YNGWIE MALMSTEEN – Blue Lightning
Discográfica: Mascot Records
Seguramente YNGWIE MALMSTEEN fue uno de los músicos que más me enganchó en su momento, cuando irrumpió a principios de los ochenta con su novedosa forma de tocar la guitarra formando parte de los míticos ALCATRAZZ y de los speedicos Steeler, e inmediatamente después con una serie de excelentes discos en solitario. Pero con el paso del tiempo, más allá de seguir manteniendo una técnica al alcance muy pocos, el sueco no hecho más que dar la razón a los que le echaban en cara su enorme ego facturando desde hace ya muchos años trabajos insustanciales y faltos de atractivo, repitiéndose una y otra vez la misma fórmula que a muchos de sus seguidores primigenios ha terminado por saturarnos.
Desde que dejó a un lado a colaboradores tan valiosos como Jeff Scott Soto, Joe Lynn Turner, Goran Edman o los hermanos Johansson, los discos de Malmsteen ha ido bajando exponencialmente, con unas composiciones que en muchos casos más parecen meros ejercicios de destreza instrumental sin alma, muy lejos de las inmensas canciones de sus primeros trabajos, con un protagonismo absoluto del sueco haciéndose cargo prácticamente de todo, incluida la voz y unas producciones realmente mediocres en algunos casos.
Dicho lo cual, es fácil entender que no supusiera una gran ilusión para mí la llegada a mis manos de este nuevo disco (igualito que si esto hubiera sucedido hace treinta años) y que no esperara gran cosa, pero siempre con la remota esperanza de que fuera a encontrarme con un trabajo al menos digno del nombre de su autor. Y el caso es que, tratándose prácticamente en su totalidad de un disco de versiones, no está mal del todo, aunque alguna de las revisiones pecan de excesivo barniz barroco cuando en su esencia son más básicas y cercanas al rock setentero y al blues. Eso sí, vuelvo a quedarme aquel magnífico “Inspiration” de 1996 con Jeff Scott Soto a la voz, en el que rendía magnífico tributo a bandas como KANSAS, RUSH, SCORPIONS, RAINBOW O DEEP PURPLE y JIMI HENDRIX que repiten en esta ocasión.
Pero claro, ahora no está Soto y la voz de Yngwie está muy lejos de acercársele, aunque como decía hay algunas covers que le han quedado bastante bien llevándoselas a su terreno, entre ellas las de Hendrix “Foxey Lady” y “Purple Haze”, bastante endurecidas y barrocas pero respetando la sensual cadencia rítmica de la primera y la incendiaria esencia de la segunda ejecutada con fuerza y brío resultando de lo más adictiva. Tampoco están mal las de PURPLE, “Demon’s Eye”, que repite respecto a “Inspiration” resultando algo menos brillante en sus partes vocales y más incisiva en su instrumentación, y la celebérrima “Somke On The Water” engordando su inconfundible riff y alargando su solo sobre una base rítmica algo hueca.
Entre medias, de todo un poco, una acertada “Blue Jean Blues” de ZZ Top que suena tórrida y atormentada con feelin’ metiendo un oportuno apoyo de teclas orgánicas acompañando su descarnado solo, una recargada “While My Guitar Gently Weeps” de George Harrison algo saturada de dibujos de guitarra con un virtuoso solo doblado pero respetando su melodía central con buen gusto, o una curiosa “Paint In Black” de los STONES acelerada en su ritmo casi power metalero obviando el encanto lisérgico de la original, explayándose igualmente con su habitual técnica en la final “Forver Man” de Eric Clapton que suena más a demo que a otra cosa desluciéndola notablemente.
De los nuevos temas propios me quedo con “Sun’s Up Tops Down”, un buen blues rock de alto octanaje de ritmo y base clásicos desarrollando sus partes de guitarra con rollo y virtuosismo, junto a una notable interpretación vocal arrastrándose tras sus notas. Por su parte “Blue Lightning” cumple en clave más hard pero sin olvidar el blues con la guitarra brillando por encima del resto con unas mínimas aportaciones de teclas y coros.
Se completa el disco con dos instrumentales no muy extensas como son “1911 Strut”, puro sonido Yngwie barroco dentro un marcado ritmo blues boogie, y “Peace Please” una bonita pieza lenta en la que el guitarrista escandinavo muestra su cara más entrañable y desgarradora recordando ligeramente sus mejores tiempos.
