Entrevista con Rob Halford, cantante de JUDAS PRIEST sobre el 30 aniversario de "Turbo"
En estos días se reedita el clásico décimo disco de estudio de JUDAS PRIEST «Turbo» con motivo de su trigésimo aniversario. Para bien o para mal «Turbo» es un álbum muy significativo de los míticos británicos, y no solo por los clásicos que incluye, sino por la vuelta de tuerca que supuso el trabajo para el sonido de JUDAS PRIEST. Como siempre es interesante hacer un poco de historia, nos pusimos en contacto con el siempre amable y elocuente Rob Halford para que nos contará sus recuerdos del álbum y algunas curiosidades relacionadas. Previamente, su discográfica nos indicó que no podíamos hacer preguntas que no trataran sobre dicho álbum…
– Para comenzar, ¿cómo ves «Turbo» después de 30 años desde su edición?
Rob.- Ahora me gusta, pero es cierto que en los años posteriores a su salida hubo cierta discusión sobre la música, el estilo y otras cosas. Yo soy tan apasionado con el metal como los fans, pero ahora creo que es una parte muy valiosa de la vida de JUDAS PRIEST. Ha encontrado su lugar. Estuvo apartado durante un tiempo pero creo que ahora está siendo reconocido de nuevo. La gente lo está escuchando desde otra perspectiva y creo que todos hemos dejado atrás el pasado para apreciarlo. Es un buen disco y es fantástico que se pueda disfrutar la música otra vez.
– Aunque seguía teniendo el sello de la banda, «Turbo» supuso sin duda un cambio después de dos discos puramente Heavy Metal como «Screaming For Vengeance» y «Defenders Of The Faith», ¿qué os llevó a darle un enfoque tan distinto?
Rob.- Creo que ahora para mí es un disco diferente. Solo descubres cosas como músico cuando empiezas a aprender sobre ti mismo y creo que aprendimos mucho tras la realización de «Turbo». Después de este disco la música era mucho más fuerte, creo que estábamos buscando algo que no habíamos encontrado y por eso estábamos experimentando. También fue la primera vez que pudimos permitirnos no correr al hacer un disco, lo veo como una especie de celebración del éxito que estaba teniendo JUDAS PRIEST en aquel momento después de todo el trabajo duro. Llevábamos mucho tiempo girando y grabando de continuo, pero en este caso pudimos divertirnos.
Comenzamos a componer en España, en Málaga, luego nos fuimos a Nassau, Miami y terminamos la grabación en Los Ángeles. Creo que influyó que compusiéramos el disco en España, también compusimos «Painkiller» en España, y creo que JUDAS PRIEST siempre ha tenido una conexión española.
En general supongo que las guitarras sintetizadas, usar un tono diferente, la dinámica del disco era distinta, la atmósfera y la actitud del metal estaban cambiando, y todo eso jugó un papel e influyó en el disco.
– Está claro que viendo el vídeo de «Priest Live!» se ve que el grupo estaba disfrutando de un gran momento, sin duda erais una banda consolidada en EE UU. «Screaming» fue el trabajo que os introdujo en el mercado americano y conseguisteis un gran éxito con él. Supongo que con «Turbo» fue todo mucho mayor.
Rob.- Creo que hay que estar ahí para apreciar todo el espectro de lo que sucedía. «Turbo» supuso una oportunidad para el grupo y nos proporcionó la ocasión para impactar con nuestro metal en diferentes partes del mundo. Eso se combinó con la conclusión del disco en América y con la aparición de los vídeos en la MTV; todo terminó influyendo. Creo que fue un disco que no solo ayudó a JUDAS PRIEST, también al metal en general. Ayudó a que el metal europeo se estableciera en América, y por eso creo que es importante reflexionar sobre este álbum y esta época.
Para muchas bandas América sigue siendo hoy en día una parte muy importante del mercado, triunfar en América es un gran logro, y ese fue nuestro caso, aunque supongo que siempre hay diferentes puntos de vista para una misma historia.
Lo que quiero decir es que como cualquier otra cosa que hayamos hecho, no solo se trataba de la música.
