Nunca jugaron en la liga de otras bandas finesas como CHILDREN OF BODOM, NIGHTWISH o los AMORPHIS actuales, por citar tres ejemplos de bandas punteras del país de los mil lagos, pero lo cierto es que ETERNAL TEARS OF SORROW llevan siendo, desde hace ya muchos años, uno de los secretos mejor guardados de aquellas tierras atendiendo a su estilo único y a su impoluta discografía, donde entre trabajos mejores y peores, no vamos a encontrar un solo disco malo, y van ya, con este, seis obras, entre las que tenemos que contar alguna que considero de obligada escucha para cualquier amante del metal sinfónico, melódico o extremo que se precie, véase el magistral «Chaotic Beauty» o «A Virgin And A Whore», dos discazos (más el primero, para mi gusto), que han hecho de esta una banda única en cuanto a estilo y casi de culto entre los más acérrimos de la nutridísima escena finesa, que cierto es que no deja de aportarnos discos alucinantes y con ese regusto exquisito en las cuidadísimas producciones de que, como no podía ser de otra manera, este nuevo «Children Of The Dark Waters» está completamente impregnado.
ETERNAL TEARS OF SORROW vuelven a la actualidad, y esta vez, por suerte, no han tenido que pasar cinco años como en la anterior ocasión, sino tres, que son los que han transcurrido desde la edición de un buen «Before The Bleeding Sun» que sentó de alguna manera las bases de este nuevo «Children Of The Dark Waters» en la medida en que en aquel aparecían ya las voces limpias invitadas de un Jarmo Kylmänen que ahora ya pertenece oficialmente al grupo, siendo el primer vocalista en limpio que milita en sus filas (colaboraciones aparte), un paso que desde mi punto de vista ha resultado ser muy positivo para este nuevo disco y para el grupo en general. Además de esta novedad, hay que sumar otras dos adiciones más a la formación del grupo, que se reforzó con Mika Lammassaari a la guitarra este mismo año y con Juho Raappana a la batería el pasado 2008, por lo que hablamos de unos seminuevos ETOS, quienes, para mi sorpresa, se han marcado un soberano discazo de cabo a rabo que no le tiene que envidiar absolutamente nada a ningún otro trabajo del grupo.
Y es que «Before The Bleeding Sun» no fue, ni muchísimo menos, un disco malo, pero lo que sí que percibo es que no consiguió mantener ni elevar el interés en este grupo como lo hace «Children Of The Dark Waters», que tras escucharlo no solo te atrapa en su magia y te obliga a escucharlo otras veinte veces, sino que te invita a sumergirte, una vez más, en su tremenda discografía y, en definitiva, despierta una sensación de lleno e interés, de perfección, que no lograba su predecesor, algo que nos da una ligera idea de que estamos ante un disco sencillamente sensacional, mimado hasta el extremo, y donde reconocemos a unos ETERNAL TEARS OF SORROW que no solo son los de siempre, sino que han vuelto con el mejor material en los últimos diez años.
Un trabajo de los fineses tiene que ser oscuro, recargado, muy recargado, con los teclados como indiscutibles protagonistas sobre todo por las atmósferas que han de dibujar pero también por los solos, así como la melodía ha de estar presentes constantemente ya sea gracias a las susodichas teclas como a las guitarras, cuyas cuerdas han de estar tanto como para dirigir con mano regia los pasajes más crudos, rápidos o pesados como para transmitirte algo en los técnicos solos, así como las voces han de fundirse tanto con la melodía como con la agresividad de las bases y lo afilado de los riffs, bien sea con unas despiadadas guturales o con unas limpias que sepan transmitir algo, que, simplemente, te pongan los pelos como escarpias, y al final, juntándolo todo, hemos de encontrar algo único, barroco a más no poder, con una producción a la altura de las circunstancias en la que no desentone absolutamente ningún elemento y todo esté en armonía, como si de un castillo de naipes de cristal se tratase… algo que, como ya habréis imaginado, es exactamente lo que vamos a encontrarnos en «Children Of The Dark Waters», una obra maestra de melodeath sinfónico que te dejará maravillado de principio a fin a poco que te guste el metal finés, vamos, ETERNAL TEARS OF SORROW en estado puro…
