STONED AT POMPEII + BONEFLOWER + PANDEMIA + SANTO ROSTRO
+ TRONO DE SANGRE + HONGO + THE WIZARDS + UNEVEN STRUCTURE
+ SUFFOCATION + MEGADETH + MONOLORD + LEPROUS
+ SCORPIONS + CROWBAR + PARADISE LOST
+ ANGELUS APATRIDA + GOD IS AN ASTRONAUT
Jueves 12, Viernes 13 y Sábado 14 de Julio de 2018 – Viveiro – Lugo
Crónica y Fotos del Viernes día 13
STONED AT POMPEII
En mi periplo por descubrir bandas nacionales por ver que se cuece en nuestro país, me crucé con los gallegos STONED AT POMPEII y con su álbum debut Ancroidal; desde ese mismo momento que ‘Life Is My Name’ llegó a mis oídos, me quedé enganchado a su apuesta musical.
Algo dentro de mí decía que iban a ser una de las sorpresas del día para muchos asistentes puesto que ya sabía de lo que eran capaces sobre un escenario y, cumpliendo con mi predicción, al acabar el concierto pude ver que muchos se iban contentos con lo que acababan de presenciar.
Era primera hora del segundo día de festival, pero no era un problema para que arrasaran con temas como la propia ‘Life Is My Name’ o la genial ‘The Slave In Me’. Todo sonó perfectamente y tanto la banda como el público disfrutaba del espectáculo.
La banda cumple en todos los aspectos, con Adolfo a la guitarra y a la voz ejerciendo de maestro de ceremonias, pero también con la entrega máxima de Piru al bajo, la profesionalidad de Paul a la guitarra y Cristian aporreando la batería de forma excepcional.
No exagero cuando digo que STONED AT POMPEII son sinónimo de futuro, que se merecen seguir creciendo y que, por qué no decirlo, a día de hoy es una de mis bandas nacionales favoritas y eso solo se consigue a base de esfuerzo, profesionalidad y, por encima de todo, personalidad musical, de lo cual van realmente sobrados.
Para mí, uno de los mejores conciertos de este segundo día de RESURRECTION FEST y eso que solo estuvieron media hora sobre el escenario.
Texto: Juanma García
Fotos: Álvaro Carlier
BONEFLOWER
Tras SANTO ROSTRO, cuando en realidad debían haberles precedido, tocaba ver a unos jovencísimos y prometedores BONEFLOWER desenvolver su propuesta sobre el Chaos Stage. Dispuesto a comerse el mundo con su explosividad y osadía, el trío alternativo madrileño saltaba raudo al escenario para aprovechar al máximo el apretado tiempo que debían administrar para mostrarnos en parte lo que fue su primer larga duración, “Empty Rooms, Full Bodies”; pero también para permitirnos otear lo que se está gestando en la actualidad más inmediata de la banda, que lleva varios temas presentados durante este verano, casi en formato de mensualidad a través de su bandcamp.
La versatilidad de Eric queda bien evidenciada en cada esbozo de influencia que recorre su guitarra, que se enrabieta o encrudece según corresponda para dibujar esos paisajes de puro post-rock tan completos y armoniosos. Sin duda, se trataba de una ocasión excepcional que no dejaron escapar para hacerse ver y notar por medios propios, demostrando la valía de cada uno de ellos y cómo son capaces de hacer sonar sus composiciones en conjunto; favorecidas eso sí por probablemente el escenario con el sonido más constante, equilibrado e íntegro de todos los presentes en el festival, algo que repercutió claramente en grandes actuaciones como la de BONEFLOWER, y que también elevó al estatus de imborrables los recuerdos que generarían TRONO DE SANGRE poco después.
Poca sorpresa el señor concierto que se cascaron lo de Nueva Orleans, salvo por la inesperada ausencia de Todd Strange en la banda, quien volvió hace poco más de un año. Todd, el que fuera bajista original de la banda parece ser que seguirá formando parte de la formación en estudio y por el momento solo en ciertas fechas como el esperado concierto en el que volverán a homenajear a su mayestático “Odd Fellow Rest”, en su ciudad. Shane Wesley estaba allí dispuesto a intentar que no se notara.
