Crónica y Fotos de DÜNEDAIN y EDHELLEN en Madrid

+ EDHELLEN

Viernes 29 de Mayo de 2015 – Sala Caracol – Madrid

Momento importante para DÜNEDAIN, que eligió la Sala Caracol de Madrid para presentarnos a Carlos Sanz, nuevo vocalista de la banda y que hará que Tony se centre en directo en la guitarra y las segundas voces. Como grupo invitado estuvo EDHELLEN.

El grito de guerra que dieron los chicos de EDHELLEN antes de salir al escenario se escuchó desde el público, un gesto que denotaba las ganas que tenía el combo alicantino de tocar en la capital. Arrancaron con «Cuento olvidado» de Sombra y anhelo, álbum debut de la banda. Su propuesta es un metal sinfónico y progresivo que puede recordar por momentos a grupos como Rhapsody o Angra. No tuvieron demasiada suerte con el sonido, y es que a veces se perdía el bombo o la voz, otras el teclado se ponía incluso por encima de la voz o las guitarras apenas se distinguían. Tampoco fue la noche de su vocalista, Álvaro Karnac, que resoplaba lamentándose de algunos errores.

A pesar de los citados problemas, pudimos hacernos una idea de lo que puede ofrecer un conjunto que tiene buena técnica (sería inmolarse si no fuera así en un grupo de este estilo), pero al que le falta ejecutar mejor sus propios temas. Creo que también les vendría bien definirse mejor porque, más allá de gustos personales, sus canciones son quizá demasiado enrevesadas, con melodías que no entran a la primera y con estructuras que no hacen fácil recordar un estribillo o un momento determinado del concierto. La impresión que tuve es que es una banda muy rimbombante y teatral, con influencias de la música clásica, especialmente en las voces, pero a la que le falta algo para conectar con el público. Que el mejor corte que funcionara en su actuación fuera su versión de «Un beso y una flor» de Nino Bravo dice mucho al respecto.

A su favor hay que decir que «De sangre y sal», tema de su segundo disco, previsto para finales de año, fue de los que mejor aceptación tuvieron. En este sentido, cabe citar las influencias de grupos nacionales como DRAGONFLY, OPERA MAGNA o STRAVAGANZZA. Esperaremos a ver qué tal este nuevo trabajo. Mientras tanto, deben aprovechar su talento para seguir mejorando como banda.

Setlist de EDHELLEN

1. Cuento Olvidado
2. Buscando Un Sol
3. Sombra En El Océano
4. Tras Las Llamas
5. Un Beso Y Una Flor (Versión de Nino Bravo)
6. Eterna Noche
7. De Sangre Y Sal
8. Reflejos

Con una asistencia que rozaba la mitad del aforo de la Caracol, DÜNEDAIN abrió fuego con la cañera «Buscando el norte». Carlos Sanz salió para comerse el escenario, muy enérgico y dispuesto a animar a todo el mundo, pero es que el resto de la banda no se quedó atrás. El público respondió muy bien, cantando y saltando desde el primer momento. Además, la banda sonó genial desde el principio.

La rockera «Fiel a mi libertad» fue la siguiente en caer y me sorprendió lo empastado que ya está Carlos con el grupo, y eso que fue su tercer concierto junto a ellos. El trabajo de voces junto a Tony, que ahora toca mucho más relajado y se acaba notando para bien en el resultado final, todavía tiene que perfeccionarse en general, pero hacen una muy buena pareja vocal.

¿Y qué tal Carlos? Me encantó. Tiene un timbre muy cálido en los tonos graves y medios, algo muy necesario para darle cuerpo a muchas de las melodías de DÜNEDAIN. Sus agudos son incisivos y muy precisos y, creedme, si alguien estaba buscando nuevas talentos para ir tomando el relevo de lo que supusieron Leo Jiménez o José Andrëa en su momento, Carlos es un claro candidato para convertirse en una de las mejores voces del heavy de este país. Tiene un control técnico brutal (es profesor de canto) y su afinación es impresionante (se dedicó un tiempo a cantar zarzuela de manera profesional, y se nota en la precisión con la que ejecuta las melodías). Además, empatiza muy bien con el público, anima y se mueve como un frontman de primer nivel. Todo ello de principio a fin, con una actitud incombustible y una voz que no flaqueó en ningún momento.

De las canciones más celebradas fueron «Mi alma sigue en pie», con ese ritmo power y esas guitarras dobladas a lo HELLOWEEN, la oscura y contundente «El año de la rabia» y la heavyrockera «Una razón». Por supuesto, si era la puesta de largo del nuevo cantante, no podía faltar el momento balada. Sonó «La última parada» y Carlos la bordó, especialmente a partir de la mitad del tema.

Me impresionó mucho «Solo un momento», con unos agudos de aúpa por parte de Carlos, muy a lo Saratoga, para que nos entendamos. ¿Las comparaciones son odiosas? Siempre, y por eso no diré que es mejor o peor que nadie, pero lo importante es que en directo te deja la boca abierta y tiene una personalidad propia, algo muy necesario para dejar huella. También me alegré al ver la comunión de la banda con el público en «Por los siglos de los siglos», todo un hit en su repertorio, y en «Corazón de invierno».

A nivel instrumental, DÜNEDAIN ha ganado mucho. Como decía, Tony ahora toca con más serenidad y precisión al no tener que preocuparse tanto de la voz, y Mariano, con una actitud muy rockera, la verdad que lo hizo muy bien. La base rítmica con Miguel y Jesús es compacta y bien definida. En definitiva, creo que ha sido todo un acierto haber incorporado a Carlos. Da la sensación de que era ese paso que faltaba para que la banda pueda ascender a la primera divisón metalera. Tienen buenos temas, una formación que da gusto escuchar y una buena base de público.

Quizá exagere, pero al salir de la sala me pareció haber visto un conciertazo de una banda que llegará lejos. El tiempo y la carretera lo dirán. Hasta entonces, si te gusta el heavy metal en castellano, no deberías perderte un concierto de ellos. No te dejarán indiferente.

Setlist de DÜNEDAIN

1. Buscando El Norte
2. Fiel A Mi Libertad
3. Noche De Sueños
4. La Rosa Negra
5. La Tierra De Los Sueños
6. Valor
7. 1000 Golpes
8. Mi Alma Sigue En Pie
9. El Año De La Rabia
10. La Última Parada
11. Una Razón
12. Melancolía
13. Solo Un Momento
14. Por Los Siglos De Los Siglos
15. Corazón De Invierno

Texto: César Muela – Twitter

Fotos: Juan Morillas

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