LOS SUAVES – Concierto en Madrid

5 de Marzo de 2010 – sala La Riviera – Madrid

Después de la cancelación del año pasado, había ya ganas de volver a disfrutar de los gallegos de nuevo en Madrid y es que, festivales y fiestas de barrio/pueblo aparte, al menos una vez al año hay que verlos en concierto propio en una sala, ¿no? Además, el nuevo disco parece que está dejando buen sabor de boca, y los comentarios generales sobre los últimos conciertos de la banda vuelven a ser positivos, con lo que había buena expectación para ver de nuevo a LOS SUAVES en Madrid el pasado viernes… Algo que se vio refrendado con una buena entrada (unos tres cuartos de sala), además en un curioso fin de semana en Madrid porque, sin salirnos del estilo, tocaban LOS SUAVES el viernes y BARRICADA el sábado (como os comentaremos también en breve), con lo que el doblete de público estaba asegurado (incluso hubo bastante gente que aprovechó para viajar a Madrid el fin de semana para asistir a ambos conciertos). De todas formas, la asistencia no fue el llenazo de la vez anterior (en la que estaban ECO como teloneros, el proyecto paralelo de Alberto Cereijo que, al menos a día de hoy, parece ser que está en punto muerto) aunque Madrid siempre es una plaza segura para los orensanos, que además saben que a poquito que Yosi esté centrado, que el viernes lo estuvo, el concierto es éxito seguro, además de "la fiesta de todos", como le gustaba decir antaño al cantante.

Y ya que introduzco el dato, vamos a tirar por ahí para empezar, y es que Yosi estuvo ("está", vaya, según parece) bastante centrado de nuevo, tomándose los conciertos en serio, cantando todos los temas prácticamente sin fallo en las letras (siempre dentro de su estado general y su particular personalidad, por supuesto) y fijándome personalmente en detalles positivos como que esta vez no se quitó la camiseta ni una vez (por mucho que nos guste a veces ver como se pone las que le van tirando desde el público), ni se subió por la PA, ni hizo más locuras de lo habitual, incluso sólo se tiró una vez al público, y ya al final del concierto y como agradecimiento sincero a la siempre respuesta excelente de la gente de LOS SUAVES en cualquier concierto. Y aunque sea así de fácil, la afirmación para mí siempre es rotunda: Cuando Yosi está bien, LOS SUAVES están muy bien, y efectivamente en Madrid esta vez nos tocó concierto de los buenos, con dos horas completas (incluso tuvieron que dejar fuera dos temas del set, "Siempre igual" y la parte final instrumental de "Miau, miau" por falta de tiempo) y con una banda demostrando que musicalmente son un cañón y que están muy, muy compenetrados.

Puestos a personalizar, siempre es un gran lujo ver y escuchar a Alberto Cereijo en directo, que creo que no soy el único que piensa que a día a hoy es posiblemente uno de los dos o tres mejores instrumentistas que hay en este país, y es una pasada disfrutar de su sonido además viéndole tocar con esa "sencillez" y seguridad que le caracteriza. Aparte de Alberto, y como comento en la propia crítica del disco, me gusta comprobar que Fernando Calvo es ya a estas alturas su mano derecha, y cada vez con más peso en la banda en los conciertos (incluso en el cariño de la gente). Es que LOS SUAVES es una banda 100% guitarrera y es un lujo escuchar los temas en directo de la mano de dos guitarristas tan buenos y cada vez con más feeling (y paulatinamente más pareja instrumental, como en las grande bandas), como son Alberto y Fernando. Aparte de esto, pues ya sabéis que Charly se mantiene en su segundo plano habitual (pero dándole buena cera a su bajo como base de las canciones poderosas del grupo), y Tino Mojón es un buen batería pero en directo le sigo echando siempre en falta un punto extra de pegada para que el grupo suene como el gato rabioso que ha sido siempre.

Comenzaron sorpresiva mente, y sin pirotecnia como tras veces, pero a ritmo de "No puedo dejar el rock", como en sus mejores tiempos, y a partir de aquí comenzó la fiesta que siempre son los conciertos de LOS SUAVES, con el público 100% protagonista, cantando todos los temas, y mostrándole a la banda un cariño superlativo… que ellos siempre han agradecido, por supuesto, incluso en los tiempos en los que tenían que pedir disculpas avergonzados de los peores momentos de Yosi. Por cierto, me gustó comprobar la buena recepción de los temas nuevos en el concierto, comenzando por una movida y fantástica "Cuando los sueños se van", que cantó una gran parte de la sala, demostrando que ya mucha gente se había empapado del nuevo disco. La clase de Alberto quedaba más que palpable con "San Francisco Express" (y eso que del disco siempre preferí "Ourense-Bosnia"…), aunque lo cierto es que la sala terminó de explotar con "Palabras para Julia", que ya se ha convertido en uno de los clásicos imprescindibles del grupo. Algo más fría, precisamente, resultó la aceptación de "Frío como una llave", más a medio tiempo y aún menos conocida, (aunque me resultó escuchar a la banda en tesituras casi de AOR ochentero), y lo mismo con "Judas", del infravalorado "Si yo fuera dios".