– Hablando de los temas, «Turbo» tiene grandes clásicos como «Turbo Lover» o «Rock You All Around The World», y temas muy especiales como «Locked In», «Parental Guidance» o «Out In The Cold», pero hay una canción en particular de la que me gustaría hablar que es «Reckless». Para mí es uno de los mejores temas del disco con un gran estribillo, una estrofa muy dinámica y un solo sensacional que creo que ha sido muy infravalorada con el paso del tiempo. ¿Qué me puedes contar de esta canción?
Rob.- Bueno, muchas gracias y sin duda coincido contigo, ha sido un poco como un tema perdido porque incluso quedó como escondida en el disco. Siempre he pensado que habría sido un gran tema para abrir el álbum, es una canción muy buena y está muy ligada al mensaje de PRIEST con frases como «nadie puede pararme» o «ahora voy a hacer lo que tengo que hacer y vivir mi vida». De eso trata la vida, de tener una oportunidad para vivir una aventura y aferrarse a esa oportunidad. Es un tema muy dinámico, muy enérgico, tiene una gran letra, una buena estructura, y la combinación de todo eso es lo que hace que «Reckless» siga siendo una canción muy sólida.
– El tema fue solicitado para incluirse en la banda sonora de «Top Gun» pero rechazasteis la oferta. ¿Por qué?
Rob.- Sí, eso fue un error (risas). El problema es que la gente de la película nos pidió el tema para la banda sonora, pero la condición era que no lo incluyéramos en el disco, y no nos pareció una buena idea. Les dijimos que podían incluirlo en la película pero que queríamos meterlo en nuestro disco, y ellos no aceptaron. El caso es que perdimos la oportunidad de aparecer en una de las bandas sonoras más famosas de aquella época y fue una pena, habría sido una gran oportunidad de ver a PRIEST en una película importante y nos habría ayudado a crecer. Aparecer en una película o en un anuncio siempre es importante si lo que quieres es que tu número de fans crezca, puedes llegar a alguien que nunca ha escuchado hablar de JUDAS PRIEST.
Simplemente fue una de esas cosas que no terminan saliendo bien, pero es un tema muy importante para el disco.
– Como extra esta nueva reedición incluye un directo grabado en el Kemper Arena de Kansas, ¿por qué habéis elegido esta actuación en particular?
Rob.- Creo que era importante incluir un concierto americano ya que iba más en consonancia con «Turbo», pero también queríamos una grabación que capturara la energía, la atmósfera y el rollo que había alrededor del lanzamiento. También tuvimos la suerte de encontrar este concierto con buen sonido y completo y nos pareció perfecto para casarlo con el CD y el vinilo.
Además es un concierto en el que no solo puedes experimentar los temas de «Turbo» en el repertorio, también las canciones antiguas. Creo que captura a la perfección el momento y la época, hay mucha intensidad y locura y se puede sentir lo que era JUDAS PRIEST en aquel momento.
Creo que es un paquete muy completo, el disco de estudio con la oportunidad de escuchar los temas en directo, el cual además demuestra que podemos transportar al directo cualquier cosa que grabemos en un estudio. Desde el punto de vista de un músico creo que está muy bien poder experimentar las dos caras del álbum.
– Por lo que sé, «Turbo» en origen fue concebido como un disco doble que iba a llamarse «Twin Turbos» pero la idea quedó descartada. Aunque algunos de los temas que no se incluyeron en «Turbo» terminaron en «Ram It Down» y otros aparecieron en las reediciones de la caja, ¿no pensasteis en incluir como extra más material de las sesiones de «Twin Turbos»?
Rob.- Lo estábamos pasando muy bien en Málaga y estábamos teniendo muchas ideas para el disco, así que seguimos componiendo y componiendo. Como he dicho antes, fue la primera vez que tuvimos tiempo de verdad para tomarnos con el álbum, y decidimos trabajar bien la pre – producción, algo muy importante porque son las bases de lo que quieres conseguir.
