+ ELECTRIC FUNERAL
Sábado 26 de septiembre de 2015 – Sala Edaska – Barakaldo – Bizkaia
Muchas ganas había por parte de todo el entorno del grupo de que llegara esta noche para ver a unos reformados THE NAME tras un año y tres meses en proceso de restructuración tras la salida de la banda de Javi Caldito (guitarra) y Roberto Orruño (batería). Les habíamos visto este verano con la coincidencia de que ese día faltaban los dos reemplazos del grupo, con lo que tan solo brindaron una corta actuación en acústico. Así que este era el día en que THE NAME nos confirmaría definitivamente que siguen en la brecha, más vivos que nunca con más fuerza si cabe que la última vez que les viéramos en eléctrico sobre un escenario, demostrando que los obstáculos del camino, una vez sorteados, solo dan más firmeza y seguridad en el paso.
Esta cita acarreó la presencia en escena como banda de apertura de ELECTRIC FUNERAL, grupo tributo a BLACK SABBATH al cual tenía muchas ganas de ver. No en vano tributan a una de las bandas clave y más importantes de la historia del heavy metal. Incluso para muchos son los absolutos creadores del estilo. Lo indudable es que de no serlo, contribuyeron sobremanera a definirlo.
ELECTRIC FUNERAL comenzó como idea en 2001, pero realmente esto se consolida en el reciente 2014. De hecho, si mal no me informaron este era su cuarto concierto como banda. Teniendo este hecho en cuenta la sensación de lo vivido rememorando exclusivamente temas de la primera época de Ozzy en la banda británica no puede ser mejor.
Hay que decir que los músicos son curtidos, que saben por dónde se andan y que tienen un dominio cada uno de su posición en la banda que les hace sonar con calado, independientemente de alguna traba en la ejecución que no pasó a mayores. Además el repertorio fue bastante completo, aunque cabe ponerle en el debe el olvido de «Sabbath Bloody Sabbath», uno de sus discos más representativos. El riff del tema homónimo es uno de los que debería impartirse en las escuelas de metal.
Quitando este borrón con fácil arreglo en el futuro, con ellos solo cabe disfrutar si te encuentras entre los amantes de ese sonido sucio, oscuro y denso que Tony Iommi y sus chicos crearon en una época donde nadie a ese nivel se mostraba más rupturista. Estos se saltaron la reminiscencia blues que todavía impregnaba a contemporáneos como ZEPPELIN y PURPLE para pasar a hacer algo totalmente nuevo, arriesgado. Eso lo saben ver perfectamente los componentes de ELECTRIC FUNERAL, que homenajearon con respeto y nivel al grupo, demostrando que pueden convertirse en un nuevo grupo tributo a tener muy en cuenta.
Entre lo mejor del repertorio me quedo con «Sonwblind», seguido de cerca por «Iron Man». Tampoco cabe menospreciar ninguno de los temas, como por ejemplo un «Dirty Women» sensacional; como bien dijo su vocalista, Calos Fernández, de un trabajo infravalorado como «Technical Ecstasy». Igualmente queda en la memoria la colaboración de Guillermo Fernández de THE NAME haciendo un dueto vocal junto a su hermano en el ideal para ello «War Pigs». ¿Quién no tiene en mente al público coreando en respuesta a Ozzy en los conciertos de BLACK SABBATH? Aquí se turnaron perfectamente el papel los dos vocalistas.
Cayeron temas de la complejidad de «Fairies Wear Boots», temas tan imperecederos como «N.I.B» o «Children Of The Grave», sin olvidar el adiós a la época de Ozzy en los 70 con «Never Say Die», haciéndonos rockear como lo hizo para acabar el infalible «Paranoid». Todos ellos sonaron excelentemente, con una banda que sabe en qué punto hacerlos sonar para que cualquier seguidor de los SABBATH originales pueda disfrutar del legado de uno de los grupos imprescindibles para cualquiera que adore esto del Heavy Metal.
Tras ellos THE NAME salieron a escena a por todas. Dicen que lo que no te mata te hace más fuerte y eso debe ser lo que cabe aplicar a la banda vizcaína. Porque después de verles en infinidad de ocasiones, incluso con formaciones asentadas durante algún tiempo, considero que esta presentación de nueva banda ha sido la mejor de todas ellas. No sé lo que ocurrirá cuando cojan rodaje, pero de momento en este concierto no se notó en nada falta de engranaje en las nuevas piezas ni el óxido propio de un parón más largo de lo que se hubiera querido, todo lo contrario.
Comenzando por el componente pasional, que parece contagiado en cada miembro del grupo, y continuando por el nivel de ejecución, todo salió esta noche a pedir de boca en uno de esos conciertos que se recuerdan por mucho tiempo por parte de todos los presentes. Y para terminar de acompañar, el sonido fue impecable, potente y nítido, a lo que tampoco faltó una calurosa respuesta de sus incondicionales, algo sembrado desde el escenario con la propia actitud y calidad de la banda.
A todo esto el grupo ofreció tres nuevas canciones esta noche en un repertorio donde no faltaron temas ya muy especiales para cualquiera que se haya acercado a la música de esta recomendable banda. Los elegidos fueron tres temas bien diferenciados, todos ellos integrantes de un futuro disco hoy anunciado por la banda, aunque sin atreverse a dar título aun. «Impostor» fe el primero, este siendo un tema muy cañero y duro, sacando a relucir la vena más heavy de THE NAME. El lado nostálgico siempre implícito en un grupo con ese tinte oscuro, lo puso «Cadenas» y para rematar la ofrenda de piezas nuevas que auguran un inminente gran futuro para el grupo tuvimos un instrumental con una onda progresiva que también el grupo ha tenido siempre muy a mano.
Alrededor de estos nuevos alicientes la descarga entró con el gancho de la melodía de «Invisible», arrasando con sus temas más directos como «Rezar Por Ti» o «No Hay Perdón», e hipnotizándonos con la profundidad de «Tu Disfraz». No dejaron fuera temas que pueden ser tomados como insignia del grupo, caso de «Aun Sigo Ahí», probablemente el tema con el que deberíais conocerles si aún no habéis entrado en el mundo de esta maravillosa banda. Puede ser la canción que mejor les define.
Otro de los intocables en su repertorio, de los que sobreviven de su primera maqueta, es «Secret Universe», con su hermano Carlos de ELECTRIC FUNERAL devolviendo la colaboración anterior antes de terminar entre el público en un tema siempre coreado por el personal y aprovechado por Guillermo para presentar a sus actuales compañeros de batallas. Por un lado, los de la vieja guardia, Andrey Aza al bajo y Axier Báez al teclado; y, por otro, los que aportan savia nueva y renovada ilusión en el grupo, Greg MG Sworth a la guitarra y Ander Alonso a la batería.
En la recta final todo eran ya sonrisas en la sala, el regreso por todo lo alto estaba rubricado, pero aun nos ofrecieron un tema del impacto de «Mi Realidad», que pese a su dureza en música y letra fue un desahogo de satisfacción por parte de todos los congregados en una sala Edaska que vibró de lo lindo gracias a un grupo que hizo de ésta una noche muy especial. Más que simplemente una noche de confirmación de su continuidad en la brecha fue la ratificación de una inquebrantable fe en sus posibilidades, en lo que ya han hecho y en lo que aún está por llegar.
Texto: Antonio Refoyo (www.lamiradanegra.es)
Fotos: Mari Jose Martin (www.lamiradanegra.es)
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