habían comido el escenario del modo más profesional posible minutos antes de que los franceses pisasen las tablas. En otra ocasión será…y espero que así sea, porque en estudio la banda promete.

Llegó la hora del torbellino brasileño. Las pantallas traseras de la sala preparadas, y como únicos elementos extra, una tarima con la inmensa batería de Zyon Cavalera, así como dos muros de amplificadores cubiertos por enredaderas. El micro de Max está disfrazado de guerra con un cinturón de balas y el arco de "Ritual"…¿para qué más?.

Fue salir la banda al escenario, escuchar ese famoso "jump, jump!", sonar "Back to the Primitive" y Mon se vino abajo. Todo el mundo a saltar, un sonido súper contundente, y, a pesar de encontrar a un Max con un visible sobrepeso, no faltaban los saltos y su buen rollo habitual, ataviado con una bonita LTD roja, creo que decorada por él mismo con motivos tribales. Acompañándole se encuentra el gran Mike DeLeon, guitarrista tejano de Incite, que, con una camiseta de DEICIDE, calcetines y zapatillas Soulfly signature, y bigotón a lo machete, hizo que sus poses, potencia guitarrera y energía se nos contagiasen sobremanera…¡qué puesta en escena old school!. No paró un segundo, mientras que Zyon y Mike Leon partían la pana en el apartado rítmico, en especial un Zyon desatado, técnico y totalmente preciso…¡menudo inicio de bolo!. La voz de Max suena casi perfecta, la banda es un torbellino y ya no hay excusas. Todos a saltar de nuevo, ha dicho el bueno de Max.

El momento del viaje en el tiempo empezaba cuando comenzó a sonar el "No Hope=No Fear" del debut, con ese sonido de guitarra del que aprendieron otros titanes como SLIPKNOT, con ese riff que no dejó títere con cabeza, y que, en términos técnicos, es menos enrevesado de lo que grabarían después junto a Rizzo…quizás, motivo por el cual esta noche sonarían menos temas (nulos) de discos como "Dark Ages", "Conquer" o "Enslaved", por poner ejemplos claros. Las pantallas proyectaban místicas imágenes…pero, ¿quién hace caso de las pantallas teniendo a Max en escena?. El buen rollo es palpable, recíproco y hay muchas ganas de SOULFLY.

El sonido ya era tremendo, y la energía, muy positiva. "Superstition" de su último "Totem", bebe de la misma fuente que los clásicos SEPULTURA, y es que no desentonaría con la regrabación de "Schizophrenia"…en directo es demoledora, y esperamos que se mantenga en el set. Volvimos a los primeros trabajos, concretamente a "3" con "Downstroy", que casi empalmó con la anterior y con la siguiente del mismo álbum, "Seek’n’Strike", con la mística de su puente a todo trapo. Vaya forma de darle batacazos Zyon a la batería, y qué modo de hacer crujir la guitarra Mike… aquí no se echa de menos a nadie, y es una formación perfecta para el concepto, alma y formas de SOULFLY. Y es cuando empieza a sonar la intro de "Prophecy" cuando se produce el momento más brillante del show, pues el tema se las trae, y hace que las paredes de Mon vibren al son de su monstruoso riff y el coreado estribillo…¡épico!.

Otra mirada al exitoso debut con "Bumbklaat" y "Tribe", lo cual confirmaba que la primera época de SOULFLY iba a ser protagonista absoluta. De su "Totem" también descargaron "Filth Upon Filth"…"para partir la cabeza", como nos dijo Max. Gran incursión en el set de su nueva gran obra, para volver a la época más gloriosa con "Fire", así como "Porrada" del magno "Prophecy" (probablemente, mi álbum favorito de SOULFLY) ,claro que "Bring It" de "Primitive", tampoco pudo faltar, haciendo gala de esa presentación masiva del primer álbum en el set. Para el clásico "Bleed", cantamos el cumpleaños feliz a Richie Cavalera, y llenó de energía, saltos y furia el escenario junto a su padre, en un momento realmente memorable. "Bumba" del debut también fue celebradísima por los asistentes, como "Boom" de "Primitive", con su curioso, coreable y muy brasileño estribillo. El final de la fiesta vino marcado por "No", y, tras los emotivos agradecimientos de Max al público de Madrid, la movida y perfecta para saltar "Jumpdafuckup", seguida de su clásico "Eye for an Eye", sentenciando y sentando cátedra.

Sin necesidad de tirar de clásicos de SEPULTURA, creando su propio repertorio basado en sus primeros álbumes y un par de incursiones del último, SOULFLY hicieron vibrar Madrid como pocas veces les he visto en ocasiones anteriores. De largo, una de las mejores apariciones de Max y su equipo por la capital en los últimos años. Concierto memorable de SOULFLY …para disfrutar.

Texto: José Rojo

Fotos: Alvaro Ochoa

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