El caso es que al final terminamos con un montón de temas para «Turbo» (como has dicho algunos terminaron en «Ram It Down» aunque con un enfoque muy diferente), y propusimos al sello hacer un doble disco de estudio grabado en directo, pero a ellos no les gustó la idea y se pusieron a elegir los temas que debíamos grabar. Ellos pensaban que condensando el disco en esos temas estaríamos en una mejor posición para mostrar a los fans lo que queríamos y en que momento nos encontrábamos musicalmente. Al final nos gustó su idea y «Turbo» terminó como lo conocemos.
Algunos de esos temas terminaron «Ram It Down» y algunos aparecieron en las reediciones, así que decidimos que el disco fuera lo más parecido posible al original.
– ¿Y qué hay de esa versión remezclada de «Turbo Lover» denominada «Hi – Octane Remix»? ¿No pensasteis en incluirla en esta nueva tirada? Tampoco apareció en la anterior reedición de «Turbo» que se incluía en la caja con todas las reediciones.
Rob.- La verdad es que queríamos mantener la esencia original del disco; misma portada, el mismo orden de temas, etc. De algún modo los fans siempre están ligados a las cosas que has hecho, por lo que siempre que hacemos una reedición, nos aseguramos de que sea para mejorarla. No es exactamente mejorarla, es darle un toque diferente, que sea mínimo, pero que los fans lo noten.
– Para terminar, ¿qué traerá el futuro para JUDAS PRIEST?
Rob.- Muchas gracias a todos nuestros increíbles fans en España y esperamos volver pronto con el nuevo disco y veros otra vez a todos.
Antonio Cerezuela
En mi opinión, está claro que «Turbo» fue el intento de Judas Priest de hacerse hueco en el mercado norteamericano, aprovechando lo de moda que estaba el Hard Rock por aquel entonces. Para mí sigue siendo su mejor disco, con una gran producción y temas divertidos y creativos de principio a fin. Es una pena que solo suelan incluir «Turbo Lover» como mucho en sus directos.
Pues para gustos los colores, pero para mi el peor disco de Judas de la década de los 80 (desde British Steel hasta el Painkiller) Peor incluso que el Ram it down, que a pesar de ser muy irregular contiene al menos 3 o 4 trallazos. Quizás yo sea demasiado cuadriculado.
Para mi es un disco especial por la edad que tenía, de hecho es el primero que publicaron desde que empecé a escuchar rock y heavy, allá por el 84. Siempre lo he visto un disco fresco y con 3 o 4 buenas canciones, pero un tanto irregular. Para mi lo peor de la década fue Point Of Entry, en el cual ya intentaron hacer un sonido más hardrockero buscando pegar el pelotazo en USA… cosa que lograrían curiosamente con el más heavy que hicieron en esa década, el Screamin’
Hombre, el mas heavy de esa década fue el Ram it Down, eso es un hecho y hasta ellos mismos lo han afirmado siempre.
Si, puede ser. Pero cuando sacan Screaming es el más agresivo y rápido de su carrera hasta ese momento, me refería más bien a eso.
Yo creo que defenders of the faith es igual de heavy o mas que el screaming for vengeance. El problema del defenders es su sonido , muy blando , con l abateria muy floja y en segundo plano. El screaming suena mas cañero.
Cuerto. Entre discacos como el British Steel, el Defenders o el Screaming se me había pasado el Point of entry, que coincido sí es el menos acertado de la década. De puro intento de ser accesible y comercial resulta muy aburrido. Me recuerda un poco al Flick of the switch de ac/dc, que entre tanta obra maestra pasa bastante desapercibido en la correspondiente discografía de cada grupo.
El Flick of the switch es un disco cojonudo, me puede gustar hasta más que el For those… porque ese disco se acaba haciendo pesado, lento y aburrido pero el del 83 suena directo, variado y con un sonido menos tratado y más básico, más adecuado para la ideología de ka banda. Para mí es el gran olvidado, tiene temas cojonudos como el tema título y el Guns for hire por ejemplo, a partir de ahí la banda empieza a decaer hasta el rompepelotas, para mí su mejor disco desde éste del 83.
