+ MASTERPLAN
Jueves 7 de Marzo de 2024 – Sala Shoko – Madrid
Una de esas giras que más llamaban mi atención para este primer trimestre de 2024, era la conformada por dos de las bandas que más he disfrutado durante la última veintena de años, o al menos, algunos de sus lanzamientos. MASTERPLAN registraron en 2003 uno de los mejores debuts que haya escuchado jamás, cuya gira teloneando a HAMMERFALL dejó huella en muchos de los que asistimos. Jamás olvidaremos ese bajo en forma de raspa luminosa de Jam, un Uli Kusch demencialmente salvaje tras los parche, Roland en plenas facultades interpretativas y un Jorn pletórico, despegando hacia lo más alto. Más tarde regresarían con un "Aeronautics" que también los trajo a Madrid, concretamente a la Sala Arena, en una gira sensacional junto a CIRCLE II CIRCLE, ROB ROCK y PURE INC… para mí, la confirmación de que seguiría a la banda durante una buena temporada, porque volvieron a despacharse un concierto de órdago. Pero la realidad es que su historia, aún con buenos álbumes en su haber, se fue deshinchando, y a día de hoy, no arrastran la fanaticada de entonces.
Sin embargo FIREWIND , la banda de Gus G., a pesar de arrancar su camino con álbumes impresionantes ("Allegiance" o "Premonition" son seminales), parecen vivir una segunda juventud a través de discos excelsos como "Immortals" o el recién editado "Stand United", que ya va para la lista de "los mejores del año". La presentación del nuevo single de los de Roland ("Rise Again"), y la de este último trabajo de FIREWIND, conforman el motivo principal y excusa para estructurar el tour "Masters of Fire", que, habiendo disfrutado del conciertazo que los de Gus ofrecieron hace dos años justitos presentando su anterior álbum en la capital, y deseando reencontrarme con MASTERPLAN tras veinte años, no me pensaba perder…¡la noche pintaba de maravilla!. No creo que hubiese lugar al tedio en Shôko, desde luego.
Dos telones con motivos de "Rise Again", tres columnas de luces adornando los laterales y la parte baja de la tarima, la portada de "MK II" proyectada en la pantalla principal, los parches de la batería con el mismo logo y algún efecto luminoso extra a los laterales, dio lugar a que, con una sala con aproximadamente medio aforo ocupado, o algo más, saltasen MASTERPLAN al stage precisamente con "Rise Again". El sonido de la batería de Kevin por las nubes, el teclado de Axel Mackenrott inaudible, el bajo del gran Jari Kainulainen escondidísimo, la guitarra de Roland con un tono y sonido correctos, y la voz de Rick Altzi… ¡aiiins!. Me dió mucha rabia no poder disfrutar de una de las gargantas más potentes de nuestro rollo (junto a, precisamente, la de Herbie de FIREWIND), porque se escuchaba a duras penas. Siempre me ha parecido la elección más lógica e inteligente por parte de Grapow para suplir a Jorn, y es que llega a todo, con un tono personal, y, además, contando con una puesta en escena de primera. De esas de veterano que tanto nos gustan. Uno de esos frontman de corte clásico, de los que hay uno entre quinientos. Si queréis disfrutar de todo su potencial, solo tenéis que escuchar su talento en álbumes de gente como Herman Frank, AT VANCE o THUNDERSTONE. Muy top. Pero esta noche tendríamos que hacer un esfuerzo extra para disfrutar de su maravilloso chorro de voz.