Con un sonido, y me parece hasta raro de escribir, infinitamente superior al que ofrecieron en su actuación en el MAIN STAGE años atrás, el cuarteto cuajó sin duda uno de los mejores conciertos ya no del día, sino de todo el festival, rematado como no podía ser de otra manera, con clásicos como Planets Collide y Like Broken Glass, que sonaron arrolladoras. Incluso me pareció ver mientras me marchaba a ver si llegaba a los últimos minutos de PARADISE LOST que se animaban con una más.
Texto: Carlos Esteban
Fotos: Juan Ramon Felipe Mateo
SANTO ROSTRO
La segunda jornada de este RESURRECTION FEST arrancaba marcada por un inesperado y no poco notorio cambio en los horarios del día que afectaría desde primerísima hora a todo el escenario principal. Aunque no busquemos culpables, es del todo justo y necesario reseñar que los grandes damnificados por esta coyuntura fueron los incombustibles jienenses que conforman SANTO ROSTRO. Ellos eran los encargados de inaugurar el MAIN STAGE a primerísima hora, pero cuando apenas faltaba una hora para su actuación, se les notificó el desajuste que les subiría al escenario treinta minutos antes. Entre lo que el rumor tardó en hacerse oficial y el poco margen de maniobra que permite tan temprana hora, no fuimos pocos los que perdimos la oportunidad de deleitarnos con los colosales temas que enfrasca “The Healer” sobre un escenario de gran formato.
Pese a todo, Antonio y los suyos supieron sobreponerse a la adversidad y contrarrestaron con talante y buen hacer descargando temas como Hylonome o la dilatada Cut My Hand con la que abrieron. Apenas un puñado de madrugadores pudieron ser partícipes de la comunión del Santo Rostro, que ensalza cuerpo y alma con esa liturgia de sludge doom tan provocativo que vislumbraba su final con One Small Victory. Solamente restaría Blood Run, para culminar la escasa media hora que se les brindó, rindiendo así tributo a aquel primer larga duración que llevaba su propio nombre y que este septiembre cumplirá cinco años desde que viera la luz.
Me queda cierta sensación agridulce al pensar a cuánta gente podían haber sorprendido de haber tocando a una hora más decente, incluso en el DESERT STAGE. Muchísima, estoy convencido, pues para mí supusieron desde su confirmación uno de los grandes atractivos naciones del festival.
Desde luego, podían estar plenamente satisfechos por su trabajo bien hecho a pesar de los problemas surgidos, por ello no dudaron en auto indemnizarse retozar infatigablemente y disfrutando al máximo durante el resto del festival con los incontables compañeros de la escena. Esperemos vuelvan pronto por Viveiro…
Texto: Carlos Esteban
Fotos: Juan Ramon Felipe Mateo
TRONO DE SANGRE
Frente a bastante menos público del que merecen, los madrileños TRONO DE SANGRE nos compensaron a los escasos allí presentes con su particular “zapatilla”. Así es como definen lo que hacen, y no creo que nada pueda llegar a definirlo mejor con menos palabras.
Las influencias son incontables, pero si nos abstraemos de eso, ver a esta banda en directo es una verdadera experiencia de lo más enriquecedora.
Poco más de media hora conducida con la mayor intensidad imaginable en la que se fueron intercalando temas tanto de su larga duración “La mitad de lo que somos, la mitad de lo que creemos” como de su más reciente EP “El Perro Bajo la Piel”, interpretado al completo. No faltaron Mona Lisa ni Las Huellas del Pianista entre las inverosímiles contorsiones de Fer cuando no tenía que desgañitar su voz.
Es habitual verles acompañando a grandes banda de nuestro territorio como TOUNDRA u OBSIDIAN KINGDOM pero parece que ya les ha llegado la hora de brillar con luz propia, que tampoco es que no lo hicieran ya… Pero “El Perro Bajo la Piel” supuso una ratificación explicita que les ha reafirmado en sus desbocadas intenciones, que no son otras que sorprender y repartir cera a partes iguales, como llevan haciendo muchos años ya.
La pasión y el entusiasmo con el que interpretan todos sus temas traspasan el foso, pero esto es especialmente evidente en una cuidada Saló, cantada en parte por David, con Hans saltando sobre su batería con cada golpe de bombo y terminada con los instrumentos por el suelo y todos ellos jugando con los efectos desde sus pedaleras. Inapelable recital que explotó a fondo el CHAOS STAGE, como no vi a nadie volver a hacerlo.