Para mí, AC DC plancharon su último gran disco con «Flick of the Switch», al menos de esa etapa. El «For Those…» me flipa más, pero «Flick…supuso cierto aire fresco, con Simon Wright en batería.
Flick Of the Switch fue el primer disco de rock que escuché en mi vida, allá por el 84, imagina lo especial que es para mi. Tiene grandes canciones para mi gusto, las dos que comentas y otras como Badlands, This House… A mi también me gusta más que el For Those
A mi el point of entry tambien me parece de los mas malos que tienen. Apenas hay 3 o 4 canciones que me gusten.
Se nota que ese remix de Turbo Lover no le hizo mucha gracia al propio Rob ya que evita responder sobre pq no se incluyó en las anteriores reediciones.
Yo si hecho en falta algún extra en esta reedición, asi como en la reedición del Defenders. Aunque en aquel caso al menos tenias un directo completo de la gira y aqui te incluyen lo mismo si, pero que no deja de ser un Priest Live 2, con exactamente el mismo setlist y ningún extra realmente jugoso para los fans que incluso completistas como yo ya tenemos toda su discografia un par de veces como es mi caso. Y algunos álbumes incluso tres veces.
Bueno no tiene el mismo set list exactamente, Locked In Desert Plains, Victim Of Changes, The Green Manalishi (With The Two-Pronged Crown) no están en el Priest…Live.
Es cierto, con tanto bootleg ochentero que tengo me sonaba que esos temas ya estaban incluidos originalmente. Aún asi sigue sin parecerme aliciente suficiente para comprarme el disco por tercera vez. Y mira que soy fan eh.. jeje.
Coño, pero cantaba Cocodrilo Dundee en los Judas por aquel entonces?
Añoranza Priest. Por aquel entonces observé y sentí «Ram it Down» como un trabajo extraño, no precisamente de relleno, pero sí con altibajos, aunque ahora lo valoro y comprendo mucho más. Siempre me sobró «Johnny B. Goode», y alguna otra. Tal vez el tratamiento sonoro que le dieron pretendiese endurecerlo frente a «Turbo», o la propia actitud de los músicos buscase un enfoque más duro que nunca, también se aprecia una mejora del trabajo de guitarras. Es como un puente hacia lo que vino de inmediato, pero dejando atrás el sonido sampleado de batería, presente desde «Defenders of the Faith», y agregando a un músico más completo y complejo para poder afrontar nuevos retos.
«Turbo» descolocó a la gente durante unos días, con sus aires Pop, su batería exageradamente tratada y esas guitarras sintetizadas. Pero eso se pasó en nada, eran tiempos de cambio, al tiempo que el disco sonaba bien duro. «Out in the Cold» es fantástica. Este trabajo me parece excelente, Judas pudieron ejercer su visión más comercial de una forma indisimulada. Lo que no cuajó en «Point of Entry» (que simplemente adoptaba las formas básicas de enfoque y producción del «British…», y que me parece un trabajo muy disfrutable), sí que se logró con «Turbo», de alguna manera. Le echaron huevos con el nuevo sonido, se arriesgaron.
Claro, tras dos discazos impresionantes… sin duda sus discos más «Heavy», digan lo que digan o dijesen lo que quisieran decir en la época: «Screaming for Vengeance» y «Defenders of the Faith». Esto lo sabe cualquier fan de Judas Priest, otra cosa es que cada uno tenga sus respetables gustos, o que la producción de «Ram it Down» suena mucho más dura en distorsiones, pegada de batería, etc, y con un Halford en plenitud bestial. A Maiden les pasó algo similar con «Somewhere in Time», aunque no son casos comparables por las enormes diferencias entre sus planteamientos musicales.
Sin embargo, no hay un solo tema en «Ram it Down», ni el tema título, que compita con cualquier Hit de esos dos pepinazos increibles (o de otros trabajos de la banda), al menos bajo mi punto de vista. Es impresionante mirar atrás y recordar qué significaron esos álbumes de Judas y cómo fueron evolucionando y volviendo al redil, de alguna manera, desde 1986 hasta «Painkiller». En aquel momento eran muy grandes.