El simpático Grapow no es nuevo en el negocio, y sabe que el éxito es una constante si hace uso de la nostalgia, y la carta de "Enlighten Me" la jugaron demasiado temprano, porque seguía sonando todo saturado, especialmente la batería…una lástima, porque es un clásico de esos de primera línea, y lo ejecutaron a la perfección, dejando esa sensación de estar comiéndote un manjar único, sin sal…un sí, pero no. Faltó un sonido nítido para poder gozar del todo del súper hit, y así ocurrió igualmente con la tremebunda "Spirits Never Die" que Altzi clavó, en la que quizás faltó una guitarra de apoyo para dar más cuerpo (aunque cierto es que nunca la hubo en MASTERPLAN ), pero que cantamos hasta llegar a la afonía, porque el tema lo vale, y porque dar la espalda al trallazo que abre el grandioso primer álbum de la banda, sería un sacrilegio. "Lost and Gone" de "MK II", su primer y único álbum con DiMeo, fue una de las únicas dos composiciones que la banda interpretó alejándose de sus dos primeras obras. Todos los álbumes tendrían representación esta noche, menos el disco de vuelta a la palestra de Jorn, "Time to Be King". Menos mal que para "Crimson Rider", tema de apertura de "Aeronautics", el sonido empezó a "templar", mejorando mucho, y la voz de Rick comenzó a ganar protagonismo, escuchándose tímidamente los teclados del bueno de Axel, y quedando el volúmen de la batería a un nivel audible. No obstante, una buenísima noticia para nosotros, porque el concierto pasó a ser mucho más disfrutable, ya que hasta el momento, nos estaba doliendo en el alma el comprobar como una banda de su calibre, dándolo todo, no lograba emocionarnos, embarrada y lastrada por un deficiente sonido. Del mismo álbum interpretaron "Back For My Life", primer single que se usó para presentarlo, que todos coreamos a pleno pulmón, al son de la enigmática y pegajosa melodía de teclado.
Ahora sí, cuando el sonido, que no llegaba al notable alto, dejaba diferenciar elementos y diseccionar la música, pudimos gozar con una increíble tanda de clásicos iniciada por la ensordecedora (gracias al público), "Kind Hearted Light", en la que, una vez más, Altzi nos mostró la mejor de sus caras (¿tiene alguna mala?), bordando cada nota del tema, e imprimiéndole su sello y fuerza, sin perder ni un ápice del alma original. Un momentazo, seguido de la única representante de "Novum Initium", "Keep Your Dream Alive", que aún con su pesado riff y siendo un gran tema, bajó en intensidad el estándar del show, al estar rodeada de clásicos como la siguiente "Crystal Night", cuya intro (disparada, por cierto), nos adentraba en uno de los temas más intensos del debut, que, seguida de "Soulburn", nos confirmó que la noche iba a ser un completo tributo a su primer lp. Mientras, Roland, Mahou en mano, nos confundía a todos y nos adelantaba, a modo equivocación, que el siguiente tema en sonar sería "The Chance" de HELLOWEEN, aunque todos sabíamos que faltaba la joya de la corona, y…efectivamente, "Heroes" no podía faltar. Y he de colgarle otra medalla a Altzi por hacer suyas las partes de Kiske con tanta elegancia, maestría, y haciendo que gozásemos al 100% de semejante tema.
No vais a escuchar una mejor versión de "The Chance" jamás, que la que interpretan MASTERPLAN , no hay duda, como tampoco la hay respecto a que el mejor tema para finalizar el show es "Crawling From Hell", con ese riff endiablado, esas magníficas líneas vocales, e interludios entre los que Roland realizaba algunos de lo punteos clásicos que incluía en los set de HELLOWEEN, hacían sus pinitos con el "Smoke on the Water", o se presentaba a la banda entre risas, volviendo al grueso del tema posteriormente, consiguiendo arrancar el aplauso del público, llevando el show de menos a más, y haciendo que, lo que podría haber sido una decepción manchada por un sonido terrible, terminase convirtiéndose en una fiesta que, sin acercarse a las vividas durante las primeras giras con Uli y el resto de la banda inicial, volvería a visitar sin dudarlo un instante.