Texto: Carlos Esteban
Fotos: Álvaro Carlier
HONGO
He de reconocer que nunca me dio por escuchar la banda de Coruña que os presento a continuación, pero con …y sembrarán campos de odio me hicieron replantearme que tal vez me estaba perdiendo una banda con una calidad indudable. Me tomaba este concierto en RESURRECTION FEST como una prueba para ver si ese último escollo que separa que me enganche a un grupo definitivamente o no, era superado, y vaya si lo consiguieron.
HONGO contaban con un horario que, sin terminar de ser demasiado bueno por la coincidencia con otras bandas de un renombre más grande, no era tampoco una hora en la que no fueran a contar con público. Es más, según iban pasando los primeros minutos de actuación, muchos asistentes que entraban al recinto se quedaban mirando al escenario y, curiosos, se acercaban a comprobar la esencia musical que llevan este cuarteto de músicos.
Me gustó prácticamente todo, desde la actitud de la banda hasta cómo sonó un DESERT STAGE que se consolida poco a poco como uno de esos escenarios que guardan pequeñas joyas dentro del RESURRECTION FEST y, a buen recaudo, que HONGO fue una de ellas para más de un asistente. Muy bien toda la banda, pero especialmente acertado su guitarrista y vocalista David, que hizo un concierto realmente sublime.
En definitiva, fue media hora de un sludge muy bien conseguido y con unas cotas de calidad que son indiscutibles.
Texto: Juanma García
Fotos: Juan Ramon Felipe Mateo
THE WIZARDS
Qué os voy a contar que no se sepa ya de esta banda. Ya me avisaron de que en directo eran un cañón y que siempre cumplían a rajatabla lo que se esperaba de ellos y, efectivamente, THE WIZARDS en el RESURRECTION FEST, dio un concierto de esos que hay que catalogar de órdago, de sencillamente apabullante.
La apuesta de esta banda procedente de Bilbao aúna todo el espíritu del hard rock ochentero con el rock psicodélico que recuerda a bandas de actualidad como KADAVAR.
¿Qué puede salir mal si además de un estilo de música que siempre es agradable de escuchar tienes un frontman como Ian Mason que es una auténtica locomotora en el escenario? Exacto, no puede salir absolutamente nada mal.
THE WIZARDS animaron al público, los mantuvieron pendientes de su apuesta durante todo momento y los deleitaron con canciones sublimes como ‘Calliope’ y sus potentes riffs de guitarra o con otros temas de Full Moon in Scorpio que se consolida como uno de los álbume más interesantes que han salido en los últimos años dentro del panorama nacional.
Me encantaron en prácticamente todo: actitud, entrega, profesionalidad y con las canciones ejecutadas de forma magistral.
No se les puede achacar nada, fue una de las bandas que mejor sonaron del día y prueba de ello era la cantidad de gente que se veía más tarde con la camiseta de los bilbaínos adquirida en el merchandising oficial del festival. Increíbles, deseando verlos de nuevo.
Texto: Juanma García
Fotos: Álvaro Carlier
UNEVEN STRUCTURE
De la caída de ONI del cartel y la incursión de UNEVEN STRUCTURE pensé que, personalmente, había salido ganando.
Tenía ganas de ver a los franceses en directo y esta oportunidad se tornaba idílica, pero a veces las cosas no salen como deseas.
A pesar de que el sonido cuadraba, había momentos en los que no me terminaba de convencer, tornándose un concierto irregular el ofrecido en el CHAOS STAGE.
Si algo se puede destacar es la profesionalidad de la banda en todo momento y canciones como ‘Incube’ que sí sonaron bastante correctas.
Me quedan ganas de revancha para la próxima ocasión, dado que estos imprevistos, como todo, son humanos y pueden ocurrir en cualquier momento y a cualquier banda. No me cabe duda de que, en la siguiente ocasión, todo será mucho mejor con UNEVEN STRUCTURE.
Texto: Juanma García (Twitter) (Instagram)
Fotos: Álvaro Carlier
SUFFOCATION
De vuelta hacia el RITUAL STAGE, me fueron viniendo a la cabeza pequeñas ráfagas de reminiscencia sobre la anterior actuación de los siguientes protagonistas en este RESURRECTION FEST.