«Priest Live» es un buen disco, pero este nuevo directo (posiblemente hasta ahora tenido en cuenta un bootleg, aunque no lo sé) sí será un verdadero indicativo de unos Priest sin amaños de estudio o pequeños retoques. Incluso de sonido real del público (esperemos que eso no lo hayan agregado o modificado en la mezcla). Unos verdaderos Priest en vivo, en crudo.
A veces, los músicos tienen un concepto sobre sus antiguos trabajos que es absolutamente distinto del de los fans, o parte de ellos. Es otra de las cosas que tiene la música, una magia intocable. Pero en ambos sentidos. Para mí, desde «Painkiller» (que en lo personal no sitúo entre sus ocho mejores trabajos) comenzaron un declive del que no se han recuperado, por desgracia. No solo hay que mantenerse con discos, hay que hacer discazos al nivel de responsabilidad que otorgan los años como leyenda, y ahí es donde pienso que han sido y son demasiado complacientes. Es mi simple opinión, ojo.
Me hice con la reedición aniversario de»British Steel» (un poco pufera, la verdad, el propio concierto es un poco ñoño) y con la de «Screaming for Vengeance» (excelente DVD extra, y más), pero no creo que adquiera ninguna más de las que vayan sacando. Lo dicho, añoranza Priest… hay muy pocos días en los que no escuche sus trabajos, de hecho, hace nada me puse el directo de 1982 en Memphis.
La entrevista de Halford… es un gran tipo, sin duda. Pero tiene que vivir de esto, y creo que se pasa con sus reediciones y demás. Sin él, ahora mismo Priest sería un cadáver. Con él, no son ni la sombre de lo que fieron, por desgracia. Creo que desdse hace muchos años les ha faltado conexión, y algo más de trabajo duro en las composiciones, etc. Discos mucho más relevantes, vaya. Lo que no les resta estatus de leyenda, pero no es lo mismo figurar en discreto primer plano que estar a tope dentro de las posibilidades que otorga la edad, claro.
Supongo que la mayoría la habréis visto, pero para veteranos despistados, es recomendable la película «Metalhead», de Ragnar Bragason. Ahí hay un par de claves que apuntan al verdadero poder de la música de Judas Priest y su importancia en este rollo. Viva el Heavy. Un saludo.
Los grupos no pueden estar toda la vida sacando joyas de discos , todos , absulutamente todos , tienen su epoca de maximo esplendor y luego la cosa va decayendo. Es algo logico , incluso biologico. COnforme se va haciendo la persona mayor , la capacidad creativa va decayendo , y en el directo , lo mismo. No puede dar lo mismo en directo alguien con 30 o 40 años , que con 60. Muy pocos grupos clasicos hay que saquen joyas de discos hoy en dia , equiparables a los de su mejor epoca.
En cuanto a escuchar al grupo , yo no escucho a Judas Priest desde julio de 2015 , que les vi en directo en Madrid. La verdad es que escuho muy poco o nada a los grupos clasicos. Me centro en los nuevos , que hay muchos y de gran calidad. Como he dicho antes , los clasicos no sacan ya discos impresionantes como antaño. Y sus buenos discos , ya estoy cansado de escucharlos durante 30 años.
Claro, escuchar material clásico no exime de estar al día en material actual, del tipo que sea. Saludos.
A ver, al comprar el TURBO recien salido, a mi lo que me provoco no fue descoloque, si no un CABREO de mil pares de cojones. Me dieron ganas de partir en 2 el vinilo. Y no, no se me paso en 2 dias. Tarde años en poder apreciarlo.
opinando que judas acabo el stained class ,he de reconocer que turbo fue un muy buen disco ,ahora todo un clásico, aunque fue una flor de verano porque no volvieron hacer nada mas.
Pues yo lo escuche por primera vez en el 88 , despues de haber escuchado el ram it down , y el british steel (El defenders y el screaming los descubri mas tarde) , y la verdad es que tambien me produjo cabreo , y apenas me gustaron 2 o 3 canciones. Despues de ese desencuentro con el disco , estuve años y años sin volver a escucharlo. Con el paso del tiempo , me parece un buen disco , y todas las canciones me gustan. El tiempo suele cambiar la perspectiva de las cosas.
