+ NIGHTFEAR
Sábado 5 de Octubre de 2019 – Sala Cool – Madrid
DÜNEDAIN publicó su excelente Memento Mori a mediados de junio y después de haberlo presentado en directo en algunos festivales veraniegos, le llegó el turno a la puesta de largo en Madrid.
Para ello contaron con NIGHTFEAR como artistas invitados, así que el menú de la Sala Cool pintaba lleno de metal esta noche.
Tras un año y medio sin subirse al escenario, la velada comenzó con NIGHTFEAR, inmersos en la grabación de su nuevo disco del que, según dijeron, pronto lanzarán adelanto. Sin embargo, en los poco más de 30 minutos que tuvieron, la banda madrileña se centró en sus dos discos publicados hasta la fecha, Inception (2012) y Drums of War (2015).
“The Prophecy” sirvió para arrancar con un doble pedal muy cañero y un tinte muy power metalero, aunque el sonido en este momento estaba muy embarullado y con dificultades para distinguir la voz. Poco a poco fue solucionándose y por fin pudimos escuchar mejor la afilada voz de Lorenzo Mutiozabal, que bebe de la escuela de grandes cantantes como Michael Kiske o Timo Kotipelto.
“Breakout” machacó sobre todo con esa parte más extrema y cañera del final, “Sands of Fire” hizo gala de ese buen groove y buen estribillo, mientras que “Steel Warrior”, con esa onda más heavy tradicional, demostró por sus sonrisas que ellos se lo estaban pasando bien ahí arriba.
Tras algunos problemas con el micro de Lorenzo, el grupo continuó con “Drums of War”, la más rápida y cañera de la actuación, y finalizó con “Pride”, que, con ese riff tan JUDAS PRIEST, fue muy bien acogida por el respetable. En general, una banda muy técnica que mezcla el power, el heavy y toques de progresivo y metal extremo con un nexo: mucha caña. Cumplieron con nota la labor de calentar motores y dio la sensación de que ellos mismos también agradecieron poder desoxidarse en directo de nuevo.
Setlist NIGHTFEAR
- The Prophecy
- Breakout
- Sands of Fire
- Steel Warrior
- Drums of War
- Pride
Ya con los cambios pertinentes en la batería y amplis, apareció el logo de DÜNEDAIN en la pantalla del fondo junto a la imagen de la mujer pintada pintada de calavera, que forma parte de la portada del disco (y ahora también tatuaje en el hombro del líder de la formación, Tony).
Con la intro ya se notaba que el ambiente era propicio para disfrutar de la banda abulense. Había muchas ganas de verles y se confirmó cuando empezó a sonar la pregrabación de los primeros segundos de “A un paso del cielo”, con ese riff a lo RAMMSTEIN y la voz machacona que dice “déjales, déjales que hablen”. Los chicos fueron salieron con una gran sonrisa y el público cantó de principio a fin en cuanto la banda empezó a repartir cera con uno de los cortes más directos de Memento Mori.
Me gustó mucho ver la explosión que causó Carlos cuando salió al escenario. Desde que entró en DÜNEDAIN su crecimiento como frontman es abismal, y aquí se notó que salió a por todas, animando y cantando a un nivel estratosférico. El público vibró y alucinó con él, seguramente porque, además de saltar y no parar de moverse, borda cada nota, en especial las sobreagudas, que son su especialidad y en directo son impresionantes. Pero es que a su lado está Tony, que no se queda corto a la voz y que está ahora más centrado en la guitarra solista, donde ha crecido gracias a que no lleva el peso de todas las melodías vocales principales.
“El viento de la batalla”, esta vez sin Tete, que colaboró en el disco, sonó muy cañera y es que el grupo salió a arrasar. Fueron encadenando temas sin mediar palabra y a cada cual más contundente. “Legado” fue aplaudida; el estribillo de “Vuela” fue pura dinamita y puso patas arriba la sala, que rozaba el lleno; “Bola de cristal” acabó con el público coreando el riff principal.
Entonces sí, Carlos dio las buenas noches y dijo que “había sido un día muy largo” porque estaban expectantes por ver la respuesta de la gente, que no defraudó. Arremetieron con “Memento mori”, una de las más melódicas del nuevo álbum, a la que siguió “Eterno”, en la que percibí una conexión muy especial con el público. Aparte de que todo el mundo la estaba cantando, noté ese “algo” que hace que los temas nunca falten en los repertorios. Y es algo que me sorprendió para bien: las canciones del nuevo disco funcionan genial en directo y entran directamente en lo mejor de la formación, algo que confirmó “Unidos”, dedicada a la “hermandad del heavy metal” y que adquiere en vivo mucha contundencia.
A nivel técnico DÜNEDAIN se encuentra en un estado envidiable, con unos integrantes muy enchufados, tocando muy bien, moviéndose estupendo por el escenario y muy cómplices con la gente. Está claro que el timón lo lleva Tony, seguido del salvaje de Carlos, que no perdió nada de garra desde que empezó a cantar hasta que acabó el concierto, pero el resto de los compañeros ejecutaron muy bien el repertorio y se notaron las horas de ensayo porque la banda suena muy rodada.
