Crónica y fotos de BLIND GUARDIAN + DAWN OF EXTINCTION en Madrid

+ DAWN OF EXTINCTION

Viernes 27 de Octubre de 2023 – Live Las Ventas – Madrid

Qué buena noticia resulta ser cuando se tiene que reubicar un concierto porque se han vendido todas las entradas, signo inequívoco de la buena salud de la escena, y en cuestión, de la banda por la que se ha tenido que hacer tal maniobra. Y es que está muy claro que BLIND GUARDIAN están viviendo una segunda época dorada, y a nivel de público, seguramente la más importante de su vida como banda. Primeramente, juegan con la baza de haber publicado su mejor álbum en muchos años, pues "The God Machine" ya se ha ganado un hueco en la vida de sus fans más acérrimos, aquellos que les pedían menos pomposidad y más acercamiento a su parte de historia más venerada y cañera, y por otro…venían a España, donde los bardos son siempre bienvenidos y en la que siempre se les acoge de la manera más cálida. Son muy grandes en nuestro país, y siempre hay hueco para España en su agenda, pero por el motivo que fuese, la fecha de Las Ventas en Madrid tenía un aura especial. La última vez que pude ver a BLIND GUARDIAN fue también en la capital, en un concierto inolvidable en La Riviera, presentando su anterior "Beyond the Red Mirror"…y ya entonces me pareció un show superlativo, considerando que tiempo atrás, a pesar de siempre haber cumplido en el plano técnico y de sonido,  me había encontrado otro tipo de espectáculo no demasiado inspirado en la mayor parte de ocasiones. BLIND GUARDIAN han ido creciendo, y lo han hecho poco a poco, con los años y mucho trabajo. No me maleinterpretéis…nunca han descuidado el resultado final de discos y giras, pero siempre que he podido disfrutar de ellos en el plano del directo, ha sido mejorando un poco en cada ocasión respecto a la vez anterior. Y si mis cálculos no fallaban, habiendo pasado 8 años desde la última vez que les vi, estaba casi seguro de encontrarme con otro crecimiento en la banda. Veríamos a ver…pues el contexto, disco editado y ganas estaban de su parte por completo.

Por supuesto, Las Ventas no abrieron sus puertas al completo para la ocasión, sino que pudimos hacer uso de "Live Las Ventas", una carpa construída para este tipo de eventos, tapando la zona de arena, y dejando un espacio utilizable algo más grande que el de una de nuestras salas de mayor envergadura. Lo cierto es que cuando llegamos, habría un tercio de recinto lleno, con lo que no se pudo apreciar demasiado la capacidad del lugar, algo que comprobaríamos más adelante. Varias barras laterlares con comida y bebida, y un par de puestos de merchadising a ambos lados de la entrada justo antes del acceso, es lo que podríamos encontrar adicional al escenario. También se instalaron aseos prefabricados (algo retirados de la carpa), que en cierto modo me recordaron a los del Jardín Botánico en "Las Noches del Botánico". Con todo esto descrito, para poner en contexto a los curiosos que no pudieron acercarse, nos situamos entre el público para acoger a los nacionales DAWN OF EXTINCTION, banda valenciana auspiciada por Art Gates Records, que acompaña a BLIND GUARDIAN en la gira europea, y que esta noche se veían en el escenario de nada menos que Las Ventas… una experiencia, supongo, única para ellos, que por supuesto no desaprovecharían. Con el único apoyo de su logotipo tras ellos y un par de paneles con su logo, la banda salió a por todas, pero con la tensión añadida de sufrir un pequeño error de sonido inicial, nada más arrancar, que se superó enseguida en cuanto el riff entrecortado de "Underrated" de su ultimo EP, "From Tears to Vengeance", nos hiciese mover la cabeza por primera vez esta tarde. La banda se desenvuelve en un terreno a caballo entre el metalcore, el thrash o el death melódico, y, sinceramente, aunque parezca una obviedad, suenan con proyección internacional y muy profesionales. El sonido además les acompañó (he visto a bandas consagradas sonar mucho peor que ellos en recintos de la misma índole) y pudieron derrochar todo su potencial ante un público, que, seguramente, de no haber sido por su adhesión a la gira de los alemanes, no hubiese sabido de su existencia.

