|
+ STEEL HORSE
Viernes 12 de Febrero de 2010 – Sala Excalibur – Madrid
Con algo de retraso (disculpas) publicamos la crónica del excelente concierto que tuvimos el placer de disfrutar hace algunos días en la sala Excalibur de Madrid, con unos STEEL HORSE arrasando escenarios allá por donde van y demostrando que si no son nuestra mejor banda actual de heavy metal (en estudio y en directo), poco les falta. Además, venían «teloneando» a los franceses LONEWOLF (y lo pongo entre comillas porque la realidad fue que tocaron primero, nada más), que presentaban su cuarto trabajo, «The dark crusade», pero que en nuestro país aún no son demasiado conocidos, lo que se demostró en el concierto, en el que la mayor parte del público estaba para ver la actuación de STEEL HORSE. Además, después de ver ambos shows (tocando aproximadamente una hora cada banda, minutos abajo los primeros, minutos arriba los segundos), tengo que mojarme y decir que no hubo color, con unos madrileños que se comieron literalmente el escenario y consiguieron levantar a la gente desde el primer segundo de actuación a base de clase, actitud, poses estudiadas (¿y acaso no lo hicieron siempre los mejores JUDAS, ACCEPT, SCORPIONS…?) y temazos, y unos LONEWOLF que nos dejaron mucho más fríos a la mayoría con una propuesta tan similar a GRAVE DIGGER y sobre todo RUNNING WILD, pero mucho más limitados que ambos, que acabaron aburriendo a los que no eran seguidores acérrimos del grupo (que también los había).
Empezamos brevemente con STEEL HORSE, que ya digo que están en una forma insuperable, y eso que presentaban nuevo miembro, Rubén Salvador, que hizo un buen trabajo, después de que su anterior batería Ricardo haya decidido centrarse al 100% en su labor de cantante con CALIBRE ZERO, otra banda que está comenzando a funcionar bastante bien en la actualidad. Se presentaban en Madrid después de varios meses sin tocar y la verdad es que había muchas ganas de verles. Además, personalmente hacía ya un tiempo que no les veía en directo, casi dos años entre unas cosas y otras, y tengo que decir que el salto de calidad del grupo ha sido brutal, pasando de ser «sólo» una banda que apuntaba muy buenas maneras, desde los comienzos como DEAD END ROAD, hace ya años a convertirse en una realidad más que rotunda a día de hoy, y más después de la edición de «Wild power», unánimemente considerado como uno de los mejores lanzamientos del estilo de los últimos años.
En directo son un auténtico cañón, con un Willy Gascón ejerciendo de guitarrista líder, tocando con una seguridad y clase aplastante, pero sin dejar en ningún momento de lado su labor de músico para la banda, de ejecutor de canciones y de referente visual espectacular para el público, siempre en primera línea, ofreciendo su Flying V (blanca, por supuesto) y disfrutando como el que más de estar ahí. Es un guitarrista soberbio y todo un crack en directo, espectacular de verdad. Después, y sin desmerecer al bajista Choco (también muy activo y 100% metido en el concierto), ni al nuevo batería, que ambos hicieron un gran trabajo y obviamente son muy importantes para que la banda suene como un auténtico ciclón en directo, me quito el sombrero una y otra vez ante Jorge Cortés, un vocalista cada vez más cercano a Rob Halford, su referente más claro tanto en imagen, pose y voz, pero que te deja con la boca abierta en cada grito, en cada frase, en la manera de atacar los temas, y en la seguridad que transmite… y es que viéndole en directo parece que cantar «así» es fácil, ¡tela! Vestido de cuero, pelo corto y pose «halfordiana» en todo momento, (y es que está claro que hasta las mejores bandas tienen sus claras influencias), me parece sin ninguna duda ni temblor en mis palabras el mejor cantante actual de heavy metal clásico que tenemos en nuestro país (con todos los respetos al resto) y su labor en directo no hace más que reafirmarme en mi opinión.
Además, de los temas de «Wild power», que lo tocaron prácticamente entero, incluyendo ese instrumental «Némesis» 100% deudora del «Transylvania» de MAIDEN y temas similares (y es que ya digo que no tienen la más mínima intención de esconder sus influencias), nos regalaron dos excelentes versiones, como es habitual en ellos, que en este caso fueron ni más ni menos que «Stand up and shout» de DIO (que le dedicaron acertadamente deseándole una pronta recuperación) y un «Phamtom of the opera», que bordaron incluso teniendo en cuenta la dificultad de abordar el tema sólo con una guitarra (cuando obviamente uno de los puntales del original es el juego entre las guitarras de Dave Murray y Dennis Stratton/Adrian Smith… y es que la afirmación de que Willy es un guitarrista espectacular no es gratuita en absoluto, os lo aseguro). Personalmente me encantaron cortes como «Run to survive», con ese final apoteósico de Jorge, «Sons of fire», que es una pasada, además de las que creo que son los dos puntales del álbum como son «Raise your fist», muy coreada por los asistentes (por supuesto puño en alto, y melena al viento, como pide el tema) o la propia «Wild power», ya todo un clasicazo e imprescindible en sus shows.
