![]() |
Miercoles 6, Jueves 7, Viernes 8 y Sábado 9 de Junio 2018 – Norje – Suecia
Impresiones generales:
Ya de vuelta en España, es un lujo para quien estas líneas escribe, y un ejercicio casi de nostalgia, el contaros a todos cómo fue esta edición 2018 por tercer año (no consecutivo) del festival de rock escandinavo por antonomasia, y de paso la primera gran fecha del calendario de festivales veraniegos para ir abriendo el apetito, que a estas alturas de año se hace casi insaciable. Así, este año, el SWEDEN presentaba seguramente uno de los mejores carteles de los últimos años, y por qué no decirlo, uno de los más atractivos de toda Europa, aglutinando varios de los nombres más apetecibles del circuito este año como puedan ser IRON MAIDEN (primera vez en el SRF), OZZY o JUDAS PRIEST, y mezclándose también con un buen número de bandas realmente exclusivas, difíciles de ver en otro entorno, como YES, NAZARETH o ROSE TATTOO por citar tan sólo unos cuantos. Además, como en pasadas ediciones y más allá de un cartel plagado de grandes nombres, el festival volvió a ser un ejemplo a seguir para el resto, y una experiencia en sí por lo completo de sus instalaciones y por lo trabajado y avanzado de sus servicios, limpieza y seguridad.
Como novedad este año, y fruto del progresivo cambio que la nueva empresa propietaria (Live Nation) lleva dándole al festival por segundo año, el festival tuvo un incremento de asistencia con respecto al pasado año de 2000 personas por día, pasándose de las 33000 personas a las 35000, sin que el recinto del festival se ampliase significativamente. Esto, sumado a la inexplicable eliminación de una de las zonas de lavabos, fueron con diferencia los puntos negativos de la edición de este año, y sinceramente, me da un poco de miedo que el festival siga creciendo más y más. Se perdería la esencia de la cita, qué duda cabe… Con todo, y a pesar de que ya desde la jornada del jueves se notó enormemente la mayor afluencia desde las primeras horas, es justo destacar que el nuevo acceso, unificado y mucho más grande, evitó las colas y dentro del recinto, la verdad es que no hubo mayores problemas ni agobios más allá de ese mayor ambiente. Eso sí, a la hora de presenciar ciertos conciertos, se notó muy mucho que se hizo mucho más complicado encontrar un buen sitio sin estar con un mínimo de antelación, algo que en otras ediciones nunca fue un problema.
Añadir también, que el sonido en el Festival Stage (el grande) no fue bueno durante la jornada del Jueves, que encabezaban IRON MAIDEN, y que fue el primer año (que yo haya visto) en que se instalan separadores de público, no habiendo pasarela como en alguna otra edición, algo que fue una verdadera pena y que deslució algunos conciertos. Hablando de MAIDEN, por cierto, después nos hablará Carolina Cifuentes de cómo resultó su primera actuación en la historia del SWEDEN ROCK FESTIVAL, que lo fue. Así es, había estado ya Bruce en solitario, pero jamás habían estado IRON MAIDEN tocando en tan importante cita, lo que me sigue sorprendiendo…
Aparte, la edición de 2018 será recordada por el increíble tiempo anticiclónico que vivimos en el sur de Suecia durante toda la semana. Mientras en España no paraba de llover, allí bordeábamos los 30 grados y ni una sóla nube nos amenazó en las cuatro largas jornadas que disfrutamos en el län de Blekinge, algo absolutamente inusual y que tuvo como resultado un paisaje mucho menos verde que otros años. Por lo demás, la carpa Rockklassikker estrenó forma ovalada para evitar precisamente que el sol penetrase y así poder estrenar un puente de luces más vistoso, algo que agradecimos también por el tiempo, y el festival se volvió a caracterizar por contar con una oferta gastronómica variadísima, una limpieza en los servicios muy escrupulosa, y unos precios desorbitados para el poder adquisitivo medio español.
Jorge del Amo
Miércoles 6 de Junio 2018:
THREE DEAD FINGERS
El primer día de este festival, en esta ocasión con solo tres escenarios habilitados y menor cantidad de bandas, en su mayoría suecas, quienes arrancan a calentar los motores del festival.
En el “4Soundstage” justo a las 15:30 hs presenciamos a la banda sueca “THREE DEAD FINGERS” quienes se encargan de abrir el evento. Se trata de una banda compuesta por chicos entre los 12 y 13 años, reconocidos por su participación en el programa «Sweden got’s talent» y otros concursos de bandas, además de ya tener un álbum grabado, “Injustice”. Esta promesa del metal sueco nos deja gratamente sorprendidos con su estilo thrash/heavy cercano a la vieja escuela, que con su calidad musical y energía pusieron al público en movimiento.
Carolina Cifuentes
NATIONAL DAY CELEBRATION FT. ASTRAL DOORS/ BRIAN DOWNEY’S ALIVE & DANGEROUS
Después de la apertura con THREE DEAD FINGERS, jovencísima banda local compuesta por niños, y la clásica ceremonia de 20 minutos en celebración del día nacional de Suecia, este año de la mano de ASTRAL DOORS (que interpretaron un par de temas), apetecía y mucho presenciar la propuesta del mítico batería original de THIN LIZZY Brian Downey, interpretando (suponíamos) temas clásicos de la banda irlandesa.
Así fue, y mucho me temo que ni un setlist tan ganador como el que la banda puso en liza fue suficiente para engancharnos a un concierto en general flojo, sin gas, falto de carisma y de la fuerza que temas como “Jailbreak”, con la que empezaron, “Are You Ready” o “Emerald” atesoran. El batería, rodeado de dos contrastados guitarristas como Brian Grace y Phil Edgar, y con Matt Wilson al bajo y voces, fue incapaz de transmitir con su banda esa electricidad que despiden temas que son historia del rock, y no pudo escapar al constante sentimiento de “provecho” al intentar exprimirlos de un modo creo que injusto y contraproducente para los mismos. Ni el evidente parecido físico de Matt con Phil Lynott, ni su decente interpretación, pudieron paliar una falta de ganas, o de química en definitiva, que hicieron de su concierto algo plomizo. Para cuando llegó “Still In Love With You” pusimos rumbo a la carpa para que F.K.U. Nos pusieran las pilas…
Jorge del Amo
F.K.U.
La formación thrasher de Uppsala presentaba nuevo trabajo de estudio, un “1981” con el que el pasado año celebraban su 30 aniversario con la irregularidad que les caracteriza, y también con la calidad a la que nos tienen acostumbrados.
En casa, con una carpa que era un idílico oasis en el que resguardarse de la que caía fuera, el grupo se vino arriba para dar un concierto más que serio, todavía sin mucha gente eso sí, pero sonando enormemente compactos y asesinos provocando incluso algunos ‘moshpits’ y mucha fiesta a la que se iba uniendo cada vez más gente, con un Larry Lethal descomunal y un grupo entregadísimo. Abrieron con “1981”, siguiendo con un “Hell Night” sencillamente matador con la que fueron enlazando y alternando temas más clásicos, con cortes de su último LP, que repasaron en profundidad. Mención especial para himnos como “Corpse Mania”, “Where Moshers Dwell” o “Maniac”, que nos pusieron las pilas de lo lindo en mitad de una primera tarde que iba de menos a mas.
Jorge del Amo
NOCTURNAL RITES
A las 19:45hs en el “4Sound Stage” llega el turno de ver a NOCTURNAL RITES, banda sueca de sonido clásico Power Metal, donde la guitarra de Per Nilsson y la voz de Jonny Lindqvist se roban el protagonismo, dándole color y carácter a este quinteto.
Algunos de los temas que escuchamos fueron “Before we waste day”, “After life”, “Never again”, “Shadow land” y cierran con “»The fools never die».
Un show que honestamente le faltó algo de energía, aunque una pequeña parte del público logró estar animada, sin embargo, les faltó algo de esa chispa que logra sorprender a quienes los veían por primera vez.
