JUDAS PRIEST + U.D.O. + BLIND GUARDIAN en Barcelona – Crónica y Fotos

+ U.D.O. + BLIND GUARDIAN

Miercoles 16 de Mayo – San Jordi Club – BARCELONA

Se suponía que el año pasado iba a ser la última oportunidad de poder ver a JUDAS PRIEST en directo, o lo que es lo mismo, de despedirse de la banda que ha establecido los cimientos del heavy metal. Pero sin que todavía haya pasado un año de esta despedida, JUDAS vuelven a España, otra vez con "Epitaph", y con la misma idea de despedida.  A priori parece que muchos esquemas de la gira se repiten, empezando por el nombre de la misma y con el formato concierto-mini festival. Si para la anterior ocasión contaron con dos "teloneros" de lujo como fueron SAXON y MOTÖRHEAD; esta vez tampoco se han quedado cortos, y para completar el cartel han contado con dos estandartes del metal germano como son: U.D.O. y BLIND GUARDIAN. Con estos ingredientes, la verdad es que la cosa no pintaba nada mal para poder disfrutar de una tarde-noche de buen heavy metal.

La asistencia para esta ocasión ha sido mucho menor en comparación con su anterior concierto, aunque esto no quiere decir que fuera mala, pero, mientras que el año pasado en el Pabellón Olímpico de Badalona era una olla a presión a punto de estallar, esta vez se veía un Sant Jordi Club con bastante espacio libre. Determinar la causa del bajón de asistencia es bastante complicada, porque otra vez se contaba con tres grupazos, las únicas razones que se me pueden pasar por la cabeza son: o que las fechas son peores, o que la gente que ya vio a JUDAS PRIEST el año pasado haya desistido de repetir por el precio de la entrada y dada la situación general.

Con la sala llenándose poco a poco, y cinco minutos antes de lo previsto, U.D.O. aparecía sobre el escenario, para ofrecernos un concierto corto, aunque para nada falto de calidad. En sus poco más de 45 minutos de actuación, el menudo cantante alemán, rebosando carisma, se ganó al público repasando algunos momentos de su carrera en solitario y algunos de los clásicos de ACCEPT. La verdad es que hubiera preferido que le diera más espacio a las canciones de U.D.O. ya que era el grupo que tocaba, con alguna versión ocasional de ACCEPT, pero entiendo que mucha gente no estará de acuerdo conmigo. El repertorio casi se repartió por igual entre las canciones de las dos bandas, inclinándose la balanza ligeramente hacia el lado de U.D.O.  Comenzaron el concierto con "Rev-Raptor", canción que da título a su último disco, y del cual también tocaron "Leatherhead".

En esta primera parte del concierto también nos ofrecieron una potente "Animal House", recordándonos los principios de la banda, y "Vendetta", que también sonó muy bien. Tras esta primera parte, llegaba el momento para las canciones de ACCEPT (solo interrumpidas por "Man and Machine"), con las que todo el mundo se animó mucho más que con los temas anteriores. Udo visiblemente feliz, y viendo el ánimo de la gente, dejó que el público cantara buena parte de los estribillos, con mención especial a "Princess of the Dawn", que fue la primera canción de ACCEPT en caer. Con esto la gente ya estaba totalmente entregada, pero no fue nada comparado con el final que nos esperaba con: "Metal Heart", con Udo golpeándose el pecho demostrando tener un corazón de metal; "Balls to the Wall" y "Fast As a Shark", que fue la encargada de cerrar su actuación con una gran ovación. Buen concierto el de U.D.O., con una banda muy compenetrada y entregada a la causa. Lástima tener que verlos como teloneros, con un juego de luces bastante pobre, y con un sonido que aunque fue bastante bueno, se podía haber mejorado.

Setlist

• Rev-Raptor
• Animal House
• Leatherhead
• Vendetta
• Princess of the Dawn
• Man and Machine
• Metal Heart
• Balls to the Wall
• Fast as a Shark

Una vez realizado algún pequeño reajuste del escenario, y con el buen sabor de boca que había dejado U.D.O., llegaba el turno para sus contemporáneos y compatriotas BLIND GUARDIAN, que pese a que parezcan posteriores no lo son, ya que las dos bandas sacaron su primer álbum el mismo año, eso sí, por aquel entonces el señor Udo ya llevaba algunos discos grabados.

BLIND GUARDIAN, con un pequeño cambio de formación en el bajo y el teclado, nos ofrecieron un concierto muy bueno (superior a las expectativas de más de uno) en su hora y cuarto de actuación. Derrocharon simpatía, sobre todo Hansi, lo cual ya es habitual en él, pero también se mostró más activo que en ocasiones anteriores, moviéndose por todo el escenario, saltando y animando. Aunque tampoco dio carreras como un loco (no se puede pasar de un extremo a otro), pero comparado con otros conciertos que se pasaba buena parte de la actuación quieto sí que tuvo mucha más movilidad.

