WACKEN METAL BATTLE SPAIN
Final WOA Batalla España
Sábado 7 de Mayo de 2016 – Sala Becool – Barcelona
Conseguir ir a los Juegos Olímpicos, participar en la final de la Champions, ser reconocido con una estrella Michelin, pelegrinar a Tierra Santa o poder tocar en Wacken con tu propia banda. ¿Qué tienen en común todas las metas que acabo de decir? Cada uno de ellas es el sueño que un grupo de personas desea cumplir. Todas tienen su importancia, no hay duda, pero la que aquí interesa al personal es el sueño por el que un gran conjunto de bandas han peleado: poder reventar el mítico festival de Wacken con un riff de su guitarra. Cabe recordar que el año pasado no hubo batalla por las rotaciones que hay entre los países participantes en el popular concurso alemán, pero este año de nuevo la teníamos aquí.
Después de unas disputadas semifinales, la ciudad condal se vestía de metal para recibir a la final. El sábado 7 de mayo era la fecha escogida para celebrar el acontecimiento. Siendo fieles a la tradición, la sala BeCool era la elegida para albergar la batalla final donde BLAZE OUT, THE DESCENT, GRAPESHOT, LEGACY OF BRUTALITY, CANNIBAL GRANDPA y VRADEMARGK iban a presentarse con sus mejores armas para ganar. Posiblemente esta edición ha sido mucho más natural en comparación a otros años; si analizamos con cabeza: el descanso ha servido para cargar las pilas y relajar el sobrecargado ambiente competitivo que había entre las bandas por querer ir a Wacken.
Antes de ponerme a hablar quiero hacer una advertencia: no os esperéis la típica reseña donde se va a sacar a relucir los errores de las bandas y se va a destacar la razón para que LEGACY OF BRUTALITY ganaran. Quiero honrar todo el esfuerzo que cada una de las bandas realizó para llegar a tocar en Barcelona el sábado pasado.
Dejando de lado el pésimo sonido que lució la sala junto a unas luces que no permitieron un buen espectáculo a nivel visual, cada grupo peleó con sus manos para dar su mejor versión durante los trepidantes 20 minutos de actuación. A nivel de horarios todo fue un caos desde el mismísimo inicio; se retrasó la apertura de puertas de forma considerable y eso provocó que más de uno acabase perdiendo la noción del tiempo en la taberna irlandesa de al lado de la sala.
Pero centrándonos en lo importante y son las bandas participantes, cada uno de ellos mereció ganar por un factor u otro: THE DESCENT combatieron de tú a tú pese a no estar en su hogar y ser los que abrieron la noche, plantaron cara de la mejor manera posible contra el tópico de «ser los primeros» y lo que implica ello (tener la sala medio vacía, ver como muchos de los asistentes van entrando a ella mientras tocas y por ello caer en la desconcentración sin proponérselo). CANNIBAL GRANDPA dieron un recital de energía con toda la naturalidad del mundo, se les notaba una unión de muchas horas de ensayo conjuntas y unas tablas sobre el escenario que lucieron sin tabú alguno. Se hizo corto el concierto, pero dejaron un buen sabor de boca entre todo el personal allá reunido. VRADEMARGK demostraron que se puede tocar death metal con una potencia digna de los grandes, pero que a su misma vez se puede estar como un niño el día de navidad ante lo que tenían enfrente y sin quererlo: ser un tanto lineales.
A BLAZE OUT les tocó el peor sonido de la noche; eso, y unos nervios que pudieron jugar alguna mala pasada, afectó a la actuación de la banda catalana que fue floja en comparación a la semifinal. Pero si de algo puede presumir esta banda es de seguidores y estos, junto a la entrega por parte de Gerard Rigau y los suyos, nos hicieron sentir calor sin ser el clásico sofoco que suele provocar la banda habitualmente. GRAPESHOT fueron ellos mismos con una sonrisa de oreja a oreja, dieron un toque divertido/macarra y guarro a la noche y pese a que un gran número de personas habían abandonado la sala al acabar el grupo anterior, fue la actuación con más buen rollo de toda la noche. LEGACY OF BRUTALITY salieron con energía, demostraron técnica y unas dotes de puesta en escena que derrumbaron los pilares de la sala BeCool de una forma apocalíptica. Todo ello para convertir a Barcelona en una nueva Asturias con tanto derroche de pasión.
Las seis bandas acabaron y mientras el jurado se retiraba al piso de arriba a deliberar lo más tranquilo que podía, Steffi y los suyos salieron a dar un recital de metal en la capital catalana. IN MUTE eran los cabezas de cartel de la noche sí, pero seamos realistas: la inmensa mayoría de los allí presentes no habían venido a ver a los de Valencia y por eso más de uno aprovechó su actuación para ir a cenar. No estuvieron solos, eso que quede claro; un pequeño público aprovechó la ocasión para ver a los anteriores ganadores de la batalla de Wacken con sus propios ojos. IN MUTE dieron un concierto un tanto discreto y sin tener la característica garra con la que les he visto en anteriores ocasiones. No sé si fue por qué no fue su noche, las condiciones técnicas de la sala les desconcentraron, simplemente no quisieron quitar el protagonismo a las seis bandas que acababan de tocar o una fusión de todo. Algo bueno sí que se notaba en sus caras: la banda estaba contenta por volver al lugar que tan buen impulso les dio a su carrera, lástima que por una cosa u otra no acabaran de demolerla.
Llegaba la hora, un jurado con nombres totalmente respetables se subió al escenario para anunciar lo que todos esperábamos. Los nervios que circulaban por el ambiente se podían palpar por su intensidad. LEGACY OF BRUTALITY fueron los ganadores de la batalla. Puedo entender las razones del jurado y respetarlas; solo uno podía ganar y los de Asturias demostraron que con fe en uno mismo y una energía sobresaliente por su compacto death metal, se puede ganar pese a no estar en el hogar. Hubieron caras largas, algo lógico y comprensible, dado que la ilusión era máxima. Yo solo espero que tanto los finalistas como los semifinalistas se queden con lo siguiente: todos somos importantes en el momento exacto, lo importante es saber ver ese momento. Sin ir más lejos: habéis ganado una experiencia, pelear por un sueño es algo que no se puede encontrar fácilmente.
Si hubiésemos estado en el coliseo romano, os aseguro que cada gladiador se habría alzado con un poder digno capaz de derrumbar a cualquier emperador. Estemos orgullosos de nuestra escena rica, variada e digna para recoger el testigo de los más grandes que desgraciadamente se jubilarán tarde o temprano. LEGACY OF BRUTALITY se unen a la familia que bandas como CRISIX, VITA IMANA, RAVENBLOOD, TRALLERY y IN MUTE han encabezado de una forma gloriosa. Su resultado en el propio festival alemán seguro que será optimo y su futuro también.
Los precedentes son buenos, el nivel es alto y Asturias tiene un nuevo hijo predilecto. ¿Qué más podemos pedir? Larga vida a Wacken y la oportunidad que da cada año a bandas desconocidas. Más de una sorpresa nos podemos encontrar saliendo de este festival, sino que se lo pregunten a las bandas que ha cambiado su vida.
Texto: Alex Hidalgo
Fotos: Elena Marco
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todas ellas demostrando que el metal nacional es mucho más que Barón Rojo, Oker, Saratoga o Mägo de Oz
metal con dos cojones, calidad y pocos apoyos.
para mi la mejor era The Descent.
Enhorabuena a Legacy of Brutality. Van a reventar Wacken.