MACHINE HEAD – Unto The Locust

 Discográfica: Roadrunner
Puntuación: 9/10

Siempre he pensado que las épocas de transición, experimentación con otros sonidos o estilos y escarceos varios, pese a descolocar a los fans en el momento de su lanzamiento y provocar opiniones encontradas, a la larga le vienen bien a las bandas. Porque la experiencia está demostrando que al final -y con excepciones, está claro- la mayoría de ellas vuelven al estilo madre que les hizo grandes con energías renovadas. Y porque yo también entiendo que uno siempre se canse de hacer siempre lo mismo e incluso se sienta encasillado.

Por supuesto que como cualquier otro me quedé extrañado cuando vi a Rob Flynn en chandal rojo rapear colgado del techo para la promoción de "The Burning Red", disco que si bien no fue el paso obvio después de sus dos  primeras obras maestras, creo que la perspectiva del tiempo ha puesto en su sitio como un muy buen y "diferente" álbum. Aunque con "Supercharger" salieran algo peor parados, "Through the Ashes of Empires" apuntaba buenas maneras y "The Blackening" fue un retorno al thrash moderno que les viera nacer, otra obra maestra incluso para muchos -me incluyo- superior a sus dos primeros discos. Como digo, una banda con energías renovadas (no sólo en disco, sino también en sus alucinantes conciertos de aquella larga gira) que, tras una etapa transitoria en la que algunos fans perdieron el interés, volvió por todo lo alto enamorando como en sus comienzos tanto a crítica como público.

"Unto the Locust" retoma el hilo de "The Blackening" en todos los sentidos. Aunque sean sólo siete temas, todos son de larga duración. Prevalecen las estructuras complejas, huyendo de cualquier fórmula compositiva establecida y, aunque tiene sus momentos de melodía, el thrash metal y la caña  son su estandarte. Flynn lo ha producido sabiamente, resaltando en todo momento la rabia sonora imperante, con un sonido de guitarra sobresaliente, así como el de batería, atronadora por doquier.

Es encomiable la labor en bloque de los cuatro músicos, con una base rítmica de diez formada por la solidez de Adam Duke al bajo y un Dave McClain al que da gusto oir tocar su batería, tanto por calidad como por sonido. Rob Flynn llevando el mayor peso de las guitarras (rítmicas, acústicas y solistas) así como con las voces (alternando sabiamente entre la ronca y la melódica cuando el momento se lo pide) se ha dejado el alma en cada uno de los rincones de este "Unto the Locust". Por último y no menos importante, Phil Demmel vuelve a demostrar lo gran guitarrista que es y la gran pareja de hachas que hace junto a Rob. Comentar también sobre el aspecto guitarrístico, que la gran mayoría de las veces han dejado las dos guitarras panoramizadas de la misma forma en la que se escuchan en directo, obviando en las ocasiones que hay melodías dobladas el incluir una rítmica por debajo, quedando sólo bajo y batería, ganando la sensación de  parecer estar oyendo un concierto suyo.

Gráficamente el trabajo es tan notable como sonoro. La sorprendente -y repugnante, todo sea dicho- portada en tonos verdes obra de Paul Gerrard consigue el objetivo de captar nuestra atención. Por cierto que me recuerda bastante la langosta (de las de tierra, no de las del mar) con toques de humano al monstruo del remake de "La Mosca" que hicieron en los noventa; al menos parece un homenaje a aquella película. Las fotografías no le van a la zaga, con enjambres de langostas saliendo del cuerpo de los músicos.

Entrando a valorar lo que es la música en sí, estamos ante un disco de canciones complejas, pero que poco a poco van atrapando al oyente a base de unos estribillos definidos que, si bien no van incluidos al uso dentro de un esquema de composición concreto, si van haciendo escucha tras escucha que el oyente vaya identificando cada uno de los siete temas. Se alternan partes netamente thrash -con ese estilo propio de hacer riffs alternando notas naturalesy estridentes armónicos- más rápidas o pesadas con melodías, acústicas, o incluso un par de coros como los que abren y cierran la obra. Hay lugar para todo el abanico musical desplegado anteriormente por MACHINE HEAD excepto para la comercialidad.

Desde la inicial "I am Hell (Sonata in C#) y ese coro "Sangre, Sani" que abre la caja de los truenos, demostando que también es ideal para el inicio de los futuros conciertos de la gira, es un no parar. Ocho minutos de desenfreno puro MACHINE HEAD 100% que termina en fade out para dar paso a los ligados de "Be Still and Know", algo más estandar que no comercial o facilona de asimilar, eso sí con un puente y estribillo de los que enganchan a la primera, idóneos para el directo. "Locust" es otra pieza completa que transporta al oyente a varios estados, desde el inicial acústico hasta que va progresando al riff y a la estrofa pesada (marcando el final de algunos compases con armónicos) y de nuevo puente y estribillo sobresalientes. El interludio acústico a la mitad, seguido de las armonías de guitarra son para enmarcar. "This is the End", pese a su inicio acústico y tranquilo, es lo más rápido del álbum, construída en buena parte con riffs a púa-contrapúa rapidísimos, poniendo a prueba la habilidad para seguirlos de McClain a la batería. "Darkness Within" es quizás la que más pudiera estar dentro del marco single -aunque insisto: no es éste el disco para buscar comercialidad en MACHINE HEAD- con unas melodías vocales muy marcadas desde que abren con sólo la guitarra y cantando encima, hasta que se van uniendo el resto de músicos. "Perls Before the Swine" nos devuelve a la complejidad y el thrash, en tesituras parecidas a "Locust", mientras que lo primero que llama la atención de "Who we are" son los coros de niños del comienzo, grabados por los hijos de los músicos, por cierto. La entrada de Rob cantando el coro lleno de rabia y el posterior silencio para arrancar con uno de los riffs marca de la casa dan rienda suelta al broche de oro.

Como digo, gran álbum, tan complejo como excelente. Siguiendo la estela del genial "The Blackening", sin desmarcarse especialmente de el. Demuestra el gran estado de forma de una banda que, como decía al comienzo, ha tenido sus cambios de estilo pero ha vuelto con energías renovadas y mejorando lo que parecía imposible de mejorar.

J. José Jiménez

Lista de Temas:

1. I Am Hell (Sonata In C#)
   1. Sangre Sani
   2. I Am Hell
   3. Ashes To The Sky
2. Be Still And Know
3. Locust
4. This Is The End
5. Darkness Within
6. Pearls Before The Swine
7. Who We Are