Sábado 8: MUTANT + BURY TOMORROW + ARCH ENEMY + LORDS OF BLACK
+ MANTAR + MASTODON + TAAKE + ORANGE GOBLIN + MAYHEM
+ AGNOSTIC FRONT + SABATON + PORCO BRAVO + OBITUARY
Jueves 6, Viernes 7 y Sábado 8 de julio de 2017 – Viveiro
Sábado 8
MUTANT
Después de que MORPHIUM abriese el escenario principal, los gallegos MUTANT volvían a tocar en casa para realizar el primer concierto del día en el Chaos Stage.
El cambio entre los dos discos de la banda es muy amplio, con el primero muy thrashero (cuando todavía se llamaban MUTANT SQUAD) y el segundo de un estilo mucho más complejo que recuerda a grupos como MASTODON (los cuales tocaron unas horas más tarde en el festival), y para la cita en el RESURRECTION FEST, decidieron que el repertorio que interpretarían para el público sería exclusivamente el de su último álbum, ‘Pleiades’.
Los problemas técnicos llegaron a tal punto en su concierto que tuvieron que cortar una de sus canciones a la mitad por la dificultad que estaba ocasionando a Pla (guitarrista y vocalista) continuar con el tema, pero a partir de ahí siguieron sin parar hasta la claudicación de su directo.
El mismo Pla se encargó de dar la bienvenida a la formación a su nuevo bajista, Cristian, y de alabar la labor de Caki a la batería, que se encontraba con fiebre tocando. Asimismo, le dio un toque el público diciendo que está bien ir a eventos como este, pero que la música se sostiene gracias a los bolos en las salas el resto del año, y que por tanto hay que apoyar la escena desde su base para que todo el panorama pueda sostenerse en el presente y en el futuro.
Texto: Dani Bueno
Fotos: Unai Endemaño
BURY TOMORROW
No era mucha gente la que se acercaba a ver en un principio a los británicos BURY TOMORROW, pero con la realización de las dos primeras canciones el número de asistentes al show se vio incrementado. No es para menos que un sonido como el de estos jóvenes de Southampton llame la atención incluso al menos seducido por el género del metalcore, puesto que verdaderamente tienen una calidad compositiva envidiable en el género.
Con la llegada de su cuarto álbum de estudio en 2016 titulado «Earthbound», los británicos encabezados por Daniel Winter-Bates, venían al RESURRECTION FEST 2017 a hacer vibrar al público con una propuesta en la que se encuentran pequeñas pinceladas a otros géneros como el melodeath, especialmente en las guitarras.
Arrancaron con «Man on Fire», único representante de su anterior redondo titulado «Runes», y ya para entonces pudimos notar que íbamos a presenciar uno de los conciertos más sorprendentes del festival. La voz de Daniel Winter-Bates es colosal, potente y siempre cumplidora, aderezando además su entrega vocal con la conexión con el público haciendo las veces de frontman mientras, en algunos casos, normalmente en los estribillos, la voz de Jason Cameron era la encargada de esta faceta.
«Knight Life», «Lionheart» o la sublime «Cemetery» sirvieron para que muchos de los asistentes nos quedásemos boquiabiertos ante la técnica del guitarrista Kristan Dawson, que completó un concierto sublime y al que no se puede hacer otra cosa que felicitarle. Por lo demás el concierto transcurrió con los habituales circle pit y, a nivel general, una fiesta para los seguidores del metalcore y una sorpresa para los que no simpatizan tanto con este género.
Texto: Juanma García
Fotos: Juan Ramon Felipe Mateo
ARCH ENEMY
Hubo quien especuló sobre Alissa White-Gluz diciendo que no era la vocalista ideal para ARCH ENEMY, pero lo cierto es que, aunque esos debates sigan de actualidad, Alissa sí está más que capacitada para tomar el control como la cantante de la banda sueca. En RESURRECTION FEST 2017 la banda lo iba a demostrar de nuevo.
Pasaban las siete de la tarde cuando un buen número de personas nos situábamos en el Main Stage para ver a la banda. Con una pancarta del grupo destacando el escenario y varias banderas con el logotipo de la banda como atrezzo, la banda salía a escena con «War Eternal», tema donde ya pudimos ver el despliegue técnico que poseen todos los miembros del grupo y la voz inconmensurable de Alissa. Sintiéndose algo más cómoda en sus propios temas que en los que cantó Angela Gossow en su día, Alissa es un auténtico torbellino en el escenario tanto por su potencia y registro vocal, como por su interacción con el público; pedir palmas, oír la voz de aquellos que presenciaban el concierto o directamente hablar con ellos sobre su reciente «As The Stages Burn».
