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Studio Report del nuevo disco:
Hace ya mucho tiempo que, tras un genial «Cuatro gatos» de ÑU, a los músicos que formaban la banda entonces, junto al inefable Jose Carlos Molina, claro, les empezó a rondar la cabeza de hacer algo juntos. Tras un par de años o tres bastante buenos (al menos de cara al público) con ÑU, era el momento de que Juanmi Rodríguez, Pedro Vela y Joaquín Arellano cogieran precisamente el título de ese disco para darle nombre a una más que interesante banda. Los tres, y en un principio junto a Iván Urbistondo (para mí sin duda uno de los mejores vocalistas de este país, y ya la incorporación de Javier Canseco al bajo, dejando a Juanmi con los teclados) decidieron darle forma a su particular caja de música, que ni más ni menos fue, es y será la personal propuesta del grupo. Con Iván las cosas no terminaron de funcionar, y más adelante volvería a sus BEETHOVEN R., y CUATRO GATOS seguirían adelante con un cantante uruguayo, Alex Fracchia, y un disco esférico que no funcionó tan bien ni recibió críticas tan excelentes como el primero. Poco a poco la banda se fue quedando un tanto en barbecho, y la verdad es que cuando algunos (yo el primero, lo reconozco), les teníamos algo perdida la pista, aquí les tenemos de nuevo, con energías renovadas, con la fuerza, melodía y ganas intactas, y una «nueva» formación… y lo entrecomillo porque la primera sorpresa es encontrarnos con el propio Juanmi que se ha liado la manta a la cabeza y se encarga ahora de las tareas vocales (por lo que cuentan con un teclista de apoyo para los directos), y además nos presentan a una segunda vocalista, Covadonga, que huyendo de las típicas cantantes «gotiquillas», o de las dos voces: una angelical y otra demoniaca, que está más visto que el tebeo, seguro que va a aportar un punto de vista distinto a ciertos temas y una mayor riqueza musical que, aunque suene a tópico, es lo que siempre ha caracterizado para mí más que ninguna otra cosa a esta buena banda.
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Bueno, y después de la parrafada inicial para ponernos en situación (que parezco Joaquín y Juanmi, jeje), tenemos que decir que el pasado jueves tuvimos la oportunidad de juntarnos varios compañeros de otros medios (¡un abrazo como siempre, amigos!) para una primera escucha de lo que será el nuevo disco del grupo, tres años después de la salida de «Esférica» en 2005. A la escucha asistió la banda al completo (menos el nuevo teclista, Carlos Álvarez), junto al productor David Martínez (del que comentaron varias veces entre risas que esta vez, al no producirlo Juanmi, ya tenían a quién echarle la culpa por lo que saliera mal), y mientras escuchábamos algunos de los temas que formarán parte de «El sueño de la razón», eran Juanmi y Joaquín los que, a modo pareja de hecho y derecho (y es que cómo dúo cómico no tendrían precio, os lo aseguro), nos iban explicando cómo había surgido cada tema, de qué hablaban las letras, lo que les transmitía y algunas otras interesantes y/o más irreverentes reflexiones que me guardo para los que estuvimos allí pero con las que no paramos de reír en todo momento. Tuvimos la oportunidad de escuchar 6 de los temas que tendrá el disco (ya prácticamente cómo saldrán en el trabajo) y un «bonus track» a petición popular, que fue la balada del disco, que nos dejó muy buena impresión pese a que aún estaba sin masterizar).
Lo primero que nos comentaron es que efectivamente han tenido un largo parón (al menos a nivel de exposición pública, porque ellos no han parado de trabajar), justificaron un poco estos tres años, nos presentaron a la «nueva» formación (con su humor, desparpajo y creatividad habitual) y calificaron este nuevo período como una evolución, reinvención y continuación a la carrera del grupo, manteniendo el estilo y personalidad base de CUATRO GATOS, pero añadiendo algunos matices nuevos y detalles distintos. De todos modos, tras la escucha de los temas es obvio que su estilo sigue siendo su particular caja de música, con la melodía y musicalidad por bandera, y ese toque quizás no tan accesible pero sí tremendamente atractivo, interesante y pegadizo incluso que les hace tan especiales. Con todo esto, unos mínimos detalles progresivos, ciertos arreglos orquestales y una variedad más que interesante mezclando power, heavy, hard rock y ese toque personal que sólo conocemos «cuatro gatos», han conseguido hacer un buen cocido, ¡vaya que sí!
El disco completo tendrá 13 cortes y tiene muy buena pinta, sinceramente. Lo primero que destaca es obviamente la voz de Juanmi (por aquello de ser la principal novedad), cálida, potente y con buen deje musical, como no podía ser de otro modo, obviamente sin llegar a los tonos de Iván, pero que le pega realmente bien a las nuevas composiciones. Personalmente me gustó mucho la potencia de fondo de la base rítmica, uno de los detalles quizás «diferentes» en el nuevo disco, en el sentido de que las bases son bastante potentes, y luego personalmente sigo siendo un enamorado de las melodías de Pedro Vela, y de sus «riffs» sencillos pero contundentes que siempre me han encantado… y una vez más se sale el tío. Y sobre la voz de la nueva vocalista aún no podemos decir demasiado porque de los temas que escuchamos precisamente sólo intervenía en uno y complementando a la de Juanmi, aunque ellos nos aseguraron que en otros ella era la protagonista vocal, no una mera acompañante o corista o algo así. ¡Ah!, y siendo CUATRO GATOS no es algo que destaque en sí, pero es cierto que hay muchas líneas de teclado por debajo en casi todos los temas, detalle preciosista y ornamental acertado, pero que es quizás lo que menos me convenció (aunque más por meros gustos personales que otra cosa, también tengo que decirlo).