Carolina Cifuentes
BULLET
Viene el turno de BULLET, una de las bandas esperadas y la encargada de cerrar el primer día de festival a las 23:30 hs. Con la noche nórdica acompañándonos y algo de frio, BULLET enciende el fuego “literalmente” sobre el escenario y en el público asistente al iniciar con el tema “Speed and Attack”, un juego de pirotecnia, luces y su energía demoledora.
Esta banda sueca de heavy metal liderada por Hampus Klang dio lo mejor de sí en un espectáculo inolvidable con temas como “Wildfire”, “Storm of blades”, “Stay wild”, “Fuel the fire”, “Highway love”, “Dust of gold”, entre otras para cerrar con “Bite the bullet”.
Sin duda un cierre con broche de oro, tanto que nos hizo olvidar del frío de Norje y terminar el primer día de festival con una sonrisa. BULLET con su excelente despliegue musical y la particular voz de Dag Hell Hofer brindó un gran espectáculo, sumándole las luces, el fuego, y hasta pompas de jabón.
Carolina Cifuentes
THE QUIREBOYS
A las 21H en punto daba comienzo la que iba a ser la traca de bienvenida de la edición 2018, primero con unos THE QUIREBOYS muy, pero que muy queridos en Suecia, y después con unos HARDCORE SUPERSTAR a quienes también había plenitud de ganas de ver, aunque de ello hablaremos después.
En lo que respecta a la formación de Spike, hay que destacar que ya desde que se supieron los horarios, y que la formación inglesa encabezaría la jornada del miércoles, era obvio que la fiesta iba a ser mayúscula con el atardecer gustándose en el horizonte sueco, con el sol bajando y la cerveza subiendo, como las ganas de buen ‘hard rock’ y de clásicos. THE QUIREBOYS son una de las bandas de rock más infravaloradas de la década de los 90’s, y seguramente de haberse fundado en los E.E.U.U. en lugar de en el Reino Unido, cinco años antes, su suerte hubiese sido muy diferente. Cada vez que tengo ocasión de verles en directo me convenzo más de ello, y en la jornada del miércoles todos lo volvimos a refrendar. Están a otro nivel, y tienen cuerda para rato. Su concierto fue una fiesta de principio a fin, una lección de perfección escénica, de ‘feeling’, de experiencia y de buen gusto con un Spike más centrado que nunca, cantando increíblemente bien, con esa voz que cada día está más rota y cada día nos gusta más.
Sin telón de fondo, con un Spike todavía escayolado tras su última gira, pero que no paró de acá para allá en la hora y cuarto que la banda estuvo en escena, el grupo dio espectáculo de lo lindo ante un público sueco más entregado de lo normal, mientras el grupo repartía clásicos y fiesta a diestro y siniestro. “There She Goes Again”, la inicial “Too Much Of A Good Thing”, o “Hey You” (por supuesto…), fueron lo más bailado, dando ésta última lugar a un final de ensueño con temas que no fallan como “Sweet Mary Ann”, “7 O’Clock” y la final “Sex Party”, redondearon un alarde de esfuerzo, sonorización perfecta y buenas vibraciones que se hacen tan especiales en el SWEDEN ROCK FESTIVAL…
Jorge del Amo
Setlist THE QUIREBOYS:
- Too Much of a Good Thing
- Misled
- Going Down (versión Freddie King)
- There She Goes Again
- Gracie B
- Leaving Trunk (versión Taj Mahal)
- Mona Lisa Smiled
- This Is Rock ‘n’ Roll
- Hello
- I Don’t Love You Anymore
- Tramps and Thieves
- Hey You
- Sweet Mary Ann
- 7 O’Clock
- Sex Party
HARDCORE SUPERSTAR
A la altura de THE QUIREBOYS en la jornada del miércoles encontrábamos a HARDCORE SUPERSTAR, quienes además eran los encargados de cerrar el primer día con la fiesta en todo lo alto, después de un tiempo de ausencia en la gran cita sueca. Todavía sin nuevo trabajo de estudio, la formación de Gotheborg ha vuelto a los directos con nueva imagen, a la espera de que “You Can’t Kill My Rock N’ Roll” salga en algún momento de este año; una puesta en escena bastante simplista con un gigante telón con su nuevo logo (un poco soso, para mi gusto…), dos enormes muros de Marshalls y dos cruces a ambos lados para dar imagen a un show en el que primó la actitud de un grupo muy enchufado desde el minuto 1, un enorme sonido, pero sobre todo un público nuevamente entregadísimo que se notó que llevaba(mos) tiempo esperando volver…
El comienzo con “Kick On The Upper Class” fue como un cohete, con ‘Jocke’ hiperactivo de un lado a otro, cantando bien, y un sonido muy apoyado en las guitarras de Vic Zino, quien después hacia el final se cantaría a ritmo de balada junto con ‘Jocke’ el “Someone Special”. “Electric Rider” vino después, y nos hizo cantar de lo lindo. Sonaron inconmensurables “Sadistic Girls”, “Wild Boys”, “Last Call For Alcohol”, “Bring The House Down”… y un largo etcétera gracias a un cuarteto que salió a matar, y al que le funcionaba absolutamente todo para subir la temperatura de su show. En realidad, creo que era el momento y lugar para que HARDCORE SUPERSTAR se salieran. Nada podía salir mal. La tripleta final con “Moonshine”, “We Don’t Celebrate Sundays” y “Above The Law” fueron las gotas que desbordaron el vaso del primer día. No podíamos esperar a que saliese de nuevo el sol para lo que se nos venía en la segunda jornada…
Jorge del Amo
Jueves 7 de Junio 2018:
CRAZY LIXX
Comenzamos con CRAZY LIXX a las 11:30 hs en el escenario del “4Sound stage” bajo el calor de un prometedor día de verano. La banda nacida en el 2002 en Malmö, Suecia, suena al mejor estilo del Hard Rock y Glam de los 80.
Canciones como “Wild child”, “Hell rising woman”, “XIII”, “Children of the cross” entre otras, dejan su magia en el escenario y la sensación de ver una muy buena banda para muchos por primera vez.
Carolina Cifuentes
DARK TRANQUILLITY
El Jueves comenzábamos el atracón de buenas bandas con unos DARK TRANQUILLITY a los que personalmente hacía un tiempo que no veía en directo, y a los que siempre respetaré enormemente por lo honesta de su trayectoria y evolución musical.
En casa, en Suecia, vimos a una banda crecida, a un Michael Stanne más feliz aún que de costumbre, y a un grupo bien engrasado, pero al que le faltó algo de profundidad y matices en su sonorización, que no fue del todo buena para la amalgama de contrastes de la que hacen gala sus últimos discos.
La gente no obstante respondió, y el suyo fue un concierto muy voluntarioso, más que digno, en el que la gente disfrutó con un set muy “tipo”, quizás demasiado, y es que la banda debería revisarlo porque se les está estancando un poco.
Jorge del Amo
BATTLE BEAST
Son las 12:00hs y el sol no tiene compasión en el escenario del “SwedenStage”, lo cual no es inconveniente para ver a BATTLE BEAST.
Esta banda finlandesa es un despliegue de gran potencia y gran puesta en escena, donde su vocalista Noora Louhimo brilla con luz propia. Dentro de su repertorio pudimos disfrutar de canciones como “Straight to the heart”, “Bringer of pain”, “Black ninja”, “Touch in the nigth”, “Bastard son of Odin”, “King for a day”, entre otras, para cierrar con “Beyond the burning skies”.
Esta banda de heavy/power metal logró gran empatía con el público y su actuación fue destacable.
Para mí fue un honor verlos por primera vez en este festival y estoy segura de que su actuación seguirá capturando más fans donde quiera que vayan.
Carolina Cifuentes
BUCKCHERRY
La banda de Josh Todd fue la primera en atacar el Festival Stage, y la primera en sufrir los problemas de sonido que principalmente se dieron en la jornada del Jueves. A la 1 de la tarde el sol caía a plomo, aunque la temperatura era bastante agradable, y BUCKCHERRY se nos presentaban como una excusa inmejorable para empezar a combatir el lorenzo con cerveza y rock n`roll californiano frente a una banda a la que siempre apetece ver.