El concierto en sí se nos antojó corto para la mayoría de los asistentes. Una hora de concierto encadenando canciones como «Ravenous», «We Will Rise», la más reciente «You Will Know My Name» o la mítica «Nemesis» hicieron del concierto de ARCH ENEMY uno de los favoritos de esta tercera y última jornada de RESURRECTION FEST 2017.
A nivel de cómputo de banda qué vamos a decir que no se sepa ya. Todos siguen funcionando a un nivel exquisito, pero el comandante, el jefe de este auténtico barco de guerra, Michael Amott sigue dando razones para ser admirado y considerado como uno de los mejores compositores de los que podemos disfrutar hoy en día.
El espectáculo fue aderezado con pequeñas llamaradas durante algunas canciones o columnas de humo en otras, pero siempre con la certeza de estar disfrutando de una banda que ya nos tiene comiéndonos las uñas para lo que será su siguiente álbum «Will To Power» el 8 de septiembre.
Texto: Juanma García
Fotos: Unai Endemaño
LORDS OF BLACK
La apuesta nacional de heavy metal llegó al RESURRECTION FEST con mucho tiempo para acicalar el Chaos Stage debido a la ausencia de KRISIUN por los problemas acaecidos en el aeropuerto en Madrid, que tuvo incidencias por inundaciones, y de esta manera LORDS OF BLACK aterrizaba en el festival para mostrar su propuesta algo distinta al estilo típico de este evento.
En los primeros compases del concierto, como casi era costumbre en ese escenario, el sonido no era bueno, pero al avanzar las canciones se fueron calibrando volúmenes y demás y se consiguió que sonase medianamente bien.
La voz de Ronnie Romero, probablemente la mejor voz que pisó el festival, estuvo atronadora y muy potente, y eso acompañado de las melodías de guitarra y bajo perfectamente unidos y la batería de Andy como un reloj (salvo en un pequeño fallo al final muy aislado) conformó el directo más clásico de la tarde.
Fueron emocionantes y magistrales temas como "Merciless", "Nothing Left to Fear" o "Everything You’re Not".
Tony estuvo colosal a la guitarra, tocando y mandando, Ronnie demostró que vocalmente posee una voz prodigiosa y cada vez mejor y más activa puesta en escena. Dani Criado, el nuevo bajista procedente de SKIZOO demostró estar ya asentado y puso todo de su parte ofreciendo muy buena impresión.
El público de los españoles se atisbaba el más veterano de los presentes en el RESURRECTION FEST 2017, algo acorde a este tipo de bolos habitualmente ya que es un estilo que sigue más un target de edad mayor, pero eso no excluyó que bastantes jóvenes se pasasen a mover el cuello con LORDS OF BLACK.
Para acabar hicieron un guiño a Dio con la versión de BLACK SABBATH de «Neon Knights» completando un gran concierto.
Texto: Dani Bueno
Fotos: Juan Ramon Felipe Mateo
MANTAR
La gira de KADAVAR que pasará por nuestras tierras el próximo octubre, era una de las excusas que teníamos muchos asistentes al evento para ver a MANTAR, puesto que será una de las bandas que telonearán a los alemanes.
El escenario se presentaba muy diferente a lo que estábamos acostumbrados a ver durante las jornadas anteriores del festival; la batería a la derecha sobre una plataforma elevada y mirando directamente al lado izquierdo del escenario, sobre el pavimento del escenario, un solo micrófono. MANTAR salieron a devorar y se vio en la pasión que desprendían sus dos miembros, Erinc a la batería y los coros y Hanno a la voz y la guitarra.
¿Y qué hicieron los alemanes? Pues completar la que para muchos fue la actuación más sorprendente del festival. Repasando tanto el «Death by Burning» como su trabajo de 2016 titulado «Ode to the Flame», la banda estuvo entregadísima en todo momento. La voz desgarradora de Hanno y la pasión que le ponía a estar sobre el escenario estuvo combinada en todo momento por una bestia de las baquetas como es Erinc que rompió incluso una de sus cajas en plena actuación.
Temas como «White Nights» o «Praise the Plague» sonaron a un nivel estupendo y con su despedida en apenas 50 minutos de actuación, dejaron a un público entregado a su causa y que, a buen recaudo, les seguirán muy de cerca a partir de ahora. No es para menos cuando tu concierto suena tan bien y tienes una banda entregada a dar lo mejor de sí.