Con la introducción orquestal de "At the Edge of Time" empezaron el concierto, lo que inevitablemente nos iba a llevar a "Sacred Words", tema que abre su último trabajo, y que fue la única muestra del concierto de este. Después de este primer tema y con un "hola amigos", no perdieron mucho tiempo para presentar "Welcome to Dying", que tuvo mayor aceptación, demostrando que la gente esperaba material más antiguo de la banda, y que en parte lo obtuvieron, ya que de su material más moderno (cuento desde "A Night at the Opera" hasta ahora) solo tocaron dos canciones, la ya citada de "At the Edge of Time", y una pegadiza y festiva "Turn the Page" de "A Twist in the Myth", que me sorprendió bastante, ya que pensaba que tocarían el single "Fly".

"Nighfall" y "Time Stands Still (at the Iron Hill)" fueron los primeras canciones de "Nightfall in the Middle-Earth", y esta última nos dejaría en una parte intermedia que seguro que contentó a los seguidores de los discos más antiguos de la banda y de las canciones más contundentes y rápidas. En esta parte sacaron la artillería pesada, dejándonos tres temazos como "Majesty", "Lost in the Twilight Hall" y "Valhalla", alargando el final (cosa que ya empieza a ser habitual), dejando que el público cante el estribillo varias ocasiones.

Acercándose irremediablemente al final, cuando parecía que apenas había empezado el concierto, desempolvaron "Imaginations From The Other Side", para tocar la canción que da título al disco y "Bright Eyes", que nos dejaba en un final bastante previsible con "The Bard’s song: (In the Forest)", con el público cantando gran parte de la canción; y como no podía ser de otra manera, cerraron con "Mirror Mirror". Una muy buena actuación la de BLIND GUARDIAN (vale que algunos temas ya no se cantan igual), pero que al igual que me pasó con U.D.O. me dejó un sabor extraño el verlos como teloneros y todo lo que ello conlleva.

Setlist

• Sacred Words
• Welcome to Dying
• Nightfall
• Turn the Page
• Time Stands Still (at the Iron Hill)
• Majesty
• Lost in the Twilight Hall
• Valhalla
• Bright Eyes
• Imaginations From The Other Side
• The Bard’s Song: (in the Forest)
• Mirror Mirror

Con el final de la actuación de BLIND GUARDIAN, una lona se alzó delante del escenario en la que se podía leer "Epitaph". Aquí comenzó un pequeño déjà vu, que me acompañaría durante toda la actuación de JUDAS PRIEST.

Los esquemas que decía que se repetían no solo se daba en relación a las bandas que los acompañaban, sino que JUDAS PRIEST repitió el concierto del año pasado, mismas canciones, mismo orden y mismo escenario. En definitiva, la misma gira, aunque mejorada en la ejecución. Un repaso a casi 40 años de historia, lo que permitía ver a gente de todo tipo de edad, padres alzando a sus hijos, que a su vez alzaban los cuernos para saludar al metal god; una madre que con su hija recorría la gira estatal y parte de la europea…JUDAS PRIEST da para ver la historia del heavy metal.

Cuando cayó el telón, pudimos ver el escenario que tenían preparado al ritmo de "Rapid Fire", mientras una imagen de fondo nos daba la bienvenida a una industrial Birnmingham. La locura ya estaba desatada, cuando sin perder un segundo enlazaron con "Metal Gods" y Halford se encargó de recordarnos aquello de: "The Priest is back", en lo que fue un inicio muy prometedor con estas dos canciones de "British Steel". La conexión de la banda con el público fue perfecta, desde la caída del telón hasta la última canción, se notaba que cada parte quería dar lo mejor de sí para la otra.

Halford y los suyos ofrecieron un espectáculo muy digno, tanto como banda, como a nivel individual, con algún pequeño altibajo, pero analizando el concierto desde su totalidad y de forma global pasó la prueba con bastante nota. El cantante mostró que aun tiene madera de Metal God, vale que ya no es tan joven, pero quien tuvo retuvo, y demostró que sabe llenar el escenario con su presencia, y que cuando está sobre las tablas, él es el auténtico jefe. Scott Travis, aunque me dejó un poco frio en el solo que nos ofreció antes de "Painkiller", en el trabajo para la banda estuvo perfecto, sin muchos adornos, pero muy efectivo. Qué decir del señor Ian Hill, el jefe en la sombra. Se mantuvo todo el concierto en segundo plano, dejando que los focos apuntaran directamente sobre el cantante y sus dos escuderos en forma de guitarristas, pero él se imperturbable, firme con su bajo, moviéndose lo que podía en su reducido espacio, pero que si te fijabas en el, veías a un hombre que, aunque algo desplazado, estaba disfrutando como el que más de su trabajo.