En fin, un disco que no va a hacer que Malmsteen recupere su mejor nota, pero que al menos sí nos deja algunos buenos momentos del que antaño fue uno de los mejores guitarristas del mundo.
Mariano Palomo
Lista de Temas:
- Blue Lightning
- Foxey Lady
- Demon’s Eye
- 1911 Strut
- Blue Jean Blues
- Purple Haze
- While My Guitar Gently Weeps
- Sun’s Up Top’s Down
- Peace, Please
- Paint It Black
- Smoke On The Water
- Forever Man
Me parece horrible lo de este nota. Egocéntrico. ¿No se va a dar cuenta que más del 50% de lo que es se lo debe a Soto, Turner, Boals y compañía?
Penoso
Es su proyecto. Esos que nombras se hicieron famosos por tocar con él, no al revés!
Desde luego. Si no hubiese sido por Malmsteen, no se que hubiera sido de Joe Lynn Turner, que hasta entonces sólo había tocado con mindundis como Blackmore y en grupos irrelevantes como Rainbow…
… y ahora donde está Turner? Jajajajaj
Pues a día de hoy, a un nivel más decente que el de tu querido Yngwie
Una caca y son versiones, si fuera de su cosecha…
de lo escuchado hasta ahora, un tostón inmisericorde. tengo de fondo ahora mismo el alchemy y al lado de esto parece el mismísimo trilogy (aunque bueno, el alchemy no es malo, y desde luego no es ni de coña tan atroz y aberrante como los últimos)
En el inspiration también cantaron Boals y Turner.
Yo al Yngwie ya ni gratis le escucho.
E un mojón…
Yngwie ya no es quien fue pero aquí todo dios sigue opinando sobre él, si eso es no escucharle y no seguirle, que baje dios y lo vea…
Pero si aquí se opina hasta de ti, imbatible.
Eso por descontado, es lo que nos hace grandes 🙂
se recomienda escuchar una vez antes de catalogar como «puta mierda» u «obra maestra». o al menos un par de temas, cojona. a veces la música te da sorpresas sorpresas te da la música… o te da un mojonazo en tol jeto, como es el caso.
No es el fisco que se auguraba, creo que es un buen disco con sus bemoles. Tampoco es que sea una maravilla pero resulta, al menos interesante. Destaco «Paint it black» que se presenta como una versión hardrockera bastante efectiva, muy diferente de la original pero que funciona. Foxy Lady también me gustó, es excesiva en el solo, como siempre hace Malmsteen con resultados variables, pero es que le da un toque brutal que dependiendo del estado de ánimo con que se escuche puede entretener. Demons eye es otro acierto en una presentación resumida y minimalista -diría que hasta garagera- muy espontánea. 1911 Strut es un boogie brutal, como una versión elefante arrollando todo a su paso. Sun’s Up Top’s Down es de lo mejor del disco en tanto quizá sea la pieza que más verdaderos ligados blues tiene y demuestra que cuando a Yngwie se le da la gana tocar lento -aunque sea relativamente- los resultados suelen ser mejores. Hubiera disfrutado más de blue jean blues si la hubiera interpretado más lento pero sabemos que Yngwie casi nunca se contiene, aun así el feeling de blues no se pierde por completo. Smoke on the water no es mejor que la original pero interesante que toque el solo muy parecido al original y que se de el lujo de hacer un solo final que rescata los toques vivos de «Live in japan», hubiera sido más efectiva si hubiera alargado ese jugueteo final, no me parece mala versión. En cuanto a la voz hay que reconocer que le ha echado ganas y procura cantar con fuerza y garra, claro que la capacidad vocal es limitada y la estilización forzada, como para cubrir la poca capacidad, resulta un tanto ridícula en ocasiones como sucede en un Purple Haze mal logrado. Pero vamos, tampoco su voz es del todo inadecuada para cantar lo que ha escogido cantar. No me agrada que Malmsteen decida exasperar los nervios del oyente iniciando varias de las piezas con calentamientos de dedos inútiles y cansinos que parecen las rebabas de los juguetes de plástico de tercera categoría, creo que haré mi edición propia mutilando esos intros impertinentes y ruidosos. En síntesis, es un disco creo que bastante honesto que tiene los inconvenientes, sin embargo, de su cutre producción, la baja definición de los instrumentos -sólo se escucha definida la guitarra solista- la excesiva autoindulgencia que no funciona en todas sus piezas. Pero vamos, creo que es un disco honorable e interesante que lo mantendrá vivo hasta su próxima y dudosa entrega. Saludos.