Texto: Juanma García
Fotos: Unai Endemaño
MASTODON
Lo de los norteamericanos es de echarle un par de… narices. Aunque en los festivales se suelen presentar los nuevos trabajos, siempre se guarda un hueco para deleitar a los aficionados más acérrimos al grupo con los temas más emblemáticos, pero MASTODON lleva su propio ritmo en ese sentido.
Más de la mitad de su directo se centró en mostrar al público su álbum más reciente, ‘Emperor Of Sand’, publicado este mismo año, y eso generó dos vertientes entre las opiniones de los que asistieron a su concierto: los que estaban fascinados por la calidad del nuevo material que traían los estadounidenses y los que reclamaban un repertorio más conocido para poder corear alguna canción y que así no fuese aburrido.
Con todo y con esto, la combinación de las voces de todos los miembros de la banda en el escenario le daba dinamismo a su actuación, tanto como la compenetración entre sus guitarristas, la presencia durante un tramo de los Resukids en el escenario y toda la gente que se aglomeraba en los aledaños del Main Stage.
Como al terminar su setlist les comunicaron que tenían cinco minutos más para tocar, MASTODON no tuvo un ápice de duda y ahí si volvió a las tablas con un éxito de los que han marcado su carrera hasta ahora, «Blood And Thunder», con la que si se desató la euforia entre los que asistían el bolo y que hizo claudicar su concierto con un buen sabor de boca al público e incluso a los propios MASTODON como se reflejaba en sus rostros.
Texto: Dani Bueno
Fotos: Juan Ramon Felipe Mateo
TAAKE
De los pocos exponentes que tenía el black metal en esta edición del RESURRECTION FEST 2017 era TAAKE. Los noruegos encabezados por el mítico Ulvhedin Høst tenían un público discreto pero que no dudaba del buen show que ejecutaría la banda noruega.
Con su maquillaje y la noche empezando a entrar discretamente en el recinto, la banda empezó a ejecutar su show con canciones tan características como la primera y la tercera parte de «Hordalands Doedskvad», mítico disco que es imperdible para cualquier seguidor que se precie del black metal.
Sin entretenerse con charlas insípidas y sin ningún sentido, TAAKE gozaron de un sonido un tanto errático, con ocasiones en los que las guitarras no terminaban de sonar del todo bien e interrumpían el buen espectáculo que estaban ofreciendo Høst y los suyos. Las variaciones sobre la quinta sinfonía de Beethoven en uno de los momentos del show, fue uno de los más aplaudidos por un respetable que, aunque se antojaba más o menos escaso de número, pudo presenciar de un grandísimo concierto que no solemos tener el placer de ver por aquí.
Texto: Juanma García
Fotos: Unai Endemaño
ORANGE GOBLIN
El concierto de los londinenses ORANGE GOBLIN era una de mis citas obligadas para el festival. El grupo liderado por el vocalista Ben Ward coincidía con un grupo como RANCID, que tocaban a su vez en el escenario principal. Esto me hacía pensar que tal vez el Desert Stage no iba a estar muy frecuentado, pero me equivoqué ampliamente y podríamos estar hablando de uno de los conciertos con más asistencia dentro de este emplazamiento.
ORANGE GOBLIN es una de esas pocas bandas que puede presumir de tener una discografía de lo más completa y bien trabajada. Álbumes como «The Big Black» son un ejemplo perfecto de cómo hacer un buen disco de Stoner Metal y, de hecho, fue este disco el que contó con más apariciones en la actuación que dieron aquella noche.
La banda lució en todo momento de forma más que correcta poniendo patas arribas al Desert Stage desde que «Turbo Effalunt (Elephant)» empezara a sonar con esa potencia que la caracteriza. Desde la segunda canción, el concierto de ORANGE GOBLIN fue una fiesta donde la gente no paraba de saltar a pesar de que muchos de los asistentes no conocieran las canciones. Pero lo cierto es que canciones como «The Devil’s Whip» con esa potencia y esa melodía tan animada, hacen saltar a cualquiera; si en directo ya suena potente, lo de escucharla en directo es otro mundo.
Y así, sin ningún problema más allá de nimios fallos de sonido, ORANGE GOBLIN conquistaron al público gracias a un directo potente, sencillo y muy certero que hizo que la gente pegara botes, ocasionara algún que otro pogo y, en definitiva, disfrutara del concierto como más le placiera a uno.
Texto: Juanma García
Fotos: Juan Ramon Felipe Mateo
MAYHEM
Todo parecía indicado para ser un gran concierto. La noche ya había caído completamente, la luna reinaba en el campo de Viveiro, los árboles se erguían como sombras gigantes, pero no, no fue una buena noche, al menos no para MAYHEM.
