Puntuales como siempre a su cita bianual o trianual, KALMAH regresan con nuevo disco tras permanecer casi desaparecidos desde la edición de «For The Revolution» en 2008, habiendo girado más bien poco y casi siempre por su Finlandia natal, de donde parecen no querer salir, aunque de vez en cuando sí que se animan e incluso no hace mucho han llegado a tocar por Norteamérica, lo que es señal inequívoca de que estamos ante un grupo muy demandado no solamente en Europa, donde son desde luego toda una eminencia del death metal melódico desde finales de los noventa/ comienzos de siglo y una de las bandas más interesantes surgidas de Finlandia desde entonces junto con CHILDREN OF BODOM, INSOMNIUM o ETERNAL TEARS OF SORROW, las tres un poco un poco anteriores, sino también en tierras americanas. Esto les mantiene en un status de banda rara, como muchas de las que salen o salieron de su país, de las que sacan discos interesantísimos con un buen gusto que tira para atrás pero de las que luego poco o nada se sabe, como si no estuviesen totalmente dedicados a la música o no les interesase, como los citados INSOMNIUM, que ahora parece que se animan un poco más a tocar, NOUMENA, de los que tampoco se sabe lo más mínimo, MORS PRINCIPIUM EST, o los ya extintos FALL OF THE LEAFE, banda que recomiendo encarecidamente a todo el que no la conozca, por lo que la edición de nuevo disco siempre es un notición para los fans de un género donde las alegrías cada vez llegan más con cuentagotas.
«For The Revolution» fue un gran disco, eso es indudable, aunque no es menos cierto que para muchos de sus fans, entre los que yo mismo me incluyo, no llegó al nivel estratosférico de un sobresaliente «The Black Waltz», que supuso uno de los mejores trabajos de KALMAH perfectamente equiparable a los primeros, por lo que la incertidumbre estaba ahí en cuanto a que no sabíamos si el quinteto seguiría perdiendo fuelle poco a poco o volvería a mostrarnos la mejor de sus caras, algo que afortunadamente para todos han vuelto a hacer en «12 Gauge», y además como el que no quiere la cosa, y es que KALMAH han vuelto definitivamente, ¡y de qué manera!
Así, tras este esperado sexto disco de misterioso o cuanto menos extraño títilo, se esconden nueve temas que son de lo mejor que ha compuesto el grupo en unos cuantos años, un disco que desde luego no tiene nada que envidiarle ni a los primeros ni a los últimos y que, aunque va en gustos, podría ser el mejor disco que han grabado hasta la fecha, algo que a estas alturas no me queda claro todavía porque me cuesta trabajo quedarme con uno o decidirme, aunque ya sólo eso debería servir para que os hagais una idea de lo bien que suena este «12 Gauge». De hecho, en lo que seguro que este nuevo trabajo es mejor que ninguno, es en el equilibrio entre su gran producción y los buenísimos temas, y me explico. Mientras los primeros discos tenían una magia casi inédita por entonces, sobre todo el primer y casi seminal «Swamplord» o «They Will Return», en un estilo como digo que te atrapa inmediatamente pero con una producción no mala pero sí mejorable, los últimos, sobre todo el último, tenía ya una producción muy buena pero le fallaba justo lo contrario, algo que aúna «12 Gauge» como ningún otro disco consigue, la mejor producción de que han gozado los KALMAH hasta la fecha envolviendo nueve temas que son los mejores que han grabado desde «The Black Waltz» como mínimo (a mi me han gustado más incluso), y que tienen mucho de los ya citados dos/ tres primeros discos, y es que los fineses vuelven a sonar como siempre, su mejor versión, en un trabajo que se hace realmente corto a pesar de que dura lo que tiene que dirar, unos 43 minutos de música con mayúsculas…
«12 Gauge» es un disco razonablemente rápido, como suelen serlo ellos, con un Pekka Kokko a las voces inmenso y oscuro, como siempre, pero no creo que sea las voces sean ni mucho menos lo mejor de este disco. Instrumentalmente es sin embargo donde KALMAH han dado el do de pecho. Así, y siguiendo un poco con el hilo de lo que decía antes, la música compuesta para este nuevo disco resulta de lo mejor que les he escuchado desde sus primeros trabajos, en una versión mejor producida, más cañera y también más madura. De este modo, el disco tiene TODOS los elementos que un fan de KALMAH busca en uno de sus discos, tanto de quienes gusten más de lo primero como de lo último, pues en esencia vienen a ser lo mismo. Bases y tempos devastadores, riffs transgresores que van deal heavy al death pasando por el thrash incluso puntualmente, aderezado con esas segundas guitarras tan melódicas que siempre fueron la base del grupo, y es esa combinación de fuerza en las guitarras con las melodías la que hace de este disco algo tan convincente, y lo que les vale la etiqueta de death melódico, a la que ta bien se ajusta el grupo. Esas melodías son las mejores que han compuesto desde «The Will Return» (ponen los pelos de punta), pero además los teclados acompañan mejor que nunca haciendo que el apartado de las melodías sea tan mágico como cabe esperar de unos genios como estos, a lo que si encima le sumamos que los temas funcionan, nos deja lo que nos deja, un discazo severo.
Al disco por cierto tampoco le falta variedad y arreglos variadísimos, como se demuestra desde el inicio del disco con «Rist Never Sleeps», un gran primer tema con una mini-intro cuidadísima de guitarra acústica que dibuja una melodía hipnótica gracias también a ese teclado que casi suena a orquestación, hasta que llega ese riff a lo CHILDREN OF BODOM y KALMAH comienzan a demostrar que siguen más en forma que nunca. Personalmente, uno de mis temas preferidos del disco es «One Of Fail», segundo tema en aparecer, y toda una lección de cómo incluir guitarras pesadas, rápidas, blastbeats, teclados muy muy presentes y con muchísimo peso en el tema, un buen solo dividido en tres o cuatro partes y voces brutales todo en un tema y sin morir en el intento, un tema que define a la perfección lo completo que es este disco a todos los niveles. Me han gustado también especialmente temas como «Swampwar», con muy buenos coros, «Bullets Are Blind», un tema que segurísimo que funciona genial en directo, «Hook The Monster», un tema muy en la línea de «One Of Fail», o la final «Sacramentum», un tema ideal para cerrar que no tiene mucho que ver con el resto, sino que es más preciosista en general, más tranquilo y variado.
Se puede decir por tanto que KALMAH lo han vuelto a hacer; un disco salvaje, adictivo, dinámico, reconocible, con unas melodías a un nivel altísimo, con una producción espectacular, donde todo encaja como una gran matrioska formada por los mil elementos que componen su ornamentada propuesta y la influencia que les han supuesto todos sus discos, incluídos los primeros, de donde hay más reminiscencias que nunca.
Jorge del Amo Mazarío (jorge_del_amo@rafabasa.com)
Lista de temas:
- Rust Never Sleeps
- One Of Fail
- Bullets Are Blind
- Swampwar
- Better Not To Tell
- Hook The Monster
- Godeye
- 12 Gauge
- Sacramentum