RHAPSODY-TURILLI/LIONE – Zero Gravity (Rebirth And Evolution)
Discográfica: Nuclear Blast
RHAPSODY, RHAPSODY OF FIRE, LUCA TURILLI’S RHAPSODY y ahora, pese a que probablemente me haya dejado alguno por el tintero, RHAPSODY, TURILLI/LIONE. Contando además la multitud de proyectos alternativos, carreras en solitario, colaboraciones y entrada en otras bandas (ANGRA, VISION DIVINE, LABYRINTH…), el árbol genealógico de estos italianos nada tiene que envidiar a otros tan complejos como los de DEEP PURPLE o BLACK SABBATH. Tengamos en cuenta que, al menos conviven ahora dos nombres con la denominación RHAPSODY: los de TURILLI/LIONE y los de Alex Staropoli.
Dejando de lado las vicisitudes previamente planteadas, cabe resaltar que esta nueva faceta con coletilla diferenciadora dentro de la familia RHAPSODY, viene a continuar lo que, en la gira del año pasado presentando los temas más representativos de la banda madre en directo, hicieron el guitarrista Luca Turilli y el vocalista Fabio Lione. Y lo hacen continuando con el estilo que encumbró a ambos, aunque llevándose la parte compositiva y sobre todo arreglística al terreno desarrollado por Turilli bajo la denominación RHAPSODY. Es decir, barroquismo por los cuatro costados, sinfonismo y complejidad, aunque sin terminar de conseguir plasmar un disco tan complejo ni oscuro como aquellos dos editados junto al vocalista Alessandro Conti. Sin embargo, aunque este “Zero Gravity (Rebirth and Evolution)” continúa con esa estela, sí es más accesible al oído y, aunque está repleto de capas de armonía y arreglos de post-producción, aunque no tantas como en el exagerado “Prometheus” de 2015, se hace no tan arduo el desgranar cada pasaje, melodía y canción.
Les acompañan en esta aventura viejos compañeros de aquella banda madre -protagonistas de la desbandada de miembros hace varios años que dejaron apenas solo al teclista Alex Staropoli como defensor del nombre RHAPSODY OF FIRE- como son: Dominique Leurquin a las guitarras, Patrice Guers al bajo y Alex Holzwarth a la batería.
Adorna el trabajo el estupendo arte gráfico de la artista Heilamania, quien también ha trabajado para bandas como LINDEMANN, EPICA o KREATOR. La propuesta, tan épica como fantasiosa pero a la vez metafísica, tecnológica, metafísica incluso, repleta de esos grises y plateados, es una maravilla a disfrutar desde la portada hasta las páginas del libreto.
El disco inicia con un tema “marca de la casa”, un “Phoenix Rising” donde el power metal luce en todo su esplendor, con esos dobles bombo, bajo y rítmicas a toda velocidad y un juego de ligados por parte de Turilli sencillo pero efectivo y pegadizo. El tema va creciendo a base de estrofas complejas, repletas de parones y melodías donde la voz de Lione se entrecruza con la del coro, rompiendo en un estribillo épico. Para “D.N.A. (Demon and Angel)” se une a la ecuación un adictivo ritmo para la estrofa compuesto por cinco notas que marcan la melodía principal a base de golpes, mientras Fabio hace dueto con Elize Ryd de Amaranthe en uno de los momentos álgidos del álbum.
“Zero Gravity” va añadiendo complejidad al acabado, de nuevo con unas estrofas muy trabajadas, ahora en plan sinfónico, añadiendo dramatismo vocal tras las cinematográficas orquestaciones. Me encanta cómo van marcando las tónicas voz, coro, guitarras, bajo y voz, consiguiendo que, pese a tener la misma estructura coro y estribillo, suenen completamente diferentes. Sin duda, obra de todo un genio.
“Fast Radio Burn” vuelve al power metal con el toque más clásico de los RHAPSODY originales (incluso antes de obtener la coletilla “of Fire”) con esos ligados, guitarras y teclados por todo lo alto. Es la perfecta antesala para uno de mis dos temas favoritos, el genial “Decoding the Universe” que, desde el piano inicial que va marcando las melodías principales, siguiendo a esa manera de romper tan clásica gracias a ritmos simples, siguiendo únicamente las notas principales, con doble bombo, hasta esa manera de construir las bases combinando tempos, yendo de lo lento, hermoso y pausado a lo más veloz y cómo coronan con un magnífico estribillo evocador, precioso, es una maravilla. ¡Y no me olvido de la parte central donde sus influencias de QUEEN están más que presentes, con un dramatismo propio de Broadway!
Vuelta al sonido y estilo clásico con otro gran “Multidimensional”, cuyas melodías y la manera en la que ésta son combinadas me encantan. Por su lado, “Amata Inmortale” es la balada de piano y orquesta que Fabio canta también con voz de tenor.
“I Am”… ¡Menuda obra maestra! Mi tema favorito junto al mencionado “Decoding the Universe”. ¡Qué maravilla! Es un tema complejo, repleto de cambios, atmósferas y cambios de tempo en el que esa animada estrofa de guitarras acústicas rasgadas y un saxofón enamora desde la primera escucha. Sus puentes, marcados por ligados doblados a terceras nos llevan a un estribillo sublime, con una parte central donde, una vez más, todo cambia, se para, entra la orquesta y el piano, hacen acto de presencia el dramatismo y la interpretación, los falsetes, los juegos de voces. Para el que firma, ¡uno de los mejores temas en la discografía de Luca y Fabio!