Según nos acercábamos al escenario, con “Ridin’” primero y con “Fall” después, nos íbamos dando cuenta de que el sonido desde lejos se diluía una barbaridad, y no fue hasta que ocupamos las primeras filas hasta que las guitarras sonaban a guitarras y a Todd se le escuchaba, algo que, no me cansaré de decirlo, es muy extraño en el SWEDEN.
Sea como fuere, el grupo lo dejó todo sobre el escenario para dar fiesta y buen rock en el corto espacio de tiempo de que dispusieron, tirando de clásicos como “Slamin’”, que completó el exhuberante inicio tirando del “Time Bomb”, “Say Fuck It” o “Lit Up”, con una primera parte del concierto tirando mucho de fondo de armario y una segunda más centrada el lo más reciente. Buen concierto y buena forma la del grupo angelino.
Jorge del Amo
NAZARETH
En el “SwedenStage” y siendo las 14:15hs ya contábamos con un importante aforo de público, era NAZARETH quien nos convocaba. Esta banda no necesita mucha presentación debido a su amplio reconocimiento y por ser considerada una de las clásicas dentro del hardrock.
Nacida a finales de los 60, NAZARETH fue fundada por Pete Agnew en el bajo, quien actualmente es el único miembro original que se conserva. En esta alineación encontramos a su hijo Lee Agnew en la batería, en la guitarra a Jimmy Murrison y en la voz a Carl Sentece ex integrante de Accept. Este cuarteto dejó lo mejor de sí en el escenario y gran emoción en quienes pudimos verlos.
Canciones como “This flight tonight”, “My white bycicle”, “Hair of the dog”, “Razamanaz”, las baladas “Love hurts” y “Dream on” movieron las fibras de nuestros corazones para cerrar con el cover de Bonnie Dobson, “Morning Dew”.
NAZARETH sin duda dejó feliz a su público, y fue parte de la muestra de un día con grandes bandas.
Carolina Cifuentes
GLENN HUGHES
En el escenario principal, “FestivalStage”, a las 15:30hs inicia uno de los más alucinantes shows que pudiéramos presenciar, GLEEN HUGHES, personalmente uno de los artistas más esperados en este día, y quien se mantendría en la memoria como una de las mejores presentaciones del festival fuera de las cabezas de cartel.
Su presentación está caracterizada por la gran pasión de este músico al cantar y tocar el bajo, y el estar acompañado por excelentes músicos. Su repertorio estuvo conformado por canciones de DEEP PURPLE, “Stormbringer”, “Might Just Take Your Life”, “Sail Away”, “Mistreated”, “You Keep on Moving”, “Smoke on the Water”, “Highway Star” y cierra con “Burn”.
Al final GLEEN HUGHES deja al público recargado de energía gracias a su mensaje de amor y libertad, se despide mencionando que se encuentra feliz por estar allí dejando muchos sentimientos flotando en el aire. El público lo ovaciona reiteradamente, y no es para menos, dio lo mejor de sí en este show.
Carolina Cifuentes
KILLSWITCH ENGAGE
KSE es una de esas bandas que todavía uno no se acostumbra de ver en un festival como el SWEDEN pero que, aun así, tienen su público y su cuota de interés más que justificada. El público de la cita sueca es cada vez se ve más rejuvenecido, por eso no era de extrañar la expectación que la banda americana generó en el Rock Stage a tan temprana hora. Empezaban con “Strenght Of The Mind”, con un Adam Dutkiewicz desatado, bien secundado por un Joel Stroetzel que incluso se mostró más protagonista que en cualquiera de las últimas ocasiones en que pude disfrutar del directo de la banda de Massachussets.
Su set, algo corto para lo que nos tienen acostumbrado, fue una suerte de ‘greatest hits’ bastante equitativo, algo así como una mini ‘masterclass’ de lo que suelen ser KILLSWITCH, con un sonido realmente potente y convincente, donde quizás eché un poco de menos más participación de Jesse Leach, a quien vi algo dubitativo aunque cantando bien. Cayeron y funcionaron temas como “Hate By Design”, “Always”, la sensacional “The End Of Heartache” o “In Due Time”, antes de cerrar con un “Holy Diver” que a muchos sorprendió.
Jorge del Amo
ROSE TATTOO
En lo personal, la de ‘Angry’ Anderson era una de las bandas que más ganas tenía de ver ya no sólo durante el Jueves, sino de todo el cartel de esta edición 2018. Hacía 12 años de la última vez, y sinceramente no sabía muy bien qué esperar de esta carismática banda australiana.
Eso sí, aparte de más de una década, poco más ha ocurrido desde aquella vez en Wacken en 2006, puesto que la banda sigue teniendo aquel gran “Blood Brothers” como último referente discográfico, y es que ROSE TATTOO nunca ha sido una banda demasiado productiva en ese sentido que digamos. Sin embargo, su directo siempre ha sido un sobresaliente, y el SWEDEN fue testigo de uno de los mejores gracias a ellos en la tarde de Jueves.
Buen sonido, ahora sí, y pura actitud y macarrismo, fueron las claves de un show no de sobresaliente, sino de matrícula de honor, donde la banda sacó la artillería pesada y tiró de clásicos para meterse en el bolsillo a un público muy receptivo a cada grito de ‘Angry’, a cada ‘slide’ de Dai Pitchard, a cada ‘riff’ de un Bob Spencer realmente integrado en esta versión de ROSE TATTOO que funciona tan bien que, esperemos, sea la que grabe el nuevo disco. Temas como la inicial “One Of The Boys”, “Man About Town”, la siempre gloriosa “Rock N’ Roll Outlaw”, “Bad Boy For Love” o la efectiva dupla final con “We Can’t Be Beaten” y la obligada “Nice Boys” no necesitan presentación de tipo alguno, pero me gusta que continúen acordándose de temas de su último “Blood Brothers” porque sigue siendo un excepcional trabajo de rock. En definitiva, de lo mejor del día. Una alegría espectacular ver a la veterana banda en tan buena forma.
Jorge del Amo
HELLOWEEN
Llega el turno de mi banda favorita, HELLOWEEN, en el “SwedenStage” mucho antes de las 19:40hs ya estábamos en primera fila. El show fue increíble. Se trataba de una versión resumida del “Pumkins United Tour”, por cierto, muy acertada. Esta vez los temas más largos fueron acortados, no estuvieron las baladas, ni las imágenes de los personajes Seth y Doc. La magia de ver a sus tres vocalistas históricos, Kai Hansen, Michael Kiske y Andi Deris se repitió.
La gran apertura comienza con “Halloween”, al fondo vemos una enorme pantalla e imágenes alusivas a este tema, Kiske comienza cantando y le acompaña Deris, es un tema a dúo, los tres guitarristas Weikath, Gerstner y Hansen sumados Markus Grosskopf en el bajo permanecen al frente, mientras la batería retumba con la potencia de Dani Löble. Sigue la emoción con “Doctor Stein”, en esta ocasión canta Kiske principalmente y Deris acompaña, las imágenes del lunático Doctor las podemos apreciar de fondo y la alegría del público se extiende en el espacio con sus coros.
Es el turno de Kiske sin el acompañamiento de Deris para cantar “I’m Alive” todo un himno que nos recuerda grandes tiempos de HELLOWEEN. Sigue “Waiting for the thunder” para dar paso al ovacionado popurrí de Kai Hansen con cuatro temas del “Walls of Jericho” que no podían faltar: “Starlight, Ride the Sky, Judas, y Heavy Metal (Is the Law)”.
En “Little time” los protagonistas fueron Kiske y Hansen, de fondo en la pantalla un ejército de calabazas marchaba al tic-tac de relojes. Es el turno de Andi Deris, este fabuloso frontman comienza a animar el público para dar inicio a “If I could fly”, seguir con “Power”, y “How many tears”.
Continuamos con dos clásicos “Eagle fly free” y “Keeper of the seven keys” (acortada), ambas cantadas por Kiske, durante un coro multitudinario en “Kepper” Andi presenta la banda que es ovacionada.
