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+TRACY GANG PUSSY
Viernes 5 de Febrero de 2010 – Sala Joy Slava – Madrid
Dentro de su gira de 20 aniversario, era visita obligada de los suecos el volver a recalar en nuestro país. Además, venían acompañados en esta ocasión de una muy joven banda francesa, totalmente desconocida para la mayoría, pero que nos dejaron una fantástica impresión a los pocos que estábamos en la sala cuando comenzaron a tocar (y eso que ya con BACKYARD BABIES sobre el escenario, el llenazo fue casi absoluto… un detalle que me resultó cuanto menos curioso, y es que los teloneros no tocaron mucho más de 45 minutos antes que los protagonistas). 100% sleazies y con ese deje más americanizado de nuestros queridos MÖTLEY CRÜE (de hecho, el cantante/guitarrista rítmico llevaba camiseta del «Too fast for love», en clara referencia), LA GUNS (de los que hacen guiño en el nombre, por supuesto) y demás, aunque sin dejar de lado el punto más punkroquero y de rock clásico escandinavo, me gustaron muchísimo, especialmente su guitarrista (más) tatuado, Revlon, que no paró de darle cera a su Gibson y de provocar, en el mejor sentido, a la concurrencia. Y me encantó también el batería, con un mínimo kit a ras de «suelo», pelo engominado y deje más elegante, pero que no dejó títere sin cabeza durante la media hora larga que estuvieron en escena… Algo más sosos me parecieron el bajista y el cantante (con ese pelo a lo «Melocos» que no terminamos de encuadrar muy bien con la macarrería y el sonido de la banda actual, pero bueno, son jóvenes aún, como se suele decir).
Por cierto, comentar que venían presentando su ya cuarto trabajo, «Number 4», que se dice pronto teniendo en cuenta su juventud, pero ahora ya con su estilo totalmente asentado (que comenzaron como una banda de punk/pop rock mucho más adolescente y comercial), tienen un grandísimo futuro por delante, especialmente si tenemos en cuenta la formación tan sólida que son en directo y los grandes temas que pudimos escuchar en el concierto. Grata sorpresa, en definitiva, y una banda hardroquera/sleazy más (aunque en este caso sean franceses) de una cantera europea que afortunadamente parece no agotarse.
Por cierto, antes de meternos de lleno con los protagonistas de la noche, que dieron un conciertazo de impresión, las cosas como son, no quiero dejar de comentar el impresionante merchandising que traían (ambas bandas, de hecho, pero lógicamente mucho más limitado el de los teloneros): Camisetas de todos los tipos y colores (¿a qué no sabéis quién se compró una amarilla y rosa?, jeje), vinilos, CD’s en ediciones especiales, pósters, pins… ¡hasta muñecos de Dregen!… y todo ello a un precio más que aceptable (y casi todo el material firmado, por cierto), con lo que imagino que en esta gira están haciendo más que buena caja a este respecto, y les felicito porque son detalles que los grupos cada vez cuidan menos y se nota que BACKYARD BABIES tienen especial respeto y cuidado por sus fans en este sentido. Un 10, de verdad, a la visión comercial de los tíos (incluso no me extrañaría que gracias a esto se permitan el lujo de cobrar las entradas algo más baratas en los shows, y es que en este caso eran 18 euros anticipada/20 en taquilla, que para una banda con el status de los suecos, me pareció un precio más que ajustado, y más en estos tiempos de atraco a mano armada como tónica general en los precios de las entradas).
Por cierto, por si alguien está despistado, comentar que los suecos son los pioneros, junto a TURBONEGRO quizás, de esa «nueva» ola de hard/rock guitarrero clásico que nos invade en el mejor sentido en los últimos tiempos desde el norte de Europa, especialmente desde Suecia y Finlandia (a día de hoy con HARDCORE SUPERSTAR a la cabeza, pero con una retahíla de bandas detrás de las que quitan el hipo). Y a su vez reconozco que quizás por esto mismo nunca me han convencido demasiado en disco (son los menos sleazies de todos por mucha imagen y demás, especialmente de los dos «jefes» de la banda), y de hecho no había llegado a verles en directo por esto hasta ahora. Craso error, visto lo visto, porque ese deje más melódico y «calmado» de sus temas en disco toman en directo la macarrería, suciedad y actitud que precisamente les echo en falta en disco, especialmente en la voz de Nicke Borg (con tatuajes hasta en las pestañas, ¡madre mía!).
Además, sus fans de toda la vida les achacan una cierta comercialidad y «abertura de miras excesiva» en los dos o tres últimos trabajos de la banda, pero esta vez todos, nuevos y viejos fans del grupo, incluso los «extraños» como yo, quedamos encantados con la exhibición de sudor, actitud y clase a su estilo de los suecos encima del escenario. Es más, fue para mí toda una demostración o clase maestra de cómo se debe comportar una banda de este tipo en directo: tocando literalmente encima de su público en todo momento, dando lo máximo, tocando temas de todos sus discos y prácticamente dos horas (algo que habían racaneado siempre hasta esta gira especial, según me comentaron muchos de los que les habían visto antes varias veces), y disfrutando los primeros de lo grande que es el rock en directo. Y por encima de todos, es imposible no quedarse embobado mirando a Dregen, ese niño grande punkroquero que es, como me dijo un amigo en una definición más que acertada, «el Angus Young del estilo». Pura adrenalina en directo, puro «sexo, drogas y rock n’roll» en persona, totalmente electrizado y electrizante y siempre transmitiendo la fuerza y la ilusión del que está empezando en esto (por mucho que lleve 20 años y posiblemente haya creado una nueva rama del rock). Sin camiseta, chupa de cuero «de cuando era joven», mechón sobre la cara, tatuajes, pulseras y pendientes por doquier, pose del rock, guitarra de color claro bien abajo (como los Slash, Perry, Richards y demás) y a darle cera y sudar más que nadie. Un lujo y todo un espectáculo en directo, os lo aseguro.
