IRON MAIDEN estrenan nuevo vídeo en directo para el tema «Flight Of Icarus» grabado en su última gira «Legacy Of The beast».

No es oficial aun, pero te lo puedo confirmar 😉

Solo faltaría que llamen a Martin Birch y a Andy Sneap y saquen el mejor disco desde 7th son…. si sabbath y priest pudieron hacerlo…. soñar no cuesta nada

Sonar, Sneap sabe sonar bien, eso está claro (es un gran ingeniero), pero su sistema nos acostumbra a recibir todo empaquetado y sin vida, y esto es literal. La buena música que ha trascendido en las décadas lo hizo por su dinamismo, tal vez y en parte por eso la de ahora se va quedando de forma residual en un mogollón gigantesco, de alguna manera «atascada» (saturación de bandas y saturación-presión sonora). Los «errores», los huecos intencionados en la música, los altibajos… son algo humano y fundamental. De hecho, es lo que más nos conecta. Incluso un «Turbo» maquinerizado a nivel guitarras y baterías (moda en su época), tiene más alma que Firepower… ya no digamos un Screaming o un British. Precisamente el Redeemer, con su onda más maquetera, parece querer recuperar ese viejo espíritu, y esto ha podido pasar desapercibido (aunque la producción sea bastante floja).

Shirley es bastante diferente en cada mix, el de A Matter es el que más me gusta, con diferencia, pero en Final Frontier no lo hace mal. En algunos trabajos la batería al completo suena bastante decente. Book of Souls tiene una mezcla opaca, pero creo que para bien. Dance of Death es un disco muy resultón a nivel sonoro, y Brave New World mantiene altibajos.

Todas las remasterizaciones de los clásicos de Maiden son un ejercicio de destrozo que, a pesar de todo, no ha salido tan mal parado. Han sabido «no pasarse del límite» (mezclado por Martin «MASTER» Birch.. remasterizado por «fulanito», etc, madre mía), pero le echan un morro que pa que, con tanta reedición y tal.

Respecto a las estructuras Iron… sí, se autoplagian un huevo, tirando de lo fácil, y hay que reconocer que eso cansa bastante. Lo que pasa es que consiguen colarlo como si nada (en los concerts les sirve de vacile), y como cada disco es un mundo (sonoro) pues les funciona. Pero prefiero ver a unos Maiden coreando «o oo o o o0» y a la gente participando que a un Halford (por ejemplo) literalmente callado y haciendo cantar a la peña el ultracansino «Breaking the Law», apuntando con su micro a las multitudes durante todo el tema. Cada cual explota la historia a su manera, y a ver quien compra.

No creo que un Birch lograse influir en las estructuras musicales de los actuales Maiden, o tal vez sí, puntualmente… pero el sonido del bajo sí podría reestablecerlo, aunque en Book of Souls y los conciertos a partir de ahí, la cosa ha cambiado un poco, el bajo ya suena más a bajo y menos a lata. Incluso en este vídeo de Icarus, el bajo tiene graves gruesos y menos frecuencias medias (hay que decir que a veces se pierde el sonido, por pasajes).

A mí me gusta «exagerar» algunas cosas para que realmente se comprenda el alcance de lo que quiero decir, que pique un poco… no sé si me explico. Ni todo es tan fantástico en el mundo del Metal actual (demasiado rosa, y además poco inspirado musicalmente) ni todo es tan malo, a pesar de que haya grandes bandas que se arrastren (sí, por desgracia) pero vendan entradas a precios desorbitados y se les siga el juego como si aquí no pasara nada. Es un tema muy delicado que a poco se toque, hiere sensibilidades y afecta intereses. Pero alguien decía hace poco en un comentario de esta web que eso no es el Rock, o algo así… muy de acuerdo. Otras aún juegan dignamente su partida, aunque lo de los precios de los conciertos (de estas bandas señaladas, principalmente) es para quedarse ojiplático.

De acuerdo contigo en lo de Sneap. Consigue un sonido muy poco natural y mecánico. Incluso cuando ha producido a Testament ese sonido está ahí. Me quedo con producciones y productores que dan un sonido más orgánico y natural a los discos. Hablando de Testament, los sonidos y matices que consiguieron por ejemplo en Low, fueron espectaculares.