Critica del Doble CD de IRON MAIDEN – Nights Of The Dead – Live in Mexico

IRON MAIDEN – Nights Of The Dead – Live in Mexico

Discográfica: Parplophone/Warner

En la línea de lo que sigue siendo habitual en la formación, los británicos publican un nuevo directo que recoge la pasión y energía que desprenden sus seguidores mexicanos. Dentro de su periplo Legacy que se venía extendiendo desde 2018 la banda ha dado revisión a unos cuantos clásicos, con su imponente puesta en directo. En esta ocasión se produjo durante la parada realizada en tierras aztecas las noches del 27, 29 y 30 de septiembre del año pasado y bajo una expectación inmensa que logró abarrotar el Palacio de los Deporte durante tres noches, colgando el cartel de “todo vendido”.

Un servidor tuvo la suerte de ver la gira y coincidir con los ingleses en los campos de Dessel dentro del Graspop Metal Meeting 2018 donde cuyo repertorio coincidió en su totalidad con el bolo que muchos tuvieron ocasión de ver en Madrid dentro del Wanda Metropolitano y que a la postre tocarían en las tres fechas mexicanas. La repetición del setlist pone de manifiesto la incapacidad de la banda para improvisar algún tema diferente, aunque sea con el fin de registrarlo en un trabajo editado como este a modo de disfrute de sus seguidores. Su cometido de medir todo a la perfección, como nos tienen acostumbrados con un show que calcan fecha tras fecha milimétricamente, ofreciendo a todos exactamente lo mismo, nos impide ver variantes. Es comprensible pensar que un show al que acompaña un gran montaje visual y toda la parafernalia propia del espectáculo siga los mismos patrones, pero un toque de espontaneidad que recuerde los comienzos, no viene mal y sería un gran un aliciente.

Ciñéndonos a los shows mexicanos en concreto, arrancaron tras dos introducciones previas formadas por “transylvania” y su ya prolegómeno oficial de “Doctor Doctor” que enajena a cualquiera en esos segundos previos a la salida de la doncella. Winston Churchill abre la veda con su reconocible “Intro” para que “Aces High” alborote todo el recinto con la velocidad de las guitarras y un Bruce Dickinson cada día más ornamentado salta por los aires, exhibiendo un fabuloso estado de forma. El aspecto teatral cada día resulta más relevante y una replica del Spitfire a tamaño natural sobrevuela las primeras filas en lo alto del escenario. La batería de “Where Eagles Dare” nos retrotrae al Piece Of Mind un tema que rescataron para aquella gira que repasaba sus cuatro primeros álbumes y que sin lugar a dudas fue una inclusión muy acertada. Allí vislumbramos un Nicko McBrain sentando cátedra y dando el callo en un corte que el mismo ha reconocido que le encanta tocar. Las primeras notas de “Two Minutes to Midnight” enloquecen el recinto con un clásico que, aunque trillado hasta la saciedad siempre cumple en directo. El primer repaso de la época de Blaze Bayley viene de la mano de “The Clansman” un tema donde Bruce Dickinson ha dejado su impronta característica sabiendo compaginar el buen trabajo original y su punto personal. Recuperan el brío con los tres guitarras exaltados para encarar otro clásico inquebrantable “The Trooper” poniendo a saltar a toda la concurrencia mientras Buce Dickinson y Janick Gers amagan con pelearse con su colega. Para la ocasión, se acompañan de un logrado Eddie que hace de las suyas durante dicha interpretación ante el fervor y asombro de sus fans. Con “Revelations” despiertan las memorias de ese fenomenal directo que cambió todo en los ochenta con Live After Death y que todos hemos trillado en vhs o cd. Un poco de savia nueva por medio de “For The Greater Good Of God” el mejor corte con diferencia de ese A Matter Of Life que nos calzaron completo en el Palau Saint Jordi hace una pila de años para asombro de todos. Recuperan el entusiasmo con ese sensacional single “The Wickerman” donde su artífice Adrian Smith se bate el cobre clavando el solo y agregando unos interesantes coros que confieren solidez en directo. El aspecto teatral recobra protagonismo con un Bruce Dickinson que ofrece lo mejor de si mismo en “Sign Of The Cross” cubriendo todos los ámbitos. Logrando de hecho que ese tema registrase algunos de los momentos más memorables del repertorio. Otra de las sorpresas más positivas fue la recuperación de la enorme “Flight of Icarus” con Bruce Dickinson regresando a los ochenta y la dupla Dave Murray / Adrian Smith clavando las notas de los solos como sino hubiera pasado el tiempo, mientras los fans se esmeraban en el reconocible coro junto a Steve Harris.

El tiempo avanza velozmente entre clásicos y da paso a la embriagadora atmósfera que se respira con un “Fear Of The Dark” que abraza el recinto y registra continuas ovaciones.  La incisiva “The Number Of The Beast” se abre paso entre inmensas llamas y focos centelleantes rojos con su solvente coro recitado al unísono. Haría aparición de nuevo Eddie en “Iron Maiden” para amagar despedirse del personal mientras Steve Harris alardeaba su fiereza.

Como colofón tres machetazos certeros que arrancan con uno de los cuatro singles de Seventh Son of a Seventh Son “The Evil That Men Do”. A continuación, teatralidad, exhibición instrumental y mucho alboroto con la inexpugnable “Hallowed Be Thy Name” para terminar despidiendo la velada en tono festivo de mano de “Run To The Hills”, un Dave Murray que echa el resto al asador y el llamativo coro de este super clásico.  

Un fenomenal show que ahora se puede revivir junto al entusiasmo de sus cercanos seguidores mexicanos que supieron extender la jarana durante tres jornadas inolvidables.

Txema Garay

1. Intro Churchill’s Speech
2. Aces High
3. Where Eagles Dare
4. 2 Minutes To Midnight
5. The Clansman
6. The Trooper
7. Revelations
8. For The Greater Good Of God
9. The Wicker Man
10. Sign Of The Cross
11. Flight Of Icarus
12. Fear Of The Dark
13. The Number Of The Beast
14. Iron Maiden

Bises:

1. The Evil That Men Do
2. Hallowed Be Thy Name
3. Run To The Hills