En definitiva, un concierto soberbio, espectacular y de los de quitarse el sombrero ante una banda que a día de hoy están ya a años luz de la mayoría de grupos que se nos vende desde fuera (y también dentro de nuestras fronteras, que no seré yo quien haga demagogia barata con esto) como «la nueva sensación del metal» y STEEL HORSE haciendo mucho menos ruido, siendo más humildes y trabajando muy duro hace ya tiempo está claro que están ya en un escalafón superior más que merecido. Además, personalmente les alabo que sean fieles a sus gustos, estilo y sonido (incluso a nivel de imagen y actitud en directo, por supuesto), que no es más que lo que todos hemos mamado desde que éramos pequeñitos y hemos visto y disfrutado en los vídeos de toda la vida de MAIDEN, JUDAS, SCORPIONS, ACCEPT, SAXON, DIO y demás, y no se dejen llevar por los cantos de sirena y experimentaciones que hacen caer a muchos grupos que apuntan buenas maneras pero se quedan en nada por no ser fieles a ellos mismos. Un diez para ellos y de verdad que si alguien me está leyendo y cree que exagero, no tiene más que buscar su «Wild power» y sobre todo acercarse a verles en directo cuando tengan oportunidad, y después comentarnos a todos qué les ha parecido la banda.
Y como digo, después de la demostración de STEEL HORSE, con la gente 100% con ellos y con el comentario generalizado más que positivo del concierto, creo que fue un error la elección de la posición en el cartel, por mucho que LONEWOLF sean más veteranos, y es que el concierto de los franceses se quedó en muy poco tras la actuación de los madrileños. Personalmente les descubrí hace algunos años con un interesante trabajo como fue «Unholy paradise» (de 2003), pero les tenía un tanto perdida la pista desde entonces, y tenía ganas de verles encima de un escenario… pero ya digo que nos cansaron muy pronto a la mayoría con un estilo mucho más sucio y estereotipado, a modo de copia menor de unos RUNNING WILD a los que idolatran en demasía pero que lamentablemente se quedan muy lejos de los corsarios liderados desde siempre por Rolf Kasparek.
Con una imagen incluso cercana al death metal (vestidos de negro riguroso, con semblante más serio, excepto el pequeño guitarrista solista, Damien, y con instrumentos «afilados», muy atractivos visualmente pero ya digo que me hacían pensar en una banda más extrema), y un sonido más monótono, pesado y sucio, atacaron temas de sus cuatro primeros discos, quizás con un deje en sus temas más recientes incluso cercano al folk metal que está tan en boga en Europa actualmente (sin salirse de su vena más true/underground, que nadie me malinterprete), pero mostrándose muy repetitivos, sosos y monótonos como digo, haciendo que la pista se fuera vaciando paulatinamente, con la gente cada vez más cerca de la barra y atenta a las conversaciones de turno que al devenir del concierto, algo que me imagino que la banda tuvo que notar también, aunque no hicieron demasiado para arreglarlo.
A nivel de repertorio me quedo sin duda con los cortes en los que atacaban riffs con melodía como en la powermetalera «Legacy of the wild», «Behind the cross» o la propia «The dark crusade», además de «Made in hell», uno de sus temas más clásicos y netamente heavies como fin de fiesta con varios fans del grupo y miembros de la asociación Pounding Metal cantando y «macarreando» con ellos sobre el escenario, con los músicos encantados en un final del concierto mucho más activo y animado que lo que había sido el concierto hasta entonces. Y como no podía ser de otra manera, a petición del público remataron el show con el mítico grito pirata «Are you ready for boarding?» que precedió a una limitada pero guapa versión del «Under Jolly Roger» de sus idolatrados RUNNING WILD que puso atractivo punto final a un concierto, pese al final más movido, muy a medio gas.
En definitiva, buena noche de heavy metal en la Excalibur la que vivimos hace unos días, con una asistencia más que aceptable tratándose de un viernes y de un concierto de alguna manera fuera del circuito habitual de bandas que vemos más habitualmente en Madrid. Eso sí, no me bajo del burro lo más mínimo al afirmar que no hubo color entre LONEWOLF y STEEL HORSE, con lo que tengo muy claro que con los madrileños repetiré emocionado una y otra vez siempre que pueda (enhorabuena, chicos, ¡vaya conciertazo!) y con los franceses probablemente haya tenido suficiente con esta primera vez que tenía la ocasión de coincidir con ellos en directo (y eso que soy el primero que me encantan los discos clásicos de GRAVE DIGGER y sobre todo de RUNNING WILD, por supuesto). Al final me jode incluso recurrir al tópico pero tenemos que apoyar mucho más a las bandas increíbles que tenemos aquí, que en muchos casos tienen un nivel muy, muy superior a lo que nos tratan de vender desde fuera, y no nos queremos dar cuenta.
Texto y fotos: David Esquitino (david_esquitino@rafabasa.com)
Para ver las fotos a mayor tamaño, pinchar sobre ellas.
Más fotos:
STEEL HORSE