HELLFEST 2011 – Crónica de Urgencia/Comentario General

Dias 17, 18 y 19 de Junio de 2011 – Clisson – Francia

Crónica de urgencia/comentario general

Ya tranquilo en mi casa, de vuelta del gran festival en el que se ha convertido a día de hoy HELLFEST, os puedo contar mis impresiones a modo de resúmen general de lo que ha sido esta edición del festival galo, a día de hoy uno de los más importantes y exitosos de Europa. Pues bien, deciros que para mí era la primera experiencia en Clisson (a pocos kilómetros de Nantes) y que la experiencia ha sido muy positiva a todos los niveles. De hecho, vaya por delante que algunas de las cosas que voy a contar están pasadas por el tamiz de los ojos de un primerizo en este festival, pero es que hubo muchas cosas que me sorprendieron para bien para tratarse de un evento de metal y encima de tamañas dimensiones, y como tal lo quiero contar.

Y es que en HELLFEST 2011 lo cierto es que los tres días han sido muy intensos, hemos visto muchísimos conciertos de todo tipo (grandes y pequeños, de tralla y de hard rock, en los escenarios grandes generales o en las carpas pequeñas especializadas…) pero sobre todo hemos vivido la experiencia de un festival enorme, en el que todo es a lo grande (asistencia, puestos de comida y bebida, mercadillo, escenarios…) pero que a su vez no hay queja ninguna de la organización, recinto, horarios, sonido…, y por supuesto sin ningún tipo de problemas importante que reseñar, algo que le sigue sorprendiendo a muchos, y perdonarme por ser un poco demagogo, pero el heavy sigue sin ser violencia, amigos… Retomando lo que decía, iba a Clisson con las típicas dudas del que va a un festival tan grande por primera vez, y más sabiendo que esto no es Alemania ni Holanda ni… en fin, que estábamos demasiado cerca de España e Italia, donde lamentablemente peores experiencias he sufrido siempre en este tipo de eventos. Y la verdad es que la sensación fue constante de que es un festival cuidado al máximo para que la gente esté a gusto y lo mejor atendida durante los tres días. Vale que es un festival y no siempre tienes las comodidades 100% cubiertas, pero las cosas se pueden hacer bien o mal, y en este caso os aseguro que se han hecho muy bien, algo que no siempre podemos decir en nuestro país… Bien es cierto que asistentes de otras ediciones nos han comentado que este año ha sido sin duda la más numerosa y que el recinto ya se ha quedado pequeño, y puede ser cierto, pero por otro lado no hemos tenido que sufrir demasiadas colas para casi nada ni las aglomeraciones han sido incómodas a la hora de ver los conciertos más importantes… Eso sí, si no cogías sitio con antelación te tocaba ver a los grandes desde la Conchinchina o mirando la enorme pantalla central (con excelente realización en todo momento, por cierto).

También es verdad que una vez más se cumple el tópico de que, una vez que sales de España (y si me permitís incluyo Latinoamérica aquí), da igual que el público sea francés, alemán, italiano, holandés, finés, británico (que había un montón, por cierto, supongo que por la cercanía atravesando el Canal de la Mancha) o lo que sea, que aquí en los conciertos no se mueve nadie, y vale, es cómodo pero es cuándo entiendes perfectamente porque TODAS las bandas dicen que, al menos en Europa, no hay nada como tocar en España a modo de ambiente de concierto y de movimiento de la gente. Y sí, en Europa serán más tranquilos y civilizados en este sentido, pero no me acostumbraré nunca a ver a JUDAS, OZZY o THIN LIZZY con la gente a tu alrededor completamente parada y mirando el show como quien ve un DVD en su casa. En fin, es lo que hay supongo, pero para eso estamos los españoles (que éramos un montón, las cosas como son) para corear un poco, menear los pelos y darle un poco de ambientillo extra a los conciertos en los festivales en Europa, en este caso en HELLFEST. 