Y como guinda, “Arcanum (Da Vinci’s Enigma)”. O lo que es lo mismo, barroquismo llevado al metal en su más amplia extensión. Oscuridad. El mezclar lo viejo de la orquesta con lo nuevo de los sintetizadores. El unir todos los elementos y llevarlos a un nuevo nivel de complejidad.
¿Que dieron a entender aquello de que esa sería la última oportunidad de verles tocar juntos? ¿Que incluso Luca llegó a decir que no volvería a grabar un disco de metal? Bueno, pues aquí tenemos este “Zero Gravity (Rebirth and Evolution)” para demostrar que la credibilidad de afirmaciones categóricas por parte de los músicos nunca han de ser tenidas en cuenta -lamentablemente, todo sea dicho- y que al menos, nos queda un magnífico álbum de power metal épico, opulento, progresivo y sinfónico. Aunque hay disparidad de opiniones entre los derroteros que han tomado las respectivas carreras de las bandas denominadas RHAPSODY y sus miembros, así como la evolución musical de cada parte, muchos -entre los que me incluyo- sabremos disfrutarlo con deleite.
J. José Jiménez – J_Jose_Jimenez@RafaBasa.com – Twitter.com
Lista de Temas:
- Phoenix Rising
- D.N.A. (Demon And Angel) [feat. Elize Ryd | AMARANTHE]
- Zero Gravity
- Fast Radio Burst
- Decoding The Multiverse
- Origins
- Multidimensional
- Amata Immortale
- I Am [feat. Mark Basile | DGM]
- Arcanum (Da Vinci’s Enigma)
- Oceano (Bonus)
Aún no lo he escuchado pero para mi, como seguidor de Turilli, es compra obligada. Además tocaron un tema nuevo, o varios, en Rock Fest y me gustaron, además de que sonaron muy bien. Tampoco es de extrañar dada la cantidad ingente e indisimulada de samplers que utilizan esta gente en directo…
Le he escuchado 4 veces y, si bien es más escuchable y entra mejor que Prometheus, creo que debo reconocer que no me gusta la propuesta musical de Rhapsody formato Luca. Aún, con el placer de volver a escuchar a Fabio, y reconociendo que Luca es un maestro a la hora de evolucionar su propia propuesta musical, se pasa. Ese rollo progresivo/sinfónico/electrónico/atmosfério/bombástico/yoquesequé, es demasiado para mí. Quiere meter todo tipo de sonidos, de arreglos, satura muchísimo, canciones que tienen tantas partes sonoras diferentes que parecen 2 o 3 canciones en una. Parece muy claro que la propuesta de Staropoli se ha quedado en el Rhapsody del pasado, y como tal evoca su música, y otro tanto hace Luca hacia el futuro. No puedo ponerle una puntuación, porque entiendo que a los que le gusta esta propuesta le parecerá grandiosa, y lo comprendo perfectamente. El último disco de Luca que me encantó fue el ya lejano Ascending to Infinity. Después de Prometheus esperaba algo más cercano al disco anterior, pero parece que esta es la nueva idea de sonido de Luca. Pues bravo por él, pero no es para mí.
Pse, no está mal, mejor que todo lo que ha hecho Turilli desde que se separó de Staropoli y mejor que lo último de este sin Lione, pero aún así, salvando 3-4 canciones, se hace bastante pesado.
Un coñazo y una decepción, y mira que pensé que podría hacer algo interesante. Temas sin gancho y que pasan sin pena ni gloria, y eso que calidad de músicos y producción hay, claro está, pero es un disco que no pasará a la historia.
Menuda currada de crítica, J. José. Me ha gustado tanto como el disco. Lo esperaba con ganas, pero también con escepticismo (Prometeus no terminó de entrarme), y me han sorprendido para (muy) bien.
Le he dado un par de escuchas y la verdad, no está mal. Un poco más fresco. Mejor sonido, pero compadezco al que hay hecho la mezcla del disco. Hay tantas sonidos, que se escucha un poco saturado. Sin embargo, he de reconocer, que dentro de la propuesta, hay pasajes épicos y de muy buen gusto.
El disco es una sorpresa y un soplo de aire fresco dentro del power metal con toques sinfónicos. Lleno de detalles a nivel musical y de producción, nada saturado y mucho más coherente que otros discos de Turilli. Personalmente lo prefiero 100 veces a los Rhapsody Of Fire que suenan rancios y no son capaces de encontrar la fórmula que los mantenga en pie ni cambiando de cantante.
Lione es un animal y Turilli tiene una imaginación compositiva sin precedentes dentro del género. Es un disco que amas u odias, eso está claro.
el nivel de currada es innegable, pero como ya habeis apuntado por ahí arriba, la palabra mágica es SATURACIÓN. tanta amalgama sonora y compleja acaba abrumando a alguien como yo, que lo único que espero, COJONES, LO QUE QUIERO DE UNA PUTA VEZ, ES QUE EL TURILLI RESCATE A OLAF HAYER DE DONDE COÑO ESTÉ METIDO Y SE SAQUEN UNA PUTA OBRA MAESTRA COMO FUE «KING OF THE NORDIC TWILIGHT»…!! hala, ya está. ya me he quedado a gusto.
No lo va a hacer. Leí que estaba harto de la musica medieval y todo eso. Que ese rollo ya no le va. Le gustan los actuales within temptation y esas cosas. Qué lastima que sea así.
Por otro lado a strapoli solo le gusta la musica medieval y no escucha metal asi que ahí tienes la razon de por qué ya no son como eran antes ni volveran a serlo
Coñazo desde la primera a la ultima cancion… Eso si, suena de fabula
A mí me ha encantado, como todo lo que ha hecho Turilli.