Escucha del disco de CALIBRE ZERO: “Inmune”.
La cita fué el miércoles, 9 de septiembre, en los estudios madrileños M-20 de Avispa, y allí acudimos una nutrida representación de medios para escuchar el que ya es el segundo trabajo de los aguerridos CALIBRE ZERO, una cada vez más interesante formación madrileña de puro rock/thrash/metal (uno de los puntos fuertes de la banda precisamente, ¿a qué suenan?, ¡a CALIBRE ZERO!). Tras un interesante primer trabajo, “Jugando con fuego”, que ha obtenido buen resultado a nivel de crítica y también de aceptación de público en los múltiples conciertos que la banda ha dado por todo el territorio nacional, no han querido dormirse en los laureles y se han puesto manos a la obra muy rápido para conseguir tener en la calle cuanto antes este “Inmune” que seguro que de nuevo va a dar que hablar. A la escucha asistieron los dos hermanos Lázaro (el cantante Ricardo y el guitarrista Miguel) en representación de la banda (excusaron a sus compañeros Antonio Cuenca, batería, y el más joven Pedro Peláez, bajista, que no pudieron asistir por cuestiones laborales), para dar fé de que el nuevo trallazo sonoro del grupo tiene mucho que decir en nuestra escena.
Pudimos oír la versión definitiva del disco, y de primeras mi impresión es que siguen teniendo las cosas muy claras, pero además es interesante destacar que han aprendido rápido de los “errores” del debút, quizás una cierta linealidad de los temas y una producción que, pese a permanecer ahora sucia, poderosa y rasposa, ha ganado en contundencia, acercando el sonido del disco a lo que sí suenan en directo. Además de esto, mantienen 100% la actitud de “rock hasta morir”, ofreciendo 13 cañonazos puros y duros en donde la base y tónica general sigue siendo una guitarra protagonista muy fiera, una base rítmica potente y machacona (destacando siempre el buen hacer de Antonio Cuenca, que es un crack), y la voz cruda y con mala leche de Ricky, aunque con aspectos aún a pulir, pero que cada vez le va pillando mejor el punto a dar guerra vocalmente hablando (y es que de actitud y energía anda sobrado, y siempre es un gran punto de partida para mejorar).
Musicalmente también siguen a nivel estilístico por la misma senda de “Jugando con fuego” (rock metalizado y macarrizado, con raíces incluso punks y de hardcore), manteniendo influencias lógicas de gente como METALLICA, PANTERA, MÖTORHEAD o SA y sobre todo BARRICADA (en el plano nacional y más urbano) pero incidiendo en este caso todavía más en el rollo SABBATH, con riffs “lentos” y poderosos, melodías pesadas pero que se quedan, sonido potente y crudo, pero a la vez sin dejar de perder caña ni punto roquero (pero como MÖTORHEAD, haciendo “rock n’roll desenfrenado”). Directo y contundente, aplastante, pero a la vez con bastante variedad dentro de una línea base, y un rollo algo más heterogéneo que el que mostraban en su debut. Por cierto, las letras siguen ahondando en un temática real y social, escupiendo rabia y verdades a partes iguales, y poco a poco tomando un color muy interesante, aunque aún a veces pienso que tienen que darle la última vuelta a este tema para sacarlo definitivamente del “debe” en el futuro.
El disco ha sido producido y masterizado con su buen tino habitual por David Martínez en los propios estudios M-20, y saldrá a la calle en España el 19 de octubre, con idea de lanzarlo a nivel europeo el 6 de noviembre (recordemos que “Jugando con fuego” se editó por ejemplo también en Sudamérica y también se distribuirá ahora en Europa junto con el segundo). Y además de los 13 temas, de los que ahora os comentaré mis impresiones generales, decir que han grabado también un videoclip de “Yo digo bien”, al que todavía no pudimos tener acceso.
La generalidad de los temas es que son cortos y directos, además de pesados y sin bajar ni por un segundo el nivel de tralla (de hecho, por ahora dejamos las baladas de nuevo para mejor ocasión, jeje). Quizás a nivel general me ha parecido que los temas suenan esta vez algo más metalizados, manteniendo el punto “urbano”, pero quizás rebajando este nivel en comparación con su predecesor. Y nada, vamos con un comentario general de lo que escuchamos (los 13 cortes del disco y en presumible orden final):
-
“Yo digo bien” es el primer tema y a su vez el single (del que han grabado videoclip, como decíamos antes). Un corte potente, roquero y guitarrero (“barriquero”, que dirían algunos), pero que da mucha guerra desde el principio con unas guitarras casi thrasers de fondo. La letra es bastante positiva y luchadora, aunque no es la tónica del disco, como luego veremos.
