+ HEAVEN SHALL BURN + OBITUARY + MALEVOLENCE
Martes 7 de Febrero de 2023 – Sala Razzmatazz – Barcelona
La llegada del nuevo milenio, tras los convulsos años 90, supuso una etapa de renovación en el metal y una búsqueda de nuevos referentes musicales especialmente para atraer al público más joven. Durante esta primera década de los 2000, TRIVIUMparecían llamados a encabezar esa lista de nuevas bandas a consagrarse en el olimpo del ‘new metal’. Aunque su propuesta inicial se resarcía de grandes dosis de thrash edulcorado rápidamente evolucionaron su estilo para adaptarlo a un público de masas. De lo que no cabe duda es que siguen siendo un grupo constante, fiel a sus principios y con un gran carisma. Para esta gira, se acompañaban de los alemanes HEAVEN SHALL BURN que, con una trayectoria más longeva que los americanos, siguen labrándose su camino y ampliando su legión de seguidores gracias a sus directos arrolladores. La otra gran baza del cartel corría a cargo de OBITUARY , un estandarte del death metal americano, incorporación que fue bien recibida por los amantes de los sonidos extremos.
No obstante, les tocaba abrir la velada a MALEVOLENCE unos jóvenes procedentes del Reino Unido que, recogiendo el testigo de bandas que fusionan el hardcore con el metal, se están sembrando un reconocimiento durante estos últimos años. Presentaban su disco “Malicious Intent”, facturado el pasado año, y empezaron su concierto con el primer tema de este trabajo, para mostrar como un puñetazo en la cara su contundente propuesta repleta de breakdowns brutales. A pesar de la temprana hora, fueron muy bien recibidos, especialmente por el público más adolescente. Su vocalista, Alex Taylor, es todo un gran frontman, recordándome en muchos aspectos a Jamey Jasta de Hatebreed. Ya desde un primer momento anunció que nos iban a proporcionar 30 minutos de pura energía, y así fue.
“Still Waters Run”, con sus riffs que recordaban a unos Pantera, nos acercaba a la vertiente más metalera de la banda. Con “Self Supremacy” se remontaron a su disco de 2017 de título homónimo, precedida de un constante circle pit. La llegada de la calma llegó con “Higher Place”, donde se pidió la colaboración de la audiencia para iluminar con sus móviles. Recuperaron su registro habitual con la veloz “Keep Your Distance” para finalizar su corta actuación con “On Broken Glass” sin antes anunciar que volverán a finales de año con su propia gira.
Ndr: No hay fotos de MALEVOLENCE porque nuestro fotógarfo no llegó a tiempo, Mil disculpas.
A estas alturas poco nuevo puede decirse de OBITUARY . Verdaderamente ha sido un plus la incursión de los de Florida en esta gira. La admiración de la banda por todo lo sureño quedó patente desde la inicial escucha de la festiva “Snortin’ Whiskey” de Pat Travers sucedida de “Redneck Stomp”, que es ya como la intro instrumental clásica de la banda. Ésta quedó interrumpida para seguidamente enlazarse con “Sentence Day”, con la aparición de la ya icónica figura de John Tardy balanceándose y moviendo las melenas sin separarse de su pie de micro. Las columnas de humo fueron constantes durante todo el show, además de que contaron con un excelente sonido, posiblemente el mejor de toda la noche. Puños en alza, siguieron con temas más contemporáneos como “Lesson in Vengeance” y “Visions in My Head”.
Con toda la banda rozando un altísimo nivel, cabe destacar como siempre la huella que dejan los hermanos Tardy, verdadera ánima al frente de OBITUARY , con esa voz cavernosa de John y la pegada incontestable de Donald a la batería. Los riffs entrecortados de Trevor Peres son inconfundibles, junto a otro maestro de la escena como es el bajista Terry Butler, mientras que Kenny Andrews, guitarra solista, lleva ya más de una década con ellos consolidando así una formación estable e impasible al paso del tiempo. Por supuesto que no quisieron perder la ocasión de presentar algunos temas de su reciente lanzamiento “Dying of Everything”. Las escogidas fueron “The Wrong Time” y el tema que da título también a este trabajo. La gente respondió muy bien ante estos nuevos cortes que demuestran que la banda no envejece, a pesar de no variar su patrón característico.
A la hora de tirar de clásicos, nos deleitaron con “Don’t Care”, la inconfundible versión del “Circle of the Tyrants” de Celtic Frost incluida en la obra maestra que es “Cause of Death” y la pútrida, machacona y repetitiva hasta la saciedad “I’m in Pain”. Sí, echamos en falta el tradicional fin con “Slowly We Rot”, pero no daba tiempo para más. Con toda la banda al frente y Donald Tardy alzado sobre su kit de batería se despidieron de la audiencia en lo que fue una actuación muy corta pero a la vez muy intensa.