Del resto de la banda, aunque estén más en segundo plano, me quedo sin duda con un batería excelente como me pareció Peder Carlsson (con sus habituales y largas trenzas, por supuesto). Nicke Borg, segundo guitarrista y cantante, por mucho que sea el segundo de a bordo, me sigue pareciendo que le falta un hervor en directo, además de mucha voz; y el rubio bajista Joham Blomqvist se lo pasa de vicio, vacila y juega con las primeras filas más que nadie, y musicalmente cumple… aunque lo de tirar al público los tercios de cerveza «al vuelo» es un detalle… pero peligroso. Y ya que estamos con los «elementos escénicos», si me permitís la pequeña broma, que no se me olvide hablar del precioso y vistoso escenario que traían los suecos: con los amplis rodeados de luces rojas de neón y con sirenas encima, y sobre todo una luces verticales desde el suelo que quedaron de maravilla en todo el concierto, demostrando una vez más que no son necesarios supermontajes para hacer de un escenario algo más que atractivo para que sea un extra más del propio show que, efectivamente, ya son los BACKYARD BABIES en directo en sí. Muy, muy chulo, de verdad, me encantó el tema de las luces y demás que se curró la banda (además del gran y sobrio telón con su calavera roquera habitual que llevaban de fondo, claro). Y ya que estamos, con los aspectos «técnicos», recalcar que el sonido fue más que correcto, para terminar de cuadrar la ecuación de un show excelente a todos los niveles.
Comentar también que dio la impresión en todo momento que ellos estuvieron encantados con el recibimiento de la gente en Madrid, que literalmente se volcó con ellos, y de hecho era una pasada ver las caras alucinadas de Dregen y Nicke literalmente impresionados por la respuesta de la gente. De hecho, la comunión entre banda y público fue excelente y constante durante todo el show, sin subidas y bajadas como suele ocurrir otras veces, y demostrando que los suecos son más que queridos en nuestro país (y ellos lo saben y lo notan). Además, se mostraron muy comunicativos, agradeciendo en todo momento la respuesta, como digo, y jugando constantemente con nosotros (incluso Dregen acabó un par de veces, como era lógico, «surfeando» con su guitarra por encima del público ya al final del concierto).
A nivel de temas, personalmente me quedo con los menos «comerciales», aunque por otro lado, está claro que cortes como la melódica «Nomadic» (de su último disco) o la brutal «Nothing last forever» (de su reputado «Total 13») son una pasada, además de ese imprescindible baladón que es «Abandon» que cantaron casi hasta las camareras de la sala (por cierto, de los precios de las bebidas ni hablamos, una vez más). Pero sí, desde el comienzo con temas como «Disfunctional profesional» o esa versión de FASTER PUSSYCATS, «Shut up» (bueno, vale, se llama «Babylon»), con genial entrada de Nicke diciendo que a todos nos gustan los GN’R pero que ellos siempre fueron más de FASTER PUSSYCATS, jeje, incluso con los temas más cañeros y punkroqueros como «Brand new hate» o sus ya clásicas «Too tough to make some friends» o la macarruza «Dangerous», hasta el recuerdo a su etapa más «hardroquera» con «Minus celsius», «Electric Suzy» (fantástica) o «Degenerated» (por cierto, que fue cuando comentaron divertidos que la sala les «molaba», que era como tocar en un viejo teatro, ¡qué cracks!). Para el final nos dejaron más temas imprescindibles como la 100% ramoniana «Look at you», que no podía faltar o el final con «People like us» (que de hecho dijeron que era de sus favoritas personales), aunque a mí me dejó más frío que otros temas de la noche, todo hay que decirlo.
En definitiva, un concierto de bandera, de los que uno acaba quitándose el sombrero y alabando la grandeza del rock, incluso cuando, como he reconocido al principio, nunca he sido el mayor fan de los veteranos suecos (ya sabéis que lo mío es más bien el rollo sleazy guitarrero que sí tienen al 100% HARDCORE SUPERSTAR en la actualidad). Eso sí, el concierto en Madrid de la gira de 20 aniversario de los BACKYARD BABIES fue perfecto, con un set list como tienen que ser estos conciertos conmemorativos, y sobre todo una actitud de la banda de las que hacen enamorarse de este tipo de música y de cierto tipo de grupos… Y no me olvido de TRACY GANG PUSSY… lo dicho, ¡qué gran noche de hard/punk/sleazy/rock!
Texto: David Esquitino
Fotos: Juan Ramon Felipe Mateo (La Máquina de Sonrisas) (Correspondientes al concierto de Bilbao)
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BACKYARD BABIES