Sabado 18 Diciembre de 2010 – Sala Rockstar Live – Barakaldo
La verdad es que no soy fanático de los Barones, pero un concierto con la formación original es algo especial, una oportunidad que, creo, ninguna persona que conozca en menor o mayor medida sus canciones debería dejar escapar, pues estamos hablando de la banda más grande que ha dado este país, quizá no estén en su mejor estado de forma, pero no olvidemos que unos jovencísimos METALLICA abrieron para BARÓN ROJO hace ya un porrón de años, como muestra un botón, que se suele decir.
En Bilbao y alrededores siempre fueron bien recibidos (recordemos su DVD), así que lo que si me encontré fue una Rockstar llena hasta la bandera, y lo más bonito por así decirlo es que pude ver algo que raramente sucede, varias generaciones en un mismo concierto, y en general un público muy variado, grupos de cincuentones junto a cuadrilla de chavales de apenas 18 años o menos, padres y madres con sus retoños, antiguas tigresas del metal…de todo un poco, como en los zoológicos.
El sonido estuvo a la altura de semejante ocasión, todo lo bueno que puede ser en esta sala (que ha mejorado mucho en ese aspecto y en algún otro), aunque es verdad que siempre me ha maravillado a fidelidad con la que los hermanos de Castro han sabido llevar al directo sus temas de cara al directo.
No sé tampoco por qué pero no esperaba que las cosas cambiaran mucho con el regreso de Sherpa a la banda, pero he de admitirlo, me equivoqué de lleno. El señor Campuzano (que por cierto, no sabía que hubiera pasado unos años en Beasain, y si lo sabía, no lo recordaba) pese a sus años aún conserva una voz realmente envidiable, mi sorpresa fue mayúscula y fue todo un placer escuchar los temas más clásicos de la banda en su voz, superando con creces este todos los conciertos anteriores que había visto de la banda si él.
Los hermanos de Castro como siempre dentro de su rol, Armando demostrando que es todo un «guitar hero», clavando cada una de sus notas y ofreciéndonos una clase magistral a las seis cuerdas, aunque como siempre también, un tanto distante, nada comparable con la simpatía y buen rollo que se gastaba Sherpa, quien no dejaba de hablarnos y bromear con nosotros.
Carlos nunca ha sido precisamente la simpatía personificada, pero esta vez lo vi incluso más retraído que en otras ocasiones (aparte de mucho más delgado), apenas se involucró salvo las habituales coreografías con su hermano, cierto es que en la última recta del concierto se le vio algo más activo, atreviéndose incluso a gastar una broma acerca de la duración del evento, pero por lo habitual se mostró bastante frio, aparte de parecerme en algunos momentos que no se encontraba demasiado cómodo cantando.
Apartado especial merece el bueno de Hermes, y es que viéndolo tocar en ciertos momentos me recordó a Charlie Watts (de los ROLLING STONES), tocando con sutileza, sutileza que dudo que tuviera hace unos años, y es que con todo el respeto del mundo, dio la impresión de estar mucho más «cascado» que el resto de sus compañeros, quizá fuera solo una apreciación mía, pero es lo que me pareció.
En lo musical decir que todo el concierto fue una fiesta, aunque las casi tres horas (si, he dicho tres horas, impresionante) en algún momento quizá se me hicieran un tanto pesadas, he de mentar que estuvieron a la altura y cumplieron las expectativas con casi una treintena de temas entre los que no faltaron ninguno de sus clásicos como «Larga vida al rock’n’roll», «Hermano del rockanrol», «Satánico plan», «Concierto para ellos», «Breakthoven», «Siempre estas allí», «Cuerdas de acero», «Los rockeros van al infierno», «Las flores del mal», «Resistiré», «Hijos de Caín», «El malo», «Casi me mato»…etc.
Grandes BARON ROJO, un concierto por todo lo alto digno de la fecha que se festejaba, lástima que esta formación no vaya a seguir adelante (supuestamente) porque podrían hacer cosas muy interesantes juntos en el estudio, pero bueno, al menos siempre nos quedará el recuerdo de haber podido ver a los Barones «de verdad» al menos una vez. Puede que no fuera el mejor concierto que hayan dado en toda su carrera, pero estuvieron a la altura, y si tenemos en cuenta que los años no pasan en balde para nadie, siguen teniendo mucho nivel aún, y que sigan «Rockanroleando» aún unos cuantos años más.
Texto: Ángel Ruiz
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