Con la sala a más de tres cuartos de entrada completos, el staff retiró los dos paneles de "Rise Again", y se descubrieron dos preciosas columnas simulando piedra con el logotipo de FIREWIND luminoso. Las pantallas también iban recubiertas de "piedra", y se quedaron en escena las barras de luz, añadiendo además un escudo medieval en el centro de la batería, y micrófonos personalizados, así como una proyección animada de la portada de su nuevo "Stand United". De ver a la banda casi con lo puesto hace dos años, a esto, hay una diferencia, y son de esas cosas de las que realmente te alegras…porque quiere decir que a una gran formación, le van bien las cosas, y pueden y quieren apostar por seguir entregando shows de calidad. Gus G. es una personalidad del heavy metal, y como tal, quiere dar ejemplo, con lo que su carácter minucioso ya no se refleja solo en su música, sino también en sus giras.
Algo que siempre agradezco de FIREWIND es que nunca salen al escenario en chándal…lo hacen ataviados con estilo, especialmente un Gus encuerado, metálico…como el defensor del heavy metal que es. Por supuesto, "Salvation Day", que es el tema de apertura, representa ese discazo producido por Dennis Ward que acaban de hacernos llegar, y aunque el juego de luces, atrezo e imagen grupal es de diez, la voz de Herbie se escucha descafeinada, quizás sin graves, aunque no por falta de méritos, porque esto pinta muy bien, y el resto de la banda suena que corta. Jo Nunez sigue siendo el espectáculo de siempre con sus baquetas, Petros lo borda… y Gus… no me cansaré de repetir que es uno de los guitarristas más precisos, variados y ricos en matices con su instrumento. Un deleite visual y sonoro que siempre es garantía de calidad. Un valor seguro. Lo de Herbie se quedó en algo circunstancial, porque ofreció un recital de altura…otro talento actual, que recomiendo escuchar en otros proyectos como The Lightbringer of Sweden. Primera división, amigos.
Lo curioso es que haya guiños al pasado desde el inicio del show con "World On Fire" de "Days of Defiance" del 2010, y es que si de algo van sobrados FIREWIND , es de repertorio, ya que de todos los álbumes se pueden extraer entre cinco y ocho temas sensacionales. El sonido quedaría estancado en un notable alto que se mantendría hasta el final, gustándome mucho más en su anterior visita a Madrid, donde sí sonaron de diez. Y hablando de vistas nostálgicas, "Destination Forever" nos condujo a "Between Heaven and Hell", con ese monstruoso riff, y un Herbie llegando a todos los sitios, muy comunicativo corporalmente, y una banda a todo gas. Pero he de decir, y pocas veces puedo hacerlo, que una de las que más me voló la cabeza, fue "Destiny is Calling" de su nueva obra, que posee un estribillo matador, y que la banda tocó con tantas ganas que nos infectó a todos con sus maravilloso desarrollo, a pesar de llevar días en circulación. Vaivenes en el tiempo se produjeron en el set, variado y muy bien elegido…prueba de ello es "I Am Anger" de su "Burning Earth", mientras que "Immortals" salió a relucir con "Wars of Ages". También os digo que hubiese caído el tema que fuese de aquel monstruoso disco, hubiese sido buena elección, y preámbulo perfecto a un increíble tramo instrumental en el que Gus nos deleitó con su talento innato, su destreza, y su originalidad en términos visuales, mostrándonos una guitarra con pastillas iluminadas que expulsaban humo, mientras luces led hacían su función para cada dedo en el solo, provocando un efecto visualmente impactante y entretenido de observar, que, sumado a los cañonazos de "gas", dejaron uno de esos momentos que dinamizan un show, ofreciendo algo diferente. Otro diez para FIREWIND.