Pues cada uno con sus gustos. Para mi los dos mejores de Judas y por este orden:
British Steel
Turbo
A mi TURBO siempre me ha parecido una intentona de conseguir el exito comercial que sus compatriotas DEF LEPPARD consiguieron con PYROMANIA en las americas. Intentaron no perder la esencia JUDAS pero con un acercamiento bestial a a todo lo yankie q por aquel entonces significaba «poder» en todos los ambitos musicales, quizas no tanto en la composicion aunque bastante evidente en la produccion.
Tiene temas interesantes pero sin decir que sea el mejor o el peor de JUDAS … a mi se me queda un poco corto.
Metal-Gods me encanta tu comentario de más arriba, lo comparto casi todo, pero solo una cosa…. De verdad que no incluyes a Painkiller ni siquiera entre sus ocho mejores discos? Joder tío… A ver, yo adoro todos y cada uno de los discos de Judas, amo sus primeros discos, me fascina el sonido Sin after Sin o killing machine pero por favor…Painkiller es una jodida obra de arte!! Para mi no sólo uno de lo mejores discos de Judas Priest, sino uno de los mejores discos de Heavy Metal de todos los tiempos. Perfecto de principio a fin, con un cantante y unos guitarristas en estado de gracia dando una lección magistral casi imposible de superar en cada segundo del álbum. Recuerdo que la primera vez que lo escuché me quedé con la boca abierta, no me lo podía creer, bendita sensación la que tuve en aquel momento que pocas veces en mi vida he vuelto a sentir… Tuve la certeza absoluta de que estaba ante una inmensa obra de arte y con el paso de los años creo que ese álbum marcó una época y ha influenciado a miles de bandas…Y si no que se le pregunten a Primal Fear por poner un solo ejemplo…
Mis discos favoritos de Priest son Sad wings of destiny, british steel y Painkiller. Cada uno representa un momento, una época…diferentes entre si pero regalándonos temas maravillosos a cada cual más inspirado…
Saludos a todos!
P.D. ah y sobre Turbo, que si, que con el paso de los años lo he llegado a apreciar más y me gustan casi todos sus temas pero para mí nunca figurará entre los mejores de Judas.
Hola Invictus. Sería largo de explicar, aunque podría ser un interesante debate. Pero el final es simple y muy subjetivo, respecto a mis gustos musicales o preferencias: poniendo cada disco anterior en balanza con este, no hay casi nada ahí que me «emocione» verdaderamente, al menos más allá de dos o tres canciones («One Shoot of Glory», «Leather Rebel», «Night Crawler»). Y reconozco que a nivel dureza expresiva, producción, técnico, evolutivo, etc, hay un salto, pero tampoco es para tanto. Estribillos pegadizos, algún riff más quedón… también mucha simpleza y repetición de ellos mismos. Es un pulimento, un readaptarse de nuevo, con un baterista distinto y que les abrió otras posibilidades musicales… pero simplemente no veo el gran logro que algunos sí ven. Todo esto entendiendo que para muchos es su gran album de Judas, cosa que respeto al máximo, por supuesto. Es decir, entiendo por qué ese disco se observa así.
Pero si coloco «Sin After Sin» y «Painkiller» en una balanza y olvido la época en que fueron concebidos… personalmente, no veo color. Y así.
Aprovechando la coyuntura: no creas que me he quedado anclado en el pasado, escucho todo tipo de bandas actuales y de todos los tiempos. Pero por otra parte, no hay cosa que más me «duela» que ver una banda mítica lanzar discos sosos o acaramelados. Y no va por «Painkiller», precisamente. Un saludo.
Anda, una ristra de post sobre «el mejor disco de » ACDC, Ironmaiden y Judas…
Estos post me recuerdan a las conversaciones de bares de abuelos sobre futbol. Pues el madrid, pues el barca, pues tal copa, pues tal delantero…qué entrañables 🙂