Me parece de factura resaltar la labor de un versátil Cristian Juárez como vocalista y guitarrista, que supo mantener el tipo en todo momento y ofrecernos un recital muy notable, tanto en tonos más limpios como en los más feroces, acompañado de una banda muy ensayada y estudiada…todo sonó como tenía que sonar, donde tenía que sonar. Daniel Juárez derrocha técnica y soltura, y la base rítmica es todo un torbellino, cumpliendo expectactivas y cubriendo sobradamente semejante oportunidad de presentarse a un amplio público. Cuando Cristian grió al acabar el tema "Madrid… are you ready to fucking metal?", ya se habían ganado un aplauso, con doble mérito, dada la distancia musical entre ellos y los dueños del cartel. "Rise From Oblivion" es mucho más accesible, con guitarras dobladas y ese sonido que se puede definir como "metal moderno", combinando partes desenfrenadas con otras más accesibles…una propuesta muy actual, que parece estar gustando por Europa, resaltando después el propio vocalista, lo buena gente que son BLIND GUARDIAN y el buen trato que están recibiendo por parte de los germanos y su crew durante todo el tour. Viajaron a su "Rebirth of Hate" con "This World Remains", mucho más sencilla en formas, tradicional, más clásica y donde se notaban otros mimbres diferentes a los de su su último EP. No abandonaron el buen nivel en ningún momento con algunos cortes como "Lost Paradise" y su cadencia más tranquila, para regalarnos un brillante final de show marcado por una bofetada a los malos tratos como "Motherfucker", haciendo partícipe al público de su potente estribillo, una menos agresiva "The Heresy" de su EP "Welcome to the New Century, Slaves", en la que me vinieron a la cabeza Trivium en su "The Crusade", y para finalizar, hacer al público parte de su momentazo, filmando "From Tears to Vengeance", agotando su tiempo un "Apocalypse" arrasador, que dejó en muy buen lugar el nombre de DAWN OF EXTINCTION en Live Las Ventas. De hecho, solo escuché comentarios positivos sobre su actuación, a pesar de, como digo, la distancia musical que separa a su propuesta de la de la banda que encabezaba el cartel.

Con el recinto a reventar, los pertinentes cambios en el escenario y un público entre el que se notaba la impaciencia, un telón tapó el lugar de los hechos con el logotipo gigante de BLIND GUARDIAN. Se apagan las luces y unos dragones proyectados en el frontal del escenario, acompañados de la introducción, van dispersándose para mostrarnos la parte central del "Imaginations From the Other Side", y al caer el telón y mostrarnos a los guardianes, empieza a sonar el emblemático tema. El público…ensordecedor, el sonido, al menos desde donde yo me ubicaba, potentísimo, y la banda más dura y precisa que nunca. Seis paneles de cegadoras a ambos lados de la batería, cuyos parches contienen motivos de "The God Machine" y un juego de luces espectacular, junto a la pantalla que ya nos mostraba la portada completa del disco, serían los únicos aliados para que los de Hansi no dejasen títere con cabeza.

Os digo de verdad que se respiraba un ambiente único, de entrega, cariño hacia la banda, ansia, nerviosismo… el inicio fue inolvidable, máxime cuando no hicieron falta varios temas para templar el sonido, ni para tomar posición. Todo fue sublime desde el primer minuto, momento desde el que casi no se escuchaba a la propia banda. Cuando acabó el tema fue tal la ovación ,que se notaba a la propia banda abrumada, con el correspondiente agradecimiento de un Hansi Kürsch, que se mostró tan simpático y natural como siempre…y a pesar de sacar a la palestra el tema "toros" y sonar algún abucheo, prosiguieron con una de sus más recientes apuestas. "Blood of the Elves" no desentona respecto a los clásicos, y aquí es donde podemos escuchar más agresivas y potentes que nunca las guitarras de André Olbrich, tan centrado en su labor como siempre, y Marcus Siepen, quien ya luce unas elegantes canas, que hicieron ver, a un público con 40-45 años de media, que el tiempo pasa para todo el mundo.

Espectacular dupla guitarrera en el tema, sin desmerecer a un Frederik Ehmke, que con 18 años en las filas de BLIND GUARDIAN, se ha ganado a pulso el cariño de banda y fans a base de tremendos conciertos como el de esta noche. No puede decir lo mismo en cuanto a reconocimiento Johan van Stratum, que a pesar de llevar un tiempo junto a BLIND GUARDIAN , no es parte del line-up como tal, lo mismo que Michael Schüren, casi escondido en escena, pero cumpliendo su cometido.