Tras un inicio realmente impactante y movido, los sonidos acústicos nos introducían de lleno en "Longing to Know You" de su álbum homónimo, momento en el que mejor pudimos apreciar, saborear y disfrutar de la magnífica y única voz de un Herbie Langhans pletórico e increíblemente preciso, que además también clavó cada nota de "Mercenay Man" del exitoso "The Premonition", con ese rollazo a lo Gary Moore/Thin Lizzy, que todo el mundo disfrutó de lo lindo. Un temazo de esos para presidir tus playlist, sin duda, para volver a la más plena actualidad con un "Chains" que a modo medio tiempo, contiene una preciosa línea de guitarra, totalmente adictiva, y un estribillo para no parar de cantar, que al fin y al cabo, es lo que hicimos durante su ejecución. Mientras, Gus y sus muchachos seguían apostando por el presente con "Stand United", cuyo estribillo vuelve a resultar ser otro himno absoluto, aunque fue con la propia "Allegiance" cuando más pudimos observar el contraste entre temas nuevos y clásicos, pues Herbie unifica todos, los lleva a su terreno, y da igual que los haya cantado originalmente Apollo o Henning Basse. Si él los hubiese grabado, hablaríamos de clásicos igualmente. Muy grande Herbie, quien cada vez me convence más, y me aporta más razones de peso para pensar en él como uno de los grandiosos del "top ten" de la actualidad. Y ese contraste sigue siendo interesante, cuando suena "Fallen Angel", y provoca tan buenas sensaciones como los temas ya conocidos por todos. Igual ocurrió con la brutal "Rising Fire" del homónimo, lo que nos hace pensar en lo sólido de la discografía de FIREWIND .
Pero amigos, esto se acaba, y Gus no puede dejarnos sin escuchar su particular versión de "Maniac", que, bailecito de Herbie incluido, nos hizo a todos cantar el estribillo a grito pelado, mientras que escuchamos como venían "trescientos" levantando el puño al son del estribillo de la majestuosa, potente y épica "Ode to Leonidas" del "Immortals". Uno de los mejores temas de la última década en su campo, y una de las mejores composiciones del guitarrista, que fue la antesala de un "Falling to Pieces" que marcó el final de un concierto equilibrado, lleno de energía, fuerza, técnica y buenas maneras, ejecutado por unos músicos intachables, cuyo trabajo se vió reflejado en espectáculos como el de Shôko.
Ni el mal sonido de la primera mitad del show de MASTERPLAN fue capaz de no hacernos disfrutar de dos bandas en forma, representantes indiscutibles de lo mejor de la actualidad y que, uniendo fuerzas, nos regalaron una noche de galardón. Una dupla que no dudaré en ir a ver de nuevo si deciden juntarse en el mismo cartel para otra gira.
Texto: José Rojo
Fotos: Carlos Oliver (@carlosoliverphotography) Correspondientes al concierto del (Miercoles 6 de Marzo de 2024 – Sala Wolf – Barcelona)
Para ver las fotos a mayor tamaño, pinchar sobre ellas.
Escribo sobre el de Barcelona. Me pareció un muy buen concierto. A diferencia de lo que cuentas,el sonido aquí fue muy bueno en los dos grupos. Incluso diría que me sorprendió que sonasen tan bien. No he oído todos los discos de ellos, pero las canciones que no conocía sonaron muy bien y me gustaron. Mención especial para Herbie,que canta mejor de lo que parece en directo. Gus G. y el batería,unos cracks. Y como bien dices,os recomiendo el disco que grabó Herbie con Lightbringer of Sweden,porque me parece uno de los mejores discos de estos últimos años. Lo sigo escuchando de tanto en cuanto y suena de lujo. Bueno, que los disfrutamos mucho a los dos grupos. Y Firewind llevan ya tres discazos seguidos. Este último,genial también.
Esta banda ya no es nada sin Bob Katsionis
Que pena Masterplan. Habiendo sacado dos de los mejores discos de la historia del metal, se han quedado como un grupo sin más, siendo teloneros de una banda a la que ni conocía.
Hombre, «dos de los mejores discos de la historia del metal» a lo mejor es pasarse un poco. XD
Los dos primeros de Masterplan son obras maestras auténticas!!!