Viene el momento del “encore” donde hay un espacio para el solo de guitarra de Kai Hansen, donde también participa Sasha Gerstner. Es hora de la infaltable “Future World”, donde se escucha al público coreando, en el escenario los hombres de las cuerdas se roban la atención, y Kiske que mantiene con un buen nivel en la voz.
Es momento del cierre y una fiesta estalla con “I want out”, cantan Kiske y Deris, el resto de la banda lo entrega todo, los globos y una lluvia de papelitos de colores blanco y naranja hacen que una vez más este “Pumkins United” haga desbordar al público de alegría.
Definitivamente uno de los mejores shows de 2017 se repite pero esta vez en tierras nórdicas, donde la pasión por las “calabazas unidas” es la misma, podemos apreciar la entrega total de la banda y el público. Nuevamente este show es memorable.
Carolina Cifuentes
Setlist HELLOWEEN:
- Halloween
- Dr. Stein
- I’m Alive
- Waiting for the Thunder
- Starlight / Ride the Sky / Judas / Heavy Metal (Is the Law)
- A Little Time
- If I Could Fly
- Power
- How Many Tears
- Invitation
- Eagle Fly Free
- Keeper of the Seven Keys
- Solo Kai Hansen (bis)
- Future World (bis)
- I Want Out (bis)
IRON MAIDEN
Llegan las 21:30hs y con ellas la cabeza de cartel de este día, IRON MAIDEN. La Doncella esta vez nos dejaría además de felices, gratamente sorprendidos. Y no es para menos, en esta ocasión estamos frente una obra musical de corte teatral, no solo por el escenario que fue alucinante, prolífico en efectos y cambios, sino por la presentación de Bruce Dickinson, su vestuario, sus gestos, su dramatismo y su versatilidad.
El set list resulta exquisito, inicia con el tradicional “Doctor, doctor” de UFO. Luego un inmenso avión de la Segunda Guerra Mundial sale con las primeras notas de “Aces high”, unos segundos después emerge la banda y Bruce Dickinson con atuendo de aviador de la época, y así este sexteto descarga toda su potencia.
Las luces se apagan y el escenario se transforma, sonidos de disparos, bombas y una angustiosa voz en la batalla son el preludio para “Where Eagles Dare”.
Aparece un nuevo telón de fondo y cambia el atuendo de Bruce para dar paso al clásico “Two Minutes to Midnight”, esta vez tenemos a los caballeros de las cuerdas y al frontman interactuando con el público muy de cerca.
Sigue una agradable sorpresa, “The Clansman”, a lo largo de la canción el público coreaba con entusiasmo la palabra “freedom”, la cual retumbaba y danzaba en el viento nórdico. Sigue “The Trooper”, sale un enorme Eddie mecánico como soldado de la caballería inglesa de la batalla de Balaklava quien se debate a duelo de espada con Bruce Dickinson, en esta ocasión las banderas que se ondean son la sueca y al final la inglesa.
Con el atardecer como testigo viene otro clásico, “Revelations”, el cambio del escenario es asombroso, los palaciegos vitrales y lámparas del “Legacy tour of the Beast” se instalan para quedarse.
Suenan las primeras notas de “For the Greater Good of God” en el bajo de Harris, y un asombroso juego de luces nos maravillan con este tema del álbum “A Matter of Life and Death”. Pese a que el cielo está ya algo oscuro y nos recuerda que viene la fría noche “The Wicker Man” hace que la audiencia suba la temperatura al cantar el estribillo.
Viene un cambio de telón, tenues luces y una cruz luminosa dan paso a «Sign of the Cross”, el fuego en el escenario, la pirotecnia, Bruce con una amplia capa y la profundidad de su voz hacen que este tema tenga una buena dosis de dramatismo.
Con “Flight of Icarus” el asombro nos embarga, el personaje de este mito fue representado por un gigante hombre alado y mucho fuego alrededor. Un himno continua “Fear of the dark”, para el cual Dickinson lleva una máscara y un atuendo especial, la energía de la banda sumada a los coros del público hacen de este tema un momento fascinante. Para seguir con la emoción a flor de piel continúa «The Number of the Beast” con un escenario rico en fuego, luces y mucho dinamismo.
Otro tema que no puede faltar, “Iron Maiden”, a mitad de la canción sale la enorme cabeza del Eddie cornudo de esta gira, el público extasiado ovaciona la banda. Llega el “Encore”, Nicko McBrain lanza algunas baquetas, y el espectáculo continúa con “The Evil That Men Do”. Sigue “Hallowed Be Thy Name”, Bruce tras unos barrotes comienza a cantar y el público le sigue, la emoción no cesa.
El gran cierre se da con “Run to the Hills”, cabalgando en el escenario y animando a la asistencia Bruce hace de las suyas, en definitiva estábamos frente a un espectáculo sin igual.
Así termina un alucinante show, en donde el dinamismo de la banda, el fuego, la pirotecnia, el escenario, los telones, los efectos y los grandes temas de la Doncella hicieron de este un concierto que recomiendo puedan repetir en cada uno de sus países. “The legacy of the beast tour” es simplemente maravilloso, sorprendente, sin duda, lleno de detalles que se escapan si solo se ve una vez, vale la pena repetir.
Carolina Cifuentes
Setlist IRON MAIDEN:
- Intro/ Doctor Doctor (UFO)
- Churchill’s Speech
- Aces High
- Where Eagles Dare
- 2 Minutes to Midnight
- The Clansman
- The Trooper
- Revelations
- For the Greater Good of God
- The Wicker Man
- Sign of the Cross
- Flight of Icarus
- Fear of the Dark
- The Number of the Beast
- Iron Maiden
- The Evil That Men Do (bis)
- Hallowed Be Thy Name (bis)
- Run to the Hills (bis)
- Outro Always Look on the Bright Side of Life (Monty Python)
KREATOR
Para terminar este segundo día de festival faltaba la cuota brutal y demoledora, de esto se encargó KREATOR.
Fue un show para terminar sin aliento, lleno de fuerza, fuego, imágenes en una enorme pantalla, lluvia de papeles, la cabeza de su mascota “Violent Mind”, y algunos de los mejores temas de esta poderosa banda de thrash alemán como: “Phantom Antichrist”, “Enemy of God”, “Satan is Real”, “People of the Lie”, “Gods of Violence”, “Total Death”, “From Flood into Fire”, “Hordes of Chaos”, “Violent Revolution”, “Totalitarian Terror”, “Fallen Brother”, “Betrayer” y para cerrar una canción icono de esta banda, “Pleasure to kill”.
Sin mencionar todo el set list, puedo decir que no faltaron temas para dejar de corear y que el público se desbordara con la poderosa descarga de energía de esta banda.
Así cierra el segundo día con el agotamiento de una larga jornada que solo deja felicidad y la satisfacción de varios shows sin precedentes.
Carolina Cifuentes
H.E.A.T
Después del gran concierto de la doncella, las riadas de gente enfilando la salida nos hicieron llegar como salmones a contracorriente hasta el Sweden Stage, donde H.E.A.T profetizaban en su tierra a golpe de “Late Night Lady”. Tras el cabeza de cartel, la banda de Erik Grönwall era una de las más deseadas con nuevo trabajo bajo el brazo, siendo el del Sweden además uno de los públicos más propicios para que la fiesta se desate y más a esas horas.
Hay que decir que no ha sido el mejor concierto que le he podido ver a la todavía joven banda sueca, y que tras su último “Into The Great Unknown” (2017) vislumbro un pequeño bache en el meteórico ascenso del grupo, pero que aun así, me gustó ver a una banda un poco menos desatada y más sobria que otras veces, con un Grönwall contemporizando más con su voz, una banda más elegante que mezcló en su repertorio su citado último disco con “Tearing Down The Walls”, que sigue siendo su gran disco y lo será por pocos o muchos años que hayan pasado.
Muy disfrutables particularmente el medley que se marcó el grupo, primero “Beg, Beg, Beg”, entre medias con con “Whole Lotta Love”, y despues con “Piece Of My Heart”.