Pero bueno, dentro de las cosas que nos interesan, hay que comentar que el recinto es enorme, enclavado entre viñedos (y es que la zona del Loira y cerca de la Bretaña francesa es tierra 100% de vinos y la gran mayoría de estos campos son enormes extensiones de cepas), y con varias zonas delimitadas del festival: por un lado la acampada, enorme y un poco "al libre albedrío", aunque como ni hacen los treinta y muchos grados de España (y es que incluso ha hecho rasquilla los tres días del festival, especialmente el viernes y sábado, con lluvia intermitente incluida, sobre todo la primera jornada), ni aquello es 100% patatal, como lamentablemente tienen a bien meternos la mayoría de promotores en nuestro país (con excepciones positivas, por supuesto, pero otras veces…). Por otro lado, no nos libramos ni de las duchas con agua mayormente fría ni de la intensa animación sociocultural hasta altas horas de la madrugada, aunque esto es también parte de la salsa de los festivales, ¿no? Afortunadamente, aunque se pierda rollo de festival e incluso sea más difícil llegar a ver a los primeros grupos (que aquí todo empieza y acaba antes), uno ya está mayor para ciertas cosas y pude conseguir con tiempo hotel a algunos kilómetros del festival, pero al menos con el pack cama, ducha y váter cubierto, que no es poco.De todos modos, hay que decir que en la zona de acampada había las citadas duchas, baños de sobra y a su vez puestos de comida (¡incluso con un puesto de churros!) y bebida además de una carpa donde había conciertos y música durante buena parte del día y la noche.

Del recinto en sí, aparte de los dos enormes escenarios principales, me quedo sin duda con la impresionante variedad de puestos de comida (desde todos los bocadillos imaginables hasta pizzas, tostas, platos de comida de todo tipo, hamburguesas, helados, postres, comida vegetariana, zumos, kebabs… ¡hasta había un puesto de chucherías!), y además a precios totalmente asequibles, algo que lamentablemente echamos en falta muchas veces en los festivales de nuestro país. Y para beber, refrescos de todo tipo y sobre todo cerveza y vino del festival, a buen precio (dos euros el vaso y once la jarra pero de litro y medio… de verdad, y luego te quedabas con los vasos y la jarra, de plástico y con logo chulo impreso), incluso con tercios embotellados expresamente para el festival, en una edición especial de cervezas realmente chula (¡y que estaba buena!). Además, el propio recinto en sí está decorado expresamente para el festival, con un montón de esculturas metálicas distribuidas por todo el recinto, "farolas", hogueras…, una pasada, especialmente por la noche, ya lo veréis en las fotos. Y con cantidad suficiente de servicios (portátiles pero que se limpiaban bastante a menudo), cajero, barras distribuidas por todo el recinto, personal de todo tipo…

Y no me olvido de hablar del mercadillo, con dos grandes carpas a modo de Metal Market (con toda la variedad, diversidad y cantidad de memorabilia de nuestro rollo que podáis imaginar, el paraíso para cualquier bolsillo metalero pudiente, vaya), además de muchos más puestos laterales donde sólo eché de menos algo más de cantidad de ropa de cuero, de lo que estuvo la cosa bastante escasa (y es que ademá,s entre el frío y la lluvia, y la propia cantidad de público, hubieran hecho el agosto… o el junio mejor dicho). De hecho, es que había hasta puestos de tatuajes, peluquería, venta de guitarras, zapatos/botas… Lo dicho, el paraíso del metal. Y sí, cayeron varias camisetas guapas, vinilos, alguna chuminadilla…, por supuesto, jeje.

Y de la sala de prensa/invitados/VIP/artistas mejor ni os cuento, sólo os diré que es la mejor con diferencia en la que he estado, con amplia parte interior cubierta (una gran caseta de madera donde incluso se hacían pequeños conciertos y pinchaban DJ´s por la noche, además de poder seguir los conciertos en pantalla gigante), y otra exterior (al aire libre con hamacas, sillas, mesas, bancos, Internet, esculturas de metal, servicios especiales…) además de una sala expresamente para las entrevistas con varios departamentos separados, asientos, wifi… y un espacio habilitado para hacer fotos a los artistas (con focos, un telón negro de fondo…). Absolutamente profesional y con todas las facilidades para hacer nuestro trabajo de la mejor manera posible, descansar y recargar pilas… Y lo largo de un festival tan largo y extenso se agradece, os lo aseguro.

En cuanto al público, mucho y variado, y de todas las edades (desde críos hasta gente bastante mayor, y muchas féminas también, algo que al menos a los españoles nos sigue sorprendiendo, quizás porque en nuestro país aún no es tan habitual, aunque van cambiando las tornas progresivamente, claro) con todas las variedades de heavies que os podáis imaginar, pero todas, incluso bastantes punkies y gente "normal"… De hecho, como curiosidad comentaba con mi amigo y compañero Fernando Checa que es el festival metalero en el que hemos estado en el que posiblemente hubiera más pelos cortos (o rapados) que largos, curioso cuanto menos. ¡Ah!, y con todos los frikis disfrazados del mundo, impresionante… Eso sí, más de 70.000 personas cada día, con eso os lo digo todo. Por otro lado, HELLFEST nació como un festival de punk rock y sobre todo de propuestas extremas, y es lo que prevalece. Es que un indicador claro de por dónde van los tiros en los festivales es mirar las camisetas/sudaderas de la gente, y os aseguro que en Clisson ganan las negras de grupos de thrash, death y metal extremo por goleada (aparte de los clásicos como MAIDEN o METALLICA que nunca fallan, claro).

