Critica del CD de LEPROUS – Aphelion

LEPROUS – Aphelion

 Discográfica: InsideOutMusic

Puntuación Popular

Nunca me han gustado LEPROUS. Lo he intentado escuchando sus discos, les he visto un par de veces en directo, incluso les he pinchado como DJ. Reconozco que son grandes músicos, originales en lo suyo y que en directo saben cómo dar un espectáculo, remarcando cada una de sus atmósferas, trasladándolas a los recovecos de un escenario, yendo de lo más pausado y sentido a lo enérgico en milésimas de segundo. Tengo muchas amistades con gustos similares a los míos que tienen a esta banda entre una de sus predilectas, incluso.

Y sin embargo, disco a disco, concierto a concierto, nunca han terminado de engancharme. ¿Cuál es el motivo, pues, por el que llevo dos semanas en las que no puedo parar de escuchar “Aphelion”, su última obra? ¿Por qué tarareo sus canciones, las cuales se me vienen a la mente a lo largo del día? Pues por la sencilla razón de que para este disco los noruegos han añadido un componente más pegadizo -o al menos así me lo parece- ideal para que aquellos a los que todavía no nos terminara de encajar su propuesta, consiguiéramos adentrarnos en ella.

He ahí el quid de la cuestión para el que firma. Está claro que LEPROUS continúan igual y sólo gracias a dar ese paso más “catchy”, me han ganado, con lo que el que ha terminado cambiando he sido yo, que ahora les veo con otros ojos. O les escucho con otros oídos, para ser más exactos.

La banda lleva ya varios años asentada y hace bastante de los últimos cambios de miembros, por lo que más conjuntados no pueden estar. Y aunque podamos hablar de la buena pareja de guitarras que hacen Tor y Robin o de la excelente base rítmica que interpreta cada uno de los múltiples cambios que abundan en los temas por parte de Simen Daniel al bajo y Baard a la batería o el especial mimo que se le da a las partes de teclados y sintetizadores varios, todos ellos arropados por los peculiares quejidos de Einar (uno de los motivos que más pueden enganchar o ahuyentar a quienes les escuchan por primera vez), lo cierto que más allá de ese acercamiento melódico del que hablaba antes, los noruegos son perfectamente reconocibles en su peculiar estilo. “Aphelion” suena a LEPROUS y hay quien incluso pueda considerar este redondo como la consecuencia lógica de lo que musicalmente venían desgranando en los últimos años. ¡No seré yo quien les lleve la contraria! Máxime ahora que -por fin- yo también me sumo entre los que ponen el pulgar hacia arriba cuando se les pregunta sobre si les gustan o no.

“Aphelion” me ha conquistado ya desde su inicio con el grandioso “Running Low”, gracias a esos acompasados golpes de teclado sobre los que Einar introduce unas interesantes melodías a las que se va añadiendo primero el colchón de teclados y más tarde una ruptura rítmica total con lo que a la postre será el estribillo, denotando unas calidad y originalidad compositiva a la altura de muy pocos.

No paran ahí los momentos geniales: “Out of Here” se muestra lacónica hasta que rompe en intensidad con un precioso verso que viene a transmitir eso, la necesidad de salir, de escapar de la prisión; “Silhoutte” nos deja claro que Baard Kostald es un pedazo de percusionista como la copa de un pino, con un juego de muñeca brutal que despliega tanto a la caja como en el charles, siendo la pieza fundamental sobre la que se sustenta la canción; por su lado “All The Moments” es pura delicadeza, con unas melodías que se cuentan entre las más bellas del disco, que ya es decir.

“Have You Ever?” puede parecer más anodina a primeras escuchas, sin embargo, no es tanto la canción en sí sino los detalles que la engalanan lo que la hace interesante. Y sí, me refiero a esos filler de teclado que vienen y van adornando algunos finales de frase, a los pequeños escarceos de piano de jazz que aparecen cuando uno ni se los espera y al excelso trabajo de producción que supone. “The Silent Revelation” se muestra animada, divertida, gracias a esa guitarra funky que la protagoniza, sólo para y tornarse como un tema completamente nuevo hasta arrancar de nuevo en lo que será uno de los estribillos más alucinantes del disco.“The Shadow Side” es por su lado, el momento romántico, tristón incluso. ¡Y es que esa melodía principal de sintes a través de la que se construye todo dice tanto con tan poco!

Y llegamos a la que considero la pieza central de la obra, una colosal “On Hold” que es LEPROUS en estado puro. Con esa multitud de cambios que van de lo más sentimental y lento al inesperado arranque, la multitud de pasajes que los noruegos nos pueden llegar a ofrecer en una sola canción es abrumadora, saliendo bien parados del envite que supone mezclar tantas partes tan diferentes entre sí sin que parezca un “copia/pega” de piezas inconexas.

“Castway Angels” es la balada, la pieza más intimista y una de las más oscuras del disco. Compleja y difícil de asimilar, aunque de simpar delicadeza que contrasta con “Nightime Disguise”, la cual compite con la anteriormente mencionada “On Hold” sobre cuál es la canción más compleja del disco. Esta última va un paso más allá en cuanto a bizarrada con unas armonías muy fuera de lo común y un punto de agresividad no mostrado hasta el momento a la hora de arrancar en cada uno de los muchos parones donde la banda se pone más “dulce”.

En definitiva, estamos ante un disco redondo que, personalmente, me ha ayudado a abrazar el gusto hacia esta banda.

Ha llegado el momento en el que quizás deba mirar hacia atrás, hacia esas obras anteriores suyas que no fueron de mi agrado e intentar mirarlas con nuevos ojos gracias a la perspectiva que me ha dado este gran “Aphelion”? Ese es un viaje que en algún momento sin duda habrá de recorrer.

J. José Jiménez

Lista de Temas:

1. Running Low
2. Out Of Here
3. Silhouette
4. All The Moments
5. Have You Ever?
6. The Silent Revelation
7. The Shadow Side
8. On Hold
9. Castaway Angels
10. Nighttime Disguise