La banda venía presentando su gira de aniversario del imperdible «De Mysteriis Dom Sathanas», un álbum con mucha historia y clave para entender el black metal. Nada podía fallar y sin embargo el sonido pésimo volvía a ser el protagonista de unos MAYHEM que ya no rinden al nivel que deberían por A o por B.
Ataviados con túnicas negras que dejaban levemente descubierta la cara, con focos azul oscuro sobre el escenario y una pancarta de la misteriosa portada inspirada en la Catedral Nidaros de Trondheim, Noruega.
Desde un primer momento con «Funeral Fog» ya se podía intuir el sonido saturado y los instrumentos nada diferenciados por una batería que sobresalía por encima de lo demás. La voz de Attila Csihar apenas se escuchaba, yacía lejana y parecía que ni cantase. Incluso «Freezing Moon» sonó desconocida y de forma muy diferente a la que debería haber sido.
Una pena de concierto que fue ampliamente machacado por la calidad sonora y que fue considerado por muchos asistentes como una de las decepciones del RESURRECTION FEST 2017.
Texto: Juanma García
Fotos: Unai Endemaño
AGNOSTIC FRONT
Si MAYHEM no disfrutaron de una gran noche, en la carpa hubo unos neoyorkinos que sí consiguieron triunfar al mismo tiempo. AGNOSTIC FRONT es parte de la esencia de este festival y su estilo primigenio, y de este modo según acabó RANCID, banda de corte parecido, el Ritual Stage se llenó para el directo más importante de ese día en ese escenario.
A falta de sacar nuevo material, el concierto se basó en los clásicos de siempre de la formación estadounidense, y toda la energía que desprendían los músicos sobre las tablas se transmitía fácil y rápidamente a los aficionados harcoretas que acudieron a verles, que en pocos minutos hicieron que las primeras filas se convirtiesen en un correcalles con circle pits, walls of death y el incesante crowdsurfing que impidió a muchos permanecer en la parte delantera cercana al escenario.
Canciones como «For My Family» o «A Mi Manera» fomentaron todavía más el movimiento imparable de sus seguidores, que vieron como tema tras tema AGNOSTIC FRONT no daba respiro alguno con un setlist frenético y sin casi pausas para descansar y bajar toda la adrenalina que tenían los fans merced a la actuación.
Para acabar el bolo, los norteamericanos hicieron un guiño a las raíces del punk con la interpretación de la sabida por todos versión de los RAMONES de «Blitzkrieg Bop», por lo que el famoso «Hey, ho, let’s go» fue la banda sonora final de un directo que dejó a todo el mundo exhausto.
Texto: Dani Bueno
Fotos: Juan Ramon Felipe Mateo (www.musifota.com)
SABATON
Tuve la oportunidad de ver a SABATON a comienzos de año en Madrid, en la gira que realizaban junto a ACCEPT y a TWILIGHT FORCE. Aun con la decepción que me supuso aquel concierto —a pesar del imponente tanque para la batería— tenía ganas de revancha con un grupo que a medida que ha ido creciendo en popularidad, a mi modo de ver ha perdido en calidad. Tenía ganas de revancha como digo, pero una vez más, mis sensaciones al acabar el concierto no fueron buenas.
Los suecos arrancaron con la mítica «In The Army Now» en forma de introducción para que tan solo minutos después se oyera aquello de «We are Sabaton, we play heavy metal and this is Ghost Division» y un fogonazo protagonizado desde el cañón del tanque dio comienzo a la popular canción del disco «The Art of War». Ya desde la primera canción noté algunos fallos de sonido y especialmente fueron visibles en la voz de Joakim Bróden, que no terminaba de sentirse cómodo en algún que otro momento del show.
Continuando con un periplo por las antiguas canciones de la banda como «The Art of War» o la genial «Attero Dominatus», el protagonismo se lo cobró su último trabajo «The Last Stand» con cuatro canciones completadas con las que no terminan de conectar correctamente con el público más allá de los gritos sucedidos en «Sparta» o de la animada «Shiroyama». Fue en canciones como «Sparta» cuando eché de menos la teatralidad de la que se impregnó el show de Madrid; esperaba personas caracterizadas de espartanos y un Joakim con la misma apariencia, pero en lugar de eso se utilizaron elementos pirotécnicos que no me terminaban de casar con el show que estábamos presenciando.
Es cierto que SABATON conectaron con muchos fans acérrimos a la banda, pero hasta en canciones tan explosivas y sobresalientes como «Night Witches», el público no terminaba de ver el concierto que esperaba de los suecos. «Primo Victoria» puso al público en pie entonando su pegadizo estribillo, y la gente se reía con los comentarios de Joakim y la complicidad entre él y el respetable, pero el show parecía agridulce por el sonido y por la actitud de la banda, que parecía centrarse más en el espectáculo que en la música, cosa que a ellos no les viene bien hacer.
