TIAMAT + LIV KRISTINE + SATURNUS + GREEN CARNATION + EVOKEN + A FOREST OF STARS
Viernes 1 y Sábado 2 de Diciembre 2017 – Sala But – Madrid
Sábado 2
EVOKEN
El segundo día venía incluso más cargado aún que el primero, y después de las tempraneras descargas de los reactivados AUTUMNAL y de unos A FOREST OF STARS muy deseados este año, llegaba el turno de, seguramente, la banda más esperada por aquellos fans del ‘doom’ más clásicos y más afines a la línea más clásica del festival.
Los de New Jersey no sólo llevaban años sin pisar nuestro país, sino que llevan ya más de 5 años sin editar nuevo material, un parón quizás demasiado largo para tan grandiosa banda, que con esas se presentaba sobre las tablas del MITD para dar el que seguramente fue el concierto de ‘doom/ death’ más intenso de la jornada, con permiso de SATURNUS, que después les harían sombra.
Sonido ESPECTACULAR, grave, profundo, y un John Paradiso a las voces incontestable fueron las claves de un concierto catedralicio en el que no faltaron temas como “A Tenebrous Vision”, que utilizaron para empezar, “Grim Elocuence”, “Tending The Dire Hatred” o “Curse The Sunrise”. Sonó por cierto un tema nuevo, de un nuevo disco que, según nos dijeron, está al caer con Profound Lore.
GREEN CARNATION
Tener a GREEN CARNATION en nuestro país para un único concierto fue un verdadero lujo, un privilegio que tiene que ser valorado en su justa medida. Nuevamente, se me hace difícil pensar en cualquier otra ocasión o promotor que propiciara su venida, por eso este festival nos gusta tanto y se tiene que hacer viejo. La formación noruega, aunque lleve más de 11 años sin editar nada nuevo, sigue muy viva, y fue un revulsivo y un oasis en mitad del ‘doom’ de la tarde que agradecimos y saboreamos como se merece.
Empezaron con “A Place For Me”, sonando pulcros, como siempre han sonado, ‘heavys’ pero al mismo tiempo genialmente ecualizados y enormemente disfrutables. Kjetil salía empezado el tema, y no tardaba en demostrar el enorme y versátil vocalista que es. Iban cayendo “The Quiet Offspring”, “Myron & Cole”, “Crushed To Dust” o “The Boy In The Attic”, en una primera mitad de show resplandeciente en la que la banda iba cobrando intensidad poco a poco.
Ni que decir tiene que su set se centró exclusivamente en “A Blessing In Disguise” y en “The Quiet Offspring”, conformando una suerte de ‘best of’ muy efectista que hacia la segunda mitad, nos dejó los temas más coreables y esperados, como “Pile Of Doubt”, “When I Was You” y “Writings On The Wall”. Ah, ¡y hasta se tocaron un tema nuevo, llamado “Sentinels Of Chaos”, de su próximo nuevo disco, que parece que está al caer!
SATURNUS
SATURNUS fueron, junto con TIAMAT, los encargados de la misión imposible de hacer olvidar a MY DYING BRIDE. Desde luego eso no es de ningún modo posible, pero si hay una formación de ‘doom death’ querida en Madrid, y por el público del festival, esos son sin atisbo de duda estos daneses que tan hondo nos han calado siempre.
Los de Thomas Jensen regresaban a España 5 años ya después de su último “Saturn In Ascension”, despertando un poco de ese estado latente en el que siempre se encuentran, tocando poco y grabando menos (probablemente nos queden otros 5 años para nuevo material”, y comenzando con “Litany Of Rain” nos arrastraron consigo al abismo depresivo y bucólico que crean con sus gruesas atmósferas y su recitar vibrante.
No hubo sorpresas en el repertorio, ni creo que nadie las quisiera o esperara. Una vez superados los problemas iniciales en el micro de Thomas, con ese molesto zumbido que les acompañó durante el tema inicial, llegaba “I Love Thee”, seguida de otro gran tema de su último trabajo, “Forest Of Insomnia”, para cerrar con dos clásicos del grupo como “I Long” y “Christ Goodbye”. Como de costumbre, sus melodías y ritmos apesadumbrados todavía resuenan en mi cabeza días después. Magníficos.