Les recuerdo en un más pequeño lejanamente en el CHAOS STAGE, cuando la lona aún era blanca y todo era más reducido; pero les recuerdo también ejerciendo el mismo dominio y la misma robusta autoridad que en esta ocasión, interpretando indiscriminadamente cortes basados en su death metal tan brutalísimo.
Aunque su set ha variado en cierta medida desde aquella última visita, sigue sin parecer que los neoyorkinos presentaran nuevo trabajo hace poco más de un año, como también ocurriría en aquella ocasión. Pues apenas llevan dos temas de ese “…Of The Dark Light” en su directo: Clarity Trough Deprivation y Return To The Abyss, que además no tardaron en sonar.
En parte, esto se debe a que SUFFOCATION ha sabido abstraer con los años que los temas más aclamados de su discografía hasta ahora son los pertenecientes su primera etapa, en los noventa. Cómo sonaron la destructivas Thrones Of Blood o Effigy Of The Forgotten, que nombra su debut, son buen testimonio de esto.
Cabe destacar, más allá de la presencia ya conocida por todos del subversivo Frank Mulllen y de su más antiguo compañero, el cachondo de Terrance Hobbs; la intachable participación y la perfecta sumersión de las caras nuevas en el sonido y la apariencia de la banda sobre el escenario.
En menos de dos años, Eric a fuerza de blast beats y dobles bombos frenéticos, así como Charlie Errigo como guitarrista rítmico, han sabido estar a la altura de sus compañeros y a día de hoy interpretan como suyos propios los grandes clásicos de la banda como la triada Liege Of Inveracity, Catatonia e Infecting The Crypts, que cerró su concierto casi diez minutos antes. Tras ellos llegaría la última pausa antes de afrontar el más agitado final de jornada de este RESU, pues desde LEPROUS nos vimos ocupados hasta el final del día.
Texto: Carlos Esteban
Fotos: Álvaro Carlier
MEGADETH
MEGADETH son y siempre será la banda de Dave Mustaine, están hechos a su imagen y semejanza, por ello, además de marcar el rumbo compositivo, dirigirles, y guiarles, a veces MEGADETH ha ido por un camino menos recto, más empinado o han acertado y han elegido un sendero lleno de éxitos y aciertos, sobre todo en el pasado. Aún muchos recordaréis aquel disco llamado “Risk”. En la vida de una banda longeva a veces hay curvas, pero lo que es claro es que Mustaine marca el día a día de MEGADETH por su estado de ánimo, por su predisposición, humor o según con el pie con el que se levante.
Recuerdo el pasado verano que Kiko Loureiro me dijo que Mustaine estaba pasando una buena etapa, estaba cargado de ilusión y quería hacer las cosas bien. Me alegro por ello, de hecho su último álbum Dystopia parece haberles rejuvenecido.
Pero el día a día marca el destino, y parece que este viernes no sería muy positivo para MEGADETH. Mustaine no mostró su mejor cara, cantó sin ganas, con una voz que iba a venía, que no terminaba de romper, de convencer. Ayudado por el guitarrista Loureiro, que como ya todos habréis comprobado es la mejor vitamina reconstituyente para la banda, el fenomenal batería Dirk Verbeuren (SOILWORK) y su compañero desde hace años David Ellefson, al bajo y coros, MEGADETH ofrecieron un concierto de notable bajo en RESURRECTION FEST, que gustó, pero no llegó a lo que los fans esperábamos.
El sonido fue bueno, aunque bastante mejorable, sobre todo la voz de Mustaine iba y venía, pero sobre todo por despropósito del guitarrista/vocalista, pero lo que no me convenció fueron las guitarras. La obsesión del técnico que hacerlas sonar en estéreo hizo que su resultado final no fuera óptimo. La guitarra y solos de Kiko sonaban a la izquierda y los de Mustaine a la derecha, por lo que la fuerza de la suma de las dos hechas no fue eficiente, en mi opinión.
Pero lo peor fue la actitud de Dave. De cualquiera de las formas Loureiro se echó adelante, arregló bastante el descosido.
Hangar 18 causó gran reacción inicial. The Conjuring y The Threat Is Real fueron los siguientes en sonar, dos temas que a mí me gustaron pero que enturbiaron el entusiasmo del principio, hasta que tocaron los siguientes Sweating Bullets y She-Wolf.
Ellefson daba su mejor cara, el batería Dirk estuvo tocando muy bien, y el protagonismo de los solos se los repartían Kiko y Dave.