La banda al final iba terminando con un “Living On The Run” que les quedó un poco larga, con el vocalista bajando a cantar al público, tanto que cuando fueron a cerrar con “A Shot At Redemption” la organización les cortó de súbito el sonido, algo que no les sentó nada bien, y que es también bastante extraño. COVEN comenzaban en el 4Sound…
Jorge del Amo
COVEN
Poder ver a COVEN cerrar la primera jornada completa del SWEDEN ROCK FESTIVAL fue un lujo de esos que uno no se espera, y que difícilmente puede encajarle a todo el mundo. El día había sido largo, y quizás por eso la afluencia de gente en el 4Sound Stage dejó bastante que desear para cuando el sinuoso telón que recortaba sus sombras caía al suelo dejando ver un sencillo escenario, vestido de candelabros, que se resquebrajaba con “Out Of Luck” primero, y después con la cátedra de “Black Sabbath”.
La presencia de ‘Jinx’ Dawson, así como de Milo Kovacevic y compañía, ataviados con túnicas, resultó de lo más evocadora, totalmente acorde con una propuesta que en todo recordó a un glorioso aquelarre. La banda estuvo soberbia, y los que aguantamos hasta el final tuvimos la suerte de disfrutar de un conciertazo de rock “setentero” como no hubo otro en el festival, con momentos épicos como cualquiera de los temas de “Witchcraft Destroys Minds…”, que se tocaron casi al completo.
Pura magia, aun cuando la voz de Jinx se ha agravado con los años (tiene 68 años ya…). Su concierto fue en líneas generales prácticamente perfecto, austero, pero plagado de calidad, de solos clavados, de pura psicodelia… una pena que, al igual que H.E.A.T, tiempo se les echase encima y el “Epitaph” les quedase a la mitad por el corte del sonido. Pasaban ya la 1.30H, y nos marchábamos a la cama absolutamente embrujados…
Jorge del Amo
Viernes 8 de Junio:
VIXEN
Tal vez el día más caluroso de este festival, que inicia muy temprano, y donde el cartel apunta a bandas clásicas y legendarias.
En el “Rockstage” a las 12:00hs estábamos listos para ver a VIXEN, la banda norteamericana de chicas que en los 80 revolucionó la historia del Hard Rock.
Verlas tan cerca, bien conservadas y con toda la potencia de su música fue revivir parte de la leyenda y de la historia personal, por lo tanto, un encuentro nostálgico y nunca antes imaginado.
Canciones como “How much love”, “One night alone”, “Crying”, “Love is a killer”, y “Edge of a broken heart” dejaron en el público total satisfacción y muchas ovaciones a la banda.
Carolina Cifuentes
FOCUS/ ROCKKLASSIKER ALLSTARS
La jornada del viernes comenzaba un poco como terminaba la del jueves, con una auténtica leyenda del rock de los 70`s, puro culto, con unos FOCUS que eran ‘a priori’ un caramelo de esos a saborear, eso sí, a pleno sol y con las temperaturas más altas seguramente de todo el festival.
Al contrario que con COVEN, la banda de Thijs van Leer ofreció un concierto quizás demasiado estático, demasiado monótono en algunas fases, muy técnico, casi como si de una ‘masterclass’ se tratase, lo que personalmente no me terminó de enganchar.
Hace años que he seguido y admirado trabajos como “In And Out Of Focus” o “Moving Waves”, pero reconozco que no me parecieron en absoluto una banda de directo, o al menos no de festival. Tanto fue así, que decidimos movernos hacia la carpa, donde la ya tradicional banda de músicos ‘all star’ se lucía con un medley descomunal de DEEP PURPLE con Mats Levén a las voces hacia la parte final de su show…
Jorge del Amo
GRAVEYARD
Con su nuevo “Peace” todavía caliente, GRAVEYARD regresaban al SWEDEN después de su fugaz separación con el cartel de favoritos en una tarde que nos iba recordando poco a poco, a base de calor, que el príncipe de la oscuridad se acercaba. Vale que su último no es, ni de lejos, su mejor trabajo, pero hace tiempo que encuentro en los directos de la banda sueca un declive de energía importante con el que, para nuestra desgracia, nos topamos de bruces en el Rock Stage.
La banda comenzaba con “Slow Motion Countdown”, algo que llevan algunos años haciendo, y que me sigue llamando la atención como el primer día; un tema muy lento y ‘bluesy’ que desde luego no parece la mejor opción para comenzar con energía un concierto. Es igual, es una verdadera pasada de canción. El caso es que, una vez más, Joakim se empeñó en hacer una interpretación libre de sus temas, cambiándoles el tempo, volviéndolos a menudo plomizos, y eso nos descolocó y nos hizo muy complicado meternos en ellos, algo que ya sucedió en su última ocasión en Madrid, por cierto.
Nada que objetar en un ‘set’ ecuánime y más que decente, así como en un sonido solvente e incluso en la voz del propio Nilsson, que elige cuidadosamente el orden de los temas para descansar cuando toca, que falta le hace. Sea como fuere, temas como “Hisingen Blues”, “An Industry Of Murder” o “Ain’t Fit To Live Here” tampoco consiguieron volvernos locos como en otras ocasiones, por lo anteriormente comentado: costó mucho seguirlos y meterse de lleno en un concierto algo descafeinado, titubeante, que dejó buenos ratos pero otros de ‘blues’ divagante y de melodías y tempos vocales cambiados, que para mí estropearon temas geniales…
Jorge del Amo
MADAM X
Siguiendo por el corte clásico llega el turno de MADAM X, en el “SwedenStage” bajo el abrasador calor de las 14:45 hs, llegamos expectantes a un show que dejó la sensación de que faltó un poco más para dar.
Algunas de las canciones presentadas fueron “Metal in my veins”, “Resurrection”, “Hello Sweden”, “Monstrocity”, “Dirty girls”, “Stand up and fight” y cierran con “High in high school” tema con fuerza dentro de un show de altibajos, donde también faltó más vivacidad del público, tal vez el calor fue demasiado aplastante.
Carolina Cifuentes
THE DARKNESS/ BERNIE TORMÉ
Mientras esperábamos a que en la carpa apareciese Bernie Tormé y su banda, el Festival Stage recibía a unos THE DARKNESS que desde hace más o menos un año me llaman más y más la atención en el apartado del directo. Pueden gustar más o menos, ahí no se puede entrar, pero la realidad es que la británica es una banda que si tiene el día da espectáculo asegurado, y eso vivimos durante 30 minutos en un Festival Stage que rugía rock de lo lindo, y que se quedaba algo grande para la banda de los hermanos Hawkins, que compensaron con un aplomo importante y tres carretillas de arrestos.
Abrieron con “Solid Gold”, para continuar después con “Growing On Me” y dos auténticos temazos como “Black Shuck” y “One Way Ticket”, con Justin quitándose ropa y la gente disfrutando de lo lindo a pesar de la distancia entre público (no demasiado) y músicos, que lo hizo todo un poco más frío. Era momento de movernos hacia la carpa, que presentaba un muy buen aspecto supongo que gracias a la solana que caía fuera, para ver a un clásico como Bernie Tormé (ex- OZZY, Ian Gillian) junto a su banda rockear de lo lindo, en un concierto corto pero sobrado de buen gusto, interpretando temas de su carrera como “Dublin Cowboy”, “Blood Run Cold” o “Hair Of The Dog, que no podía faltar…
Jorge del Amo
URIAH HEEP
El Sweden Stage acogía a primera hora de la tarde una de las bandas más apetecibles de todo el cartel, y como tal congregó seguramente la mayor concentración de gente que hasta el momento se había dado en esta edición 2018. Se notaba que la gente ya iba preparándose para OZZY, pero también que URIAH HEEP es una banda enormemente querida en Suecia como pudimos comprobar el año pasado con LUCIFER’S FRIEND, una banda grande, en definitiva. Lo que es.
