+ CASPIAN + UNCURED
Lunes 3 de Abril de 2017 – Hawthorne Theatre – Portland, OR – USA
Noche muy completa la que se nos presentaba en la pequeña sala Hawthorne. Por una parte los suecos KATATONIA y su melancólico metal nórdico. Por otro lado, los americanos CASPIAN trabajando duro el equilibrio entre la post-rock y el metal instrumental. Y empezando la noche unos jovenzuelos new yorkinos, UNCURED, con un estilo muy técnico y extremo. El que no se siente agradecido es porque no quiere.
Como decía, la noche la abría UNCURED. Una banda completamente fuera de mi radar. Indagando un poco más unas horas antes del concierto, descubro que lo lideran dos hermanos de 16 y 18 años que han dejado el colegio para centrarse en la música y un tal Max Portnoy. ¿Un momento? ¿Portnoy? Sí, el hijo del excelente batería y prestigioso músico Mike Portnoy (ex-DREAM THEATER) Ya teníamos el morbo. UNCURED tuvo unos 30 minutos de set para poder demostrar que dejar la escuela para centrarse en su vida musical ha podido ser una gran idea. Los hermanos Cox (a las guitarras) tienen una técnica y variedad de estilo admirable. El pequeño Portnoy maneja un kit bastante grande con un amplio rango de multiritmos con bastante soltura. Y el bajista sabe crear el groove y cadencia necesaria para hacerte menear la cabeza.
Todo correcto, si no llega a ser porque en la música, la técnica no es síntoma de buenas canciones. Tuve la sensación que por momentos, el metal extremo y técnico que desarrolla UNCURED, tuvo ramalazos de copiar-pegar, faltándole un hilo conductor musical al tema. Supongo que los fanáticos y admiradores de los multiritmos, cambios de estilos, diferentes registros cada minuto disfrutaron aquella actuación. El que abajo suscribe, prefiere ver la evolución del tema con sus cambios necesarios. Sin embargo, debo reconocer, que si son capaces de hacer eso con 18 años; solo pueden tener un futuro prometedor por delante.
Todo lo que pueda escribir un humilde servidor a continuación sobre CASPIAN será puramente subjetivo. He tenido la oportunidad de ver a los de Massachuset 6 veces en los últimos 3 años. No ha habido un solo show que no haya sido absolutamente increíble. Y es que, a mi modo de ver, el sexteto es una de esas bandas capaces de hacerte volar en un concierto. Te llevan por caminos emocionales con sus canciones. Te hacen viajar con sus notas. Sin la absoluta necesidad de usar un cantante.
Con el potentísimo aliciente de tres guitarristas creando intrincados pero sencillos juegos de melodías que te inundan y rodean los cinco sentidos. Un bajo con una potencia y galope hipnótico y una batería tan sencilla pero atronadora que tumba los paradigmas de «cuanto más grande, mejor». Por ende, tengo la suerte de haber podido entablar conversaciones con ellos unas cuantas veces y siempre confirman lo mismo «estamos aquí para trasmitir emociones con la música». Si tienes la suerte de conseguir conectar esa transmisión directa con su música, podrás viajar con tus sentimientos musicales. Yo he podido crear esa conexión y todo lo que puedo decir de CASPIAN será solo veneración, respeto, devoción y admiración.
Abrieron con su típica intro-speech «Go all the way» que da paso a «Fire Made Flesh». Con esto uno se da cuenta, que estos caballeros manejan unas pedaleras gigantescas llenas de samples, efectos y sobretodo, loops. Yuxtaposiciones hipnóticas de sonidos sobre sonidos creando efectos cambiantes y envolventes como pocas veces lo he podido observar. Perfeccionistas de los detalles pero amantes de lo complejo como suma de detalles. Excelente inicio de noche para calentar motores con esos momentos tan intensos y transitorios típicos de CASPIAN.
Le siguió una clásica como «Malacoda» con mucha pegada inicial y esa voz transitoria sobre el propio riff de guitarra que tanto les gusta camuflar. Trabajaron su último lanzamiento con «Rioseco» y «Arcs of Command». La primera dejando unos minutos iniciales de respiro y terminaron con esos simples juegos de guitarra tan fluidos y limpios. El mar y las olas hechas música. En «Arcs of Command» volvieron a demostrar que, como ellos dicen, «a veces tocamos suave, otras veces tocamos fuerte». Era el momento de tocar fuerte, muy fuerte. Y es que, sorprende la brutalidad que son capaces de desplegar estos señores en directo, algo que no se puede percibir tan claramente en sus discos.
Debo admitir que siento cierta predilección por «Castles High, Marble Bright» y poder dejar recorrer por mis venas esos primeros acordes tan efímeros e insustanciales en directo y cerrar los ojos. Es especial para mí. Sigo esperando «Dust and Disquet» pero algún día será su turno. Creo que CASPIAN está derribando varios mitos con su excelente trabajo.