“Tornado Of Souls”, les situó en escena aún más y parece que sacudió un poco a un Mustaine que le puso más ganas, pero el público no reaccionó hasta que sonó su himno, “Symphony Of Destruction” y “Peace Sells”. Ambos produjeron la locura colectiva.
Mustaine saludó de punta a punta del escenario en solitario, sonriendo, y tocaron el final “Holy Wars” que triunfó. Dave dijo que este era el último “bolo” de este tour, por lo que tuvimos la suerte de disfrutarlo, aunque fuera de forma no excesivamente brillante.
Texto: Rafa Basa
Fotos: Juan Ramon Felipe Mateo
MONOLORD
Uno de los primeros dilemas serios de esta edición del RESURRECTION, en lo que a solapamientos se refiere, venía de la mano de dos vecinos escandinavos: los noruegos LEPROUS y lo exuberantes MONOLORD. Pero mi devoción por todo lo sueco y en especial por este fabuloso trío que tantas alegrías me ha dado en forma de LP’s, hicieron la elección bastante más sencilla.
Les conocí casi de casualidad con su iniciático “Empress Rising” allá por 2014, la típica portada que por lo que sea te llama; desde entonces, ese disco y los dos que vendrían después, se han hecho un hueco inamovible entre mis reproducciones más habituales. En esta ocasión, el show de los de Gotemburgo versaría principalmente sobre su más reciente trabajo, “Rust”, publicado a finales del año pasado. Al igual que ocurre con el disco, Where Death Meets The Sea estrenaría el recital mientras la oscuridad se abría paso en todos los sentidos. Con ella, todos los presentes acabaríamos ya embaucados por la etérea atmósfera que generan con sus lentos y distorsionados riffs.
Forgotten Lands o Lord Of Suffering,que titula su ultimo EP, suenan realmente atractivas en directo, permitiendo a cada ser viviente allí presente absorber las firmes acometidas de bajo que provenían de ese finlandés infiltrado que es Mika Häkki, todo un portento, que se hace notar especialmente en temas como la instrumental Wormland, adaptada para el directo. A partir de aquí, empezaría el éxtasis final que suponen sus dos “singles” más reconocidos, que juntos casi suman veinte minutos. En primer lugar Rust, para la que ya se pudo apreciar a un Thomas Jäger completamente entregado a su flying V para deleitarnos con su exquisito solo. Después, la sublime Empress Rising, convertida ya en su corta existencia en una verdadera obra de culto, así como el resto del disco, para los amantes de las sonoridades más densas y cadenciosas.
Desbordante concierto al que solo se le puede exigir más volumen, pero con MONOLORD siempre se puede pedir más volumen, aunque te sangren los oídos. Su siempre ascendente trayectoria, no deja de granjearles extensísimas giras tanto por el continente europeo como por toda Norte América. En los últimos tiempos, nosotros hemos podido verles por aquí compartiendo cartel con sus hermanos de CONAN, apuntalando la gira de Zack Wylde y sus BLACK LABEL SOCIETY. Además, próximamente volverán por nuestro país en sus cuatro fechas cerradas para noviembre acompañando a los majestuosos KADAVAR, así que no les perdáis la pista.
Texto: Carlos Esteban
Fotos: Juan Ramon Felipe Mateo
LEPROUS
Habrá quien comente que SCORPIONS pudieron dar el concierto del festival—un servidor debe reconocer, que se aburrió bastante a pesar de Mickey Dee—, pero en mi humilde opinión, el concierto de la jornada fue a parar para los noruegos LEPROUS.
Los hay quien sabíamos que, si todos los astros se juntaban y no había ningún imprevisto, la banda comandada por Einar Soldberg iba a dar uno de los mejores conciertos del festival. Otros, curiosos, sin expectativas incluso, se acercaron a ver a la banda y, al acabar su show, se alzaron con la etiqueta de sorpresa de la jornada y no es para menos.
Es verdad que LEPROUS pueden estar un poco en desacorde al género que suele mover el festival, pero este año con la incursión de algunas bandas de progresivo—se agradece un mundo esta decisión para los amantes del género—era el momento perfecto para verlos. Desde el arranque con la genial ‘Bonneville’ demostraron que son capaces de levantar unas sensaciones muy complicadas de conseguir; hipnotizan y te dejan mirando fijamente la propuesta musical pausada, tranquila, relajada y que por momentos arranca un poco más violenta, pero sin excesos.