Celebrando su 25 aniversario y con el buen sabor de boca que nos habían dejado en sus anteriores visitas a Barcelona, tomaban el escenario HEAVEN SHALL BURN . Pese a no presentar nuevo disco, siempre es una buena oportunidad poder presenciar sus potentes directos. Con el incombustible Marcus Bischoff al frente, con su habitual camisa roja y ahora con el pelo largo, empezaron fuerte con la épica “Hunters Will Be Hunted”, una clara muestra de la propuesta de los alemanes que bebe tanto del metalcore como del death metal melódico. “Bring the War Home” motivó los aplausos del público con un Christian Bass aporreando de lo lindo su batería. La visceral “Übermacht” evidenció un sonido algo sobresaturado con unas guitarras demasiado crujientes. Marcus se elevaba en la tarima central para ver y saludar a todo el público, tanto el de la pista como el del piso superior que al estar abierto facilitó mucho la comodidad y distribución de la gente. Un wall of death fue el pistoletazo a la contagiosa “Voice of the Voiceless”.
Las guitarras de Maik Weichert y Alexander Dietz se complementaban en todo momento a la perfección, como se evidenció en temas como “My Heart and the Ocean” o “Behind a Wall of Silence”. Canciones más clásicas como la coreada “Profane Believers” o “Counterweight”, con sus incesantes cambios de velocidad, fueron las que más desataron la euforia del público. A todo ello cabe sumar la energía de Marcus animando a la gente con el puño alzado y sin parar de moverse a un lado y otro del escenario. Los temas más recientes no desentonaron, destacando un par de trallazos como son “March of Retribution” o “Thoughts and Prayers”. No faltó la ya imprescindible versión del “Black Tears” de Edge of Sanity. La recta final corrió a cargo de la apabullante “Endzeit” , “Corium” y la cabalgante “Tirpitz”. En definitiva, otro gran concierto de una banda que debería ser merecedora de un mayor reconocimiento.
Un vistoso escenario de inspiración japonesa flanqueado con dos esculturas de dragones laterales fue el ambiente escogido para esta gira por unos TRIVIUM que celebran sus dos décadas. Como viene siendo habitual, un tema de Iron Maiden (“Run to the Hills”) anunció el salto al escenario de los de Orlando, a los que muchos nos vino de nuevo a la memoria la controvertida gira de "A Matter of Life and Death", que realizaron teloneando a la doncella de hierro en 2006.
Con una chaqueta a juego con la decoración escénica, el siempre simpático Matt Heafy y sus secuaces saltaron a escena mostrando sus mejores bazas desde el primer momento. Así, desde la inicial “Rain” pusieron a la audiencia patas arriba. Matt no paraba de cambiar de posición entre los diversos micros repartidos en el escenario, repartiéndose la faena vocal con el guitarrista Corey Bealieu a los coros. El incesante doble bombo final se enlazó con los galopantes riffs de “Forsake Not the Dream” donde Heafy ya nos dibujó su característica pose sacando la lengua. Despojado ya de su vistosa indumentaria, el frontman saludó en perfecto castellano al respetable y reparó en el típico cliché de la rivalidad del público Barcelona vs. Madrid para ver quienes eran mejores, con el efecto que tuvo esta interacción en una coreadísima “Strife”.
No pudo faltar el tema nuevo “A Crisis of Revelation”, perteneciente a la última grabación de la banda con ese peculiar estribillo que juega con la voz melódica de Matt y la grave de Corey y ese tapping a duo. Con un toque más rockero, “Built to Fall” fue tocada por primera vez durante la presente gira. En este aspecto, es de agradecer que TRIVIUM esté cambiando parcialmente sus set list en cada ciudad.
Otro clásicazo que no puede faltar es “A Gunshot to the Head of Trepidation” con Matt, Corey y el bajista Paolo Gregoletto enarbolando juntos sus instrumentos. “Down from The Sky” fue otra canción antigua recibida con muchos aplausos, mientras que “The Ones We Live Behind” nos mostraba una vertiente más actual con un gran trabajo de Alex Bent a la batería. Más pausada y versátil fue la interpretación de “Until the World Goes Cold”, de tintes más comerciales, con gran parte del público cantando su estribillo incluso por encima de la voz del propio Matt Heafy.
Los riffs speedicos de “To The Rats” nos trasladó a los inicios de la banda donde la influencia del thrash metal, especialmente de Metallica, eran más que evidentes. Los de Orlando iban por faena y no quisieron descansar antes de los bises. Que se iniciaron con “The Heart From Your Heart”. Matt pidió que el público se agachase para rápidamente levantarse en “In Waves”, mientras que el repunte final corrió de la mano de “Pull Harder on the Strings of Your Martyr” con banda y público fusionados en la que fue una de las mejores interpretaciones de la noche.
Resumiendo, una muy buena gira la de este Route Resurrection donde pudimos descubrir en directo a MALEVOLENCE, disfrutar una vez más de los infalibles OBITUARY, disfrutar de la energía en directo de HEAVEN SHALL BURN y reencontrarnos con unos carismáticos TRIVIUM .
Texto: Carlos Oliver (www.facebook.com/Carlos.Oliver.Music.Photography)
Fotos: Juan Ramon Felipe Mateo
(Correspondientes al concierto del Viernes 3 de Febrero de 2023 – Sala Santana 27 – Bilbao)
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