Para la pareja de guitarristas casi sobran las palabras. ¿Qué se puede decir de Glenn Tipton que no se haya dicho ya? Se pasó todo el concierto regalándonos su entrañable sonrisa, y clavando riffs y solos, además de estar muy comunicativo con el público. Las mismas palabras se podrían aplicar a Richie Faulkner, un autentico motor inagotable, ha sido el último en entrar en la banda, pero si se lo dijeran a cualquier persona que no conozca a JUDAS PRIEST, podría pensar que este chico estaba en la banda desde sus principios. Se mueve como el que más en el escenario, demostrando pasión como si las canciones fueran todas suyas, y ejecutando todo de maravilla. Quizás haya gente que todavía diga que Faulkner no es como K.K. Downing, (está claro ni lo es ni lo será, son diferentes músicos y personas en lo bueno y lo malo), pero lo que queda fuera de discusión es la calidad y la entrega de Faulkner, que está disfrutando y sudando como cualquiera de sus compañeros.

Con toda la historia y la extensa discografía que tiene JUDAS PRIEST iba a haber momentos para todos los gustos, seguro en sus dos horas y cuarto de actuación. Para aquellos que le gustaran las canciones más rápidas, cañeras y directas nos dejaron ejemplos como las ya citadas "Rapid Fire", o "Painkiller"; si en cambio te gustan más las baldas, se pudo disfrutar de una magnifica parte inicial de "Diamonds & Rust"; o si por el contrario estás más en un término medio, y te gusta la parte más rockera de la banda, al principio del concierto nos deleitaron con "Heading Out to the Highway" y "Never Satisfied"; o canciones a medio camino entre las más cañeras y las rockeras como "Starbreaker". Cualquiera de estos momentos es perfecto para almacenarlo en la memoria como parte del pasado-presente del heavy metal para poder disfrutarlo en el futuro, o con "Breaking The Law", cantando toda la sala, tras un diálogo de Halford, recordándonos el panorama actual.

A la enorme selección de canciones hay que añadir la puesta en escena por parte de todos, y el juego que daba el escenario, con dos plataformas a los lados, que tanto Halford, como Faulkner y Tipton iban pisando de vez en cuando; una escalera central presidida por la batería, fue testigo de algunos paseos del cantante. Además, contaban con varios efectos visuales, como una pantalla de fondo, donde aparecían las portadas de los discos, el cielo, fuego o imágenes con un tono futurista, según lo pidiera la canción; y no contentos con esto también contaban con algunas columnas de fuego que aparecieron en diversas canciones, y un juego de láseres que tuvo su momento triunfal al inicio de "Victim of Changes", con esa melodía a cargo de las guitarras.  En definitiva, muchos momentos para guardar en la retina, pero no por el lucimiento individual de uno de los integrantes en concreto, sino por todo el espectáculo en general.

Mención especial al final, ya con la moto en el escenario con la que interpretaron "Hell Bent For Leather" y ya se empezaba a notar en el aire lo cercana que estaba la despedida. "You’ve Got Another Thing Comin’" puso una, una vez más a todo el mundo saltando, disfrutando de los últimos coletazos de la actuación. Un solo de Faulkner nos hacía cambiar de día, puesto que pasaban algunos minutos de las 12 de la noche, y como no podía ser de otra manera, toda la banda volvió al escenario para interpretar "Living After Midnight" con la que pusieron punto y final a su actuación, y quién sabe si a su historia en Barcelona.

Pocos peros se pueden poner a la actuación de JUDAS, que si tuvieran que elegir un momento para retirarse, quizás este podría ser un bueno, ya que dejan un muy buen sabor de boca, y nunca se sabe en el caso de que continúen si el día de la despedida estarán tan bien. Como me paso en la anterior ocasión, me quedé con ganas de alguna muestra de la época Ripper Owens, que al fin y al cabo también forma parte de la historia de JUDAS PRIEST. Y ya como colofón, y a toro pasado, contando con BLIND GUARDIAN en el mismo concierto, hubiera sido curioso ver una colaboración de Hansi en "Beyond the Realms of Death", ya que en su día hicieron la versión. Pero bueno, solo hubiera sido un momento más para guardar en el cajón de los recuerdos.

Al acabar el concierto, y también esta crónica, me asalta la misma pregunta que el año pasado ¿ha sido la última vez de JUDAS PRIEST en Barcelona? Sí es así, han dejado el pabellón por todo lo alto, y si vuelven y el concierto es de la misma calidad, es muy recomendable asistir.

 Texto: Sergio Galiot

Fotos: Carlos Oliver

Para ver las fotos a mayor tamaño, pinchar sobre ellas.

Setlist

• Rapid Fire
• Metal Gods
• Heading Out The Highway
• Judas Risisng
• Starbreaker



• Victim of Changes
• Never Satisfied
• Diamonds & Rust
• Prophecy
• Night Crawler
• Turbo Lover
• Beyond The Realms of Death
• The Sentinel
• Blood Red Skies
• The Green Manalishi



• Breaking The Law
• Painkiller
• Electric Eye
• Hell Bent for Leather
• You’ve Got Another Thing Comin’
• Living After Midnight