Son una de esas bandas que se disfrutan más en sala pero que, con total sinceridad, algunos disfrutamos incluso más debido al sonido del que gozaron. Toda la banda sonó de escándalo, argumentando por qué actualmente son una de las bandas más en alza en su género y haciendo partícipes de un estilo donde el sintetizador del señor Soldberg tiene mucho la culpa de llevarnos en volandas durante todo el show.
Como en todos los conciertos hay pegas: el corte de sonido en ‘Mirage’ no nos gustó nada a los que estábamos disfrutando del concierto y, por qué no decirlo, echamos de menos canciones tan míticas como ‘Forced Entry’ de Bilateral o ‘The Valley’ del Coal. Pero insisto, LEPROUS no solo demostró cómo se hace un grandísimo show, además demostró cómo se trata con profesionalidad y respeto a un público que aplaudió y vitoreó a la banda porque sí amigos, habían hecho uno de los mejores conciertos del festival.
Texto: Juanma García
Fotos: Álvaro Carlier
SCORPIONS
Ya dije mi opinión sobre su show en el resumen que publicamos hace unos días, y hablé a renglón pasado de cómo fue su actuación en Barcelona.
Me reafirmo: los alemanes son unos grandes profesionales, nunca fallan, son inalterables, haga frío o calor, llueva o nieve siempre marcan una temperatura templada que les mantiene en su zona de confort, y ahí están, actuación tras actuación, recorriendo el mundo y cumpliendo con su trabajo.
Su paso por RESURRECTION FEST no les sacó de esa zona templada. Tocaron temas que han sido número uno en las listas, que cantan los fans que les conocen por sus baladas más exitosas o por sus temas habituales en las radio-fórmulas e hilos musicales, interpretando algún tema del pasado, y alguno de su más reciente álbum, pero poco más.
Lo hicieron bien, sin duda, su montaje es de gran nivel, su show, pero como ya dije en mi anterior crónica, yo, como otros seguidores más, esperaba mucho más.
Me preocupó el estado en el que noté a Klaus Meine. Cantó correctamente, aunque su voz se escuchó muy baja, pero le noté robótico, como abducido, desconectado… Y escénicamente le noté más parado que anteriores giras. Los años pasan y dejan factura, imagino.
Al resto del grupo le vi bien, activo, especialmente a Jabs. Schenker jugó sus cartas, hizo sus poses, pero también le noté menos activo. El bajista Paweł Mąciwoda hizo su equilibrado trabajo, y Mickey Dee fue el coloso habitual.
Lo que si me gustó es el imán que poseen a la hora de arrastrar a cierto público “menos metalero”, fans que les conocen por las canciones de éxito que suenan en las cadenas de radio convencionales. Es claro que “Winds of Change” y “Still Loving You” ayudaron para que mucha gente comprara la entrada para ver a SCORPIONS y gozaran.
El show fue muy parecido al que ofrecieron en Santa Coloma. Empezaron con un rápido y efectivo "Going Out With a Bang" para seguir la senda que ya recorren en cada concierto de esta gira.
En Viveiro si sacaron la proyección de la bandera española en las pantallas gigantes de fondo mientras tocaron la siguiente "Make It Real", uno de los temas más acertados del show, como también lo fue el popurrí de los temas de los 70´s, formado por "Top of the Bill", "Steamrock Fever", "Speedy’s Coming" y "Catch Your Train".
“The Zoo” sonó demasiado lento, tocaron dos instrumentales, -la habitual "Coast to Coast" y a nueva "Delicate Dance", donde Mathias fue protagonista-, no faltaron “Send Me An Angel” y “Winds of Change” y en el final “Still Loving You”.
“Blackout”, “Big City Nights” y “Rock You Like A Hurricaine” fueron junto al grandioso solo de batería de Dee y la versión de “Overkill” en recuerdo a Lemmy lo más destacado de un show, que estuvo bien, pero a mí me supo a poco.
Por lo visto, el público, en general, disfrutó a raudales. Me alegro muchísimo por ello.
Texto: Rafa Basa
Fotos: Juan Ramon Felipe Mateo
CROWBAR
Con la medianoche, y el cabeza del día tocando aún en el escenario principal, llegaba el momento de ver a Kirk Windstein y su gente no dejar títere con cabeza en los aledaños del DESERT STAGE.