Terminando el concierto con «To Hell and Back», SABATON demostraron que tienen un público fiel que los defiende hasta en ocasiones donde se hace complicado hacerlo, pero la noche del
RESURRECTION FEST volvió a ser otra prueba más de que esta gira no está calando tan hondo más allá de los fans acérrimos de la banda. Es una pena, pero el show no funcionó todo lo bien que debería, al menos para la opinión de un servidor.
Texto: Juanma García
Fotos: Unai Endemaño
PORCO BRAVO
Mientras SABATON ejercía como cabeza de cartel en el escenario principal, en la otra punta del recinto, el Desert Stage, era la hora de uno de los shows más locos de toda la XII edición del RESURRECTION FEST 2017.
PORCO BRAVO disfrutó de tres cuartos de hora de actuación que no desaprovecharon para liarla todo lo posible, y es que la formación vasca no deja indiferente a nadie en sus conciertos, y así lo demostraron con su rock español desvergonzado.
¿Te preguntas por qué fue loco este concierto? Pues si no estuviste allí, imagínate a un vocalista que se sube a los altavoces que se encuentran a dos metros de la valla y a tres de altura del suelo y decide lanzarse a la masa para hacer crowdsurfing mientras canta, y no solo eso, sino que esos altavoces terminaron cayendo todos por el salto, lo que llevó varios minutos a técnicos y responsables de seguridad volver a colocarlo correctamente.
¿Te parece poco? Pues justo después volvió a bajar ante los aficionados (esta vez sin tirar nada) y encendió una bengala que se colocó en el culo para volver a hacer crowdsurfing con la gente, que dudaba entre si taparse para no quemarse o darlo todo con el cantante. En esta «visita» al césped, al volver corriendo al escenario un miembro de seguridad pensó que era un seguidor del grupo y se fue corriendo como un tiro detrás de él, hecho que en su regreso a su posición generó la mofa de sus compañeros en el foso y de algunas personas al otro lado de la valla por no haberse dado cuenta de que era el cantante.
¿Crees que eso es todo? En la siguiente canción este mismo hombre se grapó un periódico al pecho y le prendió fuego, tras lo cual bajó de nuevo con el público (con el pectoral sangrando) y empezó a grapar a todos los que se le acercaban y a disparar grapas al aire… y otra vez otro crowdsurfing más.
Toda esta demencia sobre las tablas con más bengalas más tarde y un último crowdsurfing de pie en una plataforma con la que parecía estar haciendo realmente surf provocó que en uno de esos ratos en los que es difícil llenar tu escenario por una competencia tan grande como un headliner, PORCO BRAVO consiguiese lo que parecía imposible, y de esta forma se llevó a cabo la última actuación nacional del festival.
Texto: Dani Bueno
OBITUARY
Si MAYHEM y SABATON fueron dos ejemplos de un show con más puntos negativos que positivos, el show de OBITUARY fue lo de siempre. Y sí, hay bandas que te hacen el mismo show hasta la saciedad y no aburren, todo lo contrario, divierten y llenan de gozo el alma de los asistentes a sus conciertos.
Esta era la tercera vez que tenía el gusto de ver a los de Florida, y a pesar del sonido flojo que poseía el Chaos Stage, los de John Tardy sonaron como un tiro. Un show de OBITUARY supone menear la cabeza, comprobar la habilidad de una banda que cuenta con una agrupación tan bien compenetrada y una brutalidad de proporciones épicas.
Es de ese tipo de bandas que con que toquen los 3 o 4 temas más conocidos de discos como «Slowly We Rot» o del «Cause of Death» ya triunfan, y aquella noche en Viveiro esos dos discos fueron los que más sonaron. La voz de Tardy escupiendo las frases de temas como «Turned Inside Out» o «Visions in My Head» ya son sinónimo de buen hacer y se volvió a demostrar en un concierto que se encargaba de cerrar esta edición del RESURRECTION FEST, dejando una sonrisa en la cara de los asistentes tras un más que notable concierto.
Texto: Juanma García
Fotos: Unai Endemaño (facebook.com/unai.endemano)
Para ver las fotos a mayor tamaño, pinchar sobre ellas.
Ndr.: No pudimos cubrir todo lo que nos hubiera gustado, como pasa en este tipo de festivales tan intensos, (pedimos disculpas por ello a las bandas y sus seguidores) y hay grupos que no entran en el articulo de los tres días porque no están dentro de nuestra línea editorial.