De la tenebrosa, inquietante y acertada a más no poder portada parece salir directamente «Angelheart, Ravenheart (Act II: Children of the Dark Waters)» tema inicial y uno de los más oscuros de todo el disco, con los teclados como indiscutibles protagonistas y no demasiada melodía, o al menos no tan pegadiza como las de temas posteriores. Muy buen tema para comenzar, sin voces limpias, con unas guitarras muy poco cambiantes en sus riffs y tremendas (o mejor dicho, tremenda, la de Jarmo Puolakanaho) en el solo, lleno de ´feeling’. «Baptized By The Blood Of Angels» comienza muy suave al piano y después continúa con un tempo de power metal plagado de sinfonía, al que se une la voz de Altti, que por cierto tengo que decir que es lo que menos me ha gustado del disco. Muy buen solo, buen desarrollo del tema, y nuevamente unos ETOS muy técnicos, con una guitarra solista alucinante, pero más en plan oscuro/ pomposo, algo que cambia completamente en la espectacular «Tears Of Autumn Rain», cuyo inicio nos recordará muchísimo a DARK TRANQUILLITY Y que cuenta con estribillo espeluznante de voces limpias a modo de coro, muy bien definido y efectivo. «Summon The Wild» sigue la línea de los dos primeros temas hasta el exquisito parón central, donde Jarmo le pone mucho sentimiento y donde, sorprendentemente, termina con un agudo al más puro estilo heavy… Las atmósferas aquí por cierto me recuerdan mucho a DIMMU BORGIR, mientras que es el típico tema que puede ser perfectísimamente definido como death metal sinfónico.
«Sea Of Whispers» es otro de los grandes cortes del disco. Muy tranquila, cristalina, épica, únicamente con la oscura voz de Jarmo dibujando melodías en limpio en unas estrofas preciosas y unos coros en lo que podría considerarse el estribillo calcados al del directo de EVERGREY, «A Night To Remember». «Midnight Bird» es otra ineludible donde reconozco más quizás a los ETOS del «Chaotic Beauty», un tema donde tienen más protagonismo las guitarras, que dibujan un fraseo buenísimo al comienzo y en el estribillo, y donde otra vez encontramos un oasis donde la intensidad desciende a mitad de la canción, tras el cual los fineses nos regalan con un muy buen solo de teclado empalmado con uno de guitarra. «Diary Of Demonic Dreams» es un tema muy singular dentro del disco sobre todo por el rapidísimo inicio, casi a ritmo de black sinfónico, y luego por la voz de Jarmo, muy heavy y hasta con agudo incluido, para después entrar Altti contestando en gutural. Buenísimo el primer solo y los arreglos de piano que caen como gotitas de lluvia durante partes muy concretas, y en general uno de los temas más cambiantes y desconcertantes de todo el disco, aunque casi más raro todavía termina y empieza siendo «When The Darkest Night Falls», cuyo inicio suena mucho al folk de los últimos AMORPHIS y luego inesperadamente se arranca, ahora sí, con un tempo de black puro y duro que se va entrecortando con pasajes marcados por esos coros femeninos tan característicos que ya aparecían en el anterior tema.
El trabajo concluye con «Nocturne Thule», un tema con mucho de progresivo en los camaleónicos y casi blackers riffs a los que se suma el doble bombo mientras los teclados y orquestaciones lo llenan todo, con un estribillo que sorprende mucho por lo pegadizo de su melodía, en voces limpias, y por lo poco que tiene que ver con las estrofas. La guinda al pastel es la versión acústica alternativa de «Sea Of Whispers», tremenda, con un ‘feeling’ conseguidísimo que sirve de broche de oro a un disco que se hace cortísimo, de poco más de cuarenta minutos, que tiene absolutamente todo lo que quienes les seguimos desde hace tiempo buscamos en un disco suyo.
Una obra maestra que, tópicos aparte, sigue poniendo al metal finés donde le corresponde, entre lo mejorcito del metal europeo y, sobre todo, con ese toque tan distintivo que tienen todas sus producciones, siempre tan cuidadas y preciosistas. Probablemente su mejor disco hasta la fecha, a un nivel compositivo altísimo, y con un buen gusto que, qué queréis que os diga, tira para atrás…
Jorge del Amo Mazarío (jorge_del_amo@rafabasa.com)
Lista de Temas:
- Angelheart, Ravenheart (Act II: Children Of The Dark Waters)
- Baptized By The Blood Of Angels
- Tears Of Autumn Rain
- Summon The Wild
- Sea Of Whispers
- Midnight Bird
- Diary Of Demonic Dreams
- When The Darkest Night Falls
- Nocturne Thule