KHAYMAN – The Gentle Art Of Self Destruction
Discográfica: Nooirax Producciones
La historia de KHAYMAN no tiene mucho de original. De hecho, la comparten decenas de bandas que deciden emprender un proyecto musical diferente en el marco de una ciudad pequeña, Guadalajara en este caso, saliéndose de lo establecido, encontrando todo tipo de trabas y dificultades en un camino a menudo tortuoso que les va forjando y a la vez haciendo más fuertes. En su caso, no sabíamos prácticamente nada de ellos después de los contados conciertos que sucedieron a su primer EP, “The Unbreakable Bonds Of Slavery” (2012), tras el golpe que supuso a marcha de Alfon a las voces, una auténtica bestia encima del escenario que dejó al grupo en un estado casi vegetativo durante unos años, hasta que se cansaron de buscar vocalista fuera y lo encontraron dentro. Fue entonces cuando D. Vega asumió el papel de vocalista (y guitarrista), y KHAYMAN volvieron a la actividad retomando la composición de un primer LP que por fin es una realidad, en formato cuarteto, y con un lavado de cara importante en lo que se refiere al enfoque de sus temas, que ahora huyen de etiquetas para volverse algo en mi opinión muchísimo más desafiante, intrincado y personal.
Ha costado lo suyo, pero ya están aquí. Más de 6 años es el tiempo que ha necesitado el grupo, desde su último EP, para rehacerse y parir estos 9 temas que conforman su primer largo en estudio, que han grabado ellos mismo por cierto, y que a todos los niveles suena demencial, dejando a “The Criminal Redneck Orchestra” (2010) y “The Unbreakable Bonds Of Slavery” (2012) en lo que realmente fueron: demos, fotografías en blanco y negro de una banda en un momento muy concreto que, con el tiempo, ha ido evolucionando y perfilando su sonido hacia cotas más altas, pero sobre todo más exigentes compositivamente hablando, con temas que toman influencias muchísimo más variadas, que dan lugar a un sonido mucho más original, complejo, y sin que la banda deje en ningún momento de apestar a las hediondas marismas de Luisiana como siempre ha sido. “The Gentle Art Of Self Destruction” es el sugerente nombre que el cuarteto arriacense ha elegido para este primer largo, que el pasado 18 de Mayo editaba Nooirax. Veamos a qué nos enfrentamos…
Quienes supieran de antes de ellos, KHAYMAN siempre fue una muy buena banda de ‘southern metal’ más o menos al uso, desde sus comienzos muy influenciados por bandas a lo PANTERA, DOWN o BLACK LABEL SOCIETY. Eso nos mostraron en sus dos EP’s previos, un ‘riffing’ descontrolado marca de la casa y unas voces destructivas en un apartado en directo donde la banda se salía del escenario. Pues bien, con su primer largo, y también motivado por el cambio de vocalista, los KHAYMAN ahora nos presentan una propuesta muchísimo menos etiquetable, más diversa como decía, muchísimo más densa, donde Vega se destaca como una voz mucho más versátil para el grupo y donde los sonidos más lentos y graves le han comido muchísimo terreno a la caña y al doble bombo. Ahora las influencias son mucho menos obvias, habiendo referencias a bandas como CROWBAR, YOB, EYEHATEGOD o incluso UFOMAMMUT en algunas partes instrumentales que la banda ha escondido bien a lo largo del disco, pero resultando muchísimo más inciertas, lo que habla de un estilo más propio y expeditivo por parte de unos KHAYMAN a los que veo más creativos que nunca, con un trabajo de posproducción digno de mención salpicado de arreglos y detalles que no hace sino resaltar el resultado final.
Desde que “Sunday Blues” rompe tras la intro, ya se empieza a adivinar el renovado interés del grupo por el ‘sludge’ más crudo en sus guitarras y por los tempos agónicos y lapidarios. Aquí todos juegan su parte, pero las guitarras de Vega y Álex son sin lugar a dudas la parte irrenunciable de la ecuación. “TGAOSD” es un verdadero muestrario de riffs catedralicios en ese sentido, tendiendo a alargar los temas y a tirar de múltiples recursos y efectos según lo va pidiendo el tema que toque. “Polyhate” por su parte ralentiza todavía más el disco, con un estribillo sólido en el que Vega y el grupo en general nos recuerdan a unos FEAR FACTORY, eso sí, un poco más orgánicos, menos industriales… Me resulta particularmente interesante como KHAYMAN aquí siguen destilando el apellido ‘southern’ por todas partes, pero entendido de otro modo, un gran acierto por parte del grupo. Me gusta particularmente, en esta primera mitad de disco, el efecto que el grupo crea con el tema homónimo, un tema bastante experimental para tratarse de ellos, completamente instrumental, que funciona un poco de interludio, comenzando de un modo casi ambiental y que va creciendo, primero con guitarras armonizadas y después ya con riffs más crudos, en un ‘in crescendo’ realmente bueno, dejando después paso a “Flow Down”, que al ser uno de los temas más sólidos del trabajo conforman sin duda (para mí) el momentazo del disco. Muy pero que muy destacable también el largo final con los dos últimos temas, dos cortes que se van cada uno por encima de los 6 minutos, “Red Sun” con algún que otro guiño ‘stoner’ y un buen gusto que tira para atrás y “Mississippi Voodoo” como un tema complejo y extraño, donde el grupo le ha dado rienda suelta a la imaginación de lo lindo sin que tampoco quede fuera de lugar, ni mucho menos.
Sea como fuere, creo que el regreso de KHAYMAN es una enorme noticia para la escena centro y para la escena nacional en general, un grupo que gustó mucho hace unos cuantos años con sus primeras referencias discográficas, y que sale ahora del pantano para arrastrarnos a todos hacia dentro, esperemos que para no volver a salir.
Jorge del Amo Mazarío (Jorge_del_amo@rafabasa.com) – Twitter: @Jorge_del_amo
Lista de Temas:
- Sunday Blues
- Polyhate
- Walking Away
- The Gentle Art of Self-Destruction
- Flow Down
- Dear Son
- Saw Is Family
- Red Sun
- Mississipi Voodoo
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