En este momento, el sonido comenzó a mejorar y hacerse mucho más nítido, porque había comenzado mucho más "ratonero" y con la voz de Yosi algo más baja, quizás temerosos los técnicos de lo que pudiera pasar… Pero no, ya digo que Yosi estaba "en forma" y la banda respondiendo como siempre, perfectos. Uno de los temazos de la noche fue sin duda "Maldita sea mi suerte", que todos la cantamos al unísono, puño en alto y con las guitarras sonando muy, muy bien (quizás algo más embarullado el resto aún), y también hubo muy buena respuesta, volviendo al último, con "Esta noche me perdí", un tema más melódico y muy Cereijo, pero que se nota que ha calado muy bien entre la gente. Tras el punto especial de "Malas noticias", imprescindible, (presentada por Yosi, un tanto abrumado por los gritos de la gente jaleando a la banda, que menos alegría, que ellos venían a traernos tristeza… ¡qué tío!, siempre incorregible), y el siempre emocionante recuerdo a THIN LIZZY de "¿Sabes?, Phil Lynnot, murió", yéndonos más atrás en el tiempo, era el momento de recordar a GARY MOORE con la versión de "Se alza el trueno", también del último, que les quedó sinceramente muy bien en directo, me gustó mucho, con una guitarras melódicas limpísimas y una letra de la que te llega y te hace estremecer.

"Adios, adiós", que abre el nuevo disco, les quedó muy bien en directo, la verdad, y después nos sorprendieron con un pequeño medley, enmarcado entre el principio y el final de "Preparado para el rock n’roll", incluyendo varios temas que hacía tiempo que no tocaban (a modo de lo que hicieron WASP, por ejemplo, en la misma sala hace pocos meses), y es que llega un punto en el que o haces algo así o es imposible meter tantos temas en un set list. Especialmente me emocioné escuchando un par de estrofas de "Dile siempre que no estoy", que siempre me ha parecido de sus mejores temas, además de "Pobre jugador", un tema que siempre ha gustado mucho entre el público de la banda.

Iba llegando la parte final del show, y por tanto los momentos más calientes, comenzando despacio con la preciosa y querida "Si pudiera", que cantó "hasta el apuntador", como se suele decir, y es que, aunque lo hayamos vivido más veces, es emocionante escuchar a toda una sala cantando una letra especial al mismo tiempo, ¿eh? Quizás me gustó menos "Han matado el rock n’roll" del último, algo más pesado y moderna, aunque el estribillo en directo es todo un acierto. De todas formas, posiblemente el tema más destacado de esta parte fue "Mi casa", que es increíble lo rápido y fuerte que ha calado entre la gente… y eso que fue de las que peor cantó Yosi, pero aún así fue uno de los momentos álgidos de la actuación sin duda. Y ni que decir tiene el estallido general cuando comenzó a sonar "Dolores se llamaba Lola", momento en el que alucinamos muchos cuando de repente en medio de la pista vemos emerger a un chico en silla de ruedas, levantado por completo por sus amigos para que disfrutara bien arriba del gran clásico de los gallegos, ¡impresionante! Además, fue el momento de las explosiones de confetti, y el juego habitual con las banderas, que nunca puede ni debe faltar en ningún concierto de LOS SUAVES.

Pero aún quedaba mucha noche, y tras un breve bis era el momento especial de "Pardao", otro tema único y que en directo siempre será uno de los puntales de la banda, con Yosi acariciando la acústica (tocándola menos), y la banda aportando el punto potente detrás. La sorpresa apareció con "Mártires del rock n’roll", uno de mis favoritas desde siempre, y que esta vez no esperaba, la verdad, un tema que, pese a no sonar ya en el viejo pabellón del Real Madrid, en la capital siempre tiene un rollo especial. Incluso esta vez la disfrutamos con un invitado inesperado sobre el escenario, y es que se subió Tibu, ex bajista de BANZAI, a tocarla con ellos, en un momento curioso. Eso sí, la gente más parada en un tema tan rotundo, nunca lo entenderé, en fin… será cosa de los más jóvenes que no recuerdan los discos anteriores a "Santa Compaña"…

Ya sí que iba quedando poco para "chapar", y tras una brutal "Dulce castigo", era el momento de disfrutar de la siempre mágica "El afilador" (¿qué sería de un concierto de LOS SUAVES sin escuchar esa maravillosa oda a su tierra?), poniendo más que de relieve que el concierto había ido sin duda de menos a más, sobre todo a nivel de movimiento de la gente, que comenzó más paradilla, las cosas como son. Y tras la falsa despedida, por aquello de que aún faltaba un último cartucho que quemar, el final llegó, ahora sí, con "Ya nos vamos" (saliendo Yosi con camiseta del Atleti, por cierto) poniendo punto final a la fiesta, aunque nos dejó con las ganas de más a eso de las 23:10 de la noche, pero ya sabéis que los horarios en este tipo de salas "son los que son".

En definitiva, buena presentación de los gallegos en Madrid, de nuevo afortunadamente en buena forma (sobre todo hablando por Yosi, que parece que ha vuelto al buen camino en el momento en el que su larga melena ya es totalmente canosa), y mostrando que el final de la banda no tiene visos de ser algo aún cercano.

A modo de "protesta", personalmente me pareció que el set list fue un tanto repetitivo con respecto a lo que nos llevan ofreciendo los últimos años (aparte de los temas nuevos, claro), y es que quizás esperaba dos o tres temas un tanto diferentes, aparte de los que ya son clásicos imprescindibles… aunque el propio Charly nos contó después del concierto que tocaron menos temas de sus tres primeros discos a propósito en vista de una sorpresa que nos desvelarán más adelante y que seguro que los viejos fans les agradecemos de corazón… Por otro lado, está claro que la ilusión y la emoción de ver a una banda a la has disfrutado tantas veces en concierto, no puede ser la misma que aquellos primeros shows en el Canciller a comienzos/mediados de los 90, cuando eran pura dinamita, pero aún me sigo alegrando mucho de poder coincidir con ellos de vez en cuando y decir que me han alegrado (o entristecido, según se mire, jeje) la noche. Miau, miau…

Texto; David Esquitino (david_esquitino@rafabasa.com)

Fotos: Esquitino y Fernando Checa

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