LIV KRISTINE
La tarde del sábado se iba muriendo poco a poco, y con ella un festival que antes del cabeza de cartel nos ofrecía otra de esas bandas distintas, difícilmente accesibles fuera de un evento como este. Era la primera vez de LIV KRISTINE en solitario, con su banda, en nuestro país, y la fecha única provocó que un buen puñado de fans se acercase hasta el festival solo por ese motivo. Después de todo, la vocalista alemana ha sido y sigue siendo un icono de la voz femenina en el metal, y ahí está su trayectoria con LEAVE’S EYES o THEATRE OF TRAGEDY para atestiguarlo. Precisamente en estos segundos, así como en su carrera en solitario, se centró una actuación que a nadie escapa que se nos hizo plomiza, sosa y un pelín fuera de lugar, si se me entiende.
Después de actuaciones como las de EVOKEN o SATURNUS, o incluso de la eléctrica descarga de GREEN CARNATION, el concierto de LIV KRISTINE se nos hizo a la gran mayoría algo cansino, muy descafeinado, y falto de fuerza por todas partes. No la culpo, su música es así y más aún su versión en solitario, pero quizás no estaba en el lugar o momento adecuados. Ella cantó increíblemente bien, como siempre, mostrándose extremadamente sonriente todo el tiempo, muy cariñosa con sus músicos, y muy concentrada en cuajar una buena actuación, y así lo hizo. Pero su grupo no estaba funcionando; una situación muy parecida al concierto de TIAMAT del año pasado.
Sonaron temas clásicos de THEATRE OF TRAGEDY como “Venus”, o “Siren”, que fueron mínimos repuntes en un repertorio bastante intrascendente en líneas generales, que además se cerró con una versión tediosa e injusta del “Changes” de BLACK SABBATH. Aparte, tengo que decir que me sigue indignando sobremanera toda esa gente, profundamente irrespetuosa, que no para de hablar durante los conciertos y a gritos cuando algo no le interesa. En el concierto de LIV KRISTINE se hizo especialmente palpable en las partes en que ella y su voz quedaban solos en escena, llegándose a escuchar casi más a la gente que a ella. De vergüenza.
TIAMAT
La quinta edición del festival llegaba a su fin con unos TIAMAT que, a priori, parece que no contentaban a casi nadie, en parte porque el suyo de 2016 no fue ni de lejos el mejor concierto del festival, siendo cabezas de cartel. No en vano, las circunstancias de este año eran todavía más adversas para la mítica banda sueca, y el resultado, creo que para sorpresa de absolutamente todo el mundo, diametralmente distinto.
Johan Edlund y sus chicos dieron el mejor concierto de todo el festival, seguramente el concierto que muchos hubiéramos esperado el año pasado y que llegaba con 12 meses de retraso, un show en el que dejaron el ‘goth’ a un lado para centrarse en su etapa más “proto”, ajustándose, ahora sí, totalmente a la “línea editorial” del MITD y haciéndonos vibrar como hacía tiempo que Madrid no vibraba.
Tocaron “Clouds” al completo, desde “In A Dream”, con la que ya empezamos a destrozar lo poquito que quedaba de cuello, hasta “Undressed”, que cerraba el grueso de su actuación antes de los bises. Después, según lo prometido, era el momento de “Wildhoney”, de donde cayeron los temas como el homónimo, “Do You Dream Of Me?”, en acústico, o “The Ar”, que puso punto y final a su concierto y al festival en su quinta edición.
Tan sólo por poner un pero, comentar que su concierto tuvo quizás demasiadas interrupciones, demasiados espacios en blanco entre canción y canción, que de haber sido distinto hubiesen hecho de su descarga algo todavía más magnético y envolvente. Aun así, increíble el sonido, e increíble esa sensación de túnel del tiempo y ese ‘feeling’ que todavía tienen esos temas tan clásicos. Como siempre, sólo en MADRID IS THE DARK. GRACIAS.
Texto: Jorge del Amo Mazarío (Jorge_del_amo@rafabasa.com) – Twitter: @Jorge_del_amo
Fotos: Álvaro Carlier
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