TANKARD – R.I.B.
Discográfica: Nuclear Blast
Hablar del regreso de los teutones TANKARD es una tontería, y es que esta gente es como una mancha de aceite, no se van ni con aguarrás, y yo que me alegro oiga. Siempre estará ahí la eterna discusión de qué escuela thrasher es mejor, si la americana o la europea (alemana mayormente), que si old school que si no sé qué…personalmente siempre me he decantado por lo segundo salvo excepciones puntales (SLAYER que no me los toquen), y de entre todos los grupos existentes, TANKARD siempre han sido los que nunca me han fallado con el paso de los años, sencillos como el mecanismo de un chupete, eficaces siempre en su cometido como un martillo.
Arranca este «R.I.B.» con «War cry», y desde un inicio me asombra como Gerre, con la de piscinas de cerveza que llevará ya en esa enorme panza, sigue cantando exactamente igual que el primer día, y es que parece que por él no pasen los años aunque aumenten los kilos. Si no habíamos entrado en calor ya, «Fooled by your guts» hará que mováis la cabeza sin lugar a dudas, contundente y sin tiempo para mariposillas ni adornos, pero si mucho, mucho alcohol, algo que no falta obviamente en el tema que da nombre al disco, «R.I.B. (Rest in beer)», uno de los temas «largos» del álbum y que empieza de forma algo más fúnebre debido a su título, pero que enseguida se grabara a fuego en nuestra mente, carne de directo 100%, como ya pude comprobar en el pasado Tuska Open Air.
«Riders of the doom» es uno de esos temas que tanto me gustan de TANKARD, menos thrasers quizá en un inicio pero con una base rítmica brutal que me recuerda levemente a «The horde», recogido en su «Beast of bourbon». «Hope can’t die» me deja sin embargo un tanto descolocado, hasta el tono de voz de Gerre es algo diferente en un tema que casi coquetea con el punk, muy diferente a «No one hit wonder» y su poderosa línea de bajo, aunque tanto una como otra son demasiado diferentes a lo que suele ser TANKARD habitualmente, quizá demasiado crudas.
Desde que comienzan a sonar las guitarras iniciales de «Breakfast for champions» se ve claramente que vuelven por sus fueron etílicos con un tema que romperá huesos en los pogos, al igual que «Enemy of order», puro thrash metal sin concesiones que no defraudará ni a fans ni a neófitos, excelentes riffs de guitarra, muy MAIDEN en algunos momentos si se me permite una pequeña licencia.
Aquí no hay tiempo ni lugar para para el descanso, «Clockwise to deadline» es pura mala uva desde el punto de vista de TANKARD claro está, despidiéndose con una advertencia muy clara, «The party ain’t over ‘til we say so», y es que si algo destaca siempre en cualquier trabajo y/o actuación de los thrashers más cerveceros del lugar es el buen rollo y las ganas de pasarlo bien.
Poco más que añadir, quizá no sea una obra maestra, pero tampoco lo necesitan, pues pese a editar un trabajo cada dos años de media, mantienen siempre un nivel de notable alto como mínimo, que es muchísimo más de lo que muchas bandas pueden llegar a decir nunca ni siquiera de uno solo de sus lanzamientos. Personalmente opino que quizá la segunda mitad del disco sea algo más floja, pero eso quiere decir aún que cinco temas son matadores, que no es poco, ¿no? Vayan preparando sus cuellos porque TANKARD han vuelto con ganas de fiesta, pero eso sí, calienten ustedes primeros, no nos vaya a pasar como a ese pobre infeliz durante un concierto de MÖTORHEAD… ¡Camarero!, ¡otra cerveza!
Ángel Ruiz
Lista de Temas:
- War cry
- Fooled by your guts
- R.I.B. (Rest in beer)
- Riders of the doom
- Hope can’t die
- No one hit wonder
- Breakfast for champions
- Enemy or order
- Clockwise to deadline
- The party ain’t over ‘til we say so