Llegó el turno de "Nightfall in Middle-Earth" y el himno de himnos "Nightfall". Una vez más, el público no dejó que los decibelios superasen nuestras voces al unísono. Se ponía la piel de gallina con tan solo dejarte llevar por las voces de los allí presentes y el precioso estribillo, mientras observabas la proyección de la portada de tan emblemático álbum, obra de Andreas Marschall. Espectacular el trabajo del dúo de guitarras, que nos transportó a otra época maravillosa…si a ello le sumas que la siguiente en caer fue "The Script for My Requiem", adornada con un juego de luces láser impresionante, podemos hablar de uno de los inicios de concierto más emocionantes de cuantos hayamos vivido este año. La bien acogida "Violent Shadows" nos mostró una siniestra ilustración proyectada tras la banda, ante un público que ya conocía el tema al milímetro, haciendo que fuese una composición tan válida en el set como cualquier clásico (que de eso BLIND GUARDIAN van sobrados).

La preciosa y acústica "Skalds and Shadows" fue la única representante del polémico "A Twist in the Myth", primero con Frederik a  la batería, y que gana posiciones con el paso tiempo… ¡cómo pasa la vida! (Parece que fue ayer cuando me acercaba a un hotel del centro de Madrid a charlar con la banda sobre el álbum, y de eso han pasado la friolera de 18 años). Cuanto menos curioso resultó ver como en la proyección podíamos observar la portada de "Tales From the Twilight World", sin corresponder tema, ni época…igual ocurrió en la coreadísima "Time Stand Still (At The Iron Hill)" de "Nightfall in the Middle-Earth", ensordecedora y espectacular, decorada con la portada del "Somewhere far Beyond". Curioso lo de las proyecciones, y probablemente, el único "pero" que podría ponerle al show, si es que eso puede llegar a resultar un contra para alguien.

Como no podía ser de otro modo, tenían que presentar un gran disco como "The God Machine" y con solo dos canciones en el set, no sería de recibo, ni justo. Por eso cayó una quizás menos celebrada pero muy bien ensamblada en el set "Secrets of the American Gods". Y tras un tramo de concierto realmente heavy, con una banda rozando la perfección y derrochando todo su potencial posible, era tiempo de sentarnos alrededor de la hoguera junto a Hansi y los suyos, y celebrar, cantar y disfrutar de un siempre estremecedor y emocionante "The Bard’s Song – In The Forest", cuya letra, de principio a fin, cantamos a pleno pulmón junto a la banda, que, visiblemente emocionada ante la respuesta y el fervor del público, nos atacó con dos clásicos incontestables como "Majesty" de su debut, con todo el mundo cantando el característico inicio, marcado por una melodía de "tiovivo", y generando enormes moshpit entre las primeras filas, y la épica "Traveler in Time", repartiendo caña por doquier, haciendo felices a los que, como yo, adoramos aquel tremendo álbum que es "Tales From the Twilight World".

El hombre de negro y sus secuaces se retiraban brevemente para volver minutos después y entregarnos otra tanda de clásicos de la más alta escuela. Ese inicio orquestal del "At The Edge of Time" volvió a aumentar el hype para asaltarnos con ese duelo de riffs inicial de la grandilocuente "Sacred Worlds", que ya ha quedado como clásico indicutible, mientras que "The Quest for Tanelorn" fue el único tema que tocaron del majestuoso "Somewhere far Beyond". "Lord of the Rings" nos llevó de vuelta a 1990, con la totalidad del personal dándolo todo ante el clásico. Igual ocurrió con el repetido y divertido estribillo de un "Valhalla" que, alargado hasta el inifinito, no deja de desprender magia, para finalizar la maravillosa noche un "Mirror, Mirror" en la que, literalmente, se levantaban las placas que había sobre el ruedo de la plaza, y sentías el suelo vibrar, ante una banda estupefacta, feliz y orgullosa de que en Madrid, todavía, tantos años después de su primera visita, se siga alzando como una de las formaciones más queridas, respetadas e importantes.

Con conciertos como el de Live Las Ventas, lo único que consiguen es afianzar aún más esa comunión con su público español, y asegurarse de que, cada visita, sea un momento único para el recuerdo. El del pasado viernes fue sencillamente histórico… ellos lo saben, y los fans que se acercaron a disfrutar de su música, también. De esos conciertos que quedan grabados en la memoria.

Texto: José Rojo

Fotos: Óscar Gil Escobar

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