Realmente no creo que el Main, para el que estos CROWBAR no son ningunos extraños, les robara mucho público aquel día. De hecho, la asistencia fue numerosa y constante durante todo su show, a pesar de que la mitad final se solapara también con el inicio de PARADISE LOST, que ahí alguno sí que podría tener más conflicto.
Aquella noche CROWBAR hizo vibrar el suelo como si sus riffs brotaran del propio terreno con su set habitual, el surtido de temas más aclamados durante su cuarto de siglo de existencia, largo. No esperábamos que hicieran el set del Roadburn, pero tampoco les hizo falta, temas como Conquering o All I Have (I Gave) hicieron las delicias de los forofos del combo desde el primero momento. The Cementery Angels o Walk With Knowledge Wisely siguieron aplicando una contundente dosis de distorsión, pegada y riffs arrastrantes que no te dejan más opción que moverte con sus mecidas.
Texto: Carlos Esteban
Fotos: Juan Ramon Felipe Mateo
PARADISE LOST
Lo de PARADISE LOST es bastante simple de resumir y me recuerda un poco a la historia de siempre con GHOST: o te gustan, o no te gustan, el término medio puede estar presente pero no creo que en demasía.
Personalmente es una banda que siempre he disfrutado mucho en directo y que en RESURRECTION FEST volvieron a plantarse en el escenario con una actuación realmente notable.
PARADISE LOST sonaron bien, en plena noche, con tonos rojos mayoritariamente y ofreciendo un show con gran participación de su trabajo Medusa. La voz de Nick sonó absorbente, perfecta para una noche como aquella, pero con un Gregor Mackintosh que volvió a hacerse con la batuta del miembro más sobresaliente de la banda.
De los temas que sonaron me gustó mucho ‘The Longest Winter’ con una interpretación genial de la banda, pero con Nick interpretando de manera excelente, transmitiendo con cada frase, evocando, llevando en volandas a un público que disfrutaba de un grupo cuya calidad es indiscutible.
Muy bueno el show de los ingleses que siempre son agradables de escuchar en directo para los que nos gusta el estilo que llevan PARADISE LOST.
Texto: Juanma García (Twitter) (Instagram)
Fotos: Álvaro Carlier
ANGELUS APATRIDA
Qué se puede decir ya que no se sepa sobre lo que supone un concierto de ANGELUS APATRIDA… La redundancia es doble si hablamos del RESURRECTION FEST. La historia de banda y festi están indiscutiblemente ligadas en su astronómico ascenso y una actuación suya aquí, es siempre sinónimo de éxito rotundo.
Ni se las veces que les he podido ver ya sobre los escenarios de Viveiro, pero siempre es gratificante ver cómo siguen creciendo y evolucionando, llegando día tras día a un público más extenso con puro y duro trabajo.
En esta ocasión, por fin los albaceteños pudieron gozar de un horario más privilegiado en este festival, o por lo menos más acorde con la jarana que preparan, exaltando aún más los ánimos con su concierto en el punto álgido de la segunda velada.
Cerraban el escenario principal, con un tiempo más holgado de lo habitual, y con un pepinazo debajo del brazo como es “Cabaret De La Guillotine”. Con todo esto y con la abrumadora asistencia que allí se convocó, demasiada para estar apurando la jornada, nada podía fallar. Temas nuevos como Sharpen The Guillotine, encajan a la perfección en su directo, pero me fascinó especialmente como sonó The Hume, implacable.
Sobresalientes, todos ellos. Guillermo como siempre muy participativo con un público completamente entregado y enajenado, disfrutando en incesantes pogos y circle pits. Por su parte, Adrián (IN MUTE) cumplió con honores tras los platos mientras Víctor termina su ‘fueron sucediendo hasta llegar a sus himnos predilectos, Give ‘Em War y You Are Next que ponen punto y final a un delirante concierto que nos mandó a todos en busca del apreciado descanso.
Texto: Carlos Esteban (@mapexvsmeinl)
Fotos: Juan Ramon Felipe Mateo – Juan_Ramon_Felipe@rafabasa.com
Para ver las fotos a mayor tamaño, pinchar sobre ellas.
Me temo que el cantante de Suffocation en Resurrection Fest, a pesar de que lo habían anunciado, no era el subversivo Frank Mullen