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Pues nada, para terminar os comento sobre los temas que escuchamos, una última diatriba para descontextualizar, firmamos y envuelto para regalo… No, en serio, aquí tenéis mis impresiones sobre los temas que escuchamos:
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«Mañana será peor»: Para comenzar el disco, el primer tema tenía que ser un cañonazo power y rápido y efectivamente, destacando la potente base rítmica que decía antes como cimientos del corte. Como diferenciación de un tema tipo de power metal, está claro que tiene ciertos detalles experimentales aunque manda el punto ensoñador con personalidad CG por bandera. Nos sorprendió de primeras (al menos por ser la primera vez que la escuchábamos) la voz poderosa de Juanmi en un tema que a mí al menos sí me recordó un poco a ese deje clásico de algunos cortes de ÑU como «Nessa» o «Cruz de hierro». Un tema muy musical, como siempre en la banda, duro, rápido y cañero para despertar desde el principio. La letra es «positiva», como casi todas las del disco, y es que, según decía Juanmi, la escribió en la época en la que estaban cabreados con el mundo.
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«Entre el cielo y el mar»: Un tema muy CUATRO GATOS que me recordó bastante al rollo del primero, aunque en este caso la letra sí es más positiva de verdad (de las pocas del disco, jeje), pero mantiene la base rítmica poderosa. Una canción musicalmente más grandilocuente y que, según nos comentaron, data de justo después de «Esférica», con lo que la llevan tocando bastante tiempo. Me quedo con una frase del tema que me gustó: «nadie es culpable del mundo en que le ha tocado nacer».
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«Adiós»: Ésta es más melódica y hardroquera, «bonita», con más gancho y un tema más comercial, aunque lo digo en el mejor sentido, por supuesto, La letra también es más hardroquera pero atractiva. De nuevo destaca que hay bastante teclado y en este caso nos encontramos a Juanmi cantando con voz más suave pero con feeling. Un tema sencillo pero pegadizo.
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«No importa el dónde (La playa)»: Éste es de Pedro Vela (aunque la letra es de Juanmi), y va en una onda más fresca y directa, incluso es más duro y actual, algo diferente de lo que nos tienen acostumbrados CUATRO GATOS pero que también tiene su punto. Destaca un riff de base muy potente y crudo, que incluso agobia y pesa, a juego con la letra. El tema hace referencia a que nunca sabes dónde vas a acabar, y la letra en sí está inspirada en el Desembarco de Normandía. La canción es algo más corta que el resto pero más directa, como decía, y me gusta especialmente el final, apagándose progresivamente con la voz del protagonista…
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«Contracorriente»: Otro tema a medias entre Pedro y Juanmi que básicamente se refiere a una frase que todos los roqueros y heavies conocemos muy bien: «seguiremos contracorriente mientras podamos». De nuevo es un tema poderoso pero más rimbombante, aunque luego tiene un desarrollo y una melodía vocal más suave. La letra juega con una reflexión interesante, que hay una victoria en cada derrota, y en ésta en concreto destacan sin duda el trabajo del Niño a la batería y de Pedro Vela. Como curiosidad nos comentaron que iban a haber contado con la curiosa colaboración vocal de la cantante de La Quinta Estación y con Diana Navarro (ambos grupos y/o cantantes poperos… pero según parece, de espíritu roquero), pero por problemas de agenda de ellas finalmente no pudo ser.
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«Tu propio Dios»: De nuevo volvíamos al punto más rápido y power, pese a un inicio más grandilocuente y épico, pero inducía a tema power sí o sí, con su doble bombo y una guitarra más acelerada pero melódica. Un tema con caña y letra de nuevo interesante (Juanmi siempre ha sido buen letrista, y aquí de nuevo no baja los brazos), tirando con bala. Además, es el primer tema donde pudimos oír la voz de «Covi», aunque ya digo que para emitir un veredicto al respecto prefiero escuchar algún otro tema donde ella sea la solista. Quizás es un tema más típico, de nuevo con mucho teclado, pero con buenas guitarras y sin duda destacando un excelente sólo final de Pedro.
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Finalmente, y casi como «bonus track», nos dejaron escuchar otro tema, y pedimos la balada, por aquello de que, como ellos mismos nos dijeron, era la primera vez que hacían un tema así, una balada como tal, y era interesante escucharla. «Lo que hay detrás» es una canción sencilla, bonita, y al estilo de una «power ballad» de toda la vida, con cojonudo sólo melódico «de los de toda la vida», para un tema que seguro que al final es de los que destacarán del álbum.
Pues nada, aquí tenéis entonces este pequeño comentario de lo que me pareció lo que será en Enero el nuevo disco de CUATRO GATOS. Personalmente es una gran alegría el volver a tener en circulación (si es que se fueron en algún momento) a una banda tan personal, interesante y particular, y a tenor de lo escuchado, en muy buena forma y reclamando ese puesto de relevancia que merecen en nuestra maltrecha actualidad musical. Por cierto, añadir que nos comentaron que la idea inicial es que el CD aparezca en una edición de lujo junto con un DVD con algún videoclip y extras varios tipo «making of» del disco y demás. No me enrollo más y termino con un frase suya que me parece totalmente descriptiva y acertada para rematar el artículo: «CUATRO GATOS han vuelto, y eso siempre será una gran noticia para los amantes del metal de alta calidad».
David Esquitino (david_esquitino@rafabasa.com)