-
“Mentiras” mete más tralla, y mantiene un riff más constante, en un tema de aire punk añejo, directo a la yugular y bastante breve. Un buen cañonazo a lo “bombardero” de Lemmy & Co.
-
“Nadie me dirá (lo que tengo que hacer)”: Algo más actual y por momentos cercano al nü metal, pero en el fondo se trata de un tema básico y muy directo extraído de su primera demo, y con letra protestona y rebelde que me gusta.
-
“Habla la guerra”: Ellos lo califican como el tema posiblemente más heavy del disco, y en parte estoy de acuerdo, especialmente si lo metemos en el “saco” de BLACK SABBATH (etapa Dio en este caso), aunque también tiene un deje obvio de METALLICA. Me gusta la voz potente y poderosa golpeándote en la cara, y el gran sólo pesado y óscuro de la parte intermedia. Letra interesante, por cierto.
-
“Silencio”: Un corte quizás bastante cercano al disco anterior (un tanto más “urbanita”), bastante crudo y pesado, que te aplasta despacio pero sin piedad.
-
“Hasta quedar sin voz”: Otro cañonazo sin tregua, como lo definen otros mismos, pero muy curioso ya que el riff principal parece sacado directamente del “Más duro que nunca” de ÑU (que no creo que haya sido influencia de la banda, pero el parecido en este caso es asombroso). De todos modos, un tema trallero (para variar, jeje), y muy energético, que por ejemplo sería perfecta para cerrar los conciertos.
-
“Fuiste tú”: Un gran tema pero además diferente, con un rollo totalmente setentero y oscuro, muy SABBATH de sus primeros tiempos, pero también con ese rollo pesado de gente como CANDLEMASS o ANGEL WITCH (como los gallegos SISTER MOON, vaya). Me encanta la parte final cañera a lo “N.I.B.” o “Children of the grave”. Una canción muy pesada y rítmica y con el bajo en primera línea, por cierto.
-
“El mundo estremeció”: De nuevo te hace levantar la ceja un comienzo totalmente METALLICA, aunque quizás tiene un punto de crossover en ritmo y estructura, pero vamos, en general un corte muy movido que es bastante thraser y con rollo influenciado por los Cuatro Jinetes.
-
“Ya es tarde”: Tiene un inicio potente pero es un tema un tanto más roquero y “pegadizo”, siempre dentro de su rollo. Quizás me ha entrado menos, de todas formas.
-
“El hombre al que odiar”: Macarruza a tope, con mucha caña y “metaleo”, como lo definen ellos. Buenas guitarras potentes de base y me encanta el final poderoso y aplastante tras una breve pausa.
-
“Marcas y heridas”: Un cañonazo de principio a fin, brutal y muy, muy trallera, recordándome en el buen sentido a algunos temas de LEGION o FUCK OFF. Además, tiene un rollo distinto en el estribillo que es muy curioso, y sobre todo un contrapunto melódico en la guitarra en algunas partes que es cojonudo. Interesante letra, por cierto…
-
“Todo te da igual”: Un tema de su primera maqueta que ahora han adaptado, aunque quizás me ha parecido algo más soso. De todos modos, seguro que tiene sus defensores, y desde luego que las guitarras de corte potente y machacona invitan a ello. Además, es una canción como en dos partes, una parada y luego se recupera la el inicio para rematar.
-
“Inmune”: Y ya para cerrar nos encontramos con el tema título, un corte lento, denso y pesado de base 100% METALLICA de nuevo. Muy rítmica y un auténtico muro sónico que reventará altavoces… y es que no dejan de dar caña hasta el final. Por cierto, me quedo con una frase del tema que me ha molado: “no existe el perdón si no te puedes perdonar”.
En definitiva, buena impresión y mi enhorabuena a los chicos por el trabajo coherente y bien hecho. Se trata de tralla sin tregua y a piñón, con lo que seguramente a los amantes de los sonidos exclusivamente melódicos posiblemente no les llegue. Pero para todo aquel que le gusten las buenas guitarras potentes, y en general las bandas cañeras (pero de trasfondo roquero) con actitud y personalidad, seguro que disfruta de este “Inmune”. Eso sí, 13 temas siempre se me hacen algo pesados en cualquier disco (a lo mejor es algo patológico, no lo sé), pero aún así mi pulgar sin duda se mantiene arriba al terminar de escribir estas líneas.
David Esquitino (david_esquitino@rafabasa.com)