Uno, el post-rock no es solo un movimiento de moda con mucho de estética tremendamente alejado del rock. Dos, no siempre se necesitan voces para tratar de transmitir cosas. Tres, tres guitarras sencillas juntas, hacen más que una sola guitarra abrumadora. Cuatro, la música debe trasmitir, la música debe generar cosas en los oyentes, la música debe ser recordaba porque te graba una serie de emociones en tu memoria; y ellos, lo logran. Pero ya dije, que sería subjetivo, si queréis comprobar cuan ciertas son mis palabras solo tenéis que hacer dos cosas: escucharles y verles en directo.
Set list CASPIAN:
- Fire Made Flesh
- Malacoda
- Ríoseco
- Arcs of Command
- Castles High, Marble Bright
Pero por mucha pasión que les deba a CASPIAN los verdaderos protagonistas eran KATATONIA. Que venían a presentar por los States su último gran «The Fall Of Hearts». Los creadores de los sonidos más tristes, melancólicos y «doomeros» sin guturales estaban por la costa oeste y, se nota que tienen mucho respeto a sus espaldas a este lado del Atlántico también. Sin embargo, no deja de ser curioso notar los efectos que produce el Atlántico sobre las bandas.
Todos nos hemos preguntado alguna vez como bandas de EEUU tocan en locales tan insignificantes en Madrid. Pues lo mismo pasa aquí. Pues parece ser, que superar la barrera Atlántica les cuesta a todos; los que van de aquí para allá y los de allá para acá. Es decir, poca gente en la Hawthrone pero con mucha entrega fue la que se congregó para ver a KATATONIA.
Comenzaron con unos problemas bastantes evidentes en las voces que deslucieron por completo la carismática «Last Song Before the Fade». Enseguida teníamos a Jonas Renkse escondiéndose bajo su melena y deambulando hacia delante y atrás por el escenario al más puro estilo Shakesperiano. Viva imagen de un alma en pena. Romántico empedernido. Poeta trágico. Esencia KATATONIA.
En apenas los primeros minutos habíamos podido visitar discos tan icónicos como «VIVA EMPTINESS» (con «Criminals») y «DEAD END KINGS» (con «Dead Letters» y «Buildings»). Especial mención lo bien que sonó todo lo que tocaron de «VIVA EMPTINESS» ese disco que ya tiene 13 años y que parece no envejecer. «Old Heart Falls» sonó magistral, limpia y pura en sus estrofas y potente y poderosa en su estribillo con ese Jonas subiendo por segundos. La sala le coreo con entusiasmo.
Y así, sin quererlo ni beberlo (por cierto, todo fan de la cerveza debe reconocer que ver un show en directo con las cervezas de la costa oeste deslizándose por tu gaznate siempre dejará en la cuneta a la sempiterna Heineken europea o Mahou madrileña) habíamos llegado a la mitad de su concierto. Así que aprovecharon para tirar de repertorio un poco más añejo: «Teargas» de allá por 2001 suena mucho mejor en directo que en el álbum porque esos aéreos golpean tus vertebras con más pureza con unos buenos amplis a tu alrededor. Y sobre todo tocaron mucho «VIVA EMPTINESS». ¿Debe KATATONIA plantearse re-masterizar algunos cuantos lanzamientos más? Supongo que no tardarán mucho después de haberlo hecho ya con «VIVA EMPTINESS».
Adoro «Soil’s Songs» y esos riffs tan militares con la batería marcando ritmo y vivirla en directo me hizo estar agradecido durante buena parte de la noche. Pero el agradecimiento continuó latente y más si cierran filas con «My Twin», «Lethean» y «July».
Es bastante significativo lo siguiente: no tocaron nada de «DETHRONED & UNCROWNED» y tan solo una de «NIGHT IS THE NEW DAY». Los protagonistas de la noche por goleada fueron «VIVA EMPTINESS», «THE GREAT COLD DISTANCE», «DEAD END KINGS» y el más reciente «THE FALL OF HEARTS». Es más, en la parte final del show, incluyendo bises, solo hubo una de su último redondo. Estamos hablando que, posiblemente 2/3 del set list estuvo protagonizado por temas de hace más de 10 años.
A mi modo de ver puede haber dos interpretaciones de esto: la primera la más directa y sencilla, a KATATONIA no le gusta tanto su periodo 2009 -2013, mayormente ese precipitado «DETHRONED & UNCROWNED». La segunda, más relacionada con esa barrera Atlántica: si KATATONIA subió al firmamento musical como consecuencia de lo que creo tras su aclamado «VIVA EMPTINESS» y sus giras por América les llevan por salas pequeñas, público fiel, conocedores de la banda; ¿qué mejor manera de ganar mercado que dándoles los que quieren?
Set list:
- Last Song Before the Fade
- Criminals
- Serein
- Dead Letters
- Buildings
- Old Heart Falls
- Teargas
- Evidence
- Ghost of the Sun
- Soil’s Song
- Residual
- Forsaker
- Leaders
- Passer
Encore:
- My Twin
- Lethean
- July
Texto y fotos: Jorge Carcamo
Para ver las fotos a mayor tamaño, pinchar sobre ellas.