Y así a modo de repaso general, sólo me falta hablar de los grupos, a la postre lo más importante y la razón de viajar en nuestro caso tan lejos (o al menos fuera de nuestras fronteras). Las crónicas como tal de Carlos Oliver y Jordi Marsal (con alguna aportación mía incluso) las podréis leer en unos días, pero así a modo de vista de pájaro hay que decir que es una pasada poder ver tantos grupos y de tan variado pelaje en tres días, y es que han sido unas 120 bandas de todo tipo de rock duro y metal las que han descargado en esta edición de 2011… y muchas de ellas han hecho sesiones de firmas, por cierto, en una pequeña carpa habilitada para ello (aunque los más grandes se han escaqueado prácticamente todos, las cosas como son). Y hay que decir que en el festival hay dos escenarios principales (con sonido en general perfecto y los horarios clavados) y dos carpas, una dedicada al metal más extremo y underground y otra más centrada en sonidos más actuales y alternativos incluso. Y como son tantas bandas, siempre coincidían dos o tres conciertos al mismo tiempo, a veces de grupos muy distintos y otros no tanto (por ejemplo OZZY coincidía con DARK TRANQUILITY y HAWKIND), con lo que es imposible verlo todo, al menos si quieres ver conciertos completos, teniendo en cuenta, además, la cantidad de gente que había en cualquier escenario, grande o pequeño, y la distancia entre ellos (que no era muy grande, vale, pero siempre había un paseíto).

Pero bueno, la cantidad y calidad ha sido grande, y así a modo general hay que decir que, gustos de cada uno aparte, entre los triunfadores hay que incluir los nombres de THIN LIZZY (conciertazo a media tarde el sábado), U.F.O. (¡qué clase y calidad!, además del punto más elegante y exquisito de todo el festival), OZZY (sorpresón tras el horrible concierto en Zaragoza hace un par de años, pero lo cierto es que en HELLFEST estuvo de lujo), KREATOR (brutales del primer minuto al último), MORBID ANGEL (pese a las malas críticas de su disco de regreso, se marcaron un conciertazo para sus muchos fans), IN FLAMES (tres cuartos de lo mismo), MONSTER MAGNET (¡qué bandaza en directo!) o DORO (con el 90% del set de WARLOCK, curioso cuanto menos… aunque Doro y sus chicos siempre son un valor seguro) o MUNICIPAL WASTE (una maquina de picadillo constante, además de una banda muy divertida). 

Entre los grupos que lo hicieron bien pero que personalmente no me mataron (seguramente por gustos personales) hay que incluir a CAVALERA CONSPIRACY (y no le falta razón a los que dicen que obviamente es mucho más SEPULTURA que los actuales… de hecho, provocaron las mayores polvaredas del festival en las primeras filas, ¡uff!), BLACK LABEL SOCIETY (lo siento, pero Zakk Wylde se ha hecho tremendamente predecible y cansino con los años… y se hizo el sólo más largo e infumable del festival, ¿os suena?), DOWN (con división de opiniones sobre la voz, forma e implicación de Phil Anselmo), HAMMERFALL (mejor en festivales que en directo pero…), THE CULT (con un Ian Astbury gordo y desmejorado, pero a su vez siguen siendo un grupazo en directo, aunque estuvieron un tanto desubicados en HELLFEST… al igual que ANATHEMA por ejemplo), 1349 (una máquina de matar con su old school black metal, aunque verles de día y con solazo de fondo se hace raro), POSSESED (curiosos cuanto menos, aunque se lo hicieron muy bien) o THERION (demasiado rimbombantes para mi gusto pero con una elegancia y profesionalidad que tira para atrás).

Y dejo para el final de esta categoría a JUDAS PRIEST, con muy buen show (algo corto pero lo esperado en este caso), excelente set list (con sorpresones como "Blood red skies", "Beyond the realms of death" o "Night crawler"), mucha mejor impresión de lo imaginado el nuevo guitarrista (por supuesto que no es KK Downing, esto ni se menta, pero han tenido mucha vista para coger a un tío con una imagen y estilo muy similar al original y que tiene rollo y desparpajo… además de tocar tela, lo que pasa es que es mirar al escenario y… no, es imposible sentirse satisfecho al respecto) y buen escenario y espectáculo (con pasarelas, telones muy chulos, pirotecnia y llamaradas…), además de la forma de ellos en sí. Incluso con un Halford en mejor forma de la que personalmente me esperaba, aunque es obvio que está a años luz del estado óptimo que muchos desearíamos y que hay temas que no puede se mire como se mire (y es que ni "Painkiller", que es un dolor por mucho que sea un cañón musical en directo, ni partes de "Victim of changes" o "Rapid fire" las puede hacer a día de hoy)… Es más, se nota que sufre muchísimo y canta ya casi más veces agachado, dándolo todo, sí, pero echando la bilis, que estando cómodo en el escenario dominando su voz y sus registros con toda la solvencia del mundo como antaño. Pero pese a todo, no estuvieron mal, no, y estoy seguro que en España, con el apoyo y el calor de nuestra gente estarán mucho mejor, ¡seguro!

Y a nivel de las decepciones, tengo que incluir a SCORPIONS con todo el dolor de mi corazoncito del metal (de hecho, fueron la razón principal para decidirnos finalmente por HELLFEST como experiencia internacional de este verano), y es que tocaron media hora menos de lo acordado (tenían casi dos horas y tocaron hora y media siendo generosos), con los temas ralentizados, con un set list muy tópico (lleno de clasicazos vale, pero…) y con muchos sólos (de hecho, el de Kottak duró casi 15 minutos, eso sí original y realmente muy visual, con un vídeo chulísimo de fondo incluido)… Y todo ello porque duele decir que sólo Dio y Klaus Meine no me habían decepcionado nunca, y ahora uno está muerto y el otro ya no puede. Es triste y duro pero me da que la razón real de la retirada es porque la voz de Klaus no da más de sí.

Una pena pero duele ver a un Rudolf Schenker con la misma vitalidad y energía que si tuviera veinte años (acojonante, verdaderamente acojonante ver a Rudolf Schenker en directo), y por contra a un Klaus que lo intenta pero ya no puede. Y no se le puede reprochar nada después de 40 años dando lecciones, pero para tener que escuchar "Dynamite", "Still loving you" o "Big city nights" así lo más honesto es que lo dejen estando aún muy arriba. Y ojalá vengan a España y me cierren la bocaza (que Rudolf anunció que volverían a Francia en otoño), pero me temo que no será así y que por una vez hay que aceptar el "gracias por todo pero hay que cerrar el chiringuito"… y eso que el espectáculo es excelente (con pantallas, proyecciones, juegos divertidos…) y que la banda está en perfecta forma, pero Klaus ya no puede y hay que aceptarlo.

Y en la parte negativa no me olvido de ROB ZOMBIE, tocando 15 minutos menos de lo previsto y con la mitad de espectáculo terrorífico que se supone que traía (no es santo de mi devoción pero había ganas de verle), ni de Iggy Pop, que está en una forma física excelente, increíble para sus 65 años, pero que ni canta un pimiento ya ni tiene a una banda solvente detrás por mucho que se llamen THE STOOGES… Me dejó tan frío como el tiempo que hacía el viernes a esas horas. Y para rematar el circo de los horrores, si me permitís la broma, una vez más se reiteró el esperpento que vimos en Atarfe en su momento porque MAYHEM son una tomadura de pelo a día de hoy y no merecen llevar tamaño nombre detrás (siempre dentro de los gustos de cada uno, que ya sabéis que nunca fueron ni serán santos de mi devoción). Y eso que llevaban "espectáculo", pirotecnia y demás, pero nada, el mismo chiste malo que sufrimos en Atarfe en su momento. Lamentable una vez más.

De todos modos, ya digo que las crónicas extensas y en profundidad (y hablando de muchos más grupos, y con la variedad estilística de tres personas diferentes de por medio) vendrán en unos días, pero creo que con esto es suficiente para que os podáis hacer una idea aproximada de cómo es y ha sido esta edición de Hellfest. Se ha disfrutado y por supuesto ya está apuntado en la lista de festivales a los que seguramente volveré en el futuro. Por mi parte, la experiencia y recomendación para el futuro es rotundamente positiva, ¡festivalazo!

¡Merci beaucoup y aù revoir, Hellfest!

Texto y fotos: David Esquitino (david_esquitino@rafabasa.com)

Para ver las fotos a mayor tamaño, pinchar sobre ellas.

Galería de Fotos:

BANDAS