Frente a un telón con el logo del grupo, sin demasiadas florituras, la banda inglesa ofreció seguramente el mejor concierto del día, y uno de los mejores de este año, una demostración de ganas y experiencia entremezcladas, de profesionalidad y de saber estar sin parangón que, como decía, nos arregló la tarde y el día, y nos puso las pilas para lo que quedaba de festival. Nunca he visto a URIAH HEEP defraudar, pero tampoco recuerdo haberles visto nunca tan sobrados de vitalidad, transmitiendo tanto, y tan perfectos a todos los niveles.
Abrieron con “Gypsy”, seguida de “Look At Yourself”, un inicio soñado que trajo consigo un repertorio sin concesiones, conscientes del poco espacio de que disponían. Así, clásico tras clásico, sólo hubo lugar para un “The Magician’s Birthday” nada habitual, que han rescatado para esta gira después de más de una década sin tocar en directo, y un himno detrás de otro para terminar enlazando al final la majestuosa “July Morning”, “Lady In Black” y “Easy Livin’”.
Apabullante el estado vocal de Bernie Shaw, como no menos chocante resultó la maestría con la que Mick Box defendio sus temas de toda la vida. El “abc” de lo que es URIAH HEEP…
Jorge del Amo
PESTILENCE
Después de aprovechar el concierto de Corey Taylor y sus STONE SOUR para picar algo e ir reponiendo fuerzas (el tercer día es el que más pesa… no me preguntéis por qué…), acudimos a la siempre apetecible carpa Rockklassiker huyendo del sol para encontrarnos con uno de los pocos conciertos de ‘death metal’ de que disfrutamos este año en la meca del rock en Suecia, unos PESTILENCE que sonaron todavía mejor que F.K.Ü el primer día y que, al contrario de lo que muchos pensábamos hace años con la reunificación, continúan adelante y a un nivel estratosférico.
Abrían con “Non Physical Existent”, el único tema que creo recordar tocaron de su último y devastador “Hadeon”, y de ahí en adelante la banda de Patrick Mameli provocó una verdadera escabechina de ‘moshpit’ y temazos de sus primeros cuatro trabajos, particularmente de “Testimony Of The Ancients”, del que dieron buena cuenta.
Mola mucho comprobar que la gente se sigue acordando de aquellos discos, y que sigue al mismo tiempo al lado de una banda que nunca estuvo en la primera fila, pero que es de lo más interesante que siempre ha habido en Europa en el género. Conciertazo de los neerlandeses.
Jorge del Amo
BARONESS
Otra de las bandas que, en principio, no iba demasiado con la línea clásica que suele guiar los carteles del festival fue BARONESS, que con el sol ya bajando y con OZZY casi asomando tomaron el Sweden Stage. Cuando empezaban con “Take My Bones Away”, era sorprendente la poquita gente que había siendo este uno de los escenarios más grandes, y hasta que no pasaron “The Sweetest Curse” y “March To The Sea” la cosa no cogió un poco de color (y poco).
La banda de John Baizley salió a cuchillo, sonando increíblemente bien y transmitiendo toda la energía que atesoran sus temas, con los que no dudaron. “Green Theme” sonó de lo más inspiradora, y el binomio formado primero por “Morningstar” y después la celebradísima “Shock Me” terminó por encandilar a su público, al que se veía con unas ganas especiales de disfrutar de los de Savannah. De Baizley, decir que demostró toda la fuerza interpretativa y presencia que siempre se le asocia, un genio contemporáneo que ha encontrado en Gina Gleason a su mejor escudera, una guitarrista de un talento increíble y que además hace unos coros espectaculares.
Después de “Isak”, ya estábamos preparados para recibir OZZY como se merecía…
Jorge del Amo
OZZY OSBOURNE
Su nombre en sí mismo es su carta de presentación, OZZY OSBOURNE. El show más esperado de la noche congregaría a miles de asistentes frente al escenario, incluso muchos llegaron antes de las 22:00, hora de inicio.
Cada concierto de Ozzy deja en el aire la pregunta si alcanzará a dar todo de sí, debido a su estado físico, sin embargo, en este show encontramos a un Ozzy en movimiento, que iba de un lado al otro del escenario, alegre y entregado. Zakk Wild fue un gran aporte para ello, ya que con sus largos solos pudo dar espacio a que esta leyenda tomara recesos.
El show comienza con la electrizante opera profana “O Fortuna” de Carl Off, y el fondo una enorme pantalla que nos mostraba imágenes de Ozzy durante todas estas décadas de carrera musical. Comienza con toda la fuerza “Bark at the moon” con unos lobos de fondo en la pantalla, Ozzy y Zakk hacen una amalgama que hace vibrar al público, excelente inicio.
Luego los teclados envolventes de “Mr. Crowley” nos hipnotizan con una canción himno dentro del repertorio de esta noche. “I don’t know”, “Fairies wear boots” sonaban mientras en el fondo la pantalla y una enorme cruz envueltas en luces, imágenes y efectos hacían que esta fuera una gran presentación. Siguen “Suicide solution”, “No more tears”, “Road no nowhere”, y el clásico de Black Sabbath “War pigs”. Con “Miracle Man, Crazy Babies, Desire, y Perry Mason” conjugadas, Zakk Wild hace de las suyas con sus afilados punteos.
En esta ocasión vimos al guitarrista muy cerca ya que bajó al foso, fue de un lado a otro, y volvió al escenario, todo esto por más de 20 minutos. Después tendríamos otro solo, de batería, por parte del genial Tommy Clufetos, sin embargo, tanto tiempo de solos hacían sospechar del agotamiento del príncipe de las tinieblas. Suena “I don´t want to change the world” y regresa a los escenarios Ozzy claramente recuperado.
Le siguen “Shot in the dark”, “Crazy train” para retornar a la efervescencia que producen estos clásicos en el público.
La banda se retira por un momento, y con los asistentes pidiendo su retorno, vuelven para cerrar de la mejor manera, con la emotiva “Mama I’m coming home”, y un súper clásico, “Paranoid”.
Personalmente, un gran show pese a los largos solos, también el estar en primera fila y ver a Ozzy en detalle me permite decir que fue un concierto que vivirá en la memoria.
Setlist OZZY:
- Intro/ O Fortuna (Carl Orff)
- Bark at the Moon
- Mr. Crowley
- I Don’t Know
- Fairies Wear Boots
- Suicide Solution
- No More Tears
- Road to Nowhere
- War Pigs
- Miracle Man / Crazy Babies / Desire / Perry Mason + Solo Zakk Wylde
- Solo Tommy Clufetos
- I Don’t Want to Change the World
- Shot in the Dark
- Crazy Train
- Mama, I’m Coming Home (bis)
- Paranoid (bis)
- Outro/ Changes (Ozzy & Kelly Osbourne)
Carolina Cifuentes
LUGNET
Una hora de OZZY fue suficiente para nosotros. En consecuencia, activamos el plan B previsto por si lo del príncipe de la oscuridad no funcionaba, y acudimos a la carpa Rockkassikker a disfrutar de la prueba de fuego de unos desconocidos (de momento) LUGNET, una all-star band sueca de músicos ‘underground’ con el ex- WITCHCRAFT Fredrik Jansson a la batería y Roger Solander a las voces, una banda increíblemente enérgica, con un sonido netamente 70’s y una fuerza escénica desbordante, que resultó ser un fantástico descubrimiento para nosotros.
Su concierto fue entreténidísimo, en el que estuvieron arropados por mucha más gente de la esperada a pesar de coincidir con OZZY en el escenario principal.
Jorge del Amo
MESHUGGAH
El cierre de la jornada del viernes le correspondía a unos MESHUGGAH que, por la hora, prometían espectáculo del bueno. Y digo por la hora porque, de haber sido de día, su concierto no hubiese lucido ni la mitad gracias al hipnótico juego de luces que presentaron, algo que ya por sí sólo mereció la pena y que hizo del concierto de la banda sueca la catarsis a la que nos tienen acostumbrados.
Tirando mucho de “The Violent Sleep Of Reason”, MESHUGGAH deslumbraron con un show que fue de lo más vistoso de la edición, hasta dar la sensación de que por momentos se metían encima del público, que se partía el cuello en las primeras filas.
