RIOT V – Unleash The Fire
Discográfica: SPV
Impresionante álbum, a todos los niveles, este «Unleash The Fire» con el que RIOT (ahora RIOT V) continúan el legado musical del malogrado Mark Reale (en paz descanse) con la aprobación de la familia de éste.
Hablar de RIOT es hacerlo de una banda que, en treinta y cinco años de historia discográfica ha tenido distintas etapas, siendo elementos comunes a todas ellas la calidad, el buen gusto y una capacidad creativa que ha hecho de Mark Reale, junto a las distintas formaciones de músicos con los que ha compartido su pasión, uno de los nombres propios dentro del heavy-rock. Queda sin embargo cierto poso de amargura al pensar que la historia no ha sido justa con ellos en cuanto a la popularidad que merecieron y no cosecharon, aunque su estatus como grupo de culto siempre será un valor que muy pocos podrán ostentar a futuro.
Para la posteridad han dejado obras maestras como el laureado «Thundersteel», «The Privilege of Power» (una de mis debilidades de la historia de la música universal, más allá del estilo), «Narita», «Fire Down Under», «Born in America» en una onda más rockera, «Nightbraker» o «Inishmore» inmersos en la etapa de Mike DiMeo como cantante y con un estilo más melódico acorde a la voz de éste, o el maravilloso «Inmortal Soul», que había sido su canto de cisne, hasta la fecha.
Capitaneados por el guitarrista Mike Flyntz, quien entrara en la formación en 1988, «Unleash the Fire» es un sentido homenaje al genio Mark Reale pero, por encima de todo, el sentimiento de añoranza al amigo perdido. Las letras están repletas de mensajes hacia él y cada una de las partes musicales bien podrían haber salido de su privilegiada imaginación. Todo el disco es 100% RIOT, o lo que es lo mismo, 100% heavy-rock de factura clásica, siendo además la perfecta continuación a «Inmortal Soul», un regreso por todo lo alto a su faceta más salvaje, rápida y técnica. Junto a Flyntz, la formación se completa con el vocalista Todd Michael Hall, quien rubrica un excelente trabajo consiguiendo que no añoremos a Tony Moore (que no es poco), Don Van Stavern al bajo, quien junto a Frank Gilchriest a la batería forman una consistente base rítmica) y Nick Lee a la segunda guitarra.
Doce cortes repletos de sabor clásico componen el disco, manteniendo un nivel uniforme en cuanto a calidad durante todo él. «Ride Hard, Live Free» es rápido, técnico y melódico, en la onda «Thundersteel» y con unas preciosas melodías de guitarra jugando entre riff y riff; perfecto tema de inicio. En mismas tesituras se mueve «Metal Warrior» (ya tenían un título parecido en «The Privilege of Power», «Metal Soldiers» como nota curiosa) con un precioso solo deudor de la escuela Reale, repleto de técnica, pero sin descuidar la melodía como elemento principal y cierto toque neoclásico. «Fall from the Sky» es aún más veloz, gracias al doble bombo y sobre todo a ese ritmo destroza púas junto a los ligados hammer-on que lo preside. «Bring the Hammer Down» es más duro y pesado, destacando su melódico puente y un estribillo hímnico que me ha encantado. «Unleash the Fire» es un trallazo heavy con un coro de los que enganchan a la primera, bautizando la presente obra con honores. Tras él, nos encontramos una de esas perlas musicales, de las que raro es el disco de RIOT donde no figura una como ella. Me refiero a «Land of the Rising Sun», toda una demostración de cómo hacer metal melódico con clase, sirviendo además para homenajear al país nipón del que tan buenos recuerdos guardan.
Llegados al ecuador del disco la calidad no decae. Buena muestra de ello es el portentoso riff de «Kill to Survive», con un alucinante cambio de tono y ritmo en su estribillo que me encanta. «Return of the Outlaw» se mueve en un registro más rockero, añadiendo variedad al conjunto. «Inmortal» es, en contraste, un precioso medio tiempo y no menos hermoso homenaje a su amigo perdido: «sigue brillando a través de la noche más oscura, tu música es eterna». «Take me Back» nos devuelve al heavy metal clásico liderada por las melodías dobladas de guitarras y otro juego de puente-estribillo estratosférico. «Fight, Fight, Fight» recupera la velocidad y dobles bombos en otro himno dedicado al estilo, siendo la antesala para la sentida «Until we Meet Again», la balada de cierre con una letra que pone la emoción a flor de piel, precioso epitafio para Mark Reale.
En ocasiones, la industria intenta jugar con los sentimientos del consumidor y apelar a los mismos de cara a la obtención de jugosos réditos. Pero cuando se trata de algo sincero, desde el corazón, y además con resultado sobresaliente en los apartados compositivo, interpretativo y técnico, como en el caso que nos ocupa, catalogar a un disco bueno (que lo es) es quedarse corto, pues el disfrute hacia el mismo no viene sólo desde los oídos, sino desde el corazón. «Unleash the Fire» es, hasta la fecha, de lo mejor que ha salido en 2014. ¡Disfrútenlo
J. José Jiménez – J_Jose_Jimenez@RafaBasa.com – Twitter.com/JJOSJIMNEZ
Lista de Temas:
- Ride Hard Live Free
- Metal Warrior
- Fall From The Sky
- Bring The Hammer Down
- Unleash The Fire
- Land Of The Rising Sun
- Kill To Survive
- Return Of The Outlaw
- Immortal
- Take Me Back
- Fight Fight Fight
- Until We Meet Again
- Thundersteel (live bonus track)
Me ha encantado el disco, no es tan impresionante como el anterior pero las tres primeras canciones ya merecen la compra del disco.
Se echa de menos a Reale en los solos, Flyntz lo hace bastante bien, pero se nota la falta de Mike en la composición.
En cuanto al cantante, cumple de sobra pero me quedo con Dimeo y Moore.
Lo más curioso del álbum es el sonido ochentero que posee;de hecho a mi me parece un «revival» de esa época pero en el 2014.Como mínimo me resulta un trabajo honesto y digno de una gran banda a la que muchos pensábamos que iba a desaparecer tras el fallecimiento de Mark.
Imprsionante discazo!!!. Como bien has dicho, es como escuchar un disco de Riot de los 80 pero en 2014. Brutal!!!
Ya lo comenté en el foro, acabará gustándome más que el Immortal Soul! Para mí, y a falta de 3 meses, es el disco del año.
Saludos.
Nunca me cansare de decirlo,Riot es una banda enormemente grande! Yo tarde mucho en descubrirla,pero una vez lo hice me enganche para siempre,simplemente es pura magia! Una pena no haberlos visto con Mark,siempre tendre esa espina,y la espina de no haber tenido el reconocimiento que merecen con creces,pero para »nosotros»,los que si sabemos lo que han sido,lo que son y lo que seran,siempre valoraremos su magistral obra y los llevaremos en el corazon (en especial a Mark,un autentico genio)
Riot siempre sera una »Immortal Soul»
Saludos 😉 Shine On Warrior!!!
Es un lujo encontrarse con un DISCO de estas características y a la vez una pena que no tengan el reconocimiento que merecen. A buen seguro el mejor disco del año junto al de Accept dentro del metal clásico, ya podían apuntarse el cuento muchas bandas consolidadas y ofrecer un mínimo de lo que este disco ofrece.
No llega para mi gusto al Inmortal Soul pero se acerca mucho.
Muy buen disco ….grandes RIOT