+ SOVENGAR
Sábado 10 de Febrero de 2018 – Sala Sound Stage – Madrid
¡Punto y final!… O eso parece y ha anunciado la banda. El sueño metalero de Lolo llega a su fin, al menos con OKER, la banda que empezó poco a poco con un álbum que gustó mucho bajo el título de “Dale caña”, haciéndose un hueco desde muy abajo, ocupando un puesto predominante en la escena underground, dentro de las bandas que recobraban el espíritu ochentero en el siglo XXI. Y llegaron a luchar para hacerse con un lugar en la primera división del heavy metal patrio.
OKER saltaron en poco tiempo de los bares a grandes escenarios, teloneando a bandas de gran talla, y a estar en boca de muchos,-para bien o para mal-, pero el estirón final y aparentemente definitivo y necesario no les ha funcionado desde un álbum llamado “Culpable” que no terminó de situar a la formación y tras demasiados cambios en su alineación.
La pasada noche el grupo colgó las guitarras, con un sueño cumplido: el de Lolo y sus compañeros, tanto los que se quedaron en el camino, como los actuales. Estos últimos, acompañados por amigos y músicos invitados, celebraron su ADIÓS, y a su vez su décimo aniversario, en una sala que mostró una gran entrada.
Abrieron la velada SOVENGAR, a quienes lamentablemente no pude ver, por culpa del asqueroso tráfico en la zona, dado que el concierto coincidía con un partido de fútbol en el estadio Santiago Bernabéu,-muy cercano-, por lo que los atascos me pasaron factura. Solo pude ver medio tema y la despedida de la banda; menos mal que Álvaro Carlier, nuestro fotógrafo si pudo retratarles.
A SOVENGAR ya los vi el pasado verano en el festival Acordes de Rock, en Sevilla, practicando un potente folk power metal & viking de altura. Pronto coincidiré de nuevo con ellos en el Euskal Metal Fest en Irún, el próximo 17 de marzo.
La pasada noche hicieron un gran show, por lo que contrasté más tarde, donde presentaron temas de su segundo álbum “Metal March” y dieron cancha a sus primeros himnos. Una pena no poderlos haber visto.
OKER no tardando mucho saltaron al escenario. El grupo formado en la actualidad, y por última vez por Lolo y Alberto a las guitarras, el incansable Luisito al bajo, el batería Sergio y Carmen Xina a la voz, lo dieron todo para agradar al numeroso público asistente, donde no faltaron gran parte de sus más cercanos amigos.
Lo cierto es que no se si por el equipo, la persona responsable del sonido o por el grupo, pero OKER no terminaron de sonar bien; no obstante, el sonido fue secundario en una noche especial y a la vez triste, donde gran parte de ella noté a Lolo ausente y perdido, no tan participativo y agresivo como solía comportarse en anteriores citas en directo. El resto del grupo lo dio todo, especialmente una Xina que fue el centro de atención, como siempre, por imagen, actitud y voz, una voz que noté más educada y afín, y no tan lineal y mal usada como hace tiempo.
Los primeros temas en caer fueron “Culpable”, “Sangre y Sudor” y “La Hora de Actuar”. El público estaba disfrutando y la banda, centrada en Xina, ofreciendo su mejor cara.
Ya digo que el sonido no era muy bueno, pero eso no fue óbice para que el concierto siguiera con “Traidor”, y un “Burlando a la Muerte” donde Juanky se unió como primer invitado de la noche.
Un desmejorado “Vallecas”, por la mala ejecución de su arpegio de guitarra, hizo que Xina cantara con el alma para dar paso a renglón seguido a “Yo mismo” con la subida a escena de Álvaro.
La banda iba mostrando mejor cara, Lolo parecía más metido en su papel habitual cuando llegaron los mejores momentos de la noche con la colaboración guitarrera de El Cachorro, como es llamado el hacha de Cartagena que desde siempre toca con mil bandas.
Lolo se dirigió al público, -aunque apenas se lo entendió-, como harían sus compañeros a lo largo del “bolo”, mientras Xina se cambió de indumentaria y se refrescó un poco para agitarnos con un poderoso “Dale Caña”, uno de los más históricos temas de OKER. El siguiente invitado fue el gran Silver quien se marcó a dúo con la murciana una gran “Heavy Metal”.
“El Último adiós” fue más que emocionante, a pesar de, otra vez, la deficiente ejecución de los arpegios de guitarra. Xina se llevó una merecida ovación.
La caña siguió con “Sobre el papel” y un “Vuelvo a Resurgir” donde Glory y Salva de GUADAÑA dieron una lección de buen rollo, actitud y ejecución vocal.
El final del concierto con el himno “Oker” fue brutal.
Para despedirse no podía faltar “Miedo” y la invasión del escenario de múltiples colegas, músicos y amigos para marcarse como fin de fiesta un “Rebeldes de Acero” que difícilmente el público y la banda olvidarán.
Un décimo aniversario que puso fin a una banda: OKER….”Hasta Siempre.”
Texto: Rafa Basa
Fotos: Álvaro Carlier
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Es una pena que a pesar del vozarrón de Xina y la imagen que tiene la banda, no hayan sabido superarse a sí mismos para ir subiendo. Tuvieron un buen inicio con algunos temazos aunque la verdad que pocos, pero luego ya no aportaban nada y para mi gusto discos muy aburridos quitando uno o dos temas. Aunque creo que lo han dejado temporalmente por motivos laborales, la verdad que no han sabido estar a la altura y es lo mejor que han hecho, dejarlo.
No entiendo como un grupo tan malo ha durado tanto. La Xina canta, pero los demás no tocan un carajo. Les vi en un Leyendas y fue horrible
La misma crónica lo dice varias veces (de forma muy elegante eso sí): «Mala ejecución en las guitarras» y «una voz que noté más educada y afín, y no tan lineal y mal usada como hace tiempo.»
Si hasta en una crónica de despedida dicen eso de ellos te queda claro porque no han conseguido nada: porque son malísimos y no daban para más. Además era curioso, siempre que escuchabas hablar a otros grupos de este, todo el mundo decía lo buena gente que son pero eran el hazmerreír y centro de las bromas a nivel musical. Quizá la gente les prestó atención demasiado pronto, antes de que se formasen como musicos o quizá nunca tuvieron interés en formarse.
Y de hecho tambien llama la atención que además siendo tan malos consiguiesen entrar en grandes festivales y tocar en grandes escenarios… bastante curioso esto.
Espero que les vaya bien por separado.