PROPHETS OF RAGE – Prophets of Rage
Discográfica: Caroline
Para un servidor, ocurre que cuando un nombre como el de Tom Morello aparece en escena para reunir una superbanda, automáticamente entro en un modo de observación constante para ver qué se trae entre manos el que fuera guitarrista de AUDIOSLAVE o de RAGE AGAINST THE MACHINE.
Si a ese nombre le añades el de sus compañeros en RATM, Tim Commerford y Brad Wilk, suena aún mejor. Claro, a un nivel personal la guinda del pastel viene con dos miembros de una de mis bandas de rap americano; el gran MC Chuck D se unía junto con su compañero DJ Lord provenientes de PUBLIC ENEMY. El toque final para este delicioso grupo lo proporciona B-Real, MC de CYPRESS HILL.
Como acto de sinceridad, no tenía muchas esperanzas de que el debut en disco de esta superbanda llamada PROPHETS OF RAGE. Su EP me dejó frío, indiferente, con unas canciones que parecían nimias y no terminaban por enganchar. Fue entonces cuando el concierto realizado en el DOWNLOAD FESTIVAL MADRID 2017, me cambió de parecer y ansiaba tener entre mis manos el preciado redondo del cual vengo a hablar hoy.
Si bien la banda suena como un tiro en directo, con una potencia verdaderamente envidiable en muchos grupos de géneros más extremos, PROPHETS OF RAGE en disco se amoldan sobre un sonido que baila entre el funk y el metal alternativo que ya nos propuso Tom Morello en un pasado. No es algo que les funcione mal, en absoluto; las canciones tienen un estilo muy particular que además encajan perfectamente con la voz de dos ases tan carismáticos como Chuck D y B-Real. Pero si de algo podemos estar seguros al escuchar un par de veces el disco, es que, salvando temas como ‘Strength In Numbers’, la rabia del disco, la mala uva, ese carácter de protesta, reside en unas letras donde la crítica a la política y a la sociedad están presentes en todo momento.
Sabiendo la posición política ante Donald Trump de todo el grupo, una de las mejores canciones es también una de las más directas ante el gobierno actual norteamericano: hablamos, por supuesto, de ‘Hail To The Chief’. Aun siendo el principal mensaje el de la política, PROPHETS OF RAGE no se desmarca también de esa vena funk de la que hablaba anteriormente y, dotándose de unas excelentes piezas instrumentales podemos encontrarnos temas más desenfadados. Es el caso de canciones como la animada ‘Legalize Me’, la cual le viene a B-Real al dedillo y donde encontramos una oda a la marihuana y un estribillo bastante pegadizo. Ocurre ese desenfado también con canciones como ‘Hands Up’ o ‘Take Me Higher’.
Si pasamos de las canciones con su contenido lírico y nos fijamos en lo instrumental, encontraremos un sonido bastante particular y con todos los miembros en su salsa. Tal vez el que más pase desapercibido sea DJ Lord y el que más destaque alejándonos de las voces de Chuck D y B-Real, sea, como no podía ser de otra manera, Tom Morello. Nos encontramos en esta ocasión con un Tom que suena mucho a RAGE AGAINST THE MACHINE, y muy especialmente, a aquel Tom del imprescindible redondo «The Battle of Los Angeles». Es cierto que también ayuda que dos de sus compañeros de la banda estén detrás apoyando sus solos de guitarra o sus riffs psicodélicos, pero cuando uno escucha temas como ‘Strength In Numbers’ o el ya citado ‘Hail To The Chief’, es imposible que no afirme que son canciones que podrían compartir repertorio con aquel disco.
Con este disco de PROPHETS OF RAGE se pueden decir muy pocas palabras, es cierto. No encontramos en él la panacea para un género que fusione el rap y el metal, pero tampoco esperan encontrarla ni mucho menos.
Es un disco lleno de energía, con unas letras que desprenden pensamientos interesantes, y con una banda entregada al 100% a la causa. Pero si algo hay que comentar para acabar esta reseña, es que sí, el disco te hace querer saltar en todo momento como un auténtico lunático, pero en directo puede ser una auténtica bomba el escuchar alguna de las canciones que contiene. Componer y grabar en un mes parece una locura, pero PROPHETS OF RAGE han sacado, sin lugar a duda, uno de los discos más interesantes de escuchar este año.
Juanma García (Twitter)
- Radical Eyes
- Unfuck the World
- Legalize Me
- Living on the 110
- The Counteroffensive
- Hail to the Chief
- Take Me Higher
- Strength in Numbers
- Fired A Shot
- Who Owns Who
- Hands Up
- Smashit
Joer, cómo han caído en el olvido RAGE AGAINST THE MACHINE, vendieron millones, llenaron estadios de mediano aforo y ahora ya no queda nada de ellos. Solo estas bandas estela, de las que no hablaré porque no las he oído.
Hombre yo no creo que han caido en el olvido para nada.Lo que pasa es que fueron coherentes y lo dejaron en el momento que tenían que dejarlo.Aún así son una banda muy reivindicada y revisitada por las nuevas generaciones.Además a falta de De La Rocha estos Prophets of Rage son una continuación de aquello.
RATM fue un soplo de aire fresco, con un estilo propio que vino a revitalizar el panorama de la primera mitad de los noventa. Era escuchar tres segundos y ya sabias que eran ellos, personalmente yo escuchaba casi de todo, ellos junto a Faih no More, Ninch inn Nails, Tool y un largo etc hicieron que ese periodo, con perspectiva, fuese para mi un gran lustro (90-95).
Nine inch nails. Ejem.
Perdón. Lo que hacen las prisas .
Sí, tienes razón, esas bandas que nombras, y alguna más, hicieron de ese período de tiempo algo muy especial. Yo creo que fueron las últimas grandes bandas de rock. Luego ya vino el stoner pero para entonces las descargas habían acabado con las ventas de discos y no se pudo ya producir el milagro de lanzar un grupo del anonimato a la fama. Un ejemplo de ello son MONSTER MAGNET, que nunca se hicieron grandes porque salieron demasiado tarde. Y seguror que me dejo más en el tintero.
Exacto. Hay bastantes más, la mayoría sacaron discos muy a finales de los ochenta y principios de los noventas y fueron únicos, me acuerdo del magnífico La sexorcisto de White zombie, el light camera revolution de los suicidal o de Biohazard, grupos con un estilo único de la misma época. Yo también empecé a escuchar Kyuss muy temprano, simplemente la mtv no les dió el bombo requerido. Si ha todo ello le unimos las buenas bandas del grunge y mirándolo desde 2017 fue para mi una gran época creativa.
Fusión de rap y metal. Oda a la marihuana. Soflamas ideológicas decimonónicas.
Qué pereza.