Crónica y Fotos del concierto de KADAVAR y DEATH HAWKS en Helsinki, Finlandia

+ DEATH HAWKS

Martes 5 de Noviembre de 2013 – Nosturi – Helsinki – Finlandia

He de admitir que desde hace un par de años a esta parte estoy teniendo toda una regresión musical, buscando las raíces de cada cosa, el dónde y cómo empezó todo, y la verdad es que me dio y mucho por todo el tema "hippioso" y sureño, descubriendo sobre la marcha auténticas maravillas que hasta ese momento había pasado por alto completamente, por poner algunos ejemplos, CANNED HEAT, 38 SPECIAL, COPPERHEAD, ALLIGATOR STEW,  HOGJAW…etc, me estaba perdiendo cosa fina.

Y he de admitir también que no tenía ni idea de quienes eran GRAVEYARD, KADAVAR o WITCHCRAFT por mentar algunos, hasta hace bien poquito, pero decir que me he enganchado es poco, y es que un poco de rock psicodélico no hace daño de vez en cuando, qué decir de lo bien que me sentaba escucharlo de fondo viendo el atardecer sentado en el porche de una granja en mitad de un campo de trigo en mitad de la nada Finesa, me faltaba el trabuco y la pajita en la boca, porque descalzo ya estaba.

En fin, antes de que me vaya por las ramas, habrá que ponerse a lo que interesa, y es que de pura casualidad me enteré que KADAVAR tocaba en la ciudad, y raudo y veloz corrí a hacerme un hueco, en un principio parecía que iban a actuar ellos solos, pero apenas un par de días antes se unió a la fiesta la banda local DEATH HAWKS, todos unos héroes de la psicodelia en Suomi.

Psicodelia es una palabra que se queda muy corta para definirlos, con una base de rock de los 70, hay que estar en trance y bajo el efecto de sustancias muchas y variadas para ponerse a tono y disfrutar de su música, compleja y muy chamanística por momentos, demasiados a vece, y con momentos demasiado, demasiado densos para disfrutar del verdadero rock en su vertiente más directa.

Cuidada puesta escena la suya, camisa hippies, pelos afro, mostachos, barburrias descuidadas y movimientos estudiados, podrían pasar perfectamente por una banda real de la época, aunque lo más probable es que esa atmosfera tan intimista no llegue a las masas, no es precisamente la banda de rock más fácil de escuchar sobre la tierra, eso si, muy buena actuación la suya, de principio a fin, aunque un poquito más de luz no estaría mal.

Hablar de KAVADAR es como ya he dicho, hablar entre otros de la nueva hornada de bandas que intentan recuperar el espíritu más clásico y setentero de rock, algo que va haciendo falta, y me vais a perdonar el mitin. Estamos entrando es una espiral de autodestrucción que no se muy dónde nos va a llevar, pero sin un relevo generacional  nos vamos a la mierda, así de fácil. Perdemos el culo buscando nuevos ritmos, creando nuevos estilos en su mayoría tan infumables como ridículos sus nombres (¿¿shoegaze??, por poner un ejemplo…), modas pasajeras que como el tiempo demuestra, van llegando y desapareciendo, hundiendo durante su fortaleza los estilos clásicos que siempre están ahí, para desaparecer después, dando un pequeño respiro al old school hasta el advenimiento de la siguiente moda, y así hasta el infinito y más allá.

A su vez seguimos adorando por encima de todo a las bandas clásicas de siempre, que en muchos clásicos intentan giros incompresibles en un intento por innovar, sonar "modernos" o lo que sea (Nostradamus, The final Frontier, Lulu…) olvidando lo que mejor saben hacer para en algunos casos, volver a lo de siempre que es lo que saben hacer, en otros para perderse hasta saber cuando.

Señores, necesitamos gente como KADAVAR en todos los estilos, gente que rescate lo auténtico de entre tanta mediocridad y viajes astrales varios, gente que nos recuerde qué y quienes hicieron del rock y metal lo que es o significa, gente que mantengan vivo este sentimiento y den relevo a los veteranos, que seamos realistas, no van a estar siempre ahí, y si queremos que esto siga adelante, necesitamos a gente así, y que los que nos llamamos rockeros, metaleros, "jebis" o lo que sea dejemos de mirar solo a los de siempre y abrir un poquito los ojos a lo que va llegando, que en muchos casos, es bueno, como es el caso que nos ocupa. Ojo, que esto no quiere decir que algunas cosas nuevas no merezcan la pena, algunos estilos llegan para quedarse por derecho propio. HE DICHO. Que relajado me he quedado…

Había mucha más gente de la que esperaba en la sala para ser un martes, me gustó ver que pese a que Finlandia es un país de metal extremo en general, también hay gente que gusta del rock más clásico (recomiendo THE HURRIGANES para quienes no los conozca), y sobre todo me gustó ver muchas caras muy jóvenes. KADAVAR apenas cuentan con dos discos, pero ambos con un puñado de temas que la verdad, es de lo mejor que he escuchado en muchos años.

Llamó mi atención desde un inicio ver la batería en el centro del escenario, pero todo tuvo sentido en cuanto empezaron a tocar. Ver tocar a Christoph la batería es todo un espectáculo, con la barba por bandera, no deja de moverse, gesticular y aporrear la batería con todas sus ganas y en todo momento, ejemplo claro de que no es necesario tener 204 timbales, 675 platos y 13 bombos para dar un buen espectáculo, de que sirve una técnica celestial si aburres a las piedras tocando cosas que solo Terry Bozzio podría entender.

La verdad es que me sorprendió mucho el otro Christoph, no solo era capaz de tocar y cantar, sino que llevaba muy bien el hecho de llevar todo el peso guitarrero sobre sus hombros pese a tener que cantar a la vez, estuvo muy bien a la voz y mostró muy buen hacer a la guitarra, siendo a mi parecer, el espigado Simon al bajo el único punto oscuro de la banda, y es que si al hecho de tocar de lado todo el rato le añadimos el moverse menos que los ojos de Espinete pues apaga y vámonos, sobre todo teniendo en cuenta que era el único miembro de la banda con total libertad para moverse por el escenario y hacer algo diferente.

Temas como "Doomsday machine" o "Come back life" cayeron demasiado pronto para mi gusto, sonaron como auténticos cañonazos, aunque eché de menos "fire", un tema quizá algo más metalero pero con un muy buen solo mediado el tema, pero bueno, en general no creo que nadie pueda quejarse sobre su actuación.

Buena banda, excelente actuación, sin duda uno de los conciertos que más he disfrutado en años, y es que a veces, en la sencillez está la belleza. Si podéis acercaros a uno de sus conciertos no lo dudéis ni un segundo, palabra de que no os arrepentiréis.

Texto: Ángel Ruiz

Fotos: Tuulikki Vähäpullo

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