Estas cosas el público las nota y no tardaron en empezar a corear el mítico “oeoeoe”, que siempre es buena señal, más cuando quedaba la mitad de la actuación aún.
Después de “Hechizo”, que Tony empezó cantando muy bonito y que Carlos remató con unos sobreagudos de miedo, dieron las gracias a los organizadores por hacer este concierto posible. Empalmaron con “1000 Golpes”, una de las favoritas del público a juzgar por la reacción, los saltos y los coros.
Tony pidió al técnico de luces que alumbrara al público y al grito de “¡esta es vuestra!” comenzaron a tocar “Una razón”, de su álbum Buscando el norte (2010).
Momento de los bises, aunque Carlos bromeó con un “nos vamos ya, pero que sepáis que me lo he pasado de p*** madre”. No aguantaron mucho en el camerino, y es que la energía entre el público estaba a tope, así que volvieron con “Buscando el norte” y “Fiel a mi libertad”, dos cortes muy coreados.
Después de la pegadiza y fiestera “Tu sueño”, Tony agradeció a la gente haber venido “y hacer que sigamos soñando una vez más”. Se le notaba emocionado y también aliviado de ver a tanta gente en la sala (ya sabemos que no es fácil sacar adelante un grupo de metal actualmente en nuestro país).
Me encantó “Por los siglos de los siglos”, la única representante de La luz de mi oscuridad (2007), primer álbum de la banda en el que ya entonces quedaba patente la personalidad y esencia de los DÜNEDAIN de ahora.
Y cerraron por todo lo alto con la power “Corazón de invierno”, que, una vez más, la gente cantó de principio a fin.
Fue un concierto honesto y sin más artificio que el propio metal en el que unos DÜNEDAIN pletóricos y sus buenas melodías triunfaron ante un público que disfrutó de lo lindo. Da gusto cuando a una banda como esta, que se lo lleva currando ya unos años, le salen las cosas bien. Esperemos que sea la tónica común de su gira. Se lo han ganado por méritos propios.
Setlist DÜNEDAIN
- A un paso del cielo
- El viento de la batalla
- Legado
- Vuela
- Bola de cristal
- Memento mori
- Eterno
- Unidos
- La rosa negra
- Hechizo
- 1000 Golpes
- Una razón
Bises
- Buscando el norte
- Fiel a mi libertad
- Tu sueño
- Por los siglos de los siglos
- Corazón de invierno
Texto: César Muela – Twitter
Fotos: Joseph Draven (Gracias por tu colaboración y tus fotos)
Para ver las fotos a mayor tamaño, pinchar sobre ellas.
IMPRESIONANTES!!!!! BESTIALES!!! FABULOSOS!!! Cualquier adjetivo superlativo que queráis poner ira bien para describir lo que vivimos el sábado en la Cool Stage de Madrid.
Los abulenses dieron un AUTÉNTICO RECITAL así en mayúsculas y sin ambages, estuvieron de fábula desde el primer minuto hasta después del concierto en el tiempo que estuvieron dedicandonos para las firmas y fotos de rigor.
Impresionante el set list y poderosísimo el sonido en la sala, y como rugimos con cada una de las canciones.
Lo de Carlos es bestial, se come al público, canta como los DIABLOS y es un frontman de categoría internacional, que decir de Tony que es el artifice de esta maravilla de banda, y del resto pues que Mariano es un guitarrista buenísimo, que Alberto es un bajista que lo flipas y con un carisma brutal y que Miguel golpea que te mueres.
Como se puede notar, jejeje, salí entusiasmado de verles en directo y de gozar como un cochino en una charca, y creo que con el rodaje de este disco, ya pueden empezar a soñar con LA RIVIERA y grabar algún DVD o CD en directo, así que a por todo, chicos!!!
LARGA VIDA A DÜNEDAIN, LARGA VIDA AL METAL ESPAÑOL!!!
Una pena que tuviera una boda el Sabado por la tarde/noche que me impidió asistir, tenía muchisimas ganas de verlos en directo y mas después de los dos discazos que llevan con Carlos, que como mucha gente creo que ha sido el paso que les faltaba para empezar a ir para arriba. Espero que vuelvan pronto por Madrid para poder disfrutar de ellos
Mi humilde aportación a esta crónica es que todo el mundo que tenga oportunidad de ver a Dunedain que lo haga. Tremendo el concierto, no dan ni un respiro, ni a ellos ni al público, qué energía tienen. Están en un momento bestial y no es fácil encontrar bandas en una plenitud así. Una hora y media que se me hizo cortísima, qué locura de concierto.
Les he visto en todas las épocas y creo que en casi todos los conciertos que han dado en Madrid, y sin duda lo del Sábado fue de morirse, están intratables…nunca una hora y media se me hizo tan corta. Espectacular, .. posiblemente la banda más en forma del panorama nacional . El dueto a las voces de Carlos y Tony es de otro planeta… Les veo en la Riviera pronto,, el cool stage se hizo pequeño, estaba hasta la bandera..muy difícil lograr eso hoy día.