Además, el sonido fue el más atronador y también nítido de cuantos disfrutamos a lo largo de los 4 días, saturadísimo de graves, y como digo a un volumen exagerado, lo que al final hizo del concierto una experiencia que difícilmente podrían conseguir otros. Ya sólo quedaba una jornada de festival, y qué jornada…
Jorge del Amo
Sábado 9 de Junio:
CRASHDIET/ THE DEFIANTS
El último día comenzaba tan soleado como el resto, y con ese sentir de inmediatez y de aprovechar lo poquito que nos quedaba ya, que hacía olvidar cualquier síntoma de cansancio que pudiera asomar en nuestros castigados cuerpos. CRASHDIET calentaban de lo lindo el Sweden Stage desde las 11 de la mañana como el mejor de los cafés suecos, sin pantallas ni nada, con un escenario completamente desnudo para ellos desde donde se repartió ‘sleazy’ de primera magnitud. Justo después, nos dirigimos hacia una pequeña carpa publicitaria, junto a la zona de prensa, donde el día anterior lucía un pequeño cartel donde se anunciaba un ‘mini showcase’ sorpresa pata el sábado, en dos pases, a las 13h y a las 19h, a cargo de unos tales THE DEFIANTS con miembros de DANGER DANGER.
El reclamo era suficiente, y allí que nos plantamos. Cuando llegamos, nada menos que Rob Marcello y Paul Laine calentaban motores en una pequeña tarima… ¡junto a Steve West! Allí estaba el mítico batería de DANGER DANGER, llegado adrede desde NY para dos acústicos de algo menos de una hora, un set que me pareció, sinceramente, de lo más mágico de la jornada del sábado. Después descubrimos que no era el primer año que esto sucedía, “Beat The Bullet”, “Bang Bang”, “Don’t Walk Away”, “I Still Think About You”…y así un himno detrás de otro con un Paul Laine cantando como Dios, muchos peldaños por encima del estado vocal actual de Ted Poley, por cierto. Fue corto, pero muy pero que muy especial…
Jorge del Amo
PAIN
Comenzaría el último día de festival como debe ser, con una de mis favoritas, PAIN, la banda del polifacético y talentoso Peter Tägtgren. Este proyecto que inicia como solista en los 90 iría adquiriendo fuerza e importante número de seguidores. PAIN cuenta con una excelente puesta en escena y músicos de gran calidad que van acompañando a Peter tanto en vivo como en las sesiones de grabación. Todo esto se convierte en una invitación a verlos en vivo.
Ya en el escenario del “RockStage” inician con “Rebel Yell” de Billy Idol, siguen con: “Dancing with the death”, “Suicide machine”, “Dirty woman”, “Just hate me”, “Zombie slam”, “Call me”, “Coming home”, y “On and on”. Vimos a un Peter muy entregado, carismático, que hablaba constantemente hacia el público, me gustaría saber qué decía pues la gente reía y el ambiente era afable, pero lamentablemente no hablo ni una frase de sueco.
Luego del encore y para cerrar, tres maravillosos temas que hicieron vibrar al público: “You only live twice”, un cover de los Beattles “Eleanor Rigby”, y uno de sus más conocidos temas “Shout your mouth”. Debo añadir que la banda que acompañaba al señor Tägtgren estaba indiscutiblemente conformada por excelentes músicos y que el show fue un delicioso bocadillo de entrada para lo que venía.
Carolina Cifuentes
SLADE
Otra de las bandas que más apetecían dentro de lo más clásico y escogido del cartel de este año eran los británicos SLADE, una banda pionera que inspiró a gigantes como KISS en su momento, y que nunca pasó de esa segunda fila en la que por otro lado siempre se han sentido cómodos.
Ví a los de Wolverhampton un poco plomizos sin embargo, algo cansados, pero aun así ofrecieron un conciert bastante decente, sin alardes, pero con todo el buen rollo y el buen hacer que le dan a uno las canas y un puñado de buenas canciones. La magia del festival hizo el resto. Bien Dave Hill, John Berry y Mal McNutty a las voces, bien compenetrados y sonando con fuerza, aunque el set me pareció en general un poco rebuscado por momentos, sí que es cierto que pudo ser más efectivo.
El final con “Cum On Feel The Noize” fue todo lo esperado, dejándonos otra de las fotografias imborrables de este año.
Jorge del Amo
TORCH
Ante la agónica disyuntiva de tener que elegir entre GIRLSCHOOL y STEELHEART, que se solapaban, decidimos tomar la salomónica decisión de pasar de ambos y apostar por una banda sueca nada conocida en nuestro país, pero que la gente local tenia muchísimas ganas de ver, también ansiosos de un poco de buen heavy metal de calentamiento antes de la llegada de JUDAS PRIEST. TORCH se fundaron en el 80′, y después de dos sensacionales LP’s lo dejaron en el 1986.
Después de un amago de reunión en 2003, que consistió en Dan Dark a las voces acompañado de un puñado de músicos para dar conciertos, el grupo se reúne con su formación original 10 años después, en 2013, para retomar la actividad, y el caso es que todavía no han editado ese esperado tercer disco, pero el culo nos lo patearon a base de bien con un soberano recital de vatios, actitud y buenos temas de los que le hacen a uno apresurarse a buscar su discografía.
Dan Dark es un auténtico espectáculo, un pequeño gran vocalista hiperactivo que tiene a un pipa solo para él de acá para allá del escenario, pendiente de que no se despeñe del puente de luces abajo o de que no la líe de cualquier otra forma. Su concierto fue enormemente entretenido, y nos puso las pilas para todo lo que todavía quedaba por llegar.
Jorge del Amo
STEELHEART
Era el turno de ver un clásico de los 80, STEELHEART. Uno de los atractivos de esta banda además de poder disfrutar de grandes hits, era ver en escena a su cantante Michael Matijevic quien según algunos sigue manteniendo su calidad vocal.
Aunque un poco empalagados de la brillantez propia de este vocalista pudimos disfrutar de temas como “Cabernet”, “You Got Me Twisted”, “I’ll Never Let You Go”, “Everybody’ Loves Eileen”, “My Dirty Girl”, “We All Die Young”, y de la fabulosa y poderosa balada “She is gone”.
Como muchos de mis colegas comentaban a Matijevic le faltó humildad, sin embargo, el resto de la banda tuvo una participación que vale rescatar.
Carolina Cifuentes
STRATOVARIUS
Volviendo a mis favoritos y de nuevo en primera fila, era hora de disfrutar a STRATOVARIUS.
Esta banda es muy compacta, se fusiona en sí misma y con el público rápidamente, generando empatía, coros generosos y gran alegría en los congregados.
Aunque fue un set list corto, disfrutamos de canciones clásicas como “Forever free”, “Speed the light”, y la infaltable “Paradise”.
De su álbum Eternal de 2015 escuchamos “My eternal dream” y “Shine in the dark”, “Dragons” del Nemesis.
Luego seguirían con dos maravillosas canciones “A million light years away” y “Black diamond”. Después del encore dos temas para cantar a todo pulmón, “Unbreakable” y “Hunting high and low”.
Definitivamente un show que nunca tiene desperdicio y en esta ocasión dejó con ganas de más.
Carolina Cifuentes
YES (ARW)
El de YES era sin ningún tipo de dudas uno de los conciertos que más ganas tenía de ver de toda la presente edición, principalmente porque se trata de una de las bandas más gloriosas que ha dado el rock progresivo nunca y, particularmente, mi preferida. En concreto, la encarnación de YES que pudimos disfrutar en Norje fue la que integra a Jon Anderson, Rick Wakeman y Trevor Rabin, para mí la más auténtica y legítima, dado que el conflicto con Steve Howe, Alan White y compañía continúa, dando como resultado dos versiones del grupo diferentes, que además están girando al mismo tiempo, celebrando el 50 aniversario de esta leyenda cada uno por su cuenta, confundiendo al fan, y ensuciando un nombre que es muchísimo más grande que sus intereses personales. Dicho lo cual, de poder elegir, hubiese elegido sin dudar esta versión de YES, mucho más exclusiva por el escaso número de fechas que están ofreciendo, y no me arrepentí. El primero en aparecer, magnificente y estrafalario, ataviado en una chillona capa, fue un Rick Wakeman que para mí siempre fue la esencia pura de YES. Le acompañaban acto seguido Trevor Rabin, y un Jon Anderson al que ví en un estado de forma fenomenal a sus 73 años. Este Octubre cumplirá 74, y honestamente, creo que puede seguir haciendo esto hasta que la cabeza le funcione, puede que al menos 10 años más, o al menos esa sensación me dio.
Empezaron con la intro, seguida de dos referencias consecutivas a “90125” como fueron “Cinema” y “Hold On”, que vino después. Ya de inicio, el sonido fue el más pulcro, perfecto y evocador de cuantos pudimos disfrutar en los 4 días, una sonorización que no podía sino hacerle justicia a temas plagados de matices, arreglos y efectos de toda índole. Vuelta instantánea a los 70’s de repente, para un “South Side Of The Sky”, de “Fragile” que dejó paso a uno de sus himnos, “I’ve Seen All Good People”, con el que la banda nos mandó de vuelta muchas décadas atrás, con un sonido increíblemente retro, perfecto, y un Jon Anderson cantando como siempre ha cantado, con esa voz tan particular que parece no sufrir con el paso de los años, o al menos no demasiado. De vuelta al “90125”, caía un “Changes” con el que Trevor Rabin comenzaba su show particular de clase y de elegancia, con ese estilo atemporal de tocar la guitarra, inimitable, dejando paso a “And You And I” que fue la única referencia a “Close To The Edge”, un trabajo que eché un poco más en falta y que me parece seguramente la mejor fotografía de los años más dorados de la banda. La función continuaba con “Rythm Of Love”, del “Big Generator” (1987), para ir concluyendo la primera parte del show con el “Heart Of The Sunrise” que supuso el regreso a “Fragile”, a los gloriosos 70’s. Obviamente, no sería la última referencia a este increíble trabajo. “Owner Of A Lonely Heart” nuevamente nos mandaba a los 80s, a aquel “90125” tan trascendental y que marcó una nueva era para la banda, para despedirse por poco tiempo antes de regresar dos minutos después.
Ahora sí que llegaba el momento de terminar, y lo hicieron primero con un “Perpetual Change” muy intencionado, de su trabajo homónimo nuevamente, donde Rick Wakeman salió de paseo, para acabar con un icónico “Roundabout”, que alargaron un tanto. Una increíble experiencia difícilmente repetible, de una calidad incuestionable. Se puede debatir acerca de si su repertorio fue más o menos acertado sin embargo, pero creo que todos coincidiremos en que 50 años no se pueden resumir en hora y cuarto escasa, y más cuando se trata de una banda de YES, con temas a manudo tan largos, tan intrincados, con trabajos tan difícilmente separables, muchas veces complicados de llevar al directo. Aun así, y con todo, y a pesar de todo, brillaron con luz propia…
Jorge del Amo
JUDAS PRIEST
Con el atardecer casi completo, pero todavía con mucha, quizás demasiada luz, llegaba el momento de recibir a los grandes protagonistas del día, unos JUDAS PRIEST que hace 3 años deslumbraban en el mismo Festival Stage que, esta vez, les aguardaba sin pasarela pero con muchísima más gente que en aquella ocasión, un ambientazo sensacional, el de las grandes citas, donde se respiraba ese “no se qué” que hacía presagiar un conciertazo, como así acabó siendo.
Así, después del “War Pigs” como de costumbre, salían primero Scott Travis y Rob Halford, este ataviado con chupa y pantalones plateados, dándole la espalda al público, y justo cuando irrumpía el ‘riff’ asesino de “Firepower” aparecían de sopetón Riche Faulkner, Ian Hill y Andy Sneap, en la que iba a ser una de sus primeras fechas en Europa con el grupo.
Desde el comienzo el sonido del Festival Stage estuvo a la altura, y JUDAS sonaron ‘heavies’ de pelotas. Se puede decir más alto, pero no más claro. “Grinder” nos lo confirmó, y en “Sinner” ya se empezó a vislumbrar que Rob Halford atraviesa un estado de forma envidiable dentro de lo que cabe, casi como si de una tercera o cuarta juventud se tratase, ayudado eso sí por algún que otro efecto de voces y toda la experiencia que le han dado las décadas para marcarse un concierto en el que superó el notable. En esta ocasión, el telón de fondo cambiaba, mostrándose el logo de la banda envuelto en llamas.
“The Ripper” fue una sorpresa muy bien recibida, un gran tema que llevaban años sin incluir en sus setlist, y con “Lightning Strike” corroboramos que los temas de su último trabajo no sólo funcionan de narices en directo, sino que le sirven a Halford un poco para descansar porque le exigen menos y se encuentra más cómodo.
“Bloodstone” también me sorpredió bastante, pero menos que un “Saints In Hell” que rescataron del “Stained Class” y que para mí fue la verdadera sorpresa de la noche, interpretada frente a un telón un tanto tétrico y dinámico en rojos y negros un poco a lo Tim Burton…
En cuanto a Andy Sneap, decir que solventó la papeleta con dignidad y haciendo plena justicia a los temas y a la tarea de sustituir a Glen Tipton. Es obvio, todavía falta complicidad con todos y cada uno de sus compañeros, se echan de menos 2 guitarras protagonistas en vez de una, pero no me cabe duda de que su elección es más que acertada y terminará acoplándose como lo ha hecho Richie Faulkner, que ha hecho olvidar a K.K. Downing prácticamente por completo.
“Turbo Lover” fue pura fiesta, mientras que “Night Comes Down” fue quizás el único pero que le pongo a la actuación de los “metal Gods”, un tema que se me hizo algo plomizo pero que Halford bordó literalmente.
Entrábamos en la parte más caliente del show, primero con “Freewheel Burning”, un temazo que jamás debería abandonar sus repertorios, seguida de “You’ve Got Another Thing Coming”, y de un “Hell Bent For Leather” que vio a Rob irrumpir en escena con una Indian, atravesándola en mitad del escenario.
Antes de los bises, era el turno de “Painkiller”, que sonó digna, aunque forzada como siempre, un tema que les pesa quizás demasiado y que, opinión personal, aparcaría para el directo… Fue en el solo cuando por las pantallas se pasó un video de Glen Tipton, momento en el que creo que todos pensamos que no le veríamos en la parte europea de la gira, como sí participó de la americana.
Los bises comenzaban con “Rising From Ruins”, un tema que funcionó sensacional en directo, y que dio paso a un “Metal Gods” donde quien más quien menos se emocionó al ver sobre el escenario al hombre, nada más y nada menos que el mismísimo Glen Tipton, visiblemente desmejorado, con pulso algo tembloroso, pero pateando culos a tres guitarras para terminar el concierto con “Breaking The Law” y “Living After Midnight” de forma apoteósica.
Fueron, en mi opinión, el mejor cabeza de cartel y seguramente el mejor concierto de toda la edición 2018.
Fue con el “We Are The Champions” cuando, con permiso de BACKYARD BABIES, sentimos que un año más el contador volvía a situarse en 365 y la cuenta atrás volvía a empezar….
Setlist JUDAS PRIEST:
- Intro War Pigs (Black Sabbath)/ Firepower Intro
- Firepower
- Grinder
- Sinner
- The Ripper
- Lightning Strike
- Bloodstone
- Saints in Hell
- Turbo Lover
- Prelude
- Tyrant
- Night Comes Down
- Freewheel Burning
- You’ve Got Another Thing Comin’
- Hell Bent for Leather
- Painkiller
- Encore:
- Guardians
- Rising From Ruins
- Metal Gods
- Breaking the Law
- Living After Midnight
- Outro We Are the Champions (Queen)
Jorge del Amo Mazarío (Jorge_del_amo@rafabasa.com) – Twitter: @Jorge_del_amo
Fotos: Sweden Rock
Para ver las fotos a mayor tamaño, pinchar sobre ellas.