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LEIZE en Logroño – Crónica y Fotos

14 diciembre, 2010, 12:52 am

Viernes 10 de Diciembre de 2010 Sala Biribay – Logroño

¡Cuánto echaba de menos una buena dosis de heavy rock sincero, crudo y real!. Y eso es exactamente lo que nos ofrecieron LEIZE el pasado viernes 10 de diciembre en Logroño, en la entrañable sala Biribay. Ya tocaba presentar su último disco, ‘Solo para ti’, en la capital riojana, tras su paso el pasado mes de mayo por tierras jarreras – Haro –. Con el reloj marcando las once de la noche, LEIZE aparecían sobre el escenario logroñés con unas ganas tremendas de hacer disfrutar al personal y pasárselo bien. ¡Y vaya si lo consiguieron!. Da gusto ver a estos tíos sobre el escenario, de verdad. Con el primer guitarrazo te colocan inmediatamente en tu sitio, así de simple, a golpe de válvula. Su sonido no ha cambiado lo más mínimo después de tantos años y eso se agradece, sobre todo si tienes los tímpanos saturados con tanta modernidad. Y es que así es como debe sonar el heavy rock callejero, con garra y actitud.

En el aspecto técnico, señalar brevemente que la batería del señor Gorospe sonó perfecta, aunque el local se comiera los graves del bombo. Toño se mostró como siempre, seguro y eficaz a las cuatro cuerdas, sin parar de sacudir su castigado Fender a diestra y siniestra, saltando incluso varias veces a la pista para jalear al público. Respecto a los dos hachas, Patxi y Félix, ¡qué os puedo decir!….chapeau!. Y es que tanto el sonido como la ejecución fueron impecables. Además, Félix canta como siempre, alto y claro.

Durante algo más de hora y tres cuartos, LEIZE fueron despachando clásicos uno tras otro, alternándolos con algunos temas nuevos de su último trabajo. Es el caso de ‘No me dejaré’, la encargada de abrir el plástico, que apareció después de los tres primeros cortes ‘Y otra vez’, ‘Dar el salto’ y ‘Futuro para mi’ – el punteo de ésta última me emocionó sobremanera; lo siento, pero ya no se solea como antes- . El ambiente se iba caldeando con cada himno, mientras Félix buscaba la complicidad con la parroquia ofreciendo el micrófono al respetable en varias ocasiones. A estas alturas el bolo era ya una fiesta y los de Zestoa se lo estaban pasando genial.

Poco a poco nos fueron llevando a su terreno, de manera muy inteligente. Canciones como ‘Acosándome’ o ‘Volveré a salir’ aterrizaban afiladas sobre las tablas del Biribay mientras que sus hermanas ‘Noche de ronda’, ‘A tu lado’ y ‘Pedazo de cielo’ sonaban preciosas y daban paso a la todopoderosa ‘Buscando…mirando’, con la peña dejándose la garganta en el estribillo. Con el bis de rigor, cerrando la gran ‘Muros’, LEIZE nos decían adiós entre un mar de sonrisas y aplausos. En su rostro, el reflejo del trabajo bien hecho. Incomprensiblemente la suerte nunca acompañó al combo vasco y LEIZE, en mi humilde opinión, siempre merecieron mucho más de lo que otrora consiguieron.

Dicen las malas lenguas que después de sus dos primeros trabajos se suavizaron demasiado y que a la postre eso fue un error que acabó pasándoles factura. Ciertamente tales afirmaciones pierden cualquier sentido cuando uno siente de primera mano, en sus propias carnes, un show de estas características. Hoy por hoy ‘Leise’, como dicen ellos, siguen siendo una banda imprescindible de heavy rock, una gente que continua contando lo que pasa en calle, sin disfrazar la realidad. Y eso amigos